- Introducción
- Resumen general del texto
- Resumen del expediente de Hoffman
- Argumentos del Tribunal para condenarlo
- Argumentos a su favor
- Conclusiones
- Opinión personal
Introducción
En el derecho penal, un abogado debe estar dispuesto a defender a cualquier persona que haya sido imputada, ya sea que este sea culpable o inocente, porque si solo acepta los casos de los que considera inocentes está perdiendo más de la mitad de su posible clientela, para poder defender a esta persona no solo debe tener un conocimiento amplio de las leyes, sino tener por lo menos las bases de las ciencias que se pueden ver involucradas en cualquier caso jurídico como la física, química, psicología, psiquiatría, criminalística, etc. O estar dispuesto a aprenderlas a través de un pequeño pero intensivo curso, para poder tener algunos argumentos claves en la defensa de su cliente, sobretodo lo más importante es la dedicación y el empeño que le ponga a solucionar los problemas jurídicos que se le planteen aunque para poderlo solucionar sea necesario estar consumido en esto por horas, días y hasta meses teniendo que dejar un poco de lado algunos otros placeres que después de solucionado el caso serán bien merecidos.
Aunque en las cárceles hay muchos prisioneros que se consideran inocentes es muy difícil a simple vista o a través de una somera revisión de su expediente llegar a saber si en realidad lo es o no, pienso que si se habla de abogados desempleados, estos se podrían dedicar a tratar de resolver los casos de aquellos que se consideran inocentes o que se pueda demostrar su inocencia y que lleven varios años en la cárcel pues si se llega a ganar el caso puede obtener una buena remuneración de la indemnización que se le pueda exigir al estado por los daños causados a esta persona que tuvo que soportar tanto tiempo privado se su libertad injustamente.
LA MOSCA TEJE UNA TELA DE ARAÑA
Resumen general del texto
Leibowitz era tal vez el mejor abogado penalista de Nueva York en 1.929, en cierta ocasión viendo su agenda un poco floja, pensaba en tomarse unas vacaciones, cuando revisando su correspondencia encontró un mensaje de un tal Harry Hoffman, quien le pedía ayuda para que lo defendiera en su caso, pues había sido condenado injustamente y ya llevaba 5 años en la cárcel de mínimo 20, y ya no tenía dinero para pagar más abogados. Leibowitz tal vez por curiosidad fue a entrevistarse con Hoffman y tras una conversación con este tuvo una buena impresión del caso por lo que decidió tomarlo; se entero de todo el expediente, estudio los pro y los contra y luego de tener todo preparado lo llevo a la corte refutando todos los argumentos en su contra que eran basados solamente en pruebas circunstanciales creada por el mismo Hoffman y en falsos testigos, gracias a lo convincente de sus argumentos pudo demostrar la inocencia de su cliente.
Resumen del expediente de Hoffman
El 25 de marzo de 1.924, Magda Bauer de 35 años viajaba en su automóvil con su madre e hija, cuando para darle más espacio a un camión grande que venía en sentido contrario se salió de la carretera y se atasco debido a lo blando del terreno, por lo que decidió dirigirse sola a una de las casas vecinas para de allí llamar a pedir el servicio de grúa, pero en el trayecto un señor que conducía un Ford sedan se ofreció llevarla hasta una oficina de servicio de grua, menos de una hora después ya se sabía de la muerte de Magda producto de dos disparos con arma de fuego, al parecer después de haber batallado según los morados en su cuerpo.
Gracias a una niña que se encontraba en el lugar que Magda se subió al Ford sedan se pudo obtener una descripción física del presunto homicida, la ropa que llevaba puesta y las características de las gafas que usaba, por los casquillos encontrados en lugar de los hechos se sabía que clase arma se había utilizado; con todos estos datos que fueron rápidamente difundidos se procedió a la búsqueda de los posibles sospechosos entre los que encajaba perfectamente Harry Hoffman, quien al darse cuenta de esto, desesperado por lo que le pudiera pasar, oculto su arma e invento una coartada, por lo que fue tomado como el principal sospechoso y junto con la declaración de falsos testigos fue condenado a prisión de 20 años a cadena perpetua.
Argumentos del Tribunal para condenarlo
Concordancia entre la descripción de pertenencias del presunto homicida y Hoffman: abrigo café, sombrero café, anteojos de carey, vehículo Ford sedan y pistola colt automática calibre 25.
Identificación por parte de dos testigos:
Barbara fash: de 13 años quien lo vio cuando se detuvo a recoger a la victima.
Patrullero Mateo McCormack: lo vio cuando paso por una avenida cerca del lugar de los hechos, inmediatamente después de ocurridos, en un Ford sedan a muy baja velocidad.
Falsa coartada; dijo:
Haber ido a visitar a su agente bursátil, pero este no recordó haberlo visto ese día.
Haber ido a comer a un restaurante chino, pero ninguno de los meseros lo reconoció.
Haber navegado en un bote, pero nadie lo vio
Haberse visto con un amigo, pero este lo negó.
Haber ocultado su arma: inmediatamente después del homicidio, envió por correo el arma a su hermano.
Afirmar no conocer el lugar de los hechos: fue desmentido por dos de sus compañeros de trabajo: Whittet y Edkins, quienes afirmaron que Hoffman si conocía o al menos sabia de este lugar.
Testimonio de un experto balista que reconoce el arma de Hoffman como el arma homicida: afirmó que después de disparar cincuenta tiros y comparar las marcas, concordaban con la de la bala que había sido encontrada en el cuerpo de la víctima.
Argumentos a su favor
Testigos identificadores no fiables:
Barbara Fash declaro en las primeras dos oportunidades no haber reconocido en Hoffman al mismo sujeto que había visto el día del homicidio, después, tras varias entrevistas con el capitán a cargo de la investigación, cambio de opinión.
El patrullero McCormack solo se presento a declarar un mes después de ocurridos los hechos y de ser enviado por el fiscal.
Testimonios no fiables de sus compañeros de trabajo
Whittet quien estaba condenado a prisión, luego de declarar en contra de Hoffman, recibió el beneficio de libertad condicional.
Edkins admitió haber sido golpeado y presionado para declarar en contra de Hoffman, además de no declarar que había visto los anteojos de carey de Hoffman en el lugar de trabajo.
Dos testigos afirmaban haber visto a otro sujeto con las mismas características del sospechoso, se trata de Horacio Sharret, político influyente de la zona donde se cometió el homicidio, al cual el fiscal parecía encubrir, pues ordeno a un patrullero no molestarlo
Declaración de Horacio Sharret, el otro sospechoso, de haber estado cerca del lugar de los hechos inmediatamente después de ocurridos.
Error del experto balista que aseguraba que el arma de Hoffman había sido el arma homicida: los miembros del jurado comprobaron con sus propios ojos que las marcas dejadas por el arma homicida en los casquillos encontrados cerca de la escena del crimen, no coincidían con las marcas dejadas en los casquillos por el arma de Hoffman, además según un perito, las características del cañón del arma homicida, según los rastros dejados en la bala, era de estar áspero o enmohecido que no concordaba con las características del arma del imputado y que el cepillo de alambre que presentaron como aquel con que Hoffman había limpiado y aceitado su arma después del homicidio, en realidad nuca había sido tocado por aceite alguno.
Miedo cerval de Hoffman de ser linchado por la comunidad o martirizado por las autoridades al ser tenido por sospechoso, lo que lo llevo en su desesperación a idear una falsa coartada, a decir mentiras que al final solo a el mismo habían perjudicado.
Demostración de que el asesino había disparado con la mano derecha y que Hoffman era zurdo.
Conclusiones
Muchas veces juzgamos a las persona no por lo que en realidad son o hacen, sino por lo que se puede observar de esta a simple vista, sobre todo cuando tenemos un concepto preestablecido de las características que deben tener ciertas personas.
Del derecho al igual que de la mayoría de las ciencias no podemos nunca llegar a decir que ya sabemos todo lo necesario para defendernos perfectamente en esta disciplina, el derecho que ha sido enfocado básicamente en la solución de conflictos a favor de quien nos contrate pero cuando vayamos a hacerlo de la mejor manera, descubriremos que en este proceso debemos esforzarnos por aprender las artes o ciencias que requiera el caso para poder argumentar de la manera más convincente la defensa del cliente, pues quien se conforma con el solo conocimiento de las leyes solo servirá para hacerle la vida mas fácil a aquellos que si se preocupan por aprender a demostrar lo que sea necesario en el desarrollo de su actividad.
La dedicación y la constancia siempre deben estar presentes en todos los proyectos que emprendamos si queremos alcanzar los objetivos propuestos, además debemos fijar una estructura, una organización de las actividades necesarias para llegar a tal fin e irlas controlando a medida que las vamos ejecutando.
El miedo es una de las circunstancias en que puede llegar a ser permitido hasta cierto punto la realización de actos que pueden ir en contra de las normas, pero a pesar de esta justificación, en cualquier situación de miedo, si es posible debemos buscar ayuda, asesoría para poder superar o remediar este miedo antes de que sigamos cometiendo actos que nos perjudiquen más.
Opinión personal
El triunfo de Leibowitz en este caso se debe principalmente a su amplio conocimiento de las leyes y al empeño y dedicación que le puso a resolverlo partiendo de una situación en que se tenían todas las pruebas en su contra aunque fueran circunstanciales pero que gracias a su entereza fue rebatiendo una a una sin importar que para ello haya dedicado gran cantidad de tiempo
El ser buen, regular o mal abogado no depende de nadie más que de uno mismo, no debemos echarle la culpa de nuestra mala preparación a la universidad, a los profesores o a cualquier otro factor externo, pues esto depende solamente del empeño que se le ponga en aprender todo lo que necesita un estudiante para convertirse en un buen abogado.
Pienso que por trabajo en este país no debería preocuparse un buen abogado, pues son muchas las injusticias que se cometen a diario contra las personas ya sea por parte de otras o del estado, como en el caso del señor Hoffman que por la necesidad de las autoridades de encontrar un culpable, ya sea porque no se deteriore su imagen, para calmar el pueblo o por el interés de ganar una recompensa anunciada por la captura del homicida, se le violaron sus derechos; así como este son muchos los casos que se ven en nuestro país.
El señor Hoffman fue víctima de esas situaciones en las que no se puede hacer gran cosa, ya que todas las sospechas apuntan hacia uno, en este caso lo que uno debe hacer no es actuar según sus instintos sino buscar la ayuda de la asesoría necesaria.
Autor:
Javier Tarache Pidiache
UNIVERSIDAD AUTONOMA DE BUCARAMANGA
DERECHO DIURNO PRIMER SEMESTRE
INTRODUCCION AL DERECHO
YOPAL
2010