El Trabajo y su Importancia en el Desarrollo Psicosocial del Sujeto

Introducción

La realización del siguiente trabajo responde a los requerimientos de la cátedra de "Elementos de Psicología General y Social", a fin de confeccionar un trabajo final integrador de toda la propuesta académica desarrollada durante el cursado de la misma. La temática que involucra la elaboración de este trabajo corresponde a la Unidad 3 del programa Analítico de la materia: Sistemas Sociales, y contiene temas como "Institución y Organización", "Identidad y Estructura de las Organizaciones", "Díadas y transversalidad de las instituciones", "Dinámica instituido-instituyente", "Socialización Laboral", "Contrato Psicológico" y "Desarrollo de rol".

Dado que, la propuesta de este trabajo se basa en el análisis (a la luz de la bibliografía establecida por el programa) del material y de datos extraídos de una entrevista –elaborada con el fin de que ofrezca información que pueda contribuir a dicho análisis-, decidimos que el corpus del trabajo esté conformado de la siguiente manera, en primer lugar explicitaremos el marco teórico en el que se basa el desarrollo de nuestra producción, en concomitancia con el material teórico ofrecido por la cátedra; en segundo lugar transcribimos la entrevista realizada, a posteriori el respectivo análisis y su fundamentación, y por último nuestra conclusión.

Marco teórico

Podemos afirmar que el fenómeno del trabajo es complejo y multifacético, y es por ello que ha sido abordado desde distintas disciplinas, Derecho, Psicología, Sociología, Economía, Política, Historia, Antropología, Medicina, etc. El interés de estas disciplinas en el trabajo se debe a la importancia que este tiene en el desarrollo de la sociedad y en la vida de las personas adultas que dedican una tercera parte de su tiempo a actividades laborales o a actividades relacionadas con su trabajo. Además, junto con la familia y el tiempo libre constituye uno de los tres pilares fundamentales de nuestra vida.

La psicología, como ciencia, se ocupa del estudio de la conducta humana por lo cual su eje de estudio se centra en un aspecto muy particular, el "hacer", el "accionar".

El hombre tiene la capacidad de transformar la naturaleza y su relación con la naturaleza está establecida por el trabajo cuyo producto preexiste en su conciencia antes de producirlo. En función de ello, podemos decir que la psicología general y social como una ciencia aplicada de carácter social, también tiene como eje al hombre en su medio laboral, e intenta explicar los complejos procesos psicológicos que se desencadenan en su interdependencia con el trabajo.

¿Cómo adquirimos el conocimiento del trabajo?

Normalmente el conocimiento del trabajo se adquiere a partir de las experiencias laborales y de las informaciones y modelos culturales que se reciben desde la sociedad por medio de la educación y la comunicación, a través de diversos agentes sociales (la familia, la escuela, la prensa, las empresas, etc.).(Peiró y Prieto, 1996)

Por lo tanto, el trabajo tal y como lo estamos viendo adquiere distintos significados como resultado del conocimiento sobre una parte de la experiencia realizada socialmente, elaborada y compartida. (Salanova, Prieto y Peiró, 1993).

Podemos afirmar, por tanto, que el trabajo está sociocognitivamente construido.

Cabe decir que, en el ambiente en el que se desarrolla o tiene lugar el trabajo, es un ambiente laboral, este ambiente no es exclusiva ni primordialmente de carácter físico y natural, de hecho hay numerosos elementos dentro del mismo, cuya naturaleza es eminentemente social (supervisores, compañeros de trabajo, etc.) además existen otros componentes que aun presentando una base física e incuestionable sólo cobran sentido en un marco social y en un sistema de interpretaciones sociales, entonces no sólo cabe hablar de ambiente laboral (social) en términos de sus elementos constitutivos, sino que tendremos en cuenta la interacción que se produce entre la persona y su ambiente. Esta interacción da lugar a un ambiente subjetivado y construido.

Tomando en cuenta los diferentes modos espacio-temporales que pueden adquirir estas interacciones, podemos decir que son las que definen la estructura del sistema u organización. Podemos diferenciar dos tipos de ella: las estructuras conservadoras y las estructuras innovativas. ( Etkin, Jorge y Schvarstein,Leonardo, 1992-cap 5))

A su vez, estos modos de relación son estructurantes del comportamiento, quiere decir, el clima organizacional son las percepciones, impresiones o imágenes que de la realidad organizacional tienen los propios integrantes y que influyen sobre la conducta individual y grupal.