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Las intuiciones y nuestros instintos (página 2)

Enviado por Felix Larocca


Partes: 1, 2

El ser humano hoy, está desertando en números progresivos las religiones establecidas en la tradición judeocristiana. Muchos lo hacen porque sienten que esas religiones son obsoletas e imbuidas de filosofías caducas. Ellos rehúsan concederles, tanto a las religiones como a sus representantes, la capacidad y la integridad moral para mostrarles el Camino de la Salvación y del Paraíso prometido.

En ese sentido, una proporción alarmantemente grande de las nuevas defecciones, están orientándose hacia sistemas religiosos extremistas o militantes. Sistemas que promulgan el ascetismo, la autocensura (y no la confesión de los pecados), la inmolación personal, sacrificadora y voluntaria; y quienes condenan con vehemencia a todos aquéllos quienes no aceptan como (las genuinas y las únicas verdaderas) sus nuevas convicciones religiosas. Son estos mismos, los seres fanáticos quienes ejercen un magnetismo y una atracción particular hacia miembros vulnerables de la raza humana los cuales por razones desconocidas actúan apocalípticamente en nombre de esas creencias, las cuales algunos califican de ser fanáticas y las que ellos defienden como redentoras e inspiradas por una nueva deidad.

En mi experiencia clínica, tratando de asistir otros en la búsqueda de orientación y de significado en la vida; yo he descubierto el valor singular que posee el facilitar el proceso de las Coincidencias, de las Simetrías, de las Intuiciones Instintivas por medio de la dirección y orientación suministrada por seres humanos cuyas capacidades de mostrar el Camino son esencialmente atávicas. A ello me dirijo en esta composición.

Es fácil el predecir el hecho de que nuestra civilización, casi simultáneamente ha efectuado cambios profundos que afectan las estructuras fundamentales de nuestras familias, de nuestras convicciones y creencias y de nuestras expectaciones. Lógicamente vivimos en un tiempo de incertidumbres.

A través de lo que nos suministran los sistemas de comunicación, nuestra civilización ha descartado todos los principios que daban a la Realidad su prioridad debida, cediéndole al Placer los prados ideológicos por los cuales la Realidad de antes campeaba soberana. Vivimos en una época en la cual el exhibicionismo apabullante y ridículo se expresa como arte de dudoso valor en los programas televisados que atraen las mayores audiencias.

Una época en la cual se proyectan anuncios para dietas y golosinas lado a lado con los cadáveres mutilados de víctimas de guerras étnicas y religiosas. Y estos espectáculos se admiten en las salas de nuestros hogares con la indiferencia del hábito.

Los espectáculos que nos entretienen son aquellos que carecen de valor espiritual y de calidades redentoras. Ayer los hermanos Menéndez, o Anita Hill vs. Clarence Thomas, hoy O. J. Simpson o Susan Smith; mañana… ¿quién sabe? … Quizás los que asesinan a personas inocentes durante actos terroristas en los Estados Unidos, o los mismos agentes inhumanos que se dedican a negarle una oportunidad a que el mundo pueda lograr paz, la que siempre ha sido tan elusiva …

Mirándolo de cerca ellos, los seres que contribuyen muy poco al beneficio colectivo de nuestra humanidad, están en la mayoría y ellos son quienes demandan, exigen y esperan más que aquéllos quienes tratan de remediar la situación crítica en la cual actualmente vivimos.

Creo que la experiencia de la indiferencia total, con la que existimos en un mundo complejo, la cual describiré para finalizar este ensayo, nos proporcionará una idea de lo que quiero comunicar. Hace unos cuantos días yo me encontraba en la presencia de una señora a quien oí decir: "Mírame mis manos, tan delicadas y suaves. Yo las he cuidado muy bien. Nunca han visto el trabajo. ¿Qué te parecen?"

Es ello precisamente a lo que me refiero.

La Nutrición de Pacientes Víctimas de la Anorexia Nerviosa o de la Malnutrición Severa

La anorexia nerviosa, por definición, es una entidad en la cual, a pesar de la energía exuberante manifestada por sus víctimas, la malnutrición es pronunciada. Por esta razón, es imprescindible que el especialista le asigne a la dieta de la paciente el valor dado a cualquier otro remedio o medicina; y que le diseñe un plan nutritivo a la vez tan balanceado, cuan suficiente para lograr el equilibrio necesario tanto físico como mental.

La anoréxica no cooperará en la tarea de su nutrición si sospecha que el "plan dietético" la conduciría al ganar rápido de peso, o a la sensación de estar llena, complicación común en estas pacientes, quienes muy a menudo sufren de la dilación del pasaje de la comida a través del estómago.

Los alimentos básicos de la dieta humana están divididos en cinco grupos mayores: proteínas, carbohidratos, grasas, vitaminas y minerales. Además de agua y oxígeno entre 45 y 50 substancias son esenciales para la nutrición equilibrada de nuestra especie: ocho aminoácidos derivados de proteínas, cuatro liposolubles y diez vitaminas hidrosolubles, diez minerales y tres electrólitos. Cómo estas substancias actúan en nuestro cuerpo para regular nuestra energía y salud aún no está bien entendido. Lo que sí sabemos es que la malnutrición crónica extrae un gravamen terrible de sus víctimas.

Proteínas

La principal función de las proteínas es la de reparar y reconstruir los tejidos de nuestro cuerpo, sintetizar hormonas, algunas enzimas y otras substancias complejas que rigen los procesos fisiológicos del organismo.

Las proteínas se hallan fácilmente en fuentes nutritivas tanto del reino vegetal como del reino animal; sin embargo, de los 20 aminoácidos que constituyen las proteínas, 8 se consideran esenciales esto significa, que ellos hay que suministrarlos en la dieta, si los otros (que no son esenciales) se van a utilizar sin proporcionar riesgos metabólicos al individuo. La fuente más importante de aminoácidos esenciales la constituyen proteínas de origen animal.

Minerales

Son esenciales en las actividades de los tejidos de nuestro organismo. De éstos existen dos categorías: los elementos mayores tal como lo son el calcio, el fósforo, el magnesio, el hierro, el yodo, y el potasio; y los elementos de trazas como lo son el cobre, el cobalto, el manganeso, el zinc y el flúor. Otros elementos de traza incluyen el cromo, el molibdeno y el selenio.

Muchas de las condiciones asociadas con la falta de los minerales son bien conocidas: anemia (hierro), bocio y el retardo mental (yodo), calcio y fósforo (problemas con los huesos); para sólo mencionar unos cuantos.

Vitaminas

Son compuestos orgánicos que funcionan principalmente en sistemas enzimáticos que promueven el metabolismo de grasas, carbohidratos y proteínas. Algunas deficiencias vitamínicas pueden amenazar la vida.

Carbohidratos

Suministran la más abundante, la más económica y la más accesible de las fuentes que suministran energía al ser humano.

Las dos clases de carbohidratos son los almidones, que se encuentran principalmente en granos legumbres, y tubérculos, y los azúcares los cuales es extraen de plantas y frutas. Los carbohidratos complejos deben de constituir la fracción más alta de nuestra dieta.

Grasas

La grasas contienen el doble de la energía (calorías) disponibles para nuestra dieta. En exceso, las grasas (que son necesarias para nuestro bienestar) han resultado en la seria producción de problemas para la salud del ser humano.

Clases de alimentos

La Asociación Dietética Estadounidense (American Dietetic Association) y el Congreso de los Estados Unidos publicaron recientemente las pautas para una nutrición "balanceada". Este documento consiste en lo que llaman la "Pirámide de la Nutrición" la cual no ha sido aceptada universalmente; de hecho, la Asociación Mundial de la Salud (WHO) está preparando su propio reporte separadamente.

Para el tratamiento de la malnutrición:

Semanalmente se recomiendan dos porciones diarias de proteínas animales, tres de frutas, víveres liberalmente, casabe liberalmente, granos (legumbres) liberalmente, productos lácteos y quesos (por lo menos dos veces al día), panes y cereales (incluyendo avena), por lo menos (una porción) diariamente; postres y mermeladas, por lo menos tres veces a la semana (para un total de seis), mantequilla de maní y de leche con el pan, o con el casabe una vez al día. Las fibras esenciales para la digestión siendo incluidas en este plan que hemos descrito.

Estas pautas debiendo de ser ajustadas y revisadas a medida que el proceso de la restauración de la nutrición progresa.

Bibliografía

Suministrada por solicitud.

 

Dr. Félix E. F. Larocca

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