EL AGUA DULCE EN EL PLANETA
La destrucción del hábitat natural del agua no sólo genera una crisis de abastecimiento que afecta a las personas y a los animales, sino que disminuye gravemente la cantidad de agua potable de la que dispone el planeta.
El ciclo hidrológico de una gota de agua: se evapora de una planta, de la superficie terrestre, de un pantano, de un río, de un lago o del mar para acabar volviendo a la tierra en forma de precipitación. Si la gota de agua vuelve a caer en un bosque, lago, hierba, prado o campo, puede cooperar con la naturaleza para iniciar un nuevo ciclo hidrológico. El derecho de domicilio de una gota forma parte de los derechos fundamentales, y es un derecho infinitamente más importante que integra los derechos humanos".
Lo real y de acuerdo a los estudios científicos:
1. El caudal de agua dulce no alcanza ni al uno por ciento de toda el agua contenida en la superficie de la tierra. El resto del agua es salada o forma parte de los hielos polares.
2. El agua dulce únicamente se renueva por la lluvia, que cae a un ritmo de 40.000 a 50.000 kilómetros cúbicos al año.
3. Las grandes urbes, la deforestación, el desvío de las aguas por necesidades de irrigación agrícola, seca la superficie de la tierra y produce aridez. El agua de todas las cuencas de los ríos de todos los continentes se va agotando progresivamente y de manera ininterrumpida.
4. Para el año 2025, la demanda de agua dulce será un 56 por ciento mayor que la actual.
5. El consumo mundial del agua se duplica cada veinte años, es decir a un ritmo dos veces mayor que el del crecimiento de la población humana. Los gobiernos del mundo entero, reciben grandes presiones de parte de empresas multinacionales quienes piden una solución radical, y hablan de desviar en forma masiva las aguas. Lo que se pretende es privatizar el acceso al agua potable con la finalidad de cuidar y controlar los acuíferos para prevenir la contaminación de los mismos.
6. Sabemos por experiencia, que la venta del agua en un mercado abierto no sirve para colmar las necesidades de los pobres y sedientos. Según las Naciones Unidas, hoy día 31 países padecen escasez y más de mil millones de personas carecen de agua potable.
7. De aquí al año 2025, hasta dos terceras partes de la población mundial, que para entonces se habrá incrementado en otros 2,6 mil millones de habitantes padecerán graves problemas de escasez. La tercera parte restante se verá casi totalmente privada de agua.
8. Con el respaldo del Banco Mundial, un puñado de multinacionales se dedican a acaparar el control de los servicios públicos de abastecimiento de agua en los países en desarrollo, disparando los precios en detrimento de los habitantes y sacando partido de la desesperación con la cual el tercer mundo busca resolver sus problemas de escasez. Las intenciones son
clarísimas: pretenden tratar el agua como cualquier otra mercancía, y su uso debe ir conformado por los principios que rigen el mercado.
Al mismo tiempo, los gobiernos están renunciando al control de las aguas que les compete administrar mediante su participación en acuerdos comerciales como puedan ser el Acuerdo de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN), sucedido por el Área de Libre Comercio de las Américas (ALCA) y la Organización Mundial del Comercio (OMC). Lo que hacen estas instituciones mundiales en realidad es darle a las grandes multinacionales un acceso sin precedentes al agua de los países signatarios.
9. La venta del agua al mejor postor no hará sino agravar los peores impactos de la crisis mundial del agua. Aunque la labor que realizan sea de lo más fundamental, sus esfuerzos han de ser coordinados y percibidos en el contexto más extenso de la mundialización económica y del papel de este último en lo que se refiere al fomento de la privatización y de la reificación.
10. El agua es parte del patrimonio de la tierra y que como tal debe preservarse en el dominio público por todos los tiempos y protegerse mediante rigurosas leyes locales, nacionales e internacionales.
11. Lo que está en juego es la noción de los bienes comunes, es decir la idea que a través de nuestras instituciones públicas, reconocemos la existencia de un patrimonio humano y natural común que ha de ser preservado para las generaciones venideras. Cada localidad debe de actuar como guardián de sus aguas y establecer principios para controlar el uso de tan preciado recurso.
12. Creemos que este recurso vital no debe convertirse en una mercancía que se pretende vender al mejor postor, y que el acceso al agua potable para cubrir nuestras primeras necesidades constituye un derecho humano fundamental. Cada generación debe cerciorarse de que sus actividades no empobrezcan la abundancia y la calidad del agua. No se puede escatimar esfuerzos para restablecer la salud de los ecosistemas acuáticos que ya están deteriorados, ni para proteger a los que aún no han sufrido daños.
13. No hay "arreglo" posible para un planeta en el que se ha agotado el agua. Es un Recurso Que No Es Inagotable. Se suele pensar que el caudal del agua es tan magno como infinito. Este razonamiento es falso. Lo más importante es recordar que se trata de una fuente limitada.
Página siguiente |