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El Alma Humana (página 2)

Enviado por Pedro Sandrea


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DOCTRINA MATERIALISTA

La teoría materialista Moderna está fundada casi exclusivamente en los innumerables hechos que prueban la influencia de lo físico sobre lo moral que prueban la influencia de lo físico sobre lo moral; pero sobre todo en la correspondencia entre el cerebro y la inteligencia. Los dos hechos que invocan son los siguientes: "Donde se observa un cerebro, se encuentra un ser pensante o cuando menos, inteligente en cierto grado". "Donde falta un cerebro, falta igualmente la inteligencia".

"La inteligencia y el cerebro crecen y decrecen en la misma proporción; lo que afecta al cerebro, afecta la inteligencia al mismo tiempo".

Por lo tanto, cuando las circunstancias produce un efecto por su presencia, que lo suprime por su ausencia o lo modifica por sus cambios, puede considerarse como la verdadera causa de este efecto".

"El cerebro reúne tres condiciones en relación con el pensamiento; por lo tanto, es la causa del pensamiento".

Quiere decir que para los materialistas no existe el dualismo alma y cuerpo. El alma es una fórmula que expresa el conjunto de hechos del sentimiento, de la inteligencia y de la voluntad; el pensamiento no es sino una función orgánica semejante a las demás.

"Para hacerse una idea justa de las operaciones de las cuales resulta el pensamiento, dice

Cabanis, es necesario considerar el cerebro como un órgano particular, destinado a producir de la misma manera que el estómago a efectuar la digestión por medio de las impresiones en la actividad del cerebro" (luego no es tal órgano destinado a producir el pensamiento, sino a proyectarlo).

"Buchner dice: el pensamiento es el resultado de todas las fuerzas unidas del cerebro; esta resultante que no puede ser vista, no es, según la ciencia, más que el efecto de la electricidad nerviosa" (los nervios no son generadores; ¿de dónde, pues, procede esa electricidad?).

Los materialistas, pues, se fundan en la fisiología. "Dónde hay un cerebro hay un ser pensante", en las anfractuosidades del cerebro aumenta y disminuya y varía su composición química, según el individuo se encuentra en estado normal o atacado de locura: el cretinismo proviene de una deformación del cerebro".

Ya se hecha de ver que todo esto no son más que rodeos, cobardía, egoísmo y supremacía; pues no queriendo reconocer al espíritu como único inteligente capaz de pensar y obrar (aunque se trate de los irracionales que no tienen espíritu individual que el hombre tiene), es sencillamente la pasión del orgullo y la degeneración por cobardía, con la blasfemia de la negación de lo que no han comprobado nada bajo la lógica razón, lo que compone el materialismo sistemático y más dogmático que el mismo materialismo.

El materialismo como ciencia, dentro de la ley mayor, la defiende y sostiene el "Espiritismo Luz y Verdad" y declara que "ningún estudio puede hacerse sobre la materia sin contar con el espíritu; ni sobre lo moral y espiritual sin utilizar la materia"; y por lo tanto, el materialismo, como ley física, lo ensalzamos a su puesto honorífico. Con la misma razón, al materialismo sistemático y dogmático con sus defensores sin conciencia, negadores, detractores y…animales (puesto que no quieren tener espíritu), se les dice sencillamente: mentís por maldad y a sabiendas, y sois responsables ante los hombres todos; pero aunque no queráis, tenéis espíritu; aberrado sí, pero obráis por él, queráis que no y no puede ser que no seáis para siempre.

Y bien; ha argumentado la ciencia; han expuesto los materialistas y espiritualistas sus pretensiones sobre el alma humana. Pero ha dicho alguno: ¿qué es y qué la compone y de dónde procede; y cómo se forma el alma humana? Nadie ha dicho una palabra: y como quieren atribuirle funciones arbitrarias, sin saber cuales son sus elementos físicos y metafísicos, en cuyos elementos pueden fundamentar sus cargos y deberes? Resta mucho que registrar y decir aun, tocando las doctrinas que sea necesario, por lo que ni la ciencia ha dicho nada aún, ni el materialismo fundamenta nada ni podrá fundamentar jamás,, sin aceptar el espíritu.

Continuando sobre el espiritualismo en forma de juicio y se le da lo siguiente:

DOCTRINA ESPIRITUALISTA

A los hechos expuestos por materialistas, responden los espiritualistas: "Todos esos hechos demuestran que el cerebro es, en la vida actual, una condición indispensable a la producción del pensamiento; pero de ahí no se puede concluir que sea el sujeto del pensamiento".

Exponen las pruebas que se han anotado en el párrafo anterior y la primera de la unidad del yo o la simplicidad del principio pensante dicen: "La unidad es la propiedad de un ser simple o indivisible. La unidad es el carácter del alma, es simple. El cuerpo está compuesto, pues no es simple. El cuerpo está compuesto de diferentes partes: pues, no es simple. El cuerpo es compuesto, el alma es simple, luego no son la misma cosa, se debe hacer distinción entre el alma y cuerpo".

Entonces, ¿por qué después de 20 años de estudio experimental Wiñlliam Krookes sentó: "Sólo una sustancia existe". ¿Hay algo, ni alguien que descubra en el universo más que el Éter? Y siendo éste el principio de todas las formas de la vida y la vida misma, ¿de qué otra sustancia puede ser el alma, que no sea la de los cuerpos?

¿Por qué no han visto primero cuántas unidades forman la unidad alma o cuerpo? ¿Por qué no han visto que un solo átomo contiene millones de Iones y, que éste, es compuesto por tantos Electrones y éste, reúne tanta cantidad de corpúsculos y cada uno de estos está perfectamente separado, siendo por esto cada uno una unidad? Si el alma no es materia, ¿por qué la ven hecha forma los videntes? ¿Qué es lo que la fotografía copia en las materializaciones? ¡Oh Espiritualistas! ¡Cuánto mal habéis hecho al Espiritismo! Mucho más que todas las religiones juntas y habéis de responder de tamaño delito y no tendréis atenuante, ante el Espiritismo Luz y Verdad que es justicia del Padre.

La materia del cuerpo, no es diferente de la del alma; sólo hay diferencia del grado de pureza y por lo tanto de progreso.

En la segunda prueba, por la diferencia de fenómenos fisiológicos y psicológicos, no son menos desgraciados.

Suponer que los fenómenos del alma son diferentes de las obras del cuerpo en que vive, es el colmo del desconocimiento del ser hombre; pero la única distinción entre el cuerpo y el alma en síntesis es, que el cuerpo lo rigen las leyes de la materia y el alma no tiene ley porque, sólo es una resistencia entre el espíritu y el cuerpo.

Pero los espiritualistas no han sido capaces de distinguir el espíritu del alma: y aun en su ignorancia (o su cualidad religiosa si no quieren que los llamen ignorantes), supeditan el espíritu al alma, y esto ya es una blasfemia propia del católico.

Esta blasfemia se deja ver clara en la 3º prueba: "No se puede conciliar la identidad del espíritu con la perpetua mutabilidad del cuerpo humano; luego el alma y el cuerpo son diferentes". ¿Qué concordancia tiene mentar el espíritu para la comparación y acabar suplantándolo por el alma? Y para terminar ¡religiosos espirituales! ¿Dónde habéis dicho lo que es el alma? ¿Lo ignoráis? Pase. ¿Lo amalgamáis por malicia y por acuerdo con la religión? El Espiritismo Luz y Verdad os acusa de prevaricato. Sois culpables del descrédito y retraso del espiritismo, el cual lo es todo.

DOCTRINA RELIGIOSA

Hay una verdadera Babilonia en el sentir y afirmación de todas las religiones, respecto al alma en sus funciones y destinos y se puede colegir de nuestros estudios, en las diferentes obras sobre religiones.

Pero todas concuerdan en el "castigo del alma por Dios", lo cual ha degenerado a los hombres haciéndolos insensatos, prefiriendo ser hotentotes antes que introducirse al estudio de la metafísica, para no verse esclavos y castigados. Así es el dios religioso. Cría hijos para castigarlos.

El punto 4º del párrafo 1º de este capítulo, pone de manifiesto esa superioridad de raciocinio, a la par que expresa con desenvoltura así: "Soy libre y no dudo de ello… He ahí ya suficiente razón para convencerse que mi el alma no es corporal. Todo lo que es materia, no se determina a nada por sí misma, es, por el contrario, determinada a todo por las leyes físicas, que son necesarias, invencibles y contrarias a la libertad"

Los términos son diferentes, mesurados: la doctrina misma que la de los espiritualistas; Fenelón es un arzobispo. Ignora o calla por su virtud de reconocer la inflexibilidad de las leyes que rigen el cuerpo, pero ese es el error, al tenerlas, por contrarias a la libertad y sigue: "De ahí, concluyo, que mi alma es de una naturaleza enteramente diferente de la de mi cuerpo", absolutamente igual que los espiritualistas, le aplica el mismo juicio, con más la agravante de su autoridad arzobispal, sobre sus engañados feligreses.

Otro Obispo, Buchner, dice: "Un cuerpo no elige sus movimientos, sino que se mueve según es impulsado; y si no hay en mí, más que el cuerpo, bien lejos de tener imperio yo sobre él, no tendría siquiera libertad". Buchner se refiere al alma; ya da un paso bastante avanzado, desde que supone que la causa de su libertad es su alma; concuerda con "Soy libre y no dudo de ello"… de Fenelón. Son, pues, razonables porque estos tenían conocimiento de lo que es el hombre en sus tres entidades de cuerpo, alma y espíritu. Esas leyes inflexibles les habrán tomado cuenta; pero no los habrá castigado la ley, ni Dios. En cambio, su espíritu se verá obligado a desdecirse y enderezar su error y el de los que por ellos erraron. "Ojo por ojo y diente por diente"; pero por el espíritu de cada uno. Esta es la ley establecida para siempre por el Creador, padre de los espíritus. El resarcimiento no es castigo; el pago de una duda es de ley. Las deudas a la creación no tienen más perdón que el resarcimiento, el pago,. Porque Dios (entendiendo por Dios al Creador) no hace todo cuanto quiere sino todo lo que debe.

Es una verdad verdadera, la existencia del alma que nadie discutió, como nadie declaró, ni ciencias, ni religiones, ni los materialistas, ni los espiritualistas; a lo que llegamos nosotros ahora, sin querer ni pretender anular nada de lo que esté hecho sea de quien fuere si entra en nuestra justa balanza. Mas ni una palabra han aventurado los hombres, (si se exceptúa al autor del Sánscrito o Ley de Seth. Y los que han seguido conocidos como profetas y misioneros) bajo ciertas figuras, los secretos de la creación. Porque sabían que los sacerdotes de las religiones, los mixtificaban según su concupiscencia. Pero que se descubrirían cumplidos "el tiempo, los tiempos y mitad del tiempo", bajo cuya incógnita Isaías envolvió los 36 siglos de 100 años que claramente se señalaban en el testamento secreto de Abraham, para que "La ley fuese conocida en toda la tierra", (se refiere al Decálogo de Moisés) viniendo entonces y hablando a los hombres los espíritus, "porque hablarán con mis espíritus, que ángeles llamáis"

. El cumplimiento de esta profecía, fue exactamente en el siglo 19 cuando hubo la gran manifestación de los espíritus en múltiples actos; para lo que aparecen el físico y químico Williams Crookes y Allan Kardec, investigando las diferentes formas en que se manifestaban los espíritus, codificándolas; de lo que existen varios libros con sus conclusiones.

Ahora bien, el alma de una cosa es aquella que la hace mantenerse unida por cierta fuerza magnética que une las demás cosas que componen la unidad. Entonces, el Éter es indiscutiblemente el alma universal que mantiene a cada mundo y a cada molécula de un cuerpo unida, equidistante suficientemente para ser movida constantemente cada molécula y ser bañada por ese mismo Éter. Lo que a la vez demuestra que, el Éter es el principio de la vida orgánica y la misma vida. Quedando así probada toda la máxima verdad de nuestros principios, los primeros que se dan a la humanidad, como doctrina Espiritistas de verdad abierta y descubierta.

Éter es el cuerpo humano; y terminada la tarea para que se lo crea el espíritu, al Éter vuelve. "Uno es el principio y uno es el fin" "La sustancia es una y una es la ley". Y como todo vive de esa vida única y común, se confirma por sí sólo que, El mundo todo es común de todos por lo que requerimos esa comunicación de todo: "El mundo todo comunizado".

Por fin, todo llega a ser alma y por ésta, hasta el más rustico mineral, es un día espiritualizado entendiendo por ello que todo se lo asimila el espíritu por el alma que, una vez que cada espíritu toma una parte del alma universal para tomar forma humana, esa alma, ya será Eternamente con ese espíritu, sin que él pueda ni ella dejar de ser.

"Los mundos son infinitos y el hombre ha de vivir en todos los que existen; pero la Creación sigue y no se acaba". Ha dicho Helli a Abraham, en el testamento Alianza. Pero esto no puede ser comprendido, sin sentar que es absolutamente necesaria la obligación de cumplir, irremediablemente, con el mandato a que está obligado el espíritu a reencarnar, única forma de ascender de mundo en mundo y de grado en grado de sabiduría del espíritu.

 

 

 

Autor:

Pedro Sandrea

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