Cuando la víctima ampara al captor. No siempre estamos en Estocolmo: La saga de Jaycee Dugard
Enviado por Felix Larocca
- El secuestro
- Nuestro propósito al escribir esta ponencia
- El síndrome de Estocolmo
- Patricia Hearst
- Culpando la victima
- Estrategia para la supervivencia
- El final de la saga de Jaycee
- En resumen
- Bibliografía
Existen dos síndromes de Estocolmo en la literatura psiquiátrica:
El síndrome de Estocolmo, y su subsidiario, el síndrome de Estocolmo doméstico.
Ambos están basados en defensas psicológicas para garantizar la supervivencia y no están limitados a nuestra especie humana. FEFL en: V es por violencia y los síndromes de Estocolmo.
Leer más: http://www.monografias.com/trabajos92/abecedario-v-es-violencia-y-sindromes-estocolmo/abecedario-v-es-violencia-y-sindromes-estocolmo#ixzz2xS784qJh
Noticias no muy distantes que capturaron el interés mundial fueron concernidas con el secuestro de Jaycee Dugard a la edad de 11 años y de su inesperada reaparición, como madre de dos niñas, dieciocho años después.
Jaycee en su niñez
El secuestrador, Phillip Garrido, era un delincuente sexual registrado, quien fuera liberado por buena conducta — mientras cumplía una larga sentencia — hace varios años.
Hoy, no solamente Jaycee, sino sus dos hijas Angel 11 y Starlit 15 — cuando el rescate ocurriera — deben de confrontar ciertas crudas realidades:
Que Garrido no era el padre de las tres (de Jaycee y de sus dos "hermanas", como se pretendiera). Sino que es el padre de las menores.
Que la "hermana mayor" (Jaycee) es madre de las dos pequeñas
Que Jaycee pudo escapar su captor, durante el tiempo que vivieran en una choza, en el patio trasero de la casa donde residiera Garrido en compañía de su esposa.
El secuestro
El secuestro de Jaycee Lee Dugard se produjo el 10 de junio de 1991 en South Lake Tahoe, California. Dugard tenía 11 años en ese momento y fue secuestrada en una calle mientras caminaba desde su casa a la parada del autobús escolar.
Búsquedas comenzaron inmediatamente después de la abducción, pero concluyeron sin generar pistas fiables. Ella permaneció desaparecida durante más de 18 años.
Las hijas
Los días 24 y 25 de agosto de 2009, condenado delincuente sexual Phillip Craig Garrido visitó el campus de la Universidad de Berkeley en compañía de dos chicas. Su comportamiento inusual provocó una investigación que resultó en llevar a las niñas a una oficina de libertad condicional en Concord, California el 26 de agosto, acompañado de una mujer joven que luego fuera identificada como Dugard.
Garrido, de 58 años, y su esposa Nancy Garrido, de 58 años, de Antioch California, fueron detenidos por el secuestro y otros cargos. El 28 de abril de 2011, se declararon culpables del secuestro de Dugard y asalto sexual. Los oficiales de policía creen que Dugard se mantuvo en un área oculta detrás de la casa de los Garrido en Antioch durante los 18 años de su desaparición. Durante este tiempo, Dugard tuvo dos hijas que eran de 11 y 15 años en el momento de su reaparición. El 2 de junio de 2011, Phillip Garrido fue condenado a 431 años de prisión. Su esposa Nancy Garrido recibió 36 años a la vida.
Nuestro propósito al escribir esta ponencia
El propósito de este artículo, no es el obvio, que sería tratar de perfilar, usando técnicas derivadas del psicoanálisis y de las ciencias del comportamiento, la monstruosa personalidad de Garrido. Como tampoco lo es, estimar los años de terapia que confrontarán a estas tres desventuradas mujeres. Ni mucho menos hacer una disertación acerca del trastorno por estrés post-traumático (TEPT).
Esas labores, a otros las dejaremos.
Nuestro designio en esta lección es tratar de entender por qué Jaycee nunca trató de escapar su captor y explicar sus sentimientos positivos hacia Garrido.
Examinemos la continuación del secuestro
A la edad de once años, mientras esperaba por un autobús, Garrido secuestró a la inocente niña alojándola detrás de la casa que compartiera con su esposa. Allí la niña creció, dando nacimiento, posteriormente, a dos hijas que con el captor concibiera.
Durante una entrevista con la prensa el padrastro de esta mujer, comparte con sorpresa, cuando se reúnen dieciocho años después, que la relación entre Garrido y Jaycee no era una de hostilidad, sino más bien, la de un matrimonio amistoso.
Donde confinaron a Jaycee y sus hijas
"Por esa razón — dice el padrastro — sería que nunca trataría de emprender la fuga, en las tantas oportunidades que se le presentaron".
Entonces ¿existe alguna evidencia de que algún lazo emocional creció entre esta joven mujer y el hombre a quien ella y sus niñas llamaban "papi"?
Desde que se describiera el llamado síndrome de Estocolmo se ha corroborado el hecho de que, bajo ciertas circunstancias, muchas personas que han sido aprehendidas forzosamente desarrollan lazos emocionales con sus victimarios.
El síndrome de Estocolmo
En el año 1972, durante el robo de un banco, en la capital sueca de Estocolmo, un grupo de empleados fueron detenidos, como rehenes, por seis días.
Durante ese tiempo, muchos de ellos desarrollaron vínculos afectivos con los aprehensores, llegando al extremo de besarlos cuando la policía los liberara, rehusando testificar contra ellos, y recaudando fondos para asistir en su defensa legal. (Leer más: www.monografias.com/trabajos92/abecedario-v-es-violencia-y-sindromes-estocolmo/abecedario-v-es-violencia-y-sindromes-estocolmo)
Patricia Hearst
Un caso que adquirió mucha visibilidad, hace algunos años, fue el de la heredera multimillonaria, Patricia Hearst, quien fue secuestrada en el 1974 por un grupo terrorista. Grupo al que ella, más tarde se uniría de su propia voluntad, participando en robos armados y recibiendo una sentencia por sus crímenes. La sentencia fue seguida por, el esperado, indulto presidencial, resultado del poder que ejercieran el dinero e influencia política de su padre, el magnate periodista Randolph Hearst. (Para una descripción de este caso, véase: El terrorismo en /trabajos50/el-terrorismo/el-terrorismo).
El fenómeno de la disonancia cognitiva
Una de las razones por las que una persona puede desarrollar sentimientos positivos por su captor se conoce como la disonancia cognitiva.
El concepto de disonancia cognitiva, en Psicología, hace referencia a la tensión o desarmonía interna del sistema de ideas, creencias y emociones (cogniciones) que percibe una persona al mantener al mismo tiempo dos pensamientos que están en conflicto, o por un comportamiento que entra en conflicto con sus creencias. Es decir, el término se refiere a la percepción de incompatibilidad de dos cogniciones simultáneas, todo lo cual puede impactar sobre sus actitudes.
El concepto fue formulado por primera vez en 1957 por el psicólogo estadounidense Leon Festinger en su obra: A theory of cognitive dissonance. La teoría de Festinger plantea que al producirse esa incongruencia o disonancia de manera muy apreciable, la persona se ve automáticamente motivada para esforzarse en generar ideas y creencias nuevas para reducir la tensión hasta conseguir que el conjunto de sus ideas y actitudes encajen entre sí, constituyendo una cierta coherencia interna.
La manera en que se produce la reducción de la disonancia puede tomar distintos caminos o formas. Una muy notable es un cambio de actitud o de ideas ante la realidad.
Leer más: http://es.wikipedia.org/wiki/Disonancia_cognitiva
Cuando algunas personas perciben elementos inconsistentes y conflictivos acerca de sí mismas, éstas, a menudo, alteran sus pensamientos para encontrar solución al conflicto.
La fama las visita
Un ejemplo prosaico de este fenómeno es cuando una persona hace una compra costosa de algún objeto sin valor alguno, artículo que, de inmediato valúa en exceso, para justificar su gasto descabellado.
Es muy difícil, para algunos, pensar que han comprado algo insignificante y resignarse a aceptar que, al hacerlo, fueron tontos.
Por medio de este mecanismo delusorio equilibran su autoestima.
Se cree que en el caso de una abducción forzosa, este fenómeno antedicho puede llegar a operar
Una persona que está bajo amenaza de vida por personas cuyas intenciones desconoce del todo, es alguien en quien los mecanismos de la supervivencia están en estado de la mayor alerta.
Para poder sobrevivir esas circunstancias, un comportamiento que parece natural, es volverse dócil, obsequioso y amable con los captores.
Una vez que esa forma de pensar se establece, en la mente se interpreta como: "soy afectuoso con esta persona, porque ella es verdaderamente adorable".
Culpando la victima
Aunque el síndrome de Estocolmo parezca una respuesta exagerada al peligro, éste está basado en mecanismos psicológicos bien establecidos.
A pesar de que este fenómeno parezca irracional, el hecho es que nuestros sentimientos, comportamientos y acciones están gobernados, en su mayor parte, por procesos, a veces, ilógicos y, casi siempre, inconscientes.
Oprah: La inevitable e ¿inimitable?
A muchos les gustaría pensar que si estuvieran en una situación parecida a la de Dugard, que ellos hubiesen tratado de escapar a la primera oportunidad ofrecida. Lo que se asemeja al asignar culpa a la víctima, que se estila en muchos casos en que una mujer fue violada. Lo que no es lo mismo.
Cuando una persona abusiva demuestra alguna afabilidad hacia su víctima este gesto alienta la esperanza de que todo pueda terminar bien
El gesto benigno, combinado con el terror de lo desconocido, prepara el escenario para que el rehén se sienta apegado al abductor y para el desarrollo eventual de sentimientos positivos hacia el mismo, como mecanismo de adaptación.
Mientras más largo el cautiverio, mayores serán los chances de desarrollar esos sentimientos positivos.
En el caso de Jaycee, ella vivió con Garrido por más años que los que viviera con su propia familia.
Garrido, por bien y por mal, le proporcionó a ella todas las interacciones emocionales de su vida. Lo que hace que no sea extraño que algún vínculo de afecto positivo creciera hacia él.
Estrategia para la supervivencia
La vinculación afectiva con un captor no es una destreza mental, sino una estrategia física para lograr la supervivencia.
Patricia Hearst: Guerrillera Urbana
Ya que la vida de las víctimas estaba a la merced de los Garridos. Dependiendo de ellos para todas sus necesidades vitales, se volvió imprescindible que se apegaran a los esposos para protegerse contra toda negligencia o maltrato.
Alguien que es secuestrado en la niñez, puede hacer la decisión inconsciente de no comprender enteramente el abuso proveniente de quienes llenan todas sus necesidades materiales y afectivas.
Algunas personas lo ponen fuera de sus mentes y prefieren creer que nada sucede para protegerse contra la dura realidad
En este sentido, el síndrome de Estocolmo es muy similar a las reacciones de muchas víctimas de la violencia doméstica. Esposas e hijos que sufren abuso de parte de sus compañeros o padres. Y, donde la oposición y resistencia contra el abusador pueden provocar retribución o violencia, tanto emocional como física.
En la situación en que Jaycee se encontraba ella carecía de poderes para lograr oponer sus captores, por esa razón, quizás no lo hizo.
El factor circunstancial de la indefensión adquirida
La Indefensión aprendida, o adquirida, es una condición psicológica en la que un animal aprende a creer que está indefenso, que no tiene ningún control sobre la situación en la que se encuentra y que cualquier cosa que haga para salir de la misma es inútil. Como resultado, el animal permanece pasivo frente a una situación adversa o dañina, incluso cuando dispone de la posibilidad real de cambiar las circunstancias. (Léase mi ponencia, Estrés y los Trastornos del Comer, para entender este asunto en mayor detalle).
La Indefensión Aprendida, como concepto, fue postulada por el psicólogo Martin Seligman
Indefensión adquirida
Seligman exponía a dos perros, encerrados en jaulas vecinas, a descargas eléctricas ocasionales. Basado en el comportamiento de los animales, antes su experimento, Seligman desarrolló el sistema que le trajo fama y reconocimiento. (Una buena fuente de consulta aquí se recomienda: Wikipedia Español).
Lo nombró, como ya sabemos: La Indefensión Adquirida — término pegadizo…
Leer más: /trabajos50/obesidad-indefension/obesidad-indefension#ixzz2xSMmBQQ1
El final de la saga de Jaycee
Arreglo con el Estado de California
En julio de 2010, el Estado de California aprobó un acuerdo $ 20.000.000 con Jaycee Dugard, para compensarla por "varias fallas por parte del Departamento de Correcciones [lo que contribuyó a] el mantenimiento en cautiverio de Dugard, asalto sexual en curso y el abuso mental y / o física." El acuerdo, que forma parte de AB1714 , fue aprobado por la Asamblea del Estado de California por un 70-2 voto, y por el Senado del Estado de California por un 30 a 1 voto. Tribunal Superior del Condado de San Francisco el juez Daniel Weinstein, quien medió en el acuerdo, declaró que se alcanzó el acuerdo para evitar un pleito que sería un "mayor invasión de la privacidad y una mayor publicidad para el Estado".
Tamara Lempicka
El proyecto de ley fue firmado por el gobernador de California, Arnold Schwarzenegger, el 9 de julio.
Demanda contra los Estados Unidos
El 22 de septiembre de 2011, Dugard presentó una demanda en la Corte Federal de Distrito para el Distrito Norte de California acusando a Estados Unidos de no controlar Garrido cuando era un preso en libertad condicional federal.
En los medios de comunicación
Dugard documentó su vida en cautiverio en un libro, Una vida robada: Una MEMORIA, que escribió como parte de su terapia con Rebecca Bailey, que se especializa en la post-trauma reunificación familiar. Dugard dice que ella escribió el libro, que se publicó en julio de 2011, para ayudar a otros sobrevivientes de abuso sexual.
Unos días antes de la publicación del libro, Dugard dio su primera gran entrevista televisiva para la cadena ABC Diane Sawyer.
No todos creyeron…
El circo de la farándula entra en la escena
Un espectáculo: Crimen en Estados Unidos en el Investigation Discovery Red titulado Wicked Attraction ventiló un episodio sobre Phillip y Nancy Garrido, que detalla el secuestro y la recuperación de Jaycee Dugard.
Un documental que se emitió en octubre de 2009 en el Canal 4 de Gran Bretaña titulado: Cautiva durante 18 años: Jaycee Lee se centró en la historia del secuestro de Dugard, la recuperación y el inicio de juicio, incluyendo entrevistas con el padrastro de Jaycee.
Dugard fue galardonada con el honor "Liderazgo por vida" en la tercera edición los premios DVF el 9 de marzo 2012 por su valentía y su Fundación JAYC que da apoyo a las familias que se ocupan de los secuestros y otras tragedias.
(Seguir leyendo: http://en.wikipedia.org/wiki/Jaycee_Dugard)
En resumen
El síndrome de Estocolmo es una respuesta psicológica en el que la víctima de secuestro, o persona detenida contra su propia voluntad, desarrolla una relación de "complicidad" con su raptor.
En ocasiones, los prisioneros pueden acabar ayudando a los captores a alcanzar sus fines o a evadir la justicia.
En éste, uno de tantos casos famosos parecidos reportados en años recientes en la prensa norteamericana, no podemos evitar llegar a la conclusión de que las víctimas, como los animales indefensos y los niños abusados, se ocultan detrás de los mismos mecanismos de evasión para sentirse mejor, evitando el dolor terebrante de la realidad inclemente.
Como dijera Herbert Spencer: La supervivencia del más apto…
Fin de la lección.
En nombre del avance científico y del progreso
Bibliografía
Larocca, FEF: Abecedario: V es por violencia y los síndromes de Estocolmo en monografías.com, academia.edu y researchgate.net
Larocca, FEF: El síndrome de Estocolmo doméstico (SED): El grito silencioso en monografías.com, academia.edu y researchgate.net
Larocca, FEF: La obesidad: Indefensión ¿Aprendida o innata? en monografías.com, academia.edu y researchgate.net
Larocca, FEF: Seres humanos como conejillos de indias: Milgram y Zimbardo en monografías.com, academia.edu y researchgate.net
Larocca, FEF: El experimento de Milgram: El mal que hacen los hombres en monografías.com, academia.edu y researchgate.net
Autor:
Dr. Félix E. F. Larocca