Cría intensiva e invernada de cerdos

1. Resumen ejecutivo
3. Marco teórico y definiciones terminológicas
4. Explicación de la propuesta y FODA
5. La puesta en marcha de la Empresa
6. La proyección
7. Conclusión

Resumen ejecutivo

El presente trabajo es un proyecto de inversión para montar un criadero e invernadero de cerdos con manejo intensivo en la modalidad de galpón cerrado.

A través del estudio del mercado y del panorama actual pudimos establecer que este es momento propicio para invertir en la actividad porcina. Invertir en tecnología de proceso y a gran escala, con perspectiva de crecer a largo plazo. Invertir pensando en insertarse en el negocio de la alimentación, en el negocio de la creación de proteína para consumo humano.

Datos del sector auguran un crecimiento sostenido en el consumo de carne de cerdo tanto a nivel nacional como internacional. Es sabido que cada día que pasa somos más y que el aumento del pbi de países como China están llevando a revolucionar el sector de la alimentación. Es por eso que hoy más que nunca este es un negocio prospero.

Para quien tiene campo propio mas aun pues puede agregar valor a su cosecha, transformando proteína vegetal en proteína animal y puede darle valor agregado a su cosecha transformando grano en carne.

Las puertas están abiertas para el ingreso de nuevos inversionistas. De parte del sector público se ha creado una compensación que viene a actuar de subsidio ante la suba sostenida del principal costo de la producción, el maíz. También se ha facilitado el acceso al crédito con tasa subsidiada, se impulsa el sector con publicidad y se promueve el dialogo con las empresas. El sector privado se encuentra organizado, unido e invita a quien quiera participar de esta actividad. Provee información útil y herramientas para iniciarse.

La actividad propuesta es en zona rural, a no menos de 5 Km. de cualquier centro urbano, requiere de 3 empleados fijos, y el asesoramiento de un veterinario. Para ponerse a trabajar se puede utilizar la figura de empresa unipersonal y ser responsable inscripto Hace falta cierto nivel de preparación teórico-practico para el inicio de la actividad pero el manejo es relativamente sencillo.

La inversión inicial para levantar la infraestructura necesaria para la producción los cerdos esta en el orden de los 2,8 millones de pesos. Esto incluye 4 hectáreas de buen campo en zona rural de la pampa húmeda, 5 galpones de cría e invernada, una casa, un vehículo y herramientas.

Para poner a marchar el proceso hasta que la empresa genere ingresos genuinos hacen falta 500 mil pesos. Mayormente para la compra de alimento balanceado y maíz.

La producción que conseguimos, capones de 110 kilos en 168 días, se vende a razón de 135 animales por semana, lo que totaliza una producción total de 7020 capones por año de trabajo.

Los ingresos empezaran a llegar al año de empezada la actividad y la amortización del capital lleva 10 años. La rentabilidad, variable dada la fluctuación constante de precios, ronda hoy día el 30 % De una facturación anual de 2,6 millones de pesos nos quedan aproximadamente 600 mil pesos libres de impuestos.

Las posibilidades de financiación hacen aun más interesante el negocio y dejamos planteadas varias posibilidades de crecer aun mas agregando valor a la producción. Ya sea faenando y avanzando en la distribución, o exportando la carne a países de la Unión Europea.

El sector de la producción de productos alimenticios esta en pleno apogeo los márgenes de utilidades así lo demuestra, a continuación podrán ver toda la información detallada que es necesaria para iniciarse en la actividad.

Capítulo I

Introducción y propósito

Hay dos variables que han influido fuertemente en el mercado porcino. Primero: la calidad de la carne (magro), esto ha hecho que mucha gente, que antes no elegía la carne de cerdo como alternativa en su mesa, se vuelque a comprarla. Segundo: la fuerte suba de precio de la carne vacuna, principal fuente de consumo de proteína animal en el país. Es muy importante entender la capacidad de reacción del consumidor ante los cambios de preferencia de consumo a la hora de subsistir en un mercado. Vemos entonces que el sector vacuno esta perdiendo terreno ante esta nueva situación y que ese terreno lo esta ocupando el sector porcino y en menor medida el avícola.

Cuando decimos nuevo panorama nos referimos a un sector que soporta fuertes variaciones en los precios de los insumos que son fundamentales para su producción: – Cereales y derivados. Estas fuertes subas se contrarrestan con mayor tecnología aplicada a la producción, con ingeniería de proceso, con dialogo entre las partes y asociaciones entre productores y el sector de la comercialización y entendimiento con el gobierno de turno que se traduce en mejores políticas de desarrollo para sus productores. En todas estas variables, el sector que provee el 70 porciento de la proteína animal a los argentinos (Vacuno), esta fallando, de acuerdo a la disminución de cabezas y de producción y a los compromisos comerciales que tiene la Argentina con el exterior y a la escasa ayuda y promoción de políticas productivas favorables.

El sector porcino viene creciendo a un ritmo favorable. En los últimos 4 años creció casi un 100 porciento. Esta cerca de llegar al consumo que había antes de la devaluación. En los últimos 3 años se logro que la gente consuma 2,5 kilos más por habitante por año. Y se espera que los 7,4 kilos que actualmente se consumen trepen a 15 en el término de 5 años, lo cual significa que la producción se estaría duplicando en el mediano plazo y eso sin contar la posible expansión hacia fuera por medio de las exportaciones. Tenemos grandes ventajas económicas y geográficas sobre otros países.

La gran diferencia la puede hacer el componente informal. Hasta nuestros días la carne de cerdo provenía de pequeños criaderos informales que conllevaban un gran costo de producción y con baja productividad, que tenían poca o nula sanidad animal y que se encontraban trabajando por fuera del mercado formal. Hoy todo eso esta cambiando, los costos de producción exigen trabajar haciendo rendir al máximo cada peso invertido, el consumidor pide calidad, esta informado y busca saber de donde vienen los productos y que estos estén avalados por los organismos de control animal. Y también es importante estar inserto en el mercado para comercializar. La ley es rigurosa, los controles son más estrictos y los beneficios, y los subsidios, son para quienes están en regla.

Según datos del Oncca el 80 por ciento de la producción de la provincia de Santa Fe en el año 2006 fue provisto por productores que producen menos de cien cerdos por mes. El 1 por ciento más grande se equipara en producción al 80 porciento mas chico. Esto se repite en todas las provincias. Todos estos pequeños productores irán transformándose si desean subsistir, con un buen esquema de producción intensiva a galpón. En sintonía con lo que pasa en todos los sectores, en todo el mundo occidental, en donde prevalece la racionalidad económica por encima de cualquier otro tipo de interés.

Los números hablan por si solos: para alimentar un animal a campo se insumen 420 kilos de alimento, para hacerlo en galpón 300. La producción por cerda por año a campo no supera los 15 animales, a galpón puede llegar hasta 25 animales. El número de empleados se reduce sensiblemente así como las tareas a realizar, ya que la mayoría de ellas en la producción a galpón se encuentran automatizadas, lo cual refleja la retribución del capital invertido en una alta rentabilidad.