Proyecto de intervención para la aplicación de la gimnasia psicosomática en el adulto mayor

1. Resumen
2. Introducción
3. Procedimiento de elaboración del proyecto de intervención
5. Reglas para la práctica de la gimnasia psicosomática
6. Conclusiones
7. Recomendaciones
8. Bibliografía

Resumen

El presente trabajo tiene como finalidad diseñar un proyecto de intervención para la aplicación de la Gimnasia Psicosomática que permita mejorar la salud física y mental de los integrantes del círculo de abuelos "Fernando de Dios Buñuel" en el municipio de Holguín. Se tomó una muestra intencional de dieciséis sujetos, conformada por catorce del sexo femenino y dos del sexo masculino. Para la recopilación y tratamiento de la información necesaria se triangularon diferentes métodos y técnicas como; la observación participante, la entrevista, la encuesta, el sondeo de opiniones, el análisis y crítica de fuentes y como técnicas participativas o de búsqueda de consenso, la tormenta de ideas. Se utilizó la matriz DAFO como herramienta de análisis cualitativo que sintetiza la información relativa a las fortalezas y debilidades internas al objeto de estudio, confrontándose estas con las amenazas y oportunidades que ofrece el entorno, resulta de gran utilidad antes de proceder a determinar las actividades, acciones y subacciones que integrarán el proyecto de intervención para dar solución a los problemas identificados.

Title: Interventional project to apply a Psicosomatic Gimnastic for the Adults.

Abstract.

This research work has the airn to design an interventional project for applying the psicosomatic Gymnastic to allow people from the older age getting better health and therefore encrease their cuality level life, during the investigation the author collect several data using some scientidie methods.

Key words:

Psicosomatic

Gimnastic

Cuality level life

Introducción

El envejecimiento humano es un fenómeno universal e inevitable. Estudios demográficos revelan el aumento significativo de la población mayor de 60 años. Los llamados de la Tercera Edad, que en 1995 representaban el 6,5% de la población mundial, alcanzarán una proporción del 15,1% en el año 2020. Para esa fecha habrá en el orbe más de 1000 millones de estas personas. Hoy supera los 300 millones el número de hembras y 200 millones de varones que clasifican en estas edades, particularmente el 61% de las féminas con más de 80 años viven en países desarrollados; pero, para el 2025 la mayoría de ellas lo harán en naciones en desarrollo. La longevidad de los ancianos aumenta en todo el mundo paralelamente a la esperanza de vida. La expectativa para las mujeres como promedio es de 67 años y para los hombres de 63 años.

En el ámbito internacional se han estudiado los problemas del sedentarismo y los beneficios de la actividad física, a través de la Organización Mundial de la salud (OMS) que el 50% de la población mundial están inactivos con respecto a la falta de ejercicios físicos. "La promoción de la salud debe ser realizada por las personas y con las personas. Las personas deben ejercen mayor control por su salud, la población debe participar y estar en centros de actividades de promoción de salud y la recreación". (Recomendación de la OMS).

La población cubana anda también en camino de convertirse en una sociedad encanecida. Hoy más del 13% de los habitantes de la isla tienen 60 años o más, y para el 2020 la quinta parte de la población será de adultos mayores.

Promover una vejez sana, no es tan sólo, asegurar la alimentación, servicios de salud, confort habitacional, e higiene, muy importante es también una vida útil, productiva e independiente. La vida en sociedad evita la depresión y el aislamiento tan propio de estas edades cuyos achaques más frecuentes no sólo se deben al envejecimiento biológico, sino también a la inactividad y el desuso, y no en pocos casos a la falta de afecto, de la familia y de la sociedad.

En la atención a la Tercera Edad cada día un concepto se abre paso: " hay que empezar a comprender y cuidar a los ancianos en el seno de la familia como célula básica" (Recomendación de la OMS) y de esa manera conseguiremos una mayor participación de la sociedad. Las transformaciones socioeconómicas en nuestro país dirigidas al fortalecimiento de la salud y al incremento de la duración de vida del hombre cubano, brinda actualmente nuevos frutos, donde se alcanza un promedio de vida de 76 años.

El estado cubano decreta el derecho a jubilarse a los trabajadores de 55 a 60 años, y con el desarrollo de la nueva Ley de Seguridad Social, 60 y 65 años, sin embargo, existen personas que no se sienten viejos, por el contrario con mucha frecuencia, él trata de aumentar su actividad motora mediante ejercicios físicos, a través del Círculo de Abuelos. En Cuba se cuenta con casi un cuarto de millón de personas de la Tercera Edad integradas a los Círculos de Abuelos, el 21% de la población mayor de 60 años, lo que hace más factible la interrelación entre los ancianos y la comunidad.