Vudú, Magia, y Eficacia Terapéutica: Hipóstasis Portentosa del Arte de Sanar
Enviado por Felix Larocca
- En el principio era el verbo (Juan 1:1, 1:3)
- El nacimiento de los "curanderos"
- Las creencias y sus funciones
- La creencia se transmite por medio de los símbolos
- La fe
- El placebo
- La magia
- El vudú y otros ritos afro-americanos
- En resumen
- Bibliografía
"No existe el concepto independiente de enfermedad mental, como no existe tampoco el de enfermedad física." FEFL en Las Dolencias Humanas Como Metáforas de Nuestras Emociones.
Sócrates habla sus últimas palabras a Critón: "Critón, le debemos un gallo a Asclepios, por favor, no olvides pagar la deuda".
En esta ponencia trataremos de elucidar los elementos que constituyen las bases de nuestras defensas inconscientes y de cómo, de modo adaptativo, las mismas continúan proveyendo a nuestra especie con un repertorio simbólico de posibilidades terapéuticas — hasta, ahora, no del todo bien explorado — y sus misterios, aun, no completamente, esclarecidos.
René Magritte
En el principio era el verbo (Juan 1:1, 1:3)
Todo comenzó con el uso del simbolismo en el entendimiento del significado abstracto de las palabras, con la aplicación — al principio — instintiva y rudimentariamente, de las reglas y el uso de la semántica, y con la implementación de las figuras de expresión en nuestro discurso; hoy, tan ampliamente estudiadas por los psicolingüistas. (Véase mi ponencia: La Magia Semántica…).
Nuestros idiomas explícitos y abstractos nos distinguen de entre todos los otros animales, siendo estos mismos métodos de comunicación las manifestaciones más fehacientes de nuestras capacidades intelectuales.
La semántica, desde el punto de vista lingüístico/emocional — constituye nuestra primera arma civilizada, de capacidades insospechables, cuando ésta se aplica con precisión.
El nacimiento de los "curanderos"
En el seno de todos los grupos humanos surgen espontánea, simultánea e ineludiblemente: los sanadores, chamanes, curanderos, terapeutas, médicos, hechiceros, adivinadores, magos, psicoanalistas y otros que, con sus labores, nos retornan la salud y equilibrio emocional.
Cada uno de estos individuos es producto de un contexto cultural y del momento histórico del mismo.
Todos son diestros en restaurar la salud a los enfermos. Siendo exitosos a pesar de que sus recursos terapéuticos y su visión de las enfermedades sean completamente distintos.
La pócima, el elíxir, el conjuro, el exhorto, la pastilla, la planta medicinal, la inyección, la trepanación, el oráculo, la interpretación de los sueños, la clarificación, y la elucidación; todos constituyen, un grupo heterogéneo de remedios cuyo denominador común es que cada uno de ellos es eficaz en sus logros en una proporción sorprendente de los casos.
Curandero
Este hecho asombroso invita a pensar que la curación no depende tanto del medicamento ni del terapeuta, sino de la capacidad que éstos tengan para movilizar los mecanismos naturales auto-curativos que dependen de las actividades del cerebro humano.
En tales principios se basa la medicina evolucionista o darvinista.
La elección que el individuo ansioso hace de uno u otro terapeuta depende de su condicionamiento previo, (o experiencia/socializada).
Es decir, el mejor terapeuta para un paciente es aquél quien suscita el "milagro" de la fe en la que su éxito depende.
Sin embargo, son el momento, las circunstancias y el sujeto mismo quienes evalúan el proceso terapéutico, modificando siempre la estructura del mismo. De esta manera, es como la religión de una persona resulta ser superstición para otra; y la ciencia de uno, es magia para el otro. (Véanse mis artículos: Anthropic Coincidences UBCV, y El Principio Antrópico como Fulcro, el último en monografías.com).
En esta ponencia, aunque de forma muy breve, proponemos un examen de los mecanismos profundos en el proceso de enfermar y de sanar del ser humano, explorando analíticamente la dinamia y relaciones de una serie de conceptos que considero de alto valor heurístico para este propósito.
Las creencias y sus funciones
Las creencias son ideas que operan en nuestro interior de manera automática; y que, siendo anteriores al acto de reflexionar, constituyen un verdadero a priori.
Las creencias, entidades especiales…
Las creencias son ideas que nos definen, ideas que somos, ideas que forman parte intrínseca de nuestro ser, y no imágenes que tenemos. No son formas interpretativas de la realidad, son nuestra realidad. Éstas se adquieren generalmente en el proceso de socialización y no necesitan someterse al escrutinio de la verificación empírica.
La creencia es pues, una estructura hermenéutica/intuitiva que nos permite responder y definir — organizándolo en nuestra mente — cualquier evento inexplicable que nos afecta. (Véase mi artículo: La Intuición Animal).
Intuición animal
La creencia se transmite por medio de los símbolos
Toda creencia posee un componente cognitivo/perceptivo, desde el que se formula una valoración afectiva (componente emocional) y que se encuentra inserto en estructuras somáticas (circuitos neurales).
De esta manera, toda cognición tendrá una repercusión afectiva, fisiológica y conductual.
Este proceso es bidireccional, es decir, puede funcionar en orden inverso, un acontecimiento somático moviliza componentes afectivos, cognitivos y de comportamiento, lo que en turno, activaría una red neuronal que se constituiría, por ejemplo, en una certeza de enfermedad y el individuo — como resultado — se quebrantaría.
Por su parte, la creencia en la curación desactivaría la red neuronal responsable del proceso patológico y se daría la recuperación inmediata. (Para leer más: http://www.monografias.com/trabajos60/sendero-mente-cuerpo/sendero-mente-cuerpo).
La fe
Fe es una palabra de alto contenido emocional y difícil de definir. Permanece en la base de toda curación; y reside, en esencia — convicción o creencia — en toda curación, dependiendo en cierto grado de factores psíquicos y culturales.
Así es como un nativo acude al chamán porque está seguro de que éste podrá ayudarle, igualmente acudimos al médico de más prestigio profesional porque estamos en la creencia de que él es la persona más adecuada para ayudarnos — por esa razón ciertos facultativos cubren sus paredes con exuberancia de diplomas — a veces sin valor alguno — pero a los que la fe del necesitado les asigna la relevancia imprescindible.
El concepto de fe, como convicción, lo encontramos en diferentes dominios de la realidad, de ahí que las curaciones por la fe sean variadas y se den en contextos diferentes, y a veces mediadas por individuos que no se tienen específicamente por terapeutas — como sacerdotes o santos — y que, en el mismo contexto — también podríamos mencionar lugares sagrados, reliquias, manantiales, cuevas y un largo sobreentendido de personas, objetos y espacios con propiedades paliativas.
El toque real
El toque real era una práctica de curar propia de las monarquías absolutas europeas medievales.
Carlos I, en 1,633 "curó" de una sola vez 100 afectados de escrófula y su hijo Carlos II "sanó a más de 100,000 afligidos de esta misma aflicción a lo largo de su reinado.
El placebo
La fe o creencia en que un determinado medicamento, hierba, inyección, amuleto, objeto sacro, lo que sea — que sane o nos alivie — nos conduce al concepto del placebo, en el que es necesario profundizar.
El efecto placebo
Desde el punto de vista de la medicina, el placebo es un preparado que contiene sustancias inertes, pero que en general presenta un efecto curativo igual, aunque, a veces — pero no siempre — menor, o de mayor eficacia que el competente activo.
Está largamente estudiado el hecho de que buena parte del efecto curativo de todos los medicamentos se debe al efecto anodino del efecto del placebo.
Esta fuerza dinámica de los placebos sustentó a la profesión médica durante siglos — aún cuando los medicamentos fueran funcionalmente nocivos — pero la fe, que el propio terapeuta transmitiera al enfermo, los convertiría en remedios eficaces.
Sería simplista restringir aquí los placebos a las drogas medicamentosas.
Placebo es todo aquello que simboliza la curación y genera y refuerza la fe en la misma.
Ofrendas, peregrinajes, gestos, acciones rituales, lugares, objetos simbólico-ceremoniales o sacros, deben ser consideradas como medicinas reales.
En los animales el efecto placebo funciona igualmente, a condición de crear un reflejo condicionado que active las estructuras auto curativas endógenas de las que hablaremos más adelante.
De esa manera, ratas a las que se elimina una infección mediante la administración de un antibiótico y la exposición a una luz, se recuperan de una segunda infección aplicando solamente la luz.
En los humanos el reflejo condicionado puede estar implícito, en esta situación, debido a experiencias previas, pero en general basta con que exista una expectativa de curación para que ésta, a menudo, se dé.
De esto podemos deducir que el principal aliado del efecto placebo (fe) es la sugestión.
Vudú
Todos sabemos por experiencia habitual que las expectativas dan lugar a cambios biológicos importantes: De tal manera, que tan solo pensar en comer, propicia la secreción de jugos gástricos y saliva.
Si imaginamos un limón (significante imagen pura) y esperamos a que por rumbos asociativos se active el registro neural que contiene el (señalado concepto) "limón", salivaremos de inmediato.
Analicemos este fenómeno en mayor detalle
Las percepciones se almacenan en el cerebro en forma de registros semánticos latentes contenidos por neurotransmisores.
Cuando estos registros se activan pueden re-crear las acciones y diversas sensaciones asociadas con una entidad determinada o con una variedad de ideas (A. R. Damasio).
Si tomamos como ejemplo una taza de café, ésta evoca las representaciones visuales y táctiles de su forma, color, textura, temperatura, junto con las de aroma y sabor del café, así como la trayectoria que siguen la mano y el brazo para coger y llevar la taza de la mesa a los labios.
Todas estas impresiones poseen componentes afectivos que se re-crean en distintas áreas del cerebro y del sistema neuromuscular, si bien su reconstrucción se da de forma simultánea y refleja.
En el ejemplo mencionado del limón, la imagen mental activará todas las configuraciones nerviosas que intervinieron codificando datos en la formación del concepto (experiencia sensorial previa) y se re-estimulan todas sus propiedades, peso, acidez, olor, sabor, de manera que la imagen fantaseada se torna real en la mente y se vuelve capaz de producir una fuerte respuesta somática-sensorial.
Esta sorprendente autonomía de los registros nerviosos conceptuales explicaría la sensación de "presencia de los muertos", al menos durante el período de duelo, o del fenómeno neurológico del miembro fantasma.
Las mujeres a las que se les practicó una extirpación de ovarios y útero, reportaron, con frecuencia, una sensación confusa de vacío en el vientre — "estar vacía" — término muy popularizado en este medio. (Véase: The Feeling of What Happens por A. Damasio).
La magia
La magia tradicional opera mediante los mecanismos antes descritos, si bien es parte de dos principios fundamentales que actúan como potentes refuerzos simbólicos: El principio de analogía y el principio de contigüidad. Por tanto la magia constituye un sistema lógico-metafísico que soporta la creencia (fe).
Miguel de Cervantes Saavedra: Manco de Lepanto
El principio de analogía enuncia que dos elementos similares gozan de las mismas propiedades. Por consecuencia, consumir nueces sería bueno para las afecciones cerebrales en función del parecido morfológico que existe entre esta fruta y el órgano del pensamiento; o enviar el humo de una fogata al cielo equivaldría a fabricar nubes que desencadenarían las lluvias.
Las curaciones por exhortos y conjuros se basan en este principio utilizándolo para la creación de relaciones de analogía valiéndose de la figura lingüística denominada como la metáfora.
Esta representación mágico-religiosa es suficiente para sanar al afectado.
En esta última figura es obvia la concatenación dinámica de imágenes con la finalidad de conectar o homogenizar la enfermedad al conjunto formado por los engramas simbólicos subyacentes.
Otra representación neurolingüística es la metonimia o contigüidad, utilizada en la magia por contacto, que se basa en la asociación de ideas por proximidad: Dos entidades que están en cercanía contigua comparten, entre ellas, sus propiedades y atributos; y una parte, al separarse del todo, mantiene las propiedades de la primera; pudiendo, además continuar influenciándose, entre ellas, aún a la distancia.
Este fenómeno se estudia en la física de partículas invisibles y su actividad se ha comprobado (Véase mi ensayo: La Teología de la Relatividad en Psikis.cl y monografías.com).
El toque real del que habláramos anteriormente, la imposición de manos, las reliquias, el aliento o la saliva del curandero, el manto de la Virgen, en suma todos los objetos que han mantenido contacto con entidades especiales, derivan de ellos sus efectos, sus propiedades y atributos semánticos.
El vudú y otros ritos afro-americanos
Tanto el demonizador como su víctima han sido subsumidos en la creencia del ritual del vudú. El hechicero se las compondrá para obtener cabellos o uñas de la víctima, es decir partes del todo, que utilizará ritualmente para la confección de un muñeco, para causar el daño pues — si posee la parte puede actuar sobre el todo (lógica metonímica) — después se encargará de que la víctima se entere de sus intenciones en cuyo caso, su imaginación (fe) actuarán como un mortífero placebo.
Los amantes por René Magritte
De interés al respecto es lo siguiente:
La respuesta emocional: La muerte por vudú
La muerte por vudú. Otro de los importantes conceptos que Walter Cannon propusiera…
Walter Cannon fue quien describiera, por la vez primera, el fenómeno de la muerte cardíaca súbita, resultado del estrés llevado a su extremo. Sus explicaciones son de interés, como son descritas en su contribución meticulosa a la literatura por Esther Sternberg.
Un ejemplo de esta muerte se encuentra en el Nuevo Testamento en Hechos 5:1-11 en la leyenda de Ananías y Safira quienes mueren súbitamente cuando fueran confrontados en una mentira. (Para seguir leyendo: http://www.monografias.com/trabajos91/abecedario-q-es-quetelet-imc-y-sus-fallos/abecedario-q-es-quetelet-imc-y-sus-fallos).
Un alto número de curaciones se dan en estado de trance. De hecho un gran número de rituales se persiguen induciéndolos mediante técnicas muy variadas: Toques rítmicos de tambor, danzas excitantes, recitaciones y oraciones iterativas, sugestiones hipnóticas, utilización de drogas o de sustancias psicodélicas— Todas, técnicas que persiguen alcanzar el éxtasis como estado alternativo de la conciencia, dentro del cual la susceptibilidad a la sugestión está muy aumentada. La sugestión es un acto de inducción y persuasión de una idea hasta que ésta es tomada por cierta — en ello se basa el hipnotismo. (Véase mi artículo: La Hipnosis).
Si bien el trance no está siempre presente, la sugestión si lo está, en mayor o menor grado. En todo ritual, incluyo las consultas de médicos y terapeutas, las palabras, los gestos, los hechos y objetos son un condensado simbólico que evocan códigos, representaciones y creencias compartidas, actuando como potentes refuerzos de la fe, propiciando la curación.
La Thérapeute por René Magritte
En resumen
La enorme variedad de terapias y terapeutas en existencia, es sorprendente, pero más sorprendente aún, es el hecho de que casi todas posean éxito curativo. Esta acción requiere una reflexión sobre los mecanismos que intervienen, tanto en el proceso de enfermar como de sanar humanos.
Los avances en neurociencia son prodigiosos, se puede, gracias al PET, y otros aparatos sofisticados "fotografiar" el pensamiento y cartografiar las funciones cerebrales, si bien aún, es muy temprano para la elaboración de modelos conceptuales definitivos.
La sugestión es la acción mediante la cual se induce la formación de una imagen en la mente, suficientemente incontrastable, como para producir respuestas orgánicas.
Ésta última constituye el elemento presente en toda cura.
La medicina científica debe mucho a las labores de los magos y brujos que fungían de "médicos" en nuestro pasado ancestral.
Hoy, para aliviar las tantas enfermedades desconocidas e insufribles que nos azotan, el papel de un buen terapeuta, que sea capaz de invocar las fuerzas imponderables de nuestras emociones, aunadas con el método de la ciencia, es nuestra única esperanza de sanar.
Fin de la lección.
Bibliografía
Larocca, FEF: Las Dolencias Humanas Como Metáforas de Nuestras Emociones en monografías.com
Larocca, FEF: La Magia Semántica: Destructo Constructo ¿Qué es? en monografías.com
Larocca, FEF: El Principio Antrópico como Fulcro en monografías.com
Larocca, FEF: La Intuición Animal y sus Aplicaciones a la Adaptación Humana en monografías.com
Larocca, FEF: El Sendero de la Mente al Cuerpo: Derrotero de Dos Vías en monografías.com
Larocca, FEF: Nocebo: El Lado Opuesto del Placebo en monografías.com
Larocca, FEF: La Neuropsiquiatría Cosmética en monografías.com
Larocca, FEF: Los Enteógenos, el Chamanismo y los Estados de Conciencia Alterados… en monografías.com
Larocca, FEF: Órgano Fantasma, Cinestesia, Propiocepción: El Drama del Cerebro y del Estómago Continúa en monografías.com
Larocca, FEF: El BIID, el Cerebro Vibrante, el Lóbulo Parietal Superior (LPS) en monografías.com
Larocca, FEF: Magia: Forma Arcaica de Explicar Nuestros Misterios en monografías.com
Larocca, FEF: Superstición y Demonismo: La Yuxtaposición Instintiva de la Razón y la Magia en monografías.com
Larocca, FEF: La Teología de la Relatividad en monografías.com
Larocca, FEF: Los Mecanismos Neurales de la Sugestión Hipnótica en monografías.com
Larocca, FEF: Abecedario "Q" es por Quetelet, IMC y sus Fallos en monografías.com
Damasio, A: (199p) The Feeling of What Happens: Body and Emotion in the Making of Consciousness Harcourt
Autor:
Dr. Félix E. F. Larocca