Caracterización de sistemas productivos lecheros en la X Región de Chile mediante análisis multivariable (página 3)
Análisis de Correspondencias Múltiples
La representación gráfica del primer plano de ACM, el cual captura el 24% de la variabilidad asociada a las variables cualitativas estudiadas, se presenta en la Figura 2 (las explotaciones, representadas como puntos en la Figura 1, no se han incluido para permitir mayor legibilidad). Para interpretar un ACM debe recordarse que la información sobre la cual se realiza el análisis proviene de las tablas de frecuencia construidas con los diferentes niveles de cada variable cualitativa. De allí que si algunas características (categorías de las variables cualitativas estudiadas) aparecen "próximas" entre sí en la representación gráfica, debe interpretarse como que las frecuencias de ocurrencia de dichas características aparecen correlacionadas en la población. Esto es, si una de esas características aparece en una explotación, entonces lo más probable es que las características correlacionadas con ella también estén presentes en dicha explotación. La definición de cercanía no puede ser establecida en forma absoluta en estos análisis. Debe recordarse que las técnicas multivariables aquí presentadas son solo análisis descriptivos. Esta es una diferencia clave entre este tipo de análisis y aquellos que son inferenciales. En estos últimos, si bien tampoco es posible establecer en forma absoluta la intensidad de la relación existente entre dos variables, sí es posible estimar la probabilidad con la cual dicha intensidad es observada en la población bajo estudio.
Figura 2. Análisis de correspondencias múltiples: primer plano factorial1 (24% de la varianza). Figure 2. Multiple correspondence analysis: first factorial plane (24% of variance). 1ME= Método de encaste; DP= Dedicación del propietario; TS= Terapia de secado; ECP= Época de concentración de partos; NEO= Nivel de estudios ordeñadores; NEP= Nivel de estudios propietario; NOI= Número de ordeñas invierno; CL= Control lechero; SF= Sistema de frío.
Debe también considerarse que características que aparezcan "cercanas" al origen del sistema de coordenadas no aportan una cantidad significativa de variabilidad. Esto significa que las categorías o niveles de estas variables están distribuidas aproximadamente en forma aleatoria en la población, y, por ende, no ayudan a clasificar en grupos diferentes a los individuos (o explotaciones en este caso). O, dicho de otra forma, estas características no aparecen ligadas a un grupo determinado de otras características. Un ejemplo ayudará a clarificar este punto y desarrollar una comprensión intuitiva del análisis. Considérese la característica Época de concentración de partos: primavera en el cuadrante IV de la Figura 2. Esta característica no está "cercana" al origen (compárese su posición con la de aquellas características al interior de la "elipse"1 de línea segmentada, por ejemplo), y aparece asociada a la presencia de propietarios con educación básica, ordeñadores sin estudios, sistema de frío ausente o con agua detenida, encaste con toros sin registros, ausencia de terapia de secado, y vacas que no son ordeñadas en época invernal o lo son sólo una vez al día. Así, si en una explotación, elegida al azar dentro de la población, es observada cualquiera de las características mencionadas, lo más probable es que las demás características también estén presentes en ella.
Siguiendo esta metodología de interpretación, el cuadrante III en la Figura 2 indica que explotaciones con partos concentrados en otoño pueden realizar hasta tres ordeños en época invernal, emplean ordeñadores con un alto nivel de preparación (educación técnica o capacitados para realizar sus labores) y sus propietarios poseen estudios universitarios. Una de las variables ilustrativas empleadas en el análisis (producción anual) indica que las características mencionadas son encontradas con más frecuencia en explotaciones con producciones superiores a 1.000.000 L de leche anuales. Por el contrario, el conjunto de variables mencionadas en el párrafo anterior, propias de explotaciones con un deficiente nivel tecnológico, está asociado a producciones anuales inferiores a 100.000 L.
En la parte superior izquierda del cuadrante I en la Figura 2 se encuentra un tercer grupo de características. Estas son: uso de terapia de secado sólo en vacas que tienden a presentar mastitis en forma recurrente, enfriamiento por placas o usando agua circulante, y encaste de las vacas con toros con o sin registros. Estas características están probablemente asociadas a explotaciones con un nivel tecnológico intermedio, o con una adopción incompleta de ciertas tecnologías.
Finalmente, una conclusión interesante puede extraerse analizando algunas de las características cualitativas localizadas en torno al origen del sistema de coordenadas. Las tres categorías de la variable "dedicación del propietario" aparecen próximas al origen. De acuerdo a nuestra metodología de interpretación esto significa que el tiempo que el propietario destina al rubro lechero tiene poca relación con las demás características técnicas o productivas de la explotación (al menos las aquí estudiadas). Así, en cualquier tipo de explotación lechera en la X Región de Chile, la probabilidad de que el propietario tenga dedicación parcial o exclusiva al rubro es aproximadamente la misma. De hecho, una conclusión del análisis de conglomerados (ver Cuadro 3b) es que no existe mayor diferencia en el grado de dedicación del propietario entre explotaciones que producen menos de 100.000 L anuales y aquellas que superan el 1.000.000 L al año. La dedicación no exclusiva en pequeñas explotaciones puede explicarse por la necesidad del productor de dedicarse a otras actividades para incrementar sus ingresos. En predios de mayor tamaño y que usan un mayor nivel tecnológico la situación es distinta, pues es necesaria una mayor labor de supervisión. Este requerimiento, como la información extraída de la encuesta, indica que es satisfecho por aquellos propietarios con dedicación parcial mediante la contratación de un administrador con dedicación exclusiva.
Análisis de Conglomerados
La caracterización de los cuatro grupos o sistemas productivos obtenidos mediante el análisis de conglomerados se presenta en los Cuadros 3a y 3b. En el Cuadro 3a las características cuantitativas son presentadas mediante la mediana de cada variable en el sistema respectivo. Adicionalmente se presentan el segundo y tercer cuartiles, es decir, los valores entre los cuales se encuentran el 50% de las explotaciones que integran cada grupo. La razón de presentar la información cuantitativa en esta forma, y no usando el promedio y la desviación estándar, obedece a la ya mencionada distribución asimétrica de las variables (Cuadro 1). En estos casos la mediana es una mejor representación del valor central de la distribución que el promedio (Sokal, 1995). En el Cuadro 3b las características cualitativas de cada sistema productivo son presentadas mediante el porcentaje de explotaciones que, dentro de los respectivos grupos, clasifican en cada categoría.
Cuadro 3a. Características cuantitativas de los sistemas productivos. Table 3a. Quantitative characteristics of productive systems.
Sistema productivo | Característica | 1er cuartil | Mediana2 | 3er cuartil |
SP11 71 %3 5.5034 | Carga animal (UA ha-1) | 0,42 | 0,62 | 1,00 |
Estacionalidad | 1,68 | 2,41 | 4,49 | |
Grado confinamiento | 0,00 | 0,00 | 0,00 | |
Índice construcciones (10-3 m2 L-1) | 44,52 | 93,83 | 132,79 | |
Índice mecanización (10-4 L-1) | 2,01 | 2,87 | 4,40 | |
Praderas artificiales/praderas totales | 0,15 | 0,29 | 0,51 | |
Producción/mano obra (L año-hombre-1) | 4.534 | 7.145 | 9.908 | |
Producción/vaca (L vaca-1 año-1) | 741 | 1.131 | 1.547 | |
Producción 1996 (L) | 4.103 | 7.145 | 12.371 | |
Superficie rubro lechero (ha) | 5,8 | 9,8 | 15,0 | |
SP21 13%3 1.0224 | Carga animal (UA ha-1) | 0,54 | 0,72 | 1,00 |
Estacionalidad | 1,32 | 2,26 | 3,19 | |
Grado confinamiento | 0,00 | 2,50 | 5,00 | |
Índice construcciones (10-3 m2 L-1) | 30,62 | 56,21 | 79,65 | |
Índice mecanización (10-4 L-1) | 0,11 | 0,18 | 0,29 | |
Praderas artificiales/praderas totales | 0,19 | 0,34 | 0,62 | |
Producción/mano obra (L año-hombre-1) | 27.907 | 41.732 | 57.119 | |
Producción/vaca (L vaca-1 año-1) | 1.617 | 2.292 | 3.112 | |
Producción 1996 (L) | 108.031 | 163.400 | 247.742 | |
Superficie rubro lechero (ha) | 65,0 | 91,0 | 154,0 | |
SP31 12%3 9434 | Carga animal (UA ha-1) | 0,71 | 1,16 | 1,51 |
Estacionalidad | 1,40 | 1,69 | 2,17 | |
Grado confinamiento | 0,00 | 0,00 | 5,00 | |
Índice construcciones (10-3 m2 L-1) | 23,56 | 35,88 | 59,23 | |
Índice mecanización (10-4 L-1) | 0,08 | 0,12 | 0,22 | |
Praderas artificiales/praderas totales | 0,18 | 0,33 | 0,60 | |
Producción/mano obra (L año-hombre-1) | 36.197 | 50.089 | 70.594 | |
Producción/vaca (L vaca-1 año-1) | 2.018 | 2.776 | 3.671 | |
Producción 1996 (L) | 113.410 | 242.864 | 515.255 | |
Superficie rubro lechero (ha) | 50,0 | 82,5 | 143,8 | |
SP41 4%3 3154 | Carga animal (UA ha-1) | 0,77 | 0,96 | 1,27 |
Estacionalidad | 1,22 | 1,41 | 1,59 | |
Grado confinamiento | 4,00 | 6,00 | 10,00 | |
Índice construcciones (10-3 m2 L-1) | 16,87 | 24,81 | 40,52 | |
Índice mecanización (10-4 L-1) | 0,06 | 0,08 | 0,10 | |
Praderas artificiales/praderas totales | 0,25 | 0,45 | 1,00 | |
Producción/mano obra (L año-hombre-1) | 71.816 | 90.719 | 117.009 | |
Producción/vaca (L vaca-1 año-1) | 3.925 | 4.592 | 5.348 | |
Producción 1996 (L) | 562.800 | 763.340 | 1.182.883 | |
Superficie rubro lechero (ha) | 120,0 | 197,0 | 274,0 |
1 SP: Sistema Productivo. 2 El 25% de las explotaciones en el sistema productivo respectivo tiene valores inferiores al 1er cuartil. Otro 25% de ellas tiene valores superiores al 3er cuartil. Un 50% de las explotaciones en cada sistema productivo tiene valores entre el 1er y el 3er cuartil. Un 50% de las explotaciones tiene valores superiores a la mediana y el otro 50% tiene valores inferiores a ella. 3 Estimación del porcentaje de explotaciones, proveedoras de ASILAC y COLUN en la X Región en 1997, que clasificaban en el respectivo sistema productivo. 4 Estimación del número de explotaciones proveedoras de ASILAC y COLUN en la X Región en 1997, que clasificaban en el respectivo sistema productivo.
Cuadro 3b. Características cualitativas de los sistemas productivos. Table 3b. Qualitative characteristics of productive systems.
VARIABLES CUALITATIVAS | Porcentaje de explotaciones en cada categoría | |||
SP11 | SP2 | SP3 | SP4 | |
Encaste | ||||
Toro sin registros | 91,67 | 45,31 | 39,74 | 4,13 |
Toro con registros | 8,33 | 29,69 | 8,97 | 4,13 |
Inseminación artificial | 0,00 | 25,00 | 51,28 | 91,74 |
Dedicación del propietario | ||||
Parcial + actividades no agrícolas | 12,50 | 17,19 | 20,51 | 29,75 |
Parcial + labores otros rubros | 54,17 | 40,63 | 46,15 | 34,71 |
Exclusiva | 33,33 | 42,19 | 33,33 | 35,54 |
Empleo de terapia de secado | ||||
No hace | 83,33 | 20,31 | 24,36 | 2,48 |
En vacas con mastitis recurrente | 12,50 | 40,63 | 1,28 | 0,00 |
Todas las vacas | 4,17 | 39,06 | 74,36 | 97,52 |
Época de concentración de partos | ||||
Primavera | 37,50 | 9,38 | 1,28 | 3,31 |
Otoño | 4,17 | 1,56 | 1,28 | 7,44 |
Biestacional | 33,33 | 75,00 | 38,46 | 78,51 |
Todo el año | 25,00 | 14,06 | 58,97 | 10,74 |
Nivel de estudios ordeñadores | ||||
Sin estudios | 45,83 | 15,63 | 8,97 | 5,79 |
Básica (completa o incompleta) | 45,83 | 79,69 | 48,72 | 68,60 |
Media (completa o incompleta) | 8,33 | 3,13 | 16,67 | 9,09 |
Capacitación | 0,00 | 0,00 | 25,64 | 14,05 |
Media-técnica (completa o incompleta) | 0,00 | 1,56 | 0,00 | 2,48 |
Nivel de estudios del propietario | ||||
Sin estudios | 0,00 | 0,00 | 0,00 | 0,00 |
Básica (completa o incompleta) | 79,17 | 15,63 | 21,79 | 3,31 |
Media (completa o incompleta) | 16,67 | 34,38 | 43,59 | 35,54 |
Media-técnica (completa o incompleta) | 0,00 | 32,81 | 17,95 | 15,70 |
Universitaria (completa o incompleta) | 4,17 | 17,19 | 16,67 | 45,45 |
Número de ordeñas en invierno | ||||
No ordeña | 8,33 | 0,00 | 0,00 | 0,00 |
1 | 87,50 | 12,50 | 11,54 | 1,65 |
2 | 4,17 | 87,50 | 88,46 | 97,52 |
3 | 0,00 | 0,00 | 0,00 | 0,83 |
Control lechero | ||||
No | 100,00 | 75,00 | 50,00 | 6,61 |
Sí | 0,00 | 25,00 | 50,00 | 93,39 |
Sistema de frío | ||||
No tiene | 37,50 | 12,50 | 6,41 | 0,00 |
Agua detenida | 45,83 | 9,38 | 6,41 | 0,00 |
Agua corriente | 16,67 | 6,25 | 2,56 | 1,65 |
Por placas | 0,00 | 3,13 | 1,28 | 1,65 |
Estanque | 0,00 | 68,75 | 83,33 | 96,69 |
1 SP: Sistema Productivo en acuerdo con el Cuadro 3a.
Dieciocho variables fueron consideradas en el análisis de conglomerados para la determinación de los sistemas productivos (de las variables que muestran los Cuadros 3a y 3b, sólo la superficie de la explotación no fue incluida). El empleo de este número de variables permite generar grupos relativamente homogéneos no sólo en volumen de producción anual, como los presentados en previos estudios (Díaz y Williamson, 1998; Salas, 1995), sino también en otros múltiples aspectos productivos, tecnológicos, y relativos al capital humano disponible en las explotaciones.
El primero de los sistemas productivos (SP1 en Cuadros 3a y 3b) reúne predios con bajos índices productivos (asociados probablemente a los cuadrantes II y III del ACP): carga animal de 0,62 UA ha-1 y producción por vaca de 1.131 L año-1. Estas explotaciones no emplean estabulación, su volumen de producción anual a planta es del orden de 7.145 L, y sólo un 25% de ellas produce más de 12.371 L anuales. El método de encaste predominante es la monta con toros sin registros; en el 83,3% de las explotaciones no se realiza terapia de secado; los propietarios, en general, sólo tienen algún nivel de educación básica; los ordeñadores no han sido capacitados y una proporción importante de ellos (45,5%) carece de un nivel mínimo de estudios (Cuadro 3b). No parece haber una época específica en que estos agricultores concentren las pariciones, pero este grupo reúne la mayor cantidad de explotaciones con pariciones primaverales. En invierno, la escasez de recursos forrajeros y la tendencia a concentrar las pariciones en primavera motiva que los productores ordeñen sólo una vez al día (87,5% de las explotaciones) o simplemente no lo hagan (8,3%). No se emplea control lechero y en el 37,5% de las explotaciones la leche no es enfriada. En aquellos casos en que esta tarea sí se realiza, el método de enfriamiento consiste en sumergir el tarro con leche en algún recipiente de mayor tamaño con agua detenida o en circulación.
El segundo sistema productivo (SP2 en Cuadros 3a y 3b) muestra algunos indicadores técnicos próximos al SP1 (Cuadros 3a y 3b). La carga animal es de 0,72 UA ha-1, los animales son estabulados poco más de un mes al año y la estacionalidad de la producción es de 2,26. Sin embargo, los niveles productivos son notoriamente superiores (Cuadro 3a), la producción anual por vaca es el doble (2.292 L) y la producción anual por trabajador es casi 6 veces superior (41.732 L). Estas diferencias pueden explicarse por el mayor uso de toros con registros e inseminación artificial, lo que permite mejorar la genética del rebaño; un mayor uso del control lechero, que facilita el detectar algunas ineficiencias productivas en las vacas y en el proceso de ordeña; y el uso de terapia de secado, que permite mantener la ubre sana durante el período de secado y así disminuir la probabilidad de mastitis durante la lactancia. De igual forma la calidad de las praderas es superior en este sistema, donde alrededor del 37% de la superficie para pastoreo son praderas artificiales con menos de 5 años en producción. Esta mejor calidad del forraje, unida a una pequeña cantidad de concentrados (Cuadro 4) ayudan también a explicar las diferencias en producción por vaca entre el SP1 y el SP2. Otras características del SP2 son una mayor proporción de propietarios con educación media (43,59%) y ordeñadores generalmente con educación básica (79,69%). Las pariciones se concentran de acuerdo al sistema biestacional, lo que permite realizar dos ordeñas en época invernal. Finalmente, un 68,75% de los productores en este sistema cuenta con estanque enfriador.
Cuadro 4 Uso de concentrados comerciales, granos y otros alimentos no pratenses según sistema productivo. Table 4. Use of commercial concentrated feeds, grains, and other non-pasture feeds according to productive system.
SP1 | SP2 | SP3 | SP4 | ||
Concentrado comercial | |||||
Explotaciones que lo utilizan (%) | 0 | 52 | 65 | 75 | |
Consumo promedio2 (kg/vaca/día) | 0,0 | 1,0 | 2,1 | 2,2 | |
Predios que utilizan alimentos extraprediales3 | |||||
Pellet alfalfa (%) | 0 | 4 | 2 | 3 | |
Heno alfalfa (%) | 0 | 3 | 5 | 12 | |
Otros henos (%) | 30 | 20 | 22 | 8 | |
Granos | Maíz (%) | 0 | 7 | 14 | 35 |
Avena (%) | 0 | 7 | 12 | 23 | |
Triticale (%) | 0 | 4 | 2 | 7 | |
Harina pescado (%) | 0 | 3 | 12 | 38 | |
Coseta remolacha (%) | 0 | 0 | 6 | 5 | |
Afrecho raps (%) | 0 | 10 | 10 | 20 | |
Afrecho soya (%) | 0 | 0 | 10 | 15 | |
Afrecho granos (%) | 0 | 8 | 6 | 7 | |
Explotaciones que producen granos para sus vacas y superficie sembrada3 | |||||
Avena | % de explotaciones | 1 | 20 | 25 | 25 |
Superficie promedio (ha) 2 | 0,5 | 3 | 10 | 15 | |
Triticale | % de explotaciones | 0 | 2 | 12 | 15 |
Superficie promedio (ha) 2 | 2 | 14 | 18 | ||
Cebada | % de explotaciones | 0 | 2 | 4 | 4 |
Superficie promedio (ha) 2 | – | 2 | 2 | 14 | |
Trigo | % de explotaciones | 0 | 0 | 2 | 10 |
Superficie promedio (ha) 2 | – | – | 10 | 15 |
1 SP: Sistema Productivo en acuerdo con Cuadros 3a y 3b. 2 Promedio calculado entre las explotaciones que indicaron emplear el recurso. Muchas de ellas no proporcionaron la información por carecer de registros. 3 Alimentos comprador: Cantidades aportadas a la ración. La mayoría de ellas no proporcionó la información por carecer de registros. Fuente: Elaboración propia usando información de la encuesta.
El tercer sistema productivo (SP3 en Cuadros 3a y 3b) se caracteriza por una producción anual por vaca de 2.776 L, poco más de un 20% por sobre la del SP2. La superficie de estas explotaciones es levemente inferior a aquellas del SP2, pero la producción anual es superior en un 50% o más (Cuadro 3a). La explicación puede encontrarse en que estas explotaciones han logrado incrementar la carga animal a 1,16 UA ha-1. Esto lo han hecho prácticamente sin recurrir a la estabulación y mediante el empleo de concentrados a un nivel relativamente bajo (Cuadro 4). El encaste de las vacas con inseminación artificial o toros registrados; la concentración biestacional de pariciones o distribuidas a lo largo del año; dos ordeñas diarias durante todo el año y el empleo de estanques para refrigerar la leche son prácticas comunes en este grupo. El empleo de terapia de secado en todas las vacas se practica en un 75% de las explotaciones y un 50% de ellas lleva algún sistema de control lechero. La estacionalidad intermedia de la producción, menor que en el SP2, obedece a la curva de producción de las praderas. La menor producción de estas durante el invierno es atenuada por el empleo de forraje conservado y concentrados (el nivel de empleo de estos últimos es mayor que en el SP2, Cuadro 4). El nivel de preparación de los ordeñadores supera el de los grupos anteriores: una mayor proporción ha accedido a la educación media y sobre un 25% ha sido capacitado para su trabajo. Alrededor de la mitad de los propietarios de estas explotaciones tienen estudios universitarios o han accedido a educación técnica.
Finalmente, el cuarto sistema productivo (SP4 en Cuadros 3a y 3b) concentra las explotaciones con las mayores producciones anuales por vaca, las menores estacionalidades en la producción, y los mayores niveles de confinamiento. La carga animal es levemente superior al SP3, y la proporción de praderas artificiales es significativamente superior a la encontrada en los grupos precedentes. La baja estacionalidad de la producción, y los mayores índices productivos por vaca sugieren el empleo de una significativa cantidad de concentrados en las raciones. De hecho, el Cuadro 4 indica que, si bien el uso de preparaciones comerciales de concentrados no es particularmente alto, muchas de estas explotaciones compran los insumos necesarios para suplementar las raciones de acuerdo a sus requerimientos particulares. Estas explotaciones son relativamente homogéneas en los aspectos técnicos: empleo de inseminación artificial, terapia de secado a todo el rebaño, concentración biestacional de pariciones, dos ordeñas diarias, control lechero, y empleo de estanque refrigerado. La educación universitaria entre los propietarios supera el 40%, y otro 50% tiene algún grado de educación media o técnica. Según el Cuadro 3a en este grupo se encuentran las grandes explotaciones de la región, la producción anual presenta una mediana de 763.340 L anuales y un 25% de los predios produce más de 1.182.883 L al año.
Existen al menos dos puntos interesantes de analizar acerca de la información presentada en los Cuadros 3a y 3b. El primero es, como ya fue mencionado en la discusión del ACM, la escasa relación que existe entre la dedicación del propietario y el sistema productivo adoptado en la explotación. Prácticamente en todos los sistemas aquí mostrados la condición predominante es la dedicación parcial complementada con otras actividades agrícolas. En el SP2 y en el SP4 esta predominancia es compartida con la dedicación exclusiva. Lo interesante sin embargo, de acuerdo al Cuadro 3b, es que el porcentaje de propietarios que ocupa parte de su tiempo en labores remuneradas no agrícolas se incrementa gradualmente al pasar desde un sistema tecnológicamente deficiente como el SP1 a uno altamente tecnificado y con altos volúmenes de producción, como el SP4. Como Lichtenberg et al (1993) indican, esto puede explicarse por el mayor costo alternativo que tiene el tiempo de un empresario con estudios universitarios, lo cual le permite acceder a actividades tan o mejor remuneradas que la agrícola. Adicionalmente, los mismos autores mencionan que los agricultores más grandes y exitosos tienden a ejercer una mayor influencia en la zona en que desarrollan su actividad, por lo que es común que también se dediquen a labores gremiales.
El segundo punto se refiere a la relación directa (Cuadro 3b) entre el nivel de estudios del propietario y el nivel tecnológico y productivo de una explotación. Una relación análoga fue encontrada por Kumbhakar et al. (1989) en un estudio de la eficiencia técnica y económica en explotaciones lecheras de los Estados Unidos. Lo anterior podría significar que el nivel de estudios de los productores es una limitante para la incorporación de tecnologías que permitan alcanzar mayores niveles productivos y de eficiencia en la empresa. Si esta interpretación es válida, entonces, considerando el alto porcentaje de explotaciones que reúne las características del SP1 (Cuadro 3a), el bajo nivel de estudios en estos propietarios puede convertirse en una piedra de tope para el desarrollo de la producción lechera regional, y para la supervivencia de los pequeños productores en el largo plazo. Nótese que, de acuerdo al Cuadro 1, las explotaciones con producciones anuales inferiores a los 15.000 L constituyen aproximadamente el 70% del número total de explotaciones lecheras en la región, y su aporte a la producción regional no alcanzaba al 10% en 1997, por lo cual no tienen mayor poder negociador en el mercado de la leche. Un mecanismo que podría ayudar a la solución de este problema se haya tal vez generado con el advenimiento, bajo el auspicio del Ministerio de Agricultura, de los Centros de Gestión en la segunda mitad de la década pasada. Si estas instituciones, junto a mecanismos más efectivos de transferencia tecnológica, logran hacer menos traumática la adopción de nuevas tecnologías a los pequeños agricultores, las consecuencias negativas de un nivel deficiente de estudios en el SP1 podrían ser mitigadas.
Nuevas tecnologías pueden resultar intimidantes para estos productores debido a que les resultan más complejas y difíciles de comprender. Esto incrementa la probabilidad de que estos productores fracasen al implementarlas en su explotación y eleva el riesgo asociado a toda nueva tecnología, haciendo que el productor se muestre más renuente a invertir en ellas. Adicionalmente, tecnologías recientes son generalmente más costosas de implementar y, algunas de ellas, presentan economías de escala, de manera que sólo los productores más grandes pueden acceder a ellas. De allí que una labor adicional de los Centros de Gestión, en el contexto de este estudio, sería aprovechar la asociatividad de los productores para reducir los costos de inversión en tecnología. Una evaluación profunda acerca del aporte de los Centros de Gestión en estas áreas está pendiente.
CONCLUSIONES
La información analizada en este estudio permite concluir que las explotaciones más pequeñas de la X Región de Chile, al igual que las más grandes, son relativamente homogéneas en su forma de producir leche. Explotaciones lecheras de tamaño intermedio, sin embargo, muestran al menos dos alternativas productivas. Predios con producciones anuales inferiores a 20.000 L tienen, en general, cargas animales de 0,42 a 1,00 UA ha-1, producciones por vaca inferiores a 1.600 L año-1, no estabulan el rebaño en ningún momento del año, no usan concentrados y la producción de la mano de obra es inferior a 10.000 L año-hombre-1. En estos predios el encaste se realiza con toros sin registros, no se tiene un sistema adecuado de enfriamiento de la leche y no se usa terapia de secado.
En el otro extremo, aquellas explotaciones que producen más de 700.000 L anuales tienen carga animal de 0,77 a 1,27 UA ha-1, producciones por vaca superiores a 4.000 L año, períodos de confinamiento del rebaño superiores a 2 meses, formulan sus propios concentrados y la producción por trabajador está en el rango de 71.816 a 117.009 L año-hombre-1. En estos predios está generalizado el uso de inseminación artificial y de terapia de secado, y la leche es enfriada mediante estanques refrigerados.
A niveles intermedios de producción (150.000 a 600.000 L año-1), parecen existir al menos dos sistemas productivos. Ambos basan la alimentación de las vacas en las praderas, pero difieren en la cantidad de concentrados aportada a la ración. El sistema más pastoril tiene carga animal de 0,54 a 1,00 UA ha-1 y producción anual por vaca de 1.600 a 3.100 L. El sistema que usa mayor cantidad de concentrados presenta una carga animal de 0,71 a 1,51 UA ha-1, y su producción por vaca es aproximadamente un 20% superior a la del grupo anterior. Las explotaciones que clasifican en estos sistemas productivos tienen prácticamente la misma superficie, pero, además de la mayor carga animal y la mayor producción por vaca encontrados en el segundo sistema, su nivel tecnológico es también superior. Esto permite que sus producciones anuales puedan llegar a ser entre un 50 a un 100% superiores a aquellas en el primer sistema.
1 Dado que la mayoría de los productores no contaba con registros productivos, la información productiva utilizada en los análisis es la producción destinada a planta (volumen de leche medido en planta sin ningún tipo de correcciones). En este trabajo, los términos de producción, producción total, y producción a planta, son utilizados indistintamente. Pero, obviamente, la producción total es siempre superior a la producción destinada a planta. La información productiva fue proporcionada por las empresas receptoras.
1 Una copia de la encuesta puede ser solicitada a los autores por e – mail.
1 La información relativa a la genética de las vacas no fue incluida en este estudio. La razón para esto fue que en la mayoría de las explotaciones los registros reproductivos no existían y no era posible obtener toda la información que un análisis multivariable requiere. Como ya ha sido mencionado, la excepción fueron las explotaciones más grandes (producciones iguales o superiores a 500.000 L anuales).
1 Esta "elipse" dibujada sólo para fines ilustrativos, es en realidad un circulo centrado en el origen, pero debido a las diferentes escalas en los ejes del gráfico aparece como una elipse.
LITERATURA CITADA
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Notas
1 Trabajo financiado por DID UACH S-199943. 2 Universidad Austral de Chile, Facultad de Ciencias Agrarias, Casilla 567, Valdivia, Chile.
Ricardo Smith R.2, Víctor Moreira L. 2 y Luis Latrille L2
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