RESUMEN.
La didáctica es la ciencia encargada de estudiar el proceso de enseñanza – aprendizaje sistémico y eficiente. La misma posibilita preparar al estudiante para la vida social en la cual se desempeñará como futuro profesional.
Comunicarnos correctamente es un logro alcanzar por todo ser humano, la utilización correcta y sistemática de la lengua materna, nos identifica, nos distingue de los demás.
Es hoy en día una preocupación, la expresión oral, de los estudiantes de primer año de la carrera de Mecánica, pues los mismos utilizan muletillas, tienen escasez de vocabulario, entre otros, a la hora de exponer sus ideas, criterios, opiniones.
En este trabajo, se propone, cómo la aplicación correcta de las invariantes de la didáctica, posibilita el desarrollo de un comunicador eficiente.
La asignatura de Español, ubicada en el ciclo de formación general, de dicha carrera, asignatura de lengua, como medio de actividad verbal, como estrategia de aprendizaje, como sistema lingüístico y su papel activo en la construcción del conocimiento tiene la responsabilidad del cumplimiento total de la misma, pero a la vez, tiene que influir y determinar en las demás asignaturas, portadoras también de conocimientos y es principalmente el colectivo de año quien posibilita el cumplimiento necesario y decisivo de tan importante aplicación.
Palabras Claves: comunicación, construcción del conocimiento, sistema lingüístico, asignatura de español, futuros profesionales, modos de actuación.
INTRODUCCIÓN.
La comunicación constituye en la actualidad una categoría polisemántica al no ser su estudio privativo de una ciencia en particular sino de varias como por ejemplo: la lingüística, la antropología social, la psicología, la pedagogía y la sociología entre otras. En cada una se le estudia de acuerdo con su objeto peculiar y en correspondencia con el enfoque o modelo científico adoptado.
A pesar del amplio espectro que posee el contenido de la comunicación, es indiscutible su base sociopsicológica, al ser concebida dentro de la vida social como fenómeno subjetivo y extraindividual a la vez.
La filosofía marxista concibió siempre a la comunicación estrechamente vinculada con la naturaleza social del hombre y con la evolución de su conciencia. En diferentes obras de Carlos Marx y Federico Engels aparecen reiteradas, certeras y profundas reflexiones sobre ella; pero incipientes y necesitadas de un tratamiento postérico más sistemático que no se ha producido.
Después de La Segunda Guerra Mundial comienzan a proliferar los estudios sobre la comunicación, ciencias a la vez, debido a las propias exigencias de la vida moderna, de su desarrollo y el predominio de enfoques humanistas en ellas.
Es en el decenio de los años sesenta cuando se produce lo que puede ser denominado como el boom de las investigaciones sobre comunicación al ocurrir el salto cualitativo de los trabajos iniciados décadas atrás. Este fenómeno llega hasta la actualidad con gran ímpetu, pues se incorporan cada vez más ciencias a su estudio y con resultados de gran repercusión interdisciplinaria y nivel de complejidad.
El enfoque multidisciplinario de la comunicación presupone una interpretación teórica de ella que condiciona su definición conceptual. En la misma medida en que existan diferentes concepciones epistemológicas, aparecerían varios conceptos sobre ella. En la actualidad se pueden precisar dos interpretaciones: una amplia o genérica y otra restringida o particular.
La concepción amplia o genérica concibe la comunicación como una categoría común al hombre y a los animales, a las ciencias sociales, biológicas y físicas (A. Muñoz, 1986); o sea, la comunicación no solo ocurre entre las personas, sino entre los animales e incluso entre los fenómenos físicos cuando se produce intercambio de energía. Es obvio que este concepto es tan abarcador que resulta incómodo desde el punto de vista metodológico para operar con él, al igualar formas del movimiento de la materia muy diferentes, pero como tal constituye una conceptualización filosófica sobre la comunicación.
El concepto restringido o particular limita la comunicación a las ciencias sociales, al hombre al ser este el único portador de un lenguaje y de hecho descarta al reino animal y las ciencias exactas en cuanto a su campo de acción. Precisamente este concepto es el que más resonancia ha obtenido en los medios científicos mundiales al haber focalizado múltiples investigaciones en esta dirección.
Sin embargo se cree en la necesidad de incluir de forma consciente y con intencionalidad didáctica a las ciencias exactas también que operan con la categoría hombre y de esta manera sería mucho más integrador de influencias que entorno a la comunicación formaría a un "Comunicador Eficiente".
Las asignaturas de lengua, después de la década del ochenta han centrado su atención en la comunicación como proceso y como resultado, en las funciones que se realizan con la lengua mediante la interacción de un contexto determinado, mientras que concibe el sistema lingüístico como medio para la actividad verbal. En teoría esta metodología se ha enriquecido en los últimos años con el desarrollo de la teoría cognitiva, el procesamiento de la información y la teoría humanista, las cuales consideran las necesidades e intereses de los estudiantes, su responsabilidad al aprender, el desarrollo de estrategia de aprendizaje y su papel activo en la construcción del conocimiento, mediante el aprendizaje socializador, experimentor, cooperativo, significativo y agradable. Sin embargo, son pocas las escuelas en el mundo que han instrumentado ya en la práctica una metodología comunicativa e interactiva con una fuerte base cognitiva y esencialmente humanista.
El objetivo rector del enfoque comunicativo es la competencia comunicativa, definida como la capacidad que tiene el individuo de interpretar y utilizar la lengua con conexión y propiedad en un proceso interactivo, determinado por el contexto de la situación comunicativa y se cree que solo dentro del proceso docente educativo es que se logra la formación de hombres competentes en su comunicación; donde el papel rector lo tienen las asignaturas de lenguas, complementados siempre por el trabajo del resto de las asignaturas.
No es casual que en el Plan de Estudio C´ de la carrera de Ingeniería Mecánica se introduzca la asignatura Español, Redacción e Interpretación, para la formación general del ingeniero mecánico y es que independientemente de su función social o complementando la misma, este ingeniero es un profesional universitario, por lo tanto constituye un modelo social y de esa misma forma debe tributar al contexto donde se desarrolle o participe; históricamente han existidos insatisfacciones con el grado de competencia comunicativa que estos profesionales han logrado a lo largo de su carrera por lo que ha constituido por parte de los docentes e instituciones una preocupación permanente la búsqueda de vías que contribuyan a solucionar tales dificultades . La práctica docente durante varios años con estos futuros profesionales nos han permitido percatarnos de la necesidad de desarrollar un trabajo integrador: comprensión, análisis y producción de textos.
Los programas que hasta la fecha se han estado aplicando han carecido de este enfoque y los resultados obtenidos de por sí dicen las dificultades que ello acarrea.
En principio se parte del criterio de que los textos que se utilicen para el análisis, comprensión, estudio de estructuras gramaticales, ortografía, etc, deben ser seleccionados de temáticas que sean a fin a la especialidad lo que facilita el trabajo por parte de los estudiantes y contribuye a que puedan valorar más concretamente el valor de los contenidos que se les pretende introducir .A modo de ilustración pudiéramos mostrar algunas experiencias cuyos resultados han sido valorados como altamente positivos.
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