La labor política ? ideológica de los docentes en los momentos actuales

1. Resumen
3. Desarrollo
4. Objetivos de la educación político – ideológica
5. Contenido y tareas de la labor político – ideológica
6. Vías y métodos para el trabajo político – ideológico
7. Conclusiones
8. Bibliografía

RESUMEN.

Cuba es una potencia a nivel mundial, colocada en los primeros lugares por países en el sistema educacional, la cual ha sido atacada desde los mismos inicios de la Revolución por el enemigo; por eso es de vital importancia la preparación político – ideológica de todos los educadores. El presente trabajo aborda una problemática de trascendental significación para la obra educativa que se desarrolla en los centros educacionales, por convertirse el trabajo político – ideológico en una tarea social con la que los mismos están altamente responsabilizados.

INTRODUCCIÓN.

El mundo actual ha sufrido cambios significativos en el diario proceso desencadenado por la desintegración del campo socialista, que propició la uní polaridad internacional, la aplicación de políticas neoliberales y el desarrollo de una globalización atroz.

En medio de esa compleja situación la Revolución Cubana mantiene su autoridad nacional e internacional, incrementa la conciencia político – ideológica del pueblo, no se deja amedrentar, ha sobrepasado la etapa más crítica del período especial y desarrolla una ascendente recuperación económica con crecimiento económico por años, lo que ha podido ser posible por la unidad y conciencia del pueblo por concebir una estrategia de desarrollo muy acertada e inteligente y sobre todo porque se está librando una Batalla de Ideas de la cual no se tiene antecedentes, con argumentos sólidos y liderada por el incansable y siempre victorioso Comandante en Jefe Fidel Castro Ruz.

En este contexto internacional, la mentalidad de niños y jóvenes ha sido grandemente afectada y las consecuencias han sido manifestadas de múltiples formas; han surgido nuevos flagelos, se han perdido muchos valores y esto ha sido utilizado como vía importante por su influencia en la motivación de la forma de pensar y actuar de millones de personas en el mundo.

En correspondencia con los cambios producidos en nuestro país y el incremento de la acción enemiga contra Cuba, con la finalidad de minar la unidad de nuestro pueblo, de dividirnos, de erosionar la sociedad, de promover en ella patrones que no se corresponden con los del socialismo, es necesario fortalecer el trabajo político – ideológico.

La educación cubana es una muestra de fortaleza en estos 47 años de Revolución Socialista donde ha sido y será siempre de vital importancia para mantener nuestro sistema y nuestras conquistas la preparación general integral de nuestro `pueblo, especialmente de nuestros educadores por la misión que tienen dentro del mismo, enfatizando en las nuevas y actuales transformaciones que se han ido incorporando al sistema educacional, por lo que cada día la preparación político – ideológica de nuestros educadores tiene que ser superior y con mayor intencionalidad, haciendo uso coherente de los programas que la Revolución ha puesto en sus manos al calor de la Batalla de Ideas que protagoniza nuestro pueblo.

Por todas estas razones, la importancia de este trabajo está precisamente en lograr que los maestros comprendan que la tarea del desarrollo político – ideológico es de ellos también y que en estos momentos desempeña un papel decisivo en la formación de nuestros educandos, teniendo en cuenta que la ideología de ellos definen las fuerzas morales con que defienden las conquistas de la Revolución, donde se hace necesario luchar contra la inconsecuencia ideológica como la falta de interés moral, por lo que el trabajo político – ideológico debe ser organizado como un conjunto de acciones que influyan en las emociones y sentimientos de las personas y propicien formar, desarrollar y consolidar los valores y convicciones revolucionarias.

De ahí la necesidad de proponer tareas educativas bien definidas, dirigidas a enfrentar con dignidad, decoro y seguridad de éxito los nuevos retos que tenemos por delante para la dirección del trabajo político – ideológico..

DESARROLLO.

Existe desde los propios inicios de la Revolución, una constante preocupación y ocupación por la educación, la cual guía todo el accionar educativo, pedagógico e instructivo y como esencia asume un compromiso inicial y de principio en cuanto a la calidad de vida intelectual, promoviendo hábitos y valores por lo que transita al campo de las ideas, constituyendo uno de los sectores hacia los que el enemigo dirige su actividad ideológica. Todo esto evidencia la necesidad de reforzar la preparación político – ideológica de los maestros, teniendo en cuenta que la escuela no solo debe quedar en el marco de enseñar habilidades sino de formar ciudadanos para la sociedad con nivel cultural, valores e ideas para defender la construcción del socialismo, como un principio vital dentro de la política educacional a partir de la relación escuela sociedad.

A los maestros cubanos a lo largo de la historia, les ha correspondido el alto privilegio de ser participantes activos en el aporte a la consolidación de nuestro proceso revolucionario, contribuyendo esto a una firme confianza y seguridad que la dirección histórica de la Revolución ha demostrado tener en ellos.

El logro de este propósito ha contribuido cada vez más en la participación protagónica de nuestros maestros en la actual Batalla de Ideas que libra nuestro pueblo, consolidando la ideología de la Revolución que tiene como objetivo fundamental hechos y realizaciones concretas, en aras de lograr una preparación general integral poniendo especial énfasis en la más joven generación, la cual se ve reflejada en la construcción y reparación de escuelas primarias, la introducción de las tele clases a través de televisores y videos, los laboratorios de computación; por lo que la Batalla de Ideas se ha ido convirtiendo en centro de esfuerzo cotidiano de todos, siendo inaceptable la independencia y la poca acción de algunos revolucionarios.

Los objetivos que se alcanzan en la educación tienen como base los principios marxistas y martianos, los aportes y las alentadoras ideas de Fidel desarrollándose la moral socialista cubana debido a la estrecha vinculación entre los intereses individuales y la sociedad, a partir de su propia identidad reflejada en su comunicación ideológica, fomentando elevados sentimientos patrióticos y convirtiendo la preparación político – ideológica en convicciones de principios con la sociedad socialista.

La formación político – ideológica como parte de la política educacional no puede estar reducida a la promoción de algunos lineamientos instalados oficialmente, si no que debe ser un proceso completamente esparcido en el que los maestros de forma subjetiva y espontánea introduzcan elementos que definan una tarea en esta dirección y para ello es evidente hacer un mayor uso de los programas con que contamos para una real preparación político – ideológica que es la premisa fundamental.

La educación en Cuba ha sido y es parte genuina de la Revolución y es una de las principales conquistas al convertirse en derecho y deber de todo el pueblo. Es a toda luz y a la vista del reconocimiento del mundo y del propio pueblo cubano un autóctono y valioso logro del proceso revolucionario; por lo que la preparación político – ideológica de los educadores es la línea fundamental en la formación de las nuevas generaciones y reviste una importancia decisiva para la formación de nuestros educandos cada vez más integral.