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El signo: ¿Mediador de las relaciones humanas?


Partes: 1, 2

    El presente artículo aborda de forma muy general la relación entre cognición y comportamiento humano, prestando especial atención al papel de los signos como mediadores de la acción y transformadores de las funciones mentales; partiendo de considerar la determinación histórico social del psiquismo humano, y haciendo uso además de criterios de otros autores que no pertenecen a esta corriente histórico- cultural. Su autora hace referencia a conceptos claves que la ayudaron a tratar el tema tales como: signo, símbolo, significado, sentido, comunicación, intersubjetividad, método instrumental, etc.

    The present article undertakes the relationship between knowledge and human behavior of very general form, lending special attention to the paper of the signs like mediators of the action and transformers of the mental functions; parting of considering the historic social determination of the human psiquism, and making use besides criterions of other authors that they don't belong to this historic-cultural trend. Their author makes reference to principal concepts that they helped it to try the like topic like: sign, symbol, meaning, sense, communication, intersubjectivity, method instrumental, etc.

    I

    Cognición y comportamiento humano; dos términos muy usados en los estudios psicológicos. Dos categorías que han sido objetos centrales del estudio de numerosas escuelas y tendencias. Entre ellas se hace imprescindible señalar: el conductismo, corriente que se desarrolló a comienzos del siglo XX, cuya figura más destacada fue John B. Watson y que en su momento representó la revolución más radical en el enfoque del psiquismo humano. Nace en un momento histórico e irrumpe en el mismo considerando que lo que le compete es la conducta humana observable y rechazando que se tenga que ocupar de la conciencia, considerando que la conducta animal más elemental se puede extrapolar a la conducta más compleja del ser humano, lo que ha sido objeto de innumerables críticas; y el cognitivismo, corriente de la década de los años 60, que dio al traste con la para ese entonces vieja escuela conductista surgiendo como el nuevo paradigma del momento, que estudia la mente humana como un sistema de conocimientos y se ha basado en la metáfora de la mente humana como ordenador; dentro de la cual no se puede dejar de mencionar estudiosos como Neisser.

    A pesar de las tantísimas críticas recibidas hasta el momento, en su tiempo, en las condiciones históricas en que surgieron, significaron el punto máximo de alcance de la Psicología, y todavía hoy en todo el mundo se hace uso de sus principales postulados teóricos y metodológicos. Sin embargo el error estuvo precisamente en el hecho de considerar el estudio de estos procesos por separado, obviando la interrelación en que se dan en el marco de una personalidad concreta; siendo la cognición uno de los determinantes del comportamiento. Por tanto constituye nuestro objetivo tratar de abordar esta relación partiendo de considerar la determinación histórico- social del desarrollo del psiquismo humano y prestando especial atención al papel de los signos como mediadores de la acción y transformadores del flujo de las funciones mentales.

    II

    La estructura de la psiquis y su desarrollo pueden entenderse solo en relación con el análisis del medio social. Las formas de las funciones psicológicas- estructuras, mecanismos, relaciones genéticas- no son constantes e invariantes; ellas cambian en los diferentes períodos de historia de la Sociedad. En el hombre, las funciones psíquicas naturales sufren un proceso de transformación como resultado de la apropiación o asimilación de formas de conductas creadas en el curso del desarrollo histórico, o mejor dicho por la apropiación o asimilación de significados, siendo la asimilación el resultado de la actividad del individuo respecto a los objetos y fenómenos de la cultura humana. Este proceso de asimilación del mundo creado por la historia humana, es al mismo tiempo el de la formación en el hombre de las capacidades específicamente humanas, es decir, las denominadas por Vigotsky funciones psíquicas superiores: estructura de la percepción, la atención voluntaria, la memoria intencional, afectos superiores, el pensamiento lógico, el lenguaje, la resolución de problemas; posibilidad dada al hombre al nacer y que a nuestro juicio constituye la principal diferencia que distingue al hombre de los animales.

    Este proceso de transformación se produce como resultado del proceso de mediatización. Al igual que las acciones de trabajo al realizarse a través de la utilización de instrumentos se mediatizan y conducen a la transformación consciente de la realidad, las acciones psíquicas se mediatizan también por la utilización de instrumentos especiales surgido sobre la base del trabajo y que constituyen fenómenos de la cultura humana: Los signos.

    En el comportamiento surgen una serie de dispositivos artificiales dirigidos al propio dominio de los procesos psíquicos. Estos dispositivos recibieron la denominación condicional, de Vigotsky, de herramientas o instrumentos psicológicos, o lo que es lo mismo: signos.

    Estos instrumentos psicológicos son dispositivos sociales y no orgánicos o individuales; están dirigidos al dominio de los procesos propios o ajenos; lo mismo que la técnica lo está al dominio de los procesos de la naturaleza.

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