Vito Modesto Franklin, visto por doña Catalina Aranguren Bravo y demás familiares
Enviado por León Morales
Vito Modesto Franklin Montes, visto por Doña María Catalina de Sena Aranguren Bravo de Sánchez Jiménez en Maiquetía"
Víctor Modesto Franklin Montes, Duque de Rocanegras
Entre los pueblos de La Guaira y Maiquetía, existió un personaje histórico lleno de la mayor fabula posible, quién en su vida profana y mundana se llamó VÍCTOR MODESTO FRANKLIN MONTES, y quien de paso en el argot popular fue conocido como el "DUQUE DE ROCANEGRAS".
Yo soy nativo del pueblo de Nuestra Señora de La Candelaria de Tarmas, Parroquia Carayaca del antiguo Departamento Vargas del Distrito Federal y ciertamente hoy he querido hablar sobre este personaje místico, oriundo de La Guaira, que entre su holgazanería y vagancias de zagaletón de altos quilates, buscó la fama a través de los infortunios mismos de la vida en su época y tiempo.
Conversando con el Dr. José Basilio Sánchez Aranguren en su casa en Las Delicias de Maracay-Edo. Aragua, recordamos a ese personaje con mucha vehemencia, debido a que en los momentos en que nos vestíamos en nuestras casas en Pariata o en Piedra Azul en El Rincón de Maiquetía, como en el Bloque 2 de la Urb. "Páez" en Catia de La Mar, en muchas ocasiones oíamos a nuestra matrona común, referir estas palabras: ¡Estás Vitoqueado!
Al principio no entendíamos su expresión, pero luego fuimos comprendiendo que nos las decía cuando tratábamos de vestirnos con nuestra mejor gala o nuestra mejor ropa, aún cuando no tuviéramos ni medio en el bolsillo. Y si vestíamos con una buena chaqueta o paltó, entonces nos gritaba estas palabras: ¡Pareces un sapo rabuo!
María Catalina de Sena Aranguren Bravo de Sánchez Jiménez
Lo de "sapo rabuo", le venía en sus comparaciones con aquellas personas que iban a los teatros o actos importantes de los gobiernos de turno, ya que los hombres iban con sombreros de copa y se acompañaban de un traje de levita, con cola, se colocaban flores en uno de los bolsillos de la levita, un buen pañuelo allí y otro en el pantalón, y en algunos casos usaban guantes y hasta paraguas en manos.
Generalmente, mi abuela María Catalina de Sena Aranguren Bravo de Sánchez Jiménez, nos las aplicaba los días sábados o domingos cuando íbamos al cine o cuando en los días de Semana Santa íbamos a algunas de las procesiones que se daban por los lados de la Plaza Lourdes en Maiquetía, las cuales eran muy pomposas.
Plaza "El Tamarindo" en Maiquetía
En una ocasión, encontrándonos por los lados de La Plaza de "El Tamarindo" o Plaza de "Los Maestros" en Maiquetía, si más no recuerdo, sucedió una vez finalizada las fiestas carnestolendas de 1.965 y encontrándonos ese día con Vicente Pérez Aranguren, su sobrino e hijo de su hermana Ignacia Aranguren Bravo de Pérez con mi tío político Eleuterio Pérez, en mis mocedades juveniles, les hice a ambos la siguiente pregunta: ¿Por qué usted usa la palabra "Vitoqueado", cuando se dirige a nosotros, abuela Catalina?
¿Qué sabe usted sobre esa palabra, primo Vicente?
Mira, vale. Quién te puede hablar mejor sobre esa palabra es mi tía Catalina Aranguren Bravo, ella lo pudo haber conocido mejor que yo, ya que ella tiene más edad y ha estado muy cerca del verdadero significado de la palabra. Yo tengo entendido que una persona Vitoqueada en faramallera y es amante de su propia figura, ya que siempre viven mirándose en los espejos, en mi condición de caletero portuario no tengo palabras para explicártelo mejor.
Inmediatamente, intervino mi abuela María Catalina de Sena Aranguren Bravo y me dio a conocer estas palabras:
La palabra "Vitoqueado" tiene que ver con una persona que deambuló por varios años por estas plazas de Maiquetía y La Guaira. Él fue un personaje muy conocido, debido a sus extravagancias, aquí lo conocimos como el "Duque de San Víctor o Duque de Rocas Negras".
¿Y quién fue ese personaje, primo Vicente?
Ese tipo se llamaba VÍCTOR MODESTO FRANKLIN MONTES, quién trabajó como caletero por muchos años en el puerto de La Guaira. Y saliendo de esas duras jornadas portuarias, que sacude la frente de quienes duramente laboramos allí, a causa del fuerte y devastador calor marino, emergió esa figura extraña que deslumbró su propia personalidad y extraños modales en estas tierras.
¿Y por que lo de Víctorquedo, abuela Catalina?
Al amigo Víctor, yo lo conocí muy bien conocido. Claro está, él era más viejo que yo, ya que era muy común verlo en los teatros Lamas en La Guaira o "El Libertador" que quedaba en una esquina de la Plaza "El Tamarindo" en Maiquetía, o en "El Royal", cerca de la Plaza "El Cristo".
El Duque de Rocanegras
Las malas lenguas de la época decían que Víctor Modesto Franklin Montes, un día salió de su jornada de caletero en el puerto y dijo estas palabras: "… No seré más caletero, de ahora en adelante seré la figura de una persona importante, y me convertiré en un ser educado y lleno de modales…".
Hay quienes también alegaban, que Víctor Modesto Franklin Montes se fue a una vieja lavandería que había en Maiquetía y compró algunos trajes usados, camisas y llegó hasta a comprar zapatos remendados de dos tonos a la cubana, que nunca fueron retirados por sus dueños y haciéndose el yo no fui, se pudo comprar algunos sombreros de copa o Panamá, y de esa manera fue cambiando sus modales, para convertirse después en el Duque de Rocanegras.
¿Qué opinas sobre esos primeros andares de Víctor Modesto Franklin en el litoral guaireño, primo Vicente?
Víctor Modesto Franklin Montes fue una persona extraña y quienes le conocieron me contaron que él con facilidad se aprendía algunas palabras en francés o en inglés, quizás en italiano, ya que las oía frecuentemente en los barcos extranjeros en donde trabajaba, y de esa manera le iba dando forma a sus modales, tratando de que su vocabulario se adaptara en los espacios en donde él era la referencia del momento. Ese hombre fue un espectáculo, esa es la mera realidad de las cosas.
Las voces agoreras del pasado manifestaban que el Duque de Rocanegras antes de ser ese importante personaje, frecuentaba mucho los lenocinios de prostitutas que había en "Muchinga" en La Guaira y en "El Silencio" en Caracas, y además fue un empedernido y tramposo jugador de azahar.
¿Qué hay de cierto que a Víctor Modesto Franklin Montes, le gustaba tener relaciones intimas con hombres, abuela Catalina?
La gente de esos tiempos decían que Víctor Modesto Franklin era muy estrafalario y que a él le gustaba andar con personas "manfloricas", ya que esos extraños individuos les daban dinero, ropa y comida; y a su vez los invitaban para alguna actividad teatral o musical, que fueron los espacios en donde él más se lució.
En una ocasión, mi padre Francisco Santiago Sánchez Aranguren, hablándome del personaje en cuestión, me dijo estas palabras:
Yo no conocí personalmente a Víctor Modesto Franklin Montes, pero si conocí gente que lo conoció, tanto en el puerto de La Guaira, como en sus andanzas como el Duque de Rocanegras y Príncipe de Austracia.
Francisco Santiago Sánchez Aranguren
Ese hombre nació en La Guaira en 1.860 y era proveniente de una familia muy pobre. Y yo tengo entendido, que sus padres fueron Benito Franklin y Eduvigis Montes. Y si más no recuerdo, yo creo que él tuvo un hermano que se llamaba Antonio Franklin Montes.
Sus aventuras comenzaron en sus afanes de caletero de café en los barcos de carga en el puerto de La Guaira. Allí aprendió muchas palabras en diversos idiomas y lenguas, a través de los marinos que provenían de diferentes partes del mundo en esos tiempos.
Su periplo de bandido y holgazán tuvo au apogeo, cuando tenía 15 años de edad; la cual inició en una de las más conocidas posadas de esa época, la cual fue conocida como La Posada de "El Gato". A veces cuando somos jóvenes andamos con persosnas de nuestras mismas edades, que son desadactados, y nunca vislumbramos que nos llevan al terreno de la delincuencia y la vida fácil, sin darnos cuentas del mundo en donde después nos podemos ver inmersos.
El propio Víctor Modesto Franklin, en su trabajo "Mis Memorias" por el duque de Roca Negras en 1.924, sobre su nacimiento escribió lo siguiente:
"… Fue en la Guayra, a las orillas del mar caribe, donde la naturaleza presenció, llena de júbilo, mi advenimiento al mundo. Contábame mi madre (Q.E.P.D) de cómo el cielo, ese día feliz para ella se cubrió de nubarrones, que no tardaron en transformarse en horrenda tempestad. A la Divina Providencia plúgole que yo viera la luz de la misma manera que mi ascendiente la divina Venus.
Andando los meses, ya comenzado a peninear los sencillos campesinos quedábanse absortos contemplando mi tierna belleza sin par, tal así que muchos no pudieron contenerse cuando, durante la ceremonia del bautismo en el grave Templo, apareció mi cuerpecito, rosado como un "cundiamor" avileño, y rompieron a coro, presos de una admiración caso delirante. ¡Ay que lindo! – ¡que lindo! – ¡que lindo! -. Límpidas palabras que andando el tiempo metomorfosearónse en un cuplet popular que llegó a poseer el alma del poblacho. Hélo aquí:
En la pila bautismalEl padrino y la madrinaCargaron la figulinaQue parecía de cristalY el cura quedose – "absortum"Delante belleza talY exclamó: "Pero qué abortum"Y luego le hechó sal.
EstribilloAy que lindo, lindorum, lindigaEs Vítico, Víctorrum, VitingaEtc. Etc. Etc.
Puerto de La Guaira, en tiempos de Vito Modesto Franklin
¿Qué quiere usted, decir con eso, papá?
Bueno, vale. A Víctor Modesto Franklin quién lo metió en esas andanzas de vagabundo en La Guaira, fue Rodolfo, su amigo de infancia. Ellos tuvieron viendo como podían apropiarse del dinero que producía la ruleta en La Posada de "El Gato", lo más seguro fue que estuvieron pendiente de todos los movimientos que hacían los jugadores y los dueños de ese local al servicio de los juegos de azahar y envites.
Víctor Modesto y su amigo Rodolfo desbancaron la ruleta, algo de trampa hicieron y se pusieron en todo el dinero que la misma tenía para sus dueños y posibles jugadores incautos. En esos momentos se produjo un altercado con algunos de los perdedores, acarreando un hecho de sangre, que de hecho llevó a Víctor Modesto a pagar 3 años de cárcel en esos días, esos sucesos tal vez se dieron en 1.875.
¿Y qué pasó después con Víctor Modesto Franklin, abuela Catalina?
Que yo sepa, Víctor Modesto al salir de prisión, se fue a vivir por los lados de Barlovento, y allá se puso a vivir del chuleo y de los juegos, y aceleradamente hizo alguna platica, que lo conllevó a adquirir algunos bienes.
Ese hombre era tan charlatán, que en los lugares en donde no lo conocían se hacía pasar por abogado o por sacerdote, ya que manejaba un palabrerío que casi convencía a la gente, en pocas palabras, era un estafador.
¿Cuándo cree usted, que Víctor Modesto Franklin tuvo su mayor apogeo en su vida, abuela Catalina?
Ese vagabundo tuvo su mayor apogeo entre sus 30 a 60 años de edad, de eso no hay dudas. Yo lo conocí cuando él tenía un poco más de 40 años de edad, imagínate las cosas que hizo antes de eso, que seguro estoy fueron muchas; ya que él fue un hombre narcisista que vivió enamorado de su propia imagen; creyéndose que en esos días superaba al actor del cine mudo norteamericano, Rodolfo Valentino.
Puerto de La Guaira, año 1.900
Una vez que Víctor Modesto Franklin hizo una plata con los vicios del juego y chuleo en La Guaira: ¿Qué hizo él después, papá?
Ese hombre hizo lo que hace todo ser que va al puerto de La Guaira en son de trabajo o de ver como se embarca en un buque de cualquier bandera, para ir a buscar fortuna en cualquier parte del mundo.
Yo fui jefe personal de los Servicios Portuarios de La Guaira en 1.963, y en más de una ocasión le manifesté a mis hijos Juan Francisco Morales, Edgar Eduardo Morales y a ti, que no les daba trabajo, ya que ese centro de trabajo era un lugar de borrachos, vividores, estafadores, contrabandistas, homosexuales, ladrones y de gente de la más baja calaña, habida y por haber.
Y yo nunca quise eso para mis hijos, esa es la pura verdad, aunque siempre fui mal visto por ustedes, debido a que nunca les di trabajo en esos centros de trabajos en el portuario. A pesar de que conmigo trabajaron mi tío Lino Aranguren Bravo y mi primo Vicente Pérez Aranguren.
Los puertos siempre han sido escuelas para el vicio, ya que en su mayor caso, los trabajadores dejan sus salarios en los prostíbulos y bares de mala muerte. Yo recuerdo hijo mío, que en una ocasión tu estudiabas tercer año de bachillerato en el Liceo "José María Vargas" en Maiquetía en 1.967 y perdiste el año escolar porque te jubilabas de clases, para irte al puerto y que aprender inglés, ya que te llamaba la atención las aventuras que produce el irse como atorrante en cualquier buque que surcase nuestros puertos y rada.
Eso fue lo que hizo Víctor Modesto Franklin en esos tiempos, tomó un buque de pasajeros y se fue en tercera clase a Europa. Quizás estuvo en Francia y allí adquirió esos extraños modales que lo hacían ver como un manflórico refinado ante las demás personas.
Yo estoy seguro que estuvo en Marsella y después estuvo en Italia y en España, adquiriendo en esa vida mundana el arte refinado de Oscar Wilde, quien de paso era manflórico creativo, debido a sus obras escritas, haciendo suya la elegancia y prestancia vivida en los ademanes de las cortes españolas de su tiempo.
¿Qué pasó con Víctor Modesto Franklin, una vez que regresó al país, abuela Catalina?
Cuando él regresa al país estaba cerca de los 60 años de edad, traía una forma de presentarse ante las demás personas y fue cuando creó las figuras del Duque de Rocanegras y Príncipe de Austracia.
General en Jefe Cipriano Castro Ruiz
Yo viví en mi infancia el gobierno del General Cipriano Castro, hasta los 10 años de edad, que fue cuando el General Juan Vicente Gómez le dio el golpe que acabó con su mandato; ya que del General Castro tenemos malos recuerdos en el seno de mi familia Aranguren Bravo.
¿Y porqué tiene esos malos recuerdos sobre el General Cipriano Castro, abuela Catalina?
Nosotros, en la familia Aranguren Bravo en El Hoyo de La Cumbre en las serranías del Ávila, La Puerta de Caracas y en La Pastora en Caracas, no pasábamos por nada del mundo, a los generales José Manuel Hernández "El Mocho", y mucho menos a Cipriano Castro, ya que este último era un sádico, quien nos tenía en zozobras en esas montañas en donde nació mi familia Aranguren, desde los tiempos mismos de la conquista española.
General en Jefe Juan Vicente Gómez
El General Cipriano Castro enviaba a sus soldados negros, quienes eran los preferidos de sus escoltas, a atrapar mujeres jóvenes o doncellas, para luego violarlas con sus propias manos en Miraflores. Así podrías imaginarte, las correrías que vivieron las mujeres de mi familia en esos tiempos.
Y su bravura en contra nuestra, es que mi papá fue francmasón y siempre estuvo al lado de su hermano masón Ignacio Andrade Troconis, quién era General en Jefe y Presidente Constitucional de la República, en los tiempos que fue derrocado por Cipriano Castro en 1.898.
Mi padre tenía que apoyar al General Ignacio Andrade, debido a que él fue quien le confirió al General en Jefe Lino Aranguren Castro, quien era mi legítimo padre, el título de Ilustre Prócer de la Federación. Pero como no hay mal, que por bien venga, vino después el General Juan Vicente Gómez, y tumbó del gobierno al sádico de Miraflores y esposo de Misia Zoila de Castro.
¿Cuándo es que Víctor Modesto Franklin, pasa a ser un personaje de renombre y muy conocido en Caracas, papá?
Ese personaje comienza a tomar con fuerza nombre en Caracas es a partir de 1.920. Y todas esas cosas vinieron en esos cruciales días de nuestra política nacional, cuando se dieron los hechos del año 1.919, cuando el Dr. Enrique Chaumer con algunos militares se dieron a la tarea de tratar de tumbar al gobierno del General Juan Vicente Gómez. En esa celada se alzó nuestro pariente el Subteniente Luis Miguel Aranguren Moreno, graduado en la vieja Escuela Militar de La Planicie en 1.916.
Y eso se debió a los embates que Víctor Modesto Franklin conoció en la Europa de la primera guerra mundial, entre los años 1.914-1.918. Si te cuento una cosa no lo crees, vale.
Madre Emilia de San José
Víctor Modesto Franklin estuvo preso en la cárcel vieja de Maiquetía, la cual quedaba situada en donde hoy está el Hospital "San José" de Maiquetía, centro asistencial fundado por la Venerable Hermana Sor Madre Emilia de San José, fundadora de la Congregación de las Hermanitas de los Pobres en Maiquetía, el 22 de abril de 1.888.
¿Y qué pasó con la muerte del General Juan Crisóstomo Gómez en el Palacio de Miraflores en 1.923, abuela Catalina (Cédula Nº ?
En esos día yo tenía como unos 25 años de edad, más o menos, porque yo nací en Las Aguadas de Maiquetía el 30 de abril de 1.898 y tengo que decir que mi padre el General en Jefe Lino Aranguren Castro murió en ese mismo año que mataron en su dormitorio en el Palacio de Miraflores en Caracas al General Juan Crisóstomo Gómez, hermano menor del General en Jefe Juan Vicente Gómez.
General y 1er. Vicepresidente de la República, Juan Crisóstomo Gómez Chacón
Fíjate, que mi papá murió con bastantes años encima, y fue porque se cayó del caballo, viniendo por los lados de "El Guarapo" hacia una de sus casas en "Las Perlas" de Maiquetía.
En esos momentos en que se supo la muerte del General Juancho Gómez, se desató una fuerte persecución de mucha gente en Caracas. Se decía que mataron a algunas personas que quizás estuvieron o no involucrados en esa extraña muerte palaciega.
Lo que si sabemos fue ese suceso se dio el 30 de junio de 1.923. El General Juan Vicente Gómez de pendejo no tenía nada y esa era la purita verdad de todas las cosas. Por eso gobernó a este país por 27 años. Lo que si recuerdo es que en esas horas difíciles hicieron presos a Leoncio Martínez "Leo" y a Francisco Pimentel.
¡Imagínate, que mataron a puñaladas nada más y nada menos que al mismísimo primer vicepresidente del país, Juancho Gómez!
¿Y qué opinas usted de eso, tío José Basilio?
Todo eso conduce a una muerte extraña y que tiene ciertos matices dentro del mundo que se vive palaciegamente entre los hombres y mujeres que ejercen el poder en el país. Emitir juicios sobre esa época, es cosa muy delicada.
General Juan C. Gómez Chacón
Ya que la muerte del General Juancho Gómez hay que verlo en el contexto político de la época, en donde el General Cipriano Castro preparaba una invasión a Venezuela desde la isla de Puerto Rico, la pugna que vivían los general Eustoquio Gómez y Eleazar López Contreras, y muy disipadamente la conspiración que tenía el General José Vicente Gómez Bello en contra de su propio padre.
Y es como dice mi madre, en ese año muere mi ilustre abuelo el General Lino Aranguren Castro, pero en ese mismo año mi madre se va a vivir en "El Brillante" de Maiquetía con mi padre el comerciante de origen canario Francisco Sánchez Jiménez.
Lo que he podido saber con más claridad sobre la muerte de Juancho Gómez, es lo que he leído en libros y revistas, y los comentarios que al respecto conozco sobre esos hechos que se dieron el 30 de junio de 1.923. Lo cierto del caso, es que el caletero portuario guaireño Víctor Modesto Franklin tiene que ver en algo con lo sucedió en esos tiempos; ya que él fue la última persona que estuvo con el primer vicepresidente de la República en ese día, y en algo tuvo que haber vivido en esos minutos finales con tan versátil personaje militar y político de esas tiempos, quien se perfilaba como no de los más preclaros herederos del poder que ejercía su hermano el General Juan Vicente Gómez.
¿Por qué en ese día no hicieron preso a Vito Modesto Franklin?
¿Quién realmente lo protegió?
¿Cuáles fueron sus vínculos con el General Juan Crisóstomo Gómez Chacón?
¿Por qué Vito Modesto Franklin se alardeaba de ser amigo personal del General Juancho Gómez?
¿Qué tipo de amistad hubo entre ambos?
¿Qué fue lo que realmente sucedió en Miraflores el 30 de junio de 1.923?
Yo considero quwe quienes vivieron más cerca de esa época, pudieran estar más cerca de la verdad histórica, y a esas personas son a las que hay que entrevistar para dar con lo que sucedió en ese día en el Palacio de Miraflores en Caracas.
¿Y que opinas sobre la muerte del General Juancho Gómez, papá?
Yo si voy a ir al tapete y de una vez por todas, al General Juancho Gómez lo matan por asuntos de homosexualidad palaciega. Los manflóricos siempre han existido en el Palacio de Miraflores, de eso no hay dudas. Claro está, Vito Modesto Franklin tiene que ver con eso, ya que él era uno de los amantes de Juancho.
El General Juan C. Gómez Chacón
El General Juancho Gómez era un manflórico encapillado y sus aventuras con sus amantes masculinos las hacía muy a escondidas y reservadamente. En aquellos tiempos eran comentarios sui generis en Caracas, que sus guardias personales bajo secreto y juramento de no revelar nada, le buscaban muchachos jóvenes para sus orgías sexuales.
Tarde o temprano el General Juan Vicente Gómez iba a saber algo sobre las travesuras de su propio hermano. Yo no conocí a Vito Modesto Franklin, ya que cuando el falleció en Caracas, yo tenía 11 años de edad y vivíamos para esa entonces en el pueblo de San José de Carayaca.
Imagínate, como serían los regalos que les dio el General Juancho Gómez a Vito Modesto Franklin, que habiendo sido un zagaletón guaireño, ex-presidiario y aventurero de poca monta, de pronto se convirtiera para burla de todos, en el Duque de Rocanegras. Carajo vale, alguien tenía que darle dinero o propiedades, y eso solo se conseguía en esa época a través de las mariconerías del primer vicepresidente de la República.
Tumba del General Juancho Gómez en Caracas
¿Y por qué usted tiene esa apreciación, papá?
Cuando se tiene una forma de ser como la tenía el General Juancho Gómez, quién de paso debía pagar por sus desviaciones sexuales; ya que para la gente era un hombre con 4 bolas, debido a que había venido en esas guerras con su hermano y el General Cipriano Castro.
¿Quién iba a creer que el General Juancho Gómez era marico, vale?
¡Coño, nadie, vale!
¡No ves que para la gente era un hombre de pelo en pecho, nojoda!
¿Y cuál era el vínculo de él con Vito Modesto Franklin, papá?
El vínculo era nada más y nada menos que de amantes, y eso le generaba al Duque de Rocanegras, cierta posición dentro del marco social caraqueño, a pesar de su incultura, ya que en Caracas en esos días había mucha gente inculta, producto de esa soldadesca que llegó del occidente del país y se adueñaron del poder. Mientras que los orientales avanzaron hacia las zonas petroleras y se fueron asentando en los campos petrolíferos, dando origen a la clase media venezolana.
Imagínate a Vito Modesto Franklin andando entre los cabarets caraqueños o guaireños, de chulo o de dandy, por eso tu lo veías a él frecuentando con sus trajes de sapo rabuo o de paltó levita, corbatas vistosas y reluciendo un hermoso bastón que según él, se lo había regalado el propio Juancho Gómez, y él siempre busca merodear por los lados de la Plaza Bolívar o en el salón de La Francia, que eran los lugares en donde iban los maricos serios a pasar ratos amenos entre tertulias y conversatorios en aras de poder captar muchachos o zagaletones para saciar sus deseos lascivos.
La Plaza Bolívar en Caracas
¿Qué fue lo que realmente sucedió en esa ocasión con el General Juancho Gómez, abuela Catalina?
Como ya sabemos, el General Juancho Gómez fue al Teatro "Olimpia" que era propiedad de su consorte Vito Modesto Franklin, ya que esa propiedad en parte se la financió el propio Juancho.
Lo cierto de la vaina, es que Vito acompañó en esos momentos al General Juancho Gómez y creo que a un sobrino de él llamado Florencio Gómez Núñez, quién era hijo del Benemérito.
Al día siguiente se presentó el escándalo sobre lo que había sucedido en Miraflores el 30 de junio de 1.923. El mismísimo General Juan Vicente Gómez anduvo dando órdenes en todo instante, pero había algo oculto y era que su propio hijo estuvo comprometido con el crimen de su tío Juancho.
¿Usted cree eso, abuela Catalina?
Viejo Camino de Caracas a La Guaira en 1.892
Claro, vale. El General José Vicente Gómez Bello era el Comandante del Ejército Nacional y era 2º Vicepresidente de la República, y como su madre Dionisia Bello estaba herida por la extraña muerte de su hija Margarita Torres, quién no era hija del Benemérito, a manos del propio Coronel Eloy Tarazona, quién extrañamente le dio un tiro en la cabeza, evitando de esa manera que el General Santos Matute Gómez quién era primo hermano del Presidente de la República se casara con Margarita; diciendo las malas lenguas de ese tiempo que ese crimen se dio por instrucciones del mismísimo General Juan Vicente Gómez.
El General Juan Vicente Gómez en ese año estuvo muy enfermo y todos creíamos que él iba a morir, hasta mi padre lo creía también, a pesar que él falleció en ese mismo año; ya que mi papá era la máxima autoridad civil y militar en todos esos pueblos que circundaban la cordillera del Ávila, desde La Puerta de Caracas hasta Galipán, que de paso eran muchos.
General José Vicente Gómez Bello
La esposa del General José Vicente Gómez Bello también estuvo comprometida en todo lo que pasó en ese día, ya que ella vivía calentándole las orejas a su marido para que jodiera al Benemérito y se alzara con el coroto.
¿Y qué opinas de eso, primo Vicente?
Yo creo que mi tía Catalina Aranguren Bravo y mis primos han dicho grandes verdades, sobre los sucesos que se dieron en Caracas en esos tiempos, igualmente me uno a lo ya expresado por mi tío Lino Aranguren Bravo. Esa fue la etapa final de todos aquellos quienes conspiraron en contra del General Gómez, y de esa manera los fue aniquilando a todos, hasta darle perfil a su gobierno que concluyó con su muerte en diciembre de 1.935.
Mi tía Catalina y mi tío Lino, en parte si se quiere, han sido testigos de esos sucesos y estoy seguro que fueron temas en nuestra familia, tanto en caracas como aquí en Maiquetía.
¿Verdad tío Lino?
Y tomando la palabra el venerable anciano Lino Aranguren Bravo, nos dijo lo siguiente:
Dionisia Bello
Así es sobrino, cuando mataron a Juancho Gómez, yo tenía como mis 23 años de edad. Ya que nací el 15 de enero del año 1.900, comenzando el siglo XX y figúrate que mi cédula de identidad es bajo el Nº. 808.932.
Y recordando un poco las palabras de mi hermana Catalina Aranguren Bravo, tengo que decir, que yo recuerdo cuando mi padre el General Lino Aranguren Castro nos comentaba sobre su participación en el combate de Maiquetía que se dio casi a finales de 1.859.
Mi padre decía que él estuvo bajo el mando directo del General Pedro Vicente Aguado, y que esas acciones se dieron por los lados de La Plaza de "El Tamarindo", que antiguamente fue un bosquecillo con muchos arboles.
Y allí combatieron en contra de un general guariqueño de apellido Rubín, quién comandaba a las fuerzas gobierneras que cumplían mandatos del General y Presidente de la República, Julián Castro, quién también era familia nuestra.
¿Qué ironías de la vida misma?
Sobrino Vicente Pérez Aranguren, sobrino Francisco Sánchez Aranguren, ustedes dos deben saber que en La Plaza "El Tamarindo" estuvo "La Fuente de La Prosperidad" y por allí llegó a pasar el tranvía eléctrico.
¿Acaso ustedes no se acuerdan del amigo Guerra?
¿O es qué no le conocen?
Esa familia es la misma del señor ese que anda por ahí con jeep viejo anunciando la publicidad de los negocios que hay en toda Maiquetía y La Guaira, y lo viene haciendo desde hace muchos años atrás. La familia Guerra tenía en el fondo de su casa un cine que se llamaba "Princesa". Ellos vivieron por el sitio en donde hoy está la escuela "República de El Salvador".
¿Te acuerdas cuando trajeron esas de estatuas de tan afamados maestros extranjeros y venezolanos y las colocaron en la Plaza "El Tamarindo", sobrino Francisco?
Claro, tío Lino. ¿Cómo no me voy acordar?
¿Y usted se acuerda de eso, papá?
Figúrate, León Manuel, que en esos tiempos tú tenía 4 años de edad y ustedes estaban con su madre María Hilaria Morales en el pueblo de Nuestra Señora de La Candelaria de Tarmas, y ya habíamos pasado por el pueblo de Anare en la Parroquia Naiguatá, que fue el lugar en donde nació tú hermano Juan Francisco Morales en 1.952.
Porque yo fui cambiado de maestro rural desde la Escuela Federal Rural Nacional "Tarma" a una escuela en el pueblo de Anare y más luego fui enviado a Caraballeda y para esos tiempos yo me encontraba trabajando en la Supervisión de Educación en La Guaira y como docente en la Escuela República de Panamá en "El Cardonal".
Avenida 24 de Julio en El Cardonal-La Guaira
En aquellos días, el jefe civil de La Guaira era el Coronel Aníbal Sánchez Colmenares, muy amigo mío, ya que yo fui su secretario cuando el fue jefe civil de Carayaca.
Cuando el General Marcos Pérez Jiménez decidió acabar con algunas partes coloniales de La Guaira y El Cardonal, lo hizo destruyendo grandes vestigios históricos y arquitectónicos en esos lugares. Inclusive, en El Cardonal estaban ubicadas las estatuas de maestros celebres como Emilio Gimón Sterling y había una estatua dedicada al General José Gregorio Monagas.
Logia "Unanimidad" Nº 3 en El Cardonal-La Guaira
Ese antiguo paseo en "El Cardonal" tenía el nombre de "24 de Julio" y en ese año fue destruido totalmente, para dar paso a la ampliación de la Avenida Soublette. Debo decirte, que la Logia Masónica "Unanimidad" Nº 3 sufrió los avatares de las demoliciones que se dieron en esa época, ya que fue derribada.
Y lo más interesante es que en El Cardonal fue en donde nació el General en Jefe Manuel Carlos Miguel Piar y Gómez, El Libertador de Guayana, de eso no hay duda alguna, ya que los Xeréz y Aristigüieta tuvieron 9 casas en ese lugar.
Dr. Abel Santos
Lo cierto del caso, fue que las estatuas de los maestros Rafael Arévalo González, Emilio Gimón Sterling, Juan Aranaga, Sergio María Recagno, Ramón Valecillos y José A. Román fueron trasladadas a La Plaza de "El Tamarindo" en Maiquetía, y desde ese momento comenzó a llamarse Plaza de "Los Maestros".
¿Quién realmente fue el Coronel Aníbal Sánchez Colmenares, papá?
Yo conocí al Coronel Aníbal Sánchez Colmenares cuando fue jefe civil de la Parroquia Carayaca entre 1.948 a 1.951, ya que yo fui su secretario en esa jefatura civil. Él era tachirense de nacimiento y había combatido en esas guerras civiles que hubo en tiempos del General Juan Vicente Gómez Chacón.
Por la semejanza en nuestro apellido SÁNCHEZ, qué es muy común en esa región andina, muchas personas creían que éramos familia, pero no era así. Lo que me llamaba la atención de ese militar educado a lo prusiano y en las montoneras que pasaron a ser parte del ejército nacional en la era gomecista, es que fue una persona que le tocó vivir en su tierra natal, las atrocidades del General Eustoquio Gómez.
General Juan Pablo Peñaloza
Él estuvo muy vinculado al Dr. Abel Santos, quién fue un funcionario público muy allegado al gobierno del Benemérito General Juan Vicente Gómez, y de igual forma estuvo muy cerca del eminente tachirense, Dr. Pedro María Cárdenas.
Y lo más interesante en la vida del Coronel Aníbal Sánchez Colmenares es que él fue parte importantísima en el regreso de los exilados tachirenses y venezolanos que se encontraban en la ciudad de Cúcuta en el Norte de Santander en Colombia en 1.929.
Claro está, eso acarreó la aprehensión del General Juan Pablo Peñaloza, quién fue llevado al castillo de Puerto Cabello como reo del gomecismo, en donde murió.
¿Qué más nos puede usted contar sobre el Coronel Aníbal Sánchez Colmenares, papá?
Lo que si te puedo decir, es que ese hombre era muy justo en sus decisiones como autoridad civil y militar, a mi nunca me ha gustado hablar mal de ninguna de las mujeres que vivieron conmigo, y menos de tu madre, con quién tuve 3 hijos y una niña que falleció tempranamente.
Edgar Eduardo Morales
Este hecho sucedió en los tiempos en que yo tenía mi noviazgo con la carayaquera Hipólita Emiliana Angulo Obregón, quién nació en La Fila de Jesús o en El Casupal de Carayaca el 13 de agosto de 1.931 y cuya cédula de identidad era el Nº V-1.440.885. Ella era hija de Sabina Obregón y Pablo Lozano.
Yo ya había dejado a tu mamá, pero no sabía que ella había quedado encinta de mi hijo Edgar Eduardo Morales. Y como ya había hecho los preparativos para casarme con Emiliana, a quien de paso puse a trabajar en la Sanidad de La Guaira, un día se le presentó tu mamá en su trabajo, y allá tuvieron una fuerte discusión.
¿Cuál sería mi sorpresa?
María Morales parece que le recriminó a Emiliana que no se casara conmigo, porque ella iba a tener un hijo mío. Emiliana le respondió con unas palabras muy fuerte, diciéndole lo siguiente: "… Ese hijo que vas a tener María Morales, será hijo de otro hombre, pero no de Francisco Sánchez Aranguren, mi novio…".
Hipólita Emiliana Angulo Obregón
Tú mamá inmediatamente se fue le fue encima a Emiliana y la golpeó de tal manera, que le rompió la ropa y la arrastró por los pelos en la calle. Me llamarón en la Supervisión de Educación y me trasladé al sitio, encontrándome con esa situación. María Morales esta muy brava y se le notaba en los gestos que hacía.
Cuando me le acerque para contenerla en su bravura, ella sacó una navaja y me lanzó un navajazo a la altura de la cara, que si no trato de esquivarla, casi me agarra el cuello, hiriéndome en una de mis orejas. Logramos contener a María y sin embargo yo botaba mucha sangre, que traté de contener con mi pañuelo.
En eso, inmediatamente, intervino el Coronel Aníbal Sánchez Colmenares, quien de hecho era el jefe civil de La Guaira, y me dijo estas palabras: "… Francisco, vamos a poner presa a esa mujer, por lo que te ha hecho…".
Y yo recuerdo que le respondí al jefe civil, con estas palabras: "… No, no, Coronel Sánchez Colmenares, no hagamos eso, se lo pido por el amor de Dios. Esa mujer es la madre de mis hijos León Manuel y Juan Francisco…".
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