- Perfil del animador
- Uso del silbato
- Planilla de juegos
- El secreto de jugar
- Condiciones para la dinámica grupal
- La autoestima
- La madurez personal
- El camino de la madurez
- El proyecto de vida
- El seguimiento de Jesús
- ¿Qué hubo desde los Apóstoles hasta nosotros?
- Proceso personal- necesidades básicas
- Características de la adolescencia
- El desarrollo cognitivo adulto
- El mundo del adolescente
- Jesús se relaciona con el pueblo y las multitudes
- Personalidad y desarrollo moral
- Siguiendo la acción animadora de Jesús
Animar: Es un término que proviene de "anima" (alma), por lo que podríamos identificarla con la acción de dar vida, la esencia que contiene es dadora de vida.
Para comenzar vamos a profundizar un poco más en lo que entendemos por "animación", fundamentalmente vamos a definir esta función como una función EDUCATIVA. Que intenta promover personas comprometidas y maduras. Esto exige también, por lo tanto, que el animador lo sea.
Perfil del animador
Tratará de reflejar en su vida las siguientes actitudes y valores:
- Actitud de escucha, acogida y apertura constante, que lo dispongan para un conocimiento de su grupo.
- Actitud de comprensión y capacidad de valorar los logros y aportes de cada uno en particular.
- Testimonio alegre, entusiasta y esperanzado. Predicador con su vida y sus palabras.
- Actitud de paciente espera que lo lleve a respetar los ritmos de maduración y crecimiento de cada uno.
- Ser vínculo de comunión entre el grupo y la congregación.
- Ser compañero y amigo de los integrantes del grupo, sin perder su identidad propia de animador.
- Actitud responsable frente al compromiso.
- Coherente con todas las esferas de su vida (apostolado, familia, estudio, amigos), confrontándolo siempre con la palabra de Dios y la realidad.
- En dialogo constante con Dios y los hermanos.
- Su símbolo geométrico es la circunferencia: sillas en círculo, todos iguales, todos en el mismo plano. Lo que importa, por tanto, no son las relaciones con el animador, sino las relaciones de todos con todos.
- El buen animador no se siente satisfecho por sentirse querido, aceptado, respetado, sino que se preocupa, porque todos se acepten mutuamente, se respeten y se quieran.
- El animador sabe colocarse en segundo plano y no hace que todo el grupo dependa de sus opiniones y de sus decisiones. Anima, coordina, pero no manda. Convierte al grupo en el protagonista de su propia vida.
Nota : Un animador siempre tiene "una carta bajo la manga"
Y nunca olvida que: El jefe maneja a los demás, pero un verdadero animador, los guía. El jefe depende de su autoridad, pero un verdadero animador, de la buena voluntad. El jefe inspira miedo, pero un verdadero animador, entusiasmo. El jefe manda que sean puntuales, pero un verdadero animador, llega antes de tiempo. El jefe sabe a quién echarle la culpa, pero un verdadero animador, ayuda a solucionar los problemas. El jefe sabe cómo se realizan las cosas, pero un verdadero animador, enseña cómo se hacen. El jefe hace del trabajo una pesadilla, pero un verdadero animador, hace de la labor una diversión. El jefe dice YO, pero un verdadero animador, dice NOSOTROS.
Uso del silbato
Es muy importante llevar un silbato de manera que favorezca la comunicación. Este método en espacios reducidos en incoherente pero en un campo tratando de dar ordenes a 100 metros de distancia del grupo de usarlo es de orden.
Uso:
El silbato se usa para crear un clima de silencio. Es además un punto de referencia en cualquier sitio.
Nota:
El silbato será utilizado solo por los animadores, esto es porque al darle el silbato a alguien que no sea animador o no lo use de la forma correcta pedrera autoridad en el grupo, salvo excepciones.
Herramientas para la animación
PLANILLA DE JUEGOS
- DIVERSIDAD DE JUEGOS
Página siguiente |