La calidad en la educación superior, desafíos en un mundo que se transforma
Enviado por Juan Carlos Callejas Torres
RESUMEN
El presente trabajo aborda la temática de la calidad en la Educación Superior en los países de Latinoamérica, a partir de los diferentes conceptos de calidad que distintos autores exponen sobre la temática en cuestión y en su análisis se brinda una panorámica de la problemática de la Educación Superior en la región latinoamericana, donde existe una generalizada insatisfacción por el deterioro que en los últimos años ha sufrido la calidad, fenómeno que suele asociarse a su extraordinario crecimiento, si bien debemos advertir que es posible conciliar cantidad y calidad si se introducen cambios sustanciales de los métodos de enseñanza y se acude a la moderna tecnología educativa, se tratan aspectos importantes que permiten centrar la atención en la calidad, a partir de diferentes conceptos como la eficacia, eficiencia, pertenencia y relevancia como punto de partida para la ejecución del proceso docente y se establecen nexos entre retos de la educación cubana y sus objetivos a partir de los cuales se sugieren elementos imprescindibles para elevar la excelencia del claustro y con ello la calidad en la educación superior.
INTRODUCCIÓN
Citemos el siguiente pensamiento por su vigencia en nuestros tiempos:
Los principios de un pasado son ahora inadecuados para nuestro tormentoso presente, como nuestra situación es nueva, tenemos que pensar y actuar en forma nueva/ Abraham Linconln/.
La enorme expansión que la Educación Superior Latinoamericana experimentó en los últimos 40 años (la matrícula paso de 270 000 alumnos a más de 7 millones en 2006) no fue acompañada de un esfuerzo similar en lo cualitativo. Al contrario, existe una generalizada insatisfacción por el deterioro que en los últimos años ha sufrido la calidad de la Educación Superior en la región, fenómeno que suele asociarse a su extraordinario crecimiento, si bien debemos advertir que es posible conciliar cantidad y calidad si se introducen cambios sustanciales en los métodos de enseñanza y se acude a la moderna tecnología educativa.
Conviene mencionar ahora aunque sea muy brevemente algunos elementos de la problemática general de la calidad de nuestra Educación Superior:
En primer término corresponde señalar la falta de articulación entre los distintos niveles educativos, respecto a ello es necesario señalar que se observan cada vez mas bajos los niveles de preparación académica, en especial de las disciplinas básicas, de los egresados de la enseñanza media superior que acceden a la Educación Superior.
Esta presente la disminución de los recursos financieros destinados a la Educación Superior. América Latina es la región del mundo que menos invierte por estudiantes del tercer nivel (aproximadamente un promedio de 650 USD por estudiantes, los países asiáticos invierte cuatro veces más y los Estados Unidos y Canadá 14 veces más). Las restricciones económicas afectan sensiblemente el desempeño cualitativo de las instituciones de la Educación Superior, obligándolas a gastar más del 90 % de sus presupuestos en el pago de salario y a reducir sensiblemente las inversiones que más se ciñen a la calidad del proceso de enseñanza y aprendizaje.
Proliferación de instituciones que no reúnen los requisitos mínimos para un trabajo académico digno de considerarse de nivel superior. Hoy día funcionan en la región cerca de 3500 instituciones de tercer nivel, de las cuáles unas 550 están reconocidas como Universidades. No todas tienen el mínimo nivel exigido. Una de las características es la existencia de macrouniversidades, con más de 100 000 alumnos y microuniversidades con unos pocos centenares de estudiantes.
Seguramente el factor que más incide en la educación Superior es el nivel académico del personal docente y su formación pedagógica: Se estima que en nuestra región menos del 20 % de los profesores se han formado en programas de doctorados y 50 % de ellos tienen un trabajo adicional, incluyendo a muchos que figuran en las nóminas como "Profesores de tiempo completo". Además, es muy reducido el porcentaje de docentes que ha recibido adiestramiento en métodos de enseñanza y evaluación. Según Brunner, del total estimado de docentes, sólo una ínfima fracción (que puede conjeturarse no supera el 10 % y se halla concentrado principalmente en Brasil, Chile, México, Argentina y Venezuela) son profesores investigadores con dedicación a la docencia de postgrado y a la investigación, y que publican regularmente en revistas internacionales de prestigio. Para el grupo mayoritario de los profesores del tercer nivel los problemas de calidad están indisolublemente ligados a su propio e inestable estatuto, a las bajas remuneraciones que perciben, el escaso apoyo que encuentran y a las condiciones deterioradas que frecuentemente deben actuar. Su identidad con la disciplina o la profesión suele ser baja y en muchos casos sus asociaciones sindicales o gremiales apenas llegan a preocuparse de algo más que de los aspectos burocráticos y económicos de la carrera docente.
El método de enseñanza y aprendizaje también influyen en la baja calidad. En un gran número de instituciones la Cátedra magistral sigue siendo el centro de la calidad docente y contribuye ha alimentar la actitud pasiva que el estudiante suele traer de la enseñanza media superior. Pero no es posible centrar en el estudiante el proceso de aprendizaje si la institución no dispone de Bibliotecas, laboratorios y otros recursos didácticos que permitan el trabajo individual del educando.
La calidad se ha convertido en una preocupación fundamental en el ámbito de la Educación Superior. Y ello porque la satisfacción de las necesidades de la sociedad y las expectativas que suscita la Educación Superior depende en última instancia de la calidad del personal docente, de los programas y de los estudiantes tanto como de las infraestructuras y del medio universitario. La búsqueda de la Calidad tiene aspectos múltiplos, las medidas para acrecentar la calidad de la Educación superior deben estar destinadas a alcanzar objetivos institucionales y de mejoramiento del propio sistema.
La calidad de la infraestructura material y académicas de la educación Superior tienen importancia para la enseñanza, la investigación y las funciones de servicio, así como para la cultura institucional, imprescindible para dar coherencia a las Instituciones de Educación Superior, sumamente diversificada y a menudo geográficamente dispersa. Las inversiones de capital en infraestructura (desde las vías de acceso al campus, los laboratorios y la biblioteca hasta las "autopistas de la información") deben ser consideradas como obras públicas que formen parte del esfuerzo general destinados para la infraestructura que detened de la Economía.
Pretendemos dar algunas valoraciones sobre calidad en la Educación Superior, diferenciar conceptos, así como los elementos fundamentales a tener en cuenta si de calidad se trata para organizar el proceso docente en las Instituciones educativas del nivel Superior.
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