Las rubricas, un instrumento de apoyo para la evaluación

El presente documento muestra un breve análisis de las rubricas como instrumento para la evaluación de las competencias desde un enfoque socioformativo, con la finalidad de establecer un breve comparativo entre una rúbrica tradicional y otra con un enfoque socioformativo.

La utilización de las rubricas reflejan la aplicación integral de los saberes (considerados como pilares de la educación) y a su vez nos permiten mejorar, para así poder alcanzar las metas establecidas favoreciendo la resolución de dificultades presentadas durante el proceso de aprendizaje.

Palabras clave: rubrica, evaluación, competencias, enfoque socioformativo

Abstract:

This document presents a brief analysis of the rubrics as an instrument for the assessment of competencies from a formative social approach, in order to establish a brief, or minimal, comparison between a traditional rubric and another one with a formative social approach. The use of rubrics reflect the full application of knowledge (regarded as the education foundation) and, in turn, allow us to improve in order to archieve the set up goals, favoring the resolution of emerging difficulties, during the learning process.

Key words: rubric, assessment, skills, formative social approach

Mapa de orientación

En este mapa se presentan los elementos claves para el proceso de evaluación bajo un enfoque socioformativo.

Introducción

En la actualidad, la necesidad de proporcionar a los alumnos una educación integral y de calidad es fundamental, esta debe brindar las oportunidades necesarias para desarrollar conocimientos, habilidades y actitudes, los cuales están encaminados a satisfacer las exigencias de un mundo cada vez más cambiante, tanto social como tecnológicamente.

La Socioformación tiene como objetivo aplicar acciones concretas con los estudiantes para lograr la formación humana integral y el desarrollo de competencias para hacer frente a los desafíos del contexto actual y futuro, tanto en el plano local, regional y mundial (Tobón, 2013). Para empezar con esta transformación se debe actuar de forma integral para así lograr el desarrollo de competencias en los estudiantes y que estas tengan un impacto en el desarrollo del proyecto ético de vida de cada uno de estos.

El significado de competencia según el Diccionario de la Real Academia Española (2011) en línea, es: "pericia, aptitud, idoneidad para hacer algo o intervenir en un asunto determinado", para el enfoque socioformativo una competencia es una actuación integral, la cual permite la interrelación de los cuatro saberes: el saber ser, saber convivir, saber hacer y saber conocer.

Entonces ¿cómo la evaluación permitirá lograr el desarrollo de competencias con un enfoque socioformativo?, en este artículo se hace un breve análisis sobre la utilización de las rubricas para la evaluación por competencias, así mismo se presenta un ejemplo de rubrica tradicional y uno diseñado con el enfoque socioformativo, con la finalidad de conocer las diferencias entre ambos instrumentos para establecer así la utilización de los mismos en un determinado tema de alguna asignatura, que nos permita determinar los logros y los aspectos por mejorar durante el proceso educativo.

El enfoque socioformativo

El enfoque socioformativo se define como un marco de reflexión-acción educativo que pretende generar las condiciones pedagógicas esenciales para facilitar la formación de personas íntegras, integrales y competentes para afrontar los retos-problemas del desarrollo personal, la vida en sociedad, el equilibrio ecológico, la creación cultural-artística y la actuación profesional-empresarial (Tobón, 2013)

En base a este enfoque las competencias deben ser un componente integral en la formación de todo ser humano, por tal motivo es indispensable desarrollar instrumentos adecuados que permitan realizar una evaluación adecuada del grado de desarrollo de las competencias.

Las competencias son un componente esencial en la formación de todo ser humano, estas permiten conformar una sociedad integra, fortalecida en valores encaminados a formar personas capaces de afrontar retos y problemas, planteando a estos soluciones creativas que permitan el desarrollo un sólido proyecto ético de vida.

La evaluación

La evaluación vista como una práctica común en la educación ha presentado diversos cambios derivados de una forma de pensamiento, pese a esto aún se realizan algunas prácticas de evaluación tradicional, un ejemplo de esto es la utilización de algunos instrumentos de evaluación que no reflejan el desempeño integral de los estudiantes, tal es el caso de las pruebas escritas estandarizadas diseñadas solo para evaluar los conocimientos adquiridos de los estudiantes (ver figura 1), mas no reflejan el desempeño integral de los mismos en virtud que son utilizadas como el único instrumento de evaluación para el alumno, sin considerar las evidencias que estos pudieran presentar como el reflejo de los aprendizajes logrados durante un periodo de tiempo.

En algunas instituciones educativas es muy común utilizar este tipo de instrumentos como la única opción de acreditación de las asignaturas, las cuales por diversas situaciones los estudiantes no pudieron acreditar durante algún periodo o ciclo escolar. Estas evaluaciones se realizan de forma extraordinaria (exámenes de regularización, extraordinarios, de título de insuficiencia, etc.) y solo con el sustento de una prueba escrita se logra acreditar dicha asignatura. Entonces ¿la evaluación integral es solo para el alumno o alumna que es considerado como regular? La evaluación integral debe ser aplicada en cualquier etapa de formación educativa y debe permitir a su vez al individuo buscar que éste desarrolle los saberes necesarios para afrontar retos en cualquier contexto, social, cultural, educativo, etc., y permitiendo también la mejora continua en cada una de sus actividades.

Figura 1. Ejemplo instrumento de evaluación.

La evaluación de las competencias desde la socioformación

Tal como señalan Tobón, Pimienta y García Fraile (2010), la evaluación de las competencias es determinar cómo se forman éstas en los estudiantes durante los módulos y a lo largo de un programa educativo, con el fin de que aprendan a desempeñarse con un compromiso ético e idoneidad ante los problemas de contexto actual y futuro en el marco de un aprendizaje y mejoramiento continuos.

La evaluación desde la socioformación se basa en las evidencias de los desempeños y está encaminada al mejoramiento continuo de los individuos, vinculando saberes, disciplinas y áreas para el desarrollo integral de las competencias (Tobón, 2013).

La evaluación con un enfoque socioformativo considera tres ejes básicos:

• a) Los criterios

• b) Las evidencias

• c) Los mapas de aprendizaje

Como lo establece Tobón (2013), la metodología de la evaluación desde el enfoque socioformativo se basa en niveles de dominio:

• 1. Preformal: en este nivel se consideran solo algunos elementos que no alcanzan a definir un nivel receptivo.

• 2. Receptivo: este nivel considera que se tiene recepción de la información, el desempeño es muy operativo, hay baja autonomía, se tienen nociones sobre la realidad y el ámbito de actuación en la competencia.

• 3. Resolutivo: se resuelven problemas sencillos del contexto, hay labores de asistencia a otras personas, se tienen elementos técnicos de los procesos implicados en la competencia y se poseen algunos conceptos básicos.

• 4. Autónomo: hay autonomía en la actuación, se gestionan recurso, hay argumentación científica sólida y profunda, se resuelven problemas de diversa índole con los elementos necesarios.

• 5. Estratégico: se plantean estrategias de cambio en la realidad, hay creatividad e innovación, hay altos niveles de impacto en la realidad, se hacen análisis evolutivos y prospectivos para abordar mejor los problemas, se consideran las consecuencias de diferentes opciones de resolución de los problemas de contexto.

La evaluación mediante matrices (rúbricas)

La evaluación de las competencias como ya se menciono debe ser un proceso integrador y continuo, para tal efecto la socioformación establece la evaluación a través de matrices con mapas de aprendizaje, en las cuales se ha de describir los niveles de dominio antes mencionados que podrán ser alcanzados por los estudiantes.

A lo largo de la historia las rúbricas se han utilizado en procesos formativos donde los aprendices reciben una continua retroalimentación, dentro del terreno educativo, las rúbricas se han usado para perfilar el desarrollo de las competencias (López, 2013).

Los mapas de aprendizaje (rúbricas) son tablas de doble entrada en las cuales se relacionan los criterios establecidos en las competencias, así mismo se integran los diversos niveles de dominio y las evidencias que deberán presentar los estudiantes durante determinado tiempo.

Mapa de pasos claves para la elaboración de una rúbrica bajo un enfoque socioformativo.

Referencia: Tobón, 2013a, 2014.

A continuación se presenta un ejemplo de rúbrica con un enfoque socioformativo:

Las rubricas son un instrumento completo para verificar los alcances obtenidos por los estudiantes y deben ser diseñados de forma tal que reflejen los desempeños en las evidencias propuestas para el desarrollo de una competencia. Una rúbrica no solo puede ser utilizada para una asignatura, es decir, se puede trabajar en forma colaborativa o colegiada con algunos docentes, para que el mismo instrumento permita observar los desempeños en varias asignaturas, un ejemplo de esto es la elaboración de una investigación científica en la asignatura de metodología y taller de investigación para el nivel medio superior, los estudiantes realizan la investigación con base en la determinación del algún problema de su entorno y lo presenta en un informe con el protocolo correspondiente, este informe integra datos cualitativos y cuantitativos, los cuales presenta en cuadros y gráficos de datos agrupados, determina una población de estudio, selecciona muestras, establece variables, etc., estos resultados son evaluados como evidencia en la asignatura de probabilidad y estadística, teniendo entonces un solo proyecto para ser considerado como evidencia para la evaluación de dos asignaturas. Para los estudiantes es menos desgastante realizar un proyecto que les permite obtener notas en dos asignaturas.

Para los docentes esta actividad se vuelve enriquecedora, permitiendo abordar la transversalidad y aplicación real de los conocimientos adquiridos por parte de los estudiantes, así como el desarrollo de competencias de una forma realmente integradora, ya que por un lado el docente de metodología evalúa la estructura y el contenido del proyecto y el de probabilidad los resultados obtenidos en dicha investigación.

Conclusiones

La evaluación no debe ser considerada como un enjuiciamiento que promueva la sanción a los errores cometidos al desempeñar alguna actividad, la mayoría de los estudiantes consideran que ésta gira en torno a un instrumento de tortura llamado examen, si bien el solo hecho de considerar ser evaluado genera incertidumbre e inconformidad, este proceso es necesario, ya que se debe ver como una oportunidad de mejora.

La evaluación debe permitir la determinación de los logros de los estudiantes en una o varias competencias, considerando que esta debe ser integradora y reflejar la apropiación del conocimiento, las fortalezas de los estudiantes y las acciones de mejora proponiendo también la autoevaluación, la coevaluación y la heteroevaluación.

La autoevaluación: se realiza de forma personal, algunos instrumentos para lleva a cabo esta evaluación son los cuestionarios cualitativos y cuantitativos, los cuales permiten la valoración de la formación de las competencias.

La coevaluación: se da entre compañeros y consiste en que el estudiante pueda evaluar las o la evidencia de otro compañero de una forma objetiva, se establecen criterios que permiten identificar los logros y los aspectos de mejora de la actividad.

La heteroevaluación: se da por parte del docente y consiste en la identificación de las características del aprendizaje logrado por los estudiantes debiendo señalar las fortalezas y los aspectos a mejorar en las actividades presentadas como parte del proceso integrador de aprendizaje.

Las rúbricas son instrumentos completos que permiten observar los desempeños de los estudiantes, si son diseñadas y aplicadas de forma adecuada permiten la valoración de forma integral de los saberes para el desarrollo de las competencias, logrando así una mejora continua en los estudiantes ya que la evaluación se convierte en una experiencia más de aprendizaje, puesto que se identifican las deficiencias en la ejecución de las actividades dando oportunidad a la corrección de estas.

Las rubricas no deben ser consideradas como un instrumento de enjuiciamiento de las personas, más bien son una herramienta efectiva que da la oportunidad de desarrollar el crecimiento personal.

Referencias bibliográficas

López Carrasco, M.Á. (2013). Aprendizaje, Competencias y TIC. México: Pearson.

Tobón, S. (2013). Formación integral y competencias: pensamiento complejo, currículo, didáctica y evaluación (4ed.). Bogotá: Ecoe.

Tobón, S. (2013a). Metodología de gestión curricular. Una perspectiva socioformativa. México: Trillas.

Tobón, S. (2014). Proyectos formativos: teoría y metodología. México: Pearson.

Tobón, S., Pimienta, J. y García Fraile, J.A. (2010). Secuencias didácticas: aprendizaje y evaluación de competencias. México: Pearson.

Autor:

Patricia Ibáñez Carrasco

Lizabel Sánchez Hernández

Maestría en Docencia y Desarrollo de Competencias

Instituto CIFE