Desesperanza aprendida y clima familiar

1. Planteamiento del problema
3. Hipótesis y variables
4. Metodología de la investigación
5. Aspecto administrativo
6. Bibliografía

Desesperanza aprendida y su relación con el clima familiar en un grupo de estudiantes y padres de familia del nivel secundario integrantes de la I.E.P. fe y alegría Nº 43 del distrito de Ventanilla

I. PLANTEAMIENTO DEL PROBLEMA

DELIMITACIÓN Y DEFINICIÓN DEL PROBLEMA

Nuestra realidad se encuentra influenciada por una serie de aspectos, entre estos la desigualdad económica y social, la cual obviamente influencia el comportamiento de nuestra población. Este comportamiento sustentado en una percepción negativa y pesimista respecto a las propias capacidades y a un destino aparentemente adverso e inmodificable es el elemento fundamental de lo que se conoce como Desesperanza Aprendida. La población en la cual se trabajará se constituye de personas de ingresos económicos escasos, poco acceso a insumos y bienes básicos como la salud, vivienda y educación, o de acceder a las mismas, la calidad de dichos servicios no es siempre favorable.

Dicha situación repercute directamente sobre dinámica social, la conformación de organizaciones de base, entre estas clubes de madres o juntas vecinales suponen un esfuerzo por mejorar su estatus de vida; sin embargo lo complejidad de su condición termina por definir una serie de disposiciones negativas, sean estas intra e interpersonales. Las características personales, como el antes mencionado pesimismo, aparecen como elementos permanentes e inmodificables, por ello el desaliento y frustración conviven diariamente con ellos. La estructura social fundamental, como es la familia es muchas veces el receptáculo de estas frustraciones personales, y obviamente se tornan algo más que el malestar manifiesto, pues sus expresiones pasan a ser parte de la interacción entre los miembros, son a la par su vía de expresión cotidiana y su vehículo para manifestar inconformidad, y lo más preocupante es que constituyen modelos imitativos, formas de crianza que progresivamente recalaran en la formación de personas con las mismas características pesimistas que sus progenitores y/o referentes intrafamiliares. Si bien los estudios respecto a la Desesperanza Aprendida como constructo social son mínimos, reduciéndose a apreciaciones conceptuales más que a apreciaciones empíricas, consideramos que es pertinente mencionar elementos que guardan correlación directa. Inicialmente, la institución educativa en la que se realizará el estudio esta formada por aproximadamente 2000 personas entre estudiantes de los 3 niveles de educación regular, padres de familia, personal docente y administrativo. Los antes mencionados interactúan en función a las actividades que se cumplen dentro de la institución, y es aquí donde se puede observar con frecuencia patrones de comportamiento bastante claros; respecto a esto, tomando como referencia la atención psicológica que se da a los beneficiarios directos (padres y alumnos) es común recoger comentarios respecto a lo negativa que es su situación actual, o la tendencia a justificar cualquier evento por su condición económica. Además es un tema recurrente el ver como inmodificable los problemas intrafamiliares, siendo en mayor grado aquellos que derivan de violencia familiar o separación de padres.

Si bien podemos refrendar el hecho que cada una de las situaciones referidas realmente pueden generar estados de ánimo desfavorables, consideramos que la percepción negativa, perseverante e inmodificable respecto a su presente, pasado y futuro son el resultado de creencias estereotipadas reforzadas en cierta medida por la propia realidad. Es decir la Desesperanza Aprendida en nuestra población no debe ser tomada como el resultado directo de su condición de pobreza sino de la concepción que tienen respecto a dicha condición, esa representación mental que se caracteriza por ser totalmente disfuncional, rígida e invariable y que es capaz de definir su estado afectivo y por ende enmarca su comportamiento. Se han registrado adicionalmente reacciones como el intento de agresión a si mismo, llegando a incluir atentados claros contra la propia vida, que si bien aún son casos aislados y estadísticamente poco significativos, son por su propia naturaleza importantes y elementos que invitan a la toma de conciencia a través de estudios que permitan dar solución como es el caso de la presente tesis.

Referente al Clima Familiar, ya anteriormente hemos referido que se la misma se enmarca en una condición económica adversa y por tanto en limitaciones respecto al acceso a la información, servicios y derechos. Comencemos realzando que la familia, como entorno de influencia primordial sobre todo en los primeros años de vida, determina en buena medida las actitudes y formas de afronte que los individuos asumirán ante eventos futuros. Además como unidad social con elementos interdependientes es también una estructura de influencia a otras que se encuentran en condicione similares, es decir, si en una familia observamos pesimismo derivado de lo que creen pocas posibilidades para conseguir trabajo, es probable que una familia en condición similar se afecte por dicha actitud, la incorpore o margine. Dicha incorporación se estaría viendo facilitada por la realidad, en la que lamentablemente el Estado no contribuye con medidas concretas para la superación de la pobreza.