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La noche octosilábica; panorama de la décima escrita en Holguín (1862-2003) (página 5)


Partes: 1, 2, 3, 4, 5

61. – Hernández Menéndez, Mayra: Recado para Jonás; Sobre

el discurso femenino en la décima para niños en Cuba.

Ciudad de La Habana, Editorial Gente Nueva, 2001.

62. – Iglesias Infante, José: De mi patria y de mi amor. Pról.

Arsenio Roa Uriarte. [La Habana, Empresa Editora de

Publicaciones, 1950]

63. -Infante Miranda, María Elena y Maricela Messeguer Mercadé:

Los senderos de la luz; aproximaciones al estudio de la

poesía holguinera (1927-1989). Holguín, Ediciones

Holguín, 2000.

64. – Isla, Antonio: Frente al silencio. Pról. Mercedes Pinto. La

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65. -_________________: Poemario íntimo. La Habana, 1937.

66. – Labrada, Agustín: Viajero del asombro. Holguín, Ediciones

Holguín, 1991.

67. – Lauro Pino, Alberto: Acuarela. Col. Premio de la Ciudad.

Holguín, Ediciones Holguín, 1990.

68. – ________________: Los tesoros del duende. Col. Premio de

la Ciudad. Holguín, 1987.

69. – López Lemus, Virgilio: Décima e identidad; siglos XVIII y

XIX. La Habana, Editorial Academia, 1997.

70. – ____________________:"Décimas Labradas" en Diéresis

(Holguín), Año 5, #2, julio- diciembre 1997, pp. 187-

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71. – ______________________: Doscientos años de poesía

cubana (1790- 1990); cien poemas antológicos. Ciudad

de La Habana, Casa Editora Abril, 1999,

72. – _____________________:"El Indio Naborí y la renovación

de la décima popular cubana", en Revista de Literatura

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1995 – jun. 1996, pp. 124-129.

73. -: _____________________: La décima; panorama breve de la

décima cubana. La Habana, Editorial Academia, 1995.

74. – ______________________: La décima constante. Ciudad de

La Habana, Fundación Fernando Ortiz, 1999.

75. – ____________________: Samuel o la abeja. Ciudad de La

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76. – Luciano Torres, Antonio: Horas propicias. Holguín, 1924.

77. – Mayo Montero, Aleyda. Notas sobre la cultura en el municipio

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78.- Mariscal, Beatriz: Romancero general de Cuba. México, El

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79. – Méndez, Luis Augusto: Del vergel interior. Manzanillo,

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80. -_____________________: Guardalavaca, playa incomparable.

Holguín, 1960.

81. -_____________________: Trémulos pétalos. La Habana,

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82. – Menéndez Alberdi, Adolfo: La décima escrita. La Habana,

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83. – Monografias culturales de los municipios Gibara y Mayarí.

Investigaciones inéditas.

84. – Morffe, Freddy Camilo: Arpa y hoguera. Bilbao, Eguzki

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85. – ___________________: En la catedral del tiempo. Antología

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86. – Navarro, Tomás: Métrica española. La Habana, 1966.

87. – Nápoles Fajardo, Antonio: El sitio de Holguín. La Habana,

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88. – Ochoa Romero, Quintín: Desfamilia. Inédito.

  • 89- Orta Ruiz, Jesús: Décima y folclor. La Habana, Ediciones

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90. – Ortiz Rodríguez, Emilio: Ley de consecuencia; Manifestación

de ultratumba. Holguín, 1947.

91. – Pérez López, Antonio: Himnario escolar. Gibara, Imprenta

Personalidad, 1954.

92. – __________________: Mis versos. Holguín, Imprenta La

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93. – __________________: Prontuario poético geográfico; la

geografía de Cuba en versos. Gibara, Imprenta

Personalidad, 1954.

94. – Pérez Sierra, René: Palabras de ausencia y otros poemas.

Holguín, [1952?].

95. – Ponce de León, Miguel Angel: Albores. Santiago de Cuba,

Imprenta La Moderna Poesía, 1919.

96. -_______________: Clarinada patriótica. Holguín, Imprenta El

Arte, 1921.

97. – ______________: Los monstruos que acechan. Manzanillo,

1951.

98- ______________: Ritmos del cautiverio. Pról. Dr. Emilio del

Barrio. Holguín, 1937.

99. – Poncet y de Cárdenas, Carolina: El Romance en Cuba. La

Habana, Instituto Cubano del Libro, 1972.

100. –Poesías completas de Juan Cristóbal Nápoles Fajardo (El

Cucalambé). Pról. de Jesús Orta Ruiz (Indio Naborí). La

Habana, Ed., Arte y Literatura, 1974.

101- Pozo, Daer: Elogio del caminante. Col. Premio de la Ciudad.

Holguín, Ediciones Holguín, 1990.

102. – ____________, Arsenio Valdés Bruceta y María Josefa Re-

yes: Fiesta de espinelas. Antología mínima. Holguín,

Ediciones Holguín, 1993.

103. – Provincia del Universo; selección de poetas holguineros.

Selec. y pról. Lourdes González Herrero. 2 Tomos.

Holguín, Ediciones Holguín, 1993.

104. – Ramos Caballero, Luis: Alborear campesino. Holguín,

Ediciones Holguín, 2001.

105. – Reyes, León de León: Flores de mi huerto. Mayarí, 1947.

106. – Rivero Tamayo, Guarina: Arpegios; poesías. Introd. Octavio

Vidal Avilés. Holguín, 1945.

107. -________________: Por el sendero. Pról. Miguel Angel Ponce

de León. Holguín, 1933.

108. – Rodríguez Serrano, Ramón M.: En el lugar de los que

aman. Antología mínima. Holguín, Ediciones Holguín,

1990.

109. – Rondas de la bahía; Antología de literatura para niños.

Holguín, Ediciones Holguín, 1991.

110. – Sánchez Corrales, Reina: Una mujer terrible. Plaquette.

Santiago de Cuba, Editorial Oriente, 1992.

111. – Serrano Santiesteban, Agustín: Instantes en la memoria.

Antología mínima. Holguín, Ediciones Holguín, 1995.

112. – ___________________: Sitios de la voz. Pról. Waldo

González. Las Tunas, Editorial Sanlope, 1997.

113. – Serrano Serrano, José Luis: Aneurisma. Col. Premio

Fundación de la Ciudad de Santa Clara. Santa Clara,

Editorial Capiro, 1999.

114. – _______________: Bufón de Dios. Holguín, Ediciones "La

Luz", 1997.

115.- _______________: Examen de fe. Las Tunas, Ed. Sanlope,

2002.

116.- _______________ y Ronel González: La resaca de todo lo

sufrido. Santa Clara. Ed. Capiro, 2003.

117.- Silva, Oscar: Intermitencias. Pról. Max Henríquez Ureña.

Banes, 1924.

118. – Suárez Caamal, Ramón Iván: "Todos podemos ser viajeros

del asombro", en: Agustín Labrada Aguilera: Viajero del

asombro. Chetumal, Gobierno del Estado de Quintana Roo,

1997, pp. 9-10.

119. – Suárez Silva, Jaime: Valores orientales. La Habana, 1930.

120. – Tamayo, Carlos: Invitación a la búsqueda en torno a Manuel

Nápoles Fajardo. Las Tunas, Sección de Literatura, 1988.

121. – Tamayo, Carlos: La poesía de El Novel. Las Tunas, Editorial

Sanlope, 2000.

122. -_______________: Réquiem por una oveja negra. Las

Tunas, Editorial Sanlope, 1993.

123. – Tamayo Muñoz, Orlando: Canción de juventud; versos y

poemas. Pról. Guarina Rivero Tamayo. Holguín,

[1947?].

124. -Vaillant Luna, Mario: Mayarí; recopilación histórica. Mayarí,

1950.

125. – Valdés Bruceta, Arsenio: A la vuelta del tiempo. Holguín,

Imprenta Municipal de Cultura, 1988.

126. – _________________: Una historia por contar. Holguín,

Ediciones Holguín, 1991.

127. – Vázquez de Zayas, Agustín: Prosas y versos. Holguín,

Imprenta Dominicis, 1932.

128. – Vega Suñol, José: Región e identidad. Holguín, Eds. Holguín,

2002.

129.- Victori Ramos, María del Carmen: "La poesía tradicional de

realización oral", en: Cuba: expresión literaria oral y

actualidad. Ciudad de la Habana, CIDCC "Juan Marinello"

y Editorial "José Martí", 1998.

130. – Vitier, Cintio: Lo cubano en la poesía. La Habana, Instituto

del Libro, 1970.

Anexos

ANEXO 1

"EL JAZMIN DE MI VENTANA"

Por: Adelaida del Mármol Ballagas (1838-1857)

Lindo, esbelto, delicado,

con ramajes de esmeralda,

es bellísima guirnalda

a mi reja entrelazado:

de flores mil esmaltado

lo miro cada mañana,

suaves perfumes emana

de sus pétalos de nieve,

y dulce mi alma conmueve

el jazmín de mi ventana.

Cuando risueña aparece

velada en gasas la frente,

el alba allá en el oriente

y suave fulgor ofrece,

cuando el cielo se embellece

con las sonrisas que emana

su faz de zafir y grana,

antes que Febo la abrume,

voy a aspirar el perfume

del jazmín de mi ventana.

Para él lágrimas la aurora

vierte en cascada de perlas,

y va el céfiro a beberlas,

con languidez seductora;

esta planta encantadora

nacida en la tierra indiana,

aunque púrpura galana

no tiñe su blanca frente,

inspira más a mi mente

el jazmín de mi ventana.

Cuando la luna apacible

con sus rayos le ilumina,

mi débil frente se inclina

sobre su ramo flexible,

y mística, indefinible,

felicidad sobrehumana,

de los ángeles hermana,

a mi alma infantil desciende,

porque entonces me comprende

el jazmín de mi ventana.

Por no causarle dolores

nunca adorné mis cabellos

con esos ramos tan bellos

que forman siempre sus flores;

y a los divinos albores

con que hermosa se engalana

del trópico la mañana,

con celestial embeleso

en cada pétalo beso

al jazmín de mi ventana.

Flores atesora Abril

de suavísimos olores,

ricas en forma y colores

siendo gala del pensil:

mas nunca lucieran mil

con su hermosura temprana,

camelias, mirtos y liana,

rosa, clavel y amaranto

no tienen el dulce encanto

del jazmín de mi ventana.

Cuando descanse yo un día

en la mansión solitaria

que se escuche una plegaria

en torno a la tumba mía:

allí en la lápida fría,

fin de esta existencia vana

do la vestidura humana

para siempre allí reposa,

¡qué crezca sobre mi losa

el jazmín de mi ventana!

(Tomado de Feijóo, Samuel: La décima culta en Cuba, pp.220- 221).

ANEXO 2

"EL LUNAR DE LUISA", (Glosa)

Por: Juan N. Valdés.

Ese lunar bella Luisa

Vale un mundo, vale dos;

Vale cuanto se divisa

Entre los hombres y Dios.

De intenso placer colmado

Bendigo al omnipotente

Porque quiso inteligente

Formarte para dechado.

El mismo quedó estasiado

Al ver tu grata sonrisa

Pues le puso por divisa

En tu hermosisima cara

Para admirarte más rara

Ese lunar bella Luisa.

Tan solo el pincel divino

Pudo, Luisa, bosquejar

El conjunto singular

De tu rostro peregrino.

Ese lunar de contino

Hacia ti me leva en pos;

Por eso bendigo á Dios

Cuando miro entusiasmado

Ese lunar que apreciado

Vale un mundo, vale dos.

Tantas galas virgen pura

Que tu beldad atesora

¿Qué pecho, dime, no adora

Con ardorosa ternura?

Nada fuera tu hermosura

Sin tu lunar Bella Luisa

Y si lo anima tu risa

De afavilidad modelo,

Entre la tierra y el cielo

Vale cuanto se divisa.

¡Ay Luisa! por un instante

tener la dicha quisiera

de ese lunar que se esmera

al pasar tu rostro amante!

Fuera mi dicha triunfante

Si te diera un beso, dos,

Porque más aprecio en vos

Esa célica hermosura

Que cuanto encierra natura

Entre los hombres y Dios.(Sic)

(Tomado de El Oriental, # 3, 5 de junio de 1864).

ANEXO 3

"PIENSO EN TI"

Por: José J. Romeu

Y aun en los brazos del sueño

Me pongo a pensar en ti.

Zenea

Me tienes aquí alma mía

Contemplando mis congojas

Con el rumor de las hojas

Y mi soledad sombría.

En esta región vacía

Donde habito tristemente

Llega la noche imponente

Que hace meditar al mundo,

Y en mi aislamiento profundo

En ti pienso solamente.

Me entristece la tojosa

Con su misterioso canto

Y el recuerdo de tu encanto

La vida me muestra hermosa.

Me interno en la selva umbrosa

A sentir y á meditar

Oigo el lánguido cantar

Del alegre campesino

Y entregado a mi destino

En ti me pongo a pensar.

Con bello trino el zorzal

Llama su consorte ausente,

Fija su vista impaciente

En el bosque, en el rosal.

En sus ojos de coral

Se ve la melancolía,

Recuerda que allí existía

De su placer el poéma,

Y al contemplar yo este emblema

En ti pienso vida mía.

Cuando el sol en su carrera

Vá á descansar en su ocaso,

Me voy con callado paso

Al recinto de mi hera.

Veo tu imagen por doquiera

Errante bella y sin mí,

Me quedo dormido así…….

En un insomnio risueño,

…Y aun en los brazos del sueño

me pongo a pensar en ti. (Sic)

(Tomado de El Periquero, 27 de septiembre de 1885).

ANEXO 4

"EL COMBATE DE BÁGUANO"

Por: Fernando Figueredo

Con el alma destrozada,

lejos de ti vida mía,

por esta difícil vía

voy siguiendo mi jornada:

con la ropa desgarrada

y los piés ensangrentados,

marcho con otros soldados

de la Santa Independencia

castigando la insolencia

de tiranos y malvados.

Vamos, por fin, á acampar:

¡Oh! Que gran satisfacción

se siente en el corazón

cuando se va a descansar!

Mas… acaba de sonar

un tiro allá en la vigía,

Es, sin duda algún espía

Que nos estaba escuchando:

Voy á mi puesto volando,

¡y pienso en ti madre mía!

El fuego de la avanzada

Ya nos empieza a indicar

Que tendremos que luchar,

Sin pensar en retirada.

La gente está entusiasmada;

Y como tropa aguerrida,

Desprecia toda guarida

Y al campo raso se lanza:

Y á los gritos de venganza

¡pienso en tí, madre querida!

Ya dentro del campamento

Se introducen los soldados:

Fuego se oye á todos lados,

Que no cesa ni un momento:

Mientras sus pliegues al viento

Suelta la enseña estrellada,

Á bayoneta calada,

Nos atacan fieramente……

¡Y en tanto, siempre en mi mente

te llevo, madre adorada!

Nosotros, machete en mano,

Atacamos con destreza,

Humillando la fiereza

De los siervos del tirano:

Ya el corneta del hispano

Nos anuncia retirada,

Ya en fuga precipitada

Se declaran al instante:

Y al gritar "¡fuego!" "¡adelante!"

Pienso en tí, ¡madre adorada!

¡Oh cuánta desolación!

¡qué escena tan espantosa!

¡tanta sangre generosa

me desgarra el corazón!

En esta gran confusión

y entre tanta algarabía,

hago yo mi puntería,

y al salir del rifle el tiro

se me ha escapado un suspiro

¡pensando en tí, madre mía!

Nos han muerto un coronel,

Patriota de gran valor

Que su vida con honor

Perdió por su patria, fiel.

En la situación más cruel

deja á su madre adorada

y á su esposa idolatrada:

¡gran Dios! ¿Cuál será el destino

que encontrará en su camino

esa madre desgraciada?

Si algún día me cupiere

la misma suerte que a él

y por ceñirme un laurel

en la luche pereciere,

medita en cuanto se quiere

el que á lo grande coadyuva,

alza una oración que suba

y se remonte hasta el cielo

por quien murió en este suelo

por la libertad de Cuba…!

Tomado de Martí, José: Los poetas de la Guerra. Imprenta América,

New York, 1893, pp. 108-113.

ANEXO 5

"GEMIDO DE BANDURRIA"

Por: Oscar Silva

I

Patria, con hondo latir,

– mezcla de risa y de llanto-

lanza mi lira su canto

para gozar y sufrir.

Goza, porque al revivir

en la estrofa soberana

aquella heroica mañana

de la "Demajagua" ingente,

vibra en su arco el torrente

de la indómita campana.

II

Sufre, porque al despertar

de este nuevo diez de octubre,

barre el polvo que la cubre

con un treno de pesar;

porque no es el luminar

de aquel día esplendoroso,

aquel en que el sol radioso

abrillantando la rota

besó la frente al patriota

del empuje portentoso.

III

Goza, porque registrando

el tono sus cuerdas de oro,

repite el eco sonoro

de los clarines cargando.

Contempla el criollo bando

en impetuoso tropel,

al blanco y al negro fiel

juntos en la audaz carrera,

y en el centro una bandera

y al frente Carlos Manuel.

IV

Pero se estremece y llora,

sus débiles notas gimen,

porque se forja algún crimen

en esta indecisa hora;

la melancólica aurora

hoy es nuncio de maldad,

se cierne la falsedad

encima de la virtud

y avanza la esclavitud

vestida de libertad.

V

Goza mi lira y se baña

en luz de dicha infinita

viendo la enseña bendita

sobre el Morro y la Cabaña.

En su altura la acompaña

el amor y el patriotismo

de los que al torpe egoísmo

oponen su resistencia

por salvar la independencia

de la atracción del abismo.

VI

Se apesara al distinguir

en este ambiente nublado

un escudo mal borrado

tras un velo de zafir.

El incierto porvenir

envuelve a Cuba con maña,

se amarga su dulce caña,

se arruina su rica hoja,

y se escucha su congoja

bajo la presión extraña.

VII

Goza, empero, y se contenta

ante el Libro de la Historia

do resplandece la gloria

de la epopeya sangrienta.

Sus anales hoy sustenta

la majestad de la ley,

la fuerte cubana grey

a su recuerdo se inflama,

y arde en su pecho la llama

del patriotismo de Hatuey.

VIII

Sufre porque en este día,

bajo el polvo del pasado,

ve las sombras de Machado,

Roloff, Maceo, Mayía,

de Moncada, de García,

Martí, Gómez, Agramonte,

y ve desde el alto monte,

con rumbo al cubano suelo,

un águila en raudo vuelo

dominando el horizonte.

IX

Mas no hay que temer al mal

ni que se apague la estrella:

salvará a Cuba la huella

del GIGANTESCO ORIENTAL.

A los pies del ideal

caerá el fantasma siniestro.

Pondremos al lado nuestro,

para que la postre venza,

del Bayardo la vergüenza

y la virtud del MAESTRO.

X

Canta, lira, deja el llanto,

haz que tu concepto vibre

y dale a mi tierra libre

toda tu alma en un canto.

Bajo su estrellado manto,

porque el cubano siquiera

logre, al cabo, cuando muera

con patria sola sin amo,

tener en su tumba un ramo

de flores y una bandera.

Tomado del libro: Intermitencias. Banes, 1924, pp. 46-51.

ANEXO 6

"MI SON RETOZON" (EL TREN DE LA VIDA)

Por: Faustino Oramas (El Guayabero)

Es la vida un tren expreso

que recorre leguas miles,

el tiempo son los raíles

y el tren no tiene regreso.

En el se embarcan por eso

el viejo, el nuevo y el serio,

el vivo, el del Ministerio

y el tren a todos complace

y en las paradas que hace

los deja en el cementerio.

Como es el tren de la vida

el viaje no tiene fin

y se extiende el boletín

tan solamente de ida.

Cuando uno hace su partida,

que es a gran velocidad,

leva la conformidad

desde que sube al andén

que va a viajar en un tren

con rumbo a la eternidad.

En él se embarcan señores,

premieres y mariscales,

ministros y generales,

reyes y emperadores;

los papas y los doctores

potentados con dinero,

cuando llega un paradero

que le llaman Camposanto

allí les tiende su manto

de tierra el sepulturero.

La diferencia del viaje

en ricos y pordioseros

consiste en que los primeros

llevan mejor equipaje,

pero el que a la tierra viaje

con el correr de los días,

los gusanos con su cría

le infectan la vestidura

poniendo a la misma altura

todas las categorías.

Yo no he podido encontrar

todavía ni un pobre ni un rico

que a mí me haya dicho, chico,

yo no me pienso embarcar.

En él tienen que viajar

la linda, el tipo y el viejo.

De ese fúnebre cortejo

toditos vamos en pos;

por eso le digo yo

levantaremos parejo.

Basta de filosofar,

no sigo más esta rima

porque ya se me aproxima

la hora de yo embarcar.

Pero les voy a encargar

a los que atrás van quedando

que embarcarán no sé cuándo

pero es una cosa fija:

que no se den mucha lija

que el tren los está esperando.

La vida no es otra cosa

que un prolongado gemido,

nace en la cuna y perdido

se va a extinguir a la fosa.

Estribillos: 1. – Si las mujeres tocaran tres

le cambian el ritmo a los hombres.

2. – Con el son, picachón, retozón,

que bien lo baila Marieta.

Tomado del disco: "SONES DEL HUMOR POPULAR"

GRABADO POR ESTUDIOS SIBONEY

SANTIAGO DE CUBA. 1987.

 

 

 

 

Ronel González

[1] Menéndez Alberdi, Adolfo: La décima escrita, p. 46.

[2] Acerca del origen y evolución de la décima espinela pueden consultarse los volúmenes: Décima e identidad; siglos XVIII y XIX; La décima; panorama breve de la décima cubana y La décima constante del Dr. Virgilio López Lemus, quien ofrece en Cuba los más completos estudios acerca del tema.

[3] López Lemus, Virgilio: "La décima; panorama breve de la décima cubana, p.5.

[4] Poncet y de Cárdenas, Carolina: El romance en Cuba, p. 6.

[5] Datos extraídos de La décima culta en Cuba de Samuel Feijóo, Panorama histórico de la literatura cubana de Max Henríquez Ureña y Diccionario de la literatura cubana.

[6] El Dr. Virgilio López Lemus dedica un lúcido capítulo a este tema en su libro La décima constante (pp. 178-192).

[7] Idem.

[8] López Lemus, Virgilio: "Décima y oralidad en la tradición cubana", Op. Cit., pp. 56-57.

[9] Vega Suñol, José: "Los canarios en Holguín", en Región e identidad, p. 85.

[10] Ibid, p. 87.

[11] Vega Suñol, José, Op.Cit., p. 99.

[12] Archivo Nacional de Cuba, Fondo Gobierno General, Legajo 543, No. 27101. Datos también aportados por el historiador José Novoa Betancourt al autor de este libro.

[13] Datos tomados de Adelaida del Mármol; la primera poetisa holguinera de David Cabrera Araújo, pp. 74-77 y 105.

[14] Museo Provincial de Holguín " La Periquera", Fondo 1700-1867, exp. 462.

[15] La Luz, 20 de julio de 1862.

[16] Cabrera Araújo, David: "Itinerario holguinero de El Cucalambé", pp.37- 41.

[17] El Oriental, 28 de julio de 1865.

[18] Tomado de Guerra sin rostro de José Abreu, p. 15.

[19] Colectivo de autores. Monografía Cultural de Gibara. Investigación inédita.

[20] López Lemus, Virgilio: Doscientos años de poesía cubana (1790- 1990); cien poemas antológicos, p.20.

[21] Díaz Pimienta, Alexis: Teoría de la improvisación, p. 113.

[22] Feijóo, Samuel: La décima culta en Cuba, p. 305.

[23] López Lemus, Virgilio: La décima; breve panorama de la décima cubana, p. 48.

[24] Un texto que no se debe obviar a la hora de estudiar y comprender la creación poética de Naborí es el ensayo: "Jesús Orta Ruiz; decimista cimero del siglo XX", incluido en La décima constante, pp.157-177, del Dr. Virgilio López Lemus.

[25] Datos Tomados de Selva interior; estudio crítico de la poesía en Holguín (1862-1930) de Ronel González, Zenovio Hernández y Anicia Cruz. Holguín, Eds. Holguín, 2002.

[26] Idem

[27] Ed. Arroyo Hermanos, Santiago de Cuba, 1930, p. 71.

[28] Información completa acerca de este creador aparece en el Diccionario de autores de la décima cubana (inédito) de Ronel González.

[29] Henríquez Ureña, Max, prólogo a Intermitencias, p. I.

[30] González, Ana Gloria: La ensenada. Antología de poetas banenses, p. 15.

[31] Cruz, Laudacio de la. Pról. a Del vergel interior, p. XII.

[32] Datos tomados de Selva interior y de La ensenada de Ana Gloria González.

[33] Vaillant Luna, Mario: Mayarí. Parte II. P, 268.

[34] Datos tomados del Panorama de la cultura mayaricera. Investigación inédita de Ana Margarita Sánchez Torres.

[35] El Eco de Tunas, 28 de junio de 1916, p. 6.

[36] Ducazcal, pról. a Albores, p.11.

[37] Ver Notas sobre la cultura en el municipio Rafael Freyre, pp. 30-31 de Aleyda Mayo Montero y el tomo I del Diccionario de la Literatura cubana, pp. 86-87.

[38] Al parecer fue un error de imprenta, en este caso debió decir: todo el mundo va al café. N. del A.

[39] Los senderos de la luz, pp. 29-81.

[40] Prontuario poético geográfico, p. 33.

[41] El Pueblo, 8 de mayo de 1936.

[42] El resto de los decimistas que publicaron en El Pueblo en este período fueron, entre otros, Guillermo González, Luis Angel Bas, Francisco Llorens, José Manuel Cuscó, el muy conocido poeta holguinero residente en Las Tunas Rafael Zayas González (Cabaniguán) director del periódico El Eco de Las Tunas; Pastor del Río, Santiago Miranda, Juana Estrada, Fidel A. Portela, José Selgas, Ricardo León, Adela Beltrán, María Luisa Sánchez, Vicente V.F. Lima, María Fernández y E. Solano. Se incluyeron también décimas de autores reconocidos como Gustavo Sánchez Galarraga, J.Butteri Gaunaurd, Julio Flores, Adelardo López de Ayala y Simone de L.T que parece ser un seudónimo.

[43] Poetas como Juana Casanova de Morales, Quintín Santuna Díaz, M. Rodríguez Rendueles, Santiago Miranda, Juan A. Estrada, Mima López de Pérez, la manzanillera-holguinera Guarina Rivero, Antonio Plaza, un autor que firmaba con el seudónimo "El duende la cañada", José Almiral Oropesa – que publicó varias composiciones con el seudónimo "El viejo apuntador -, Cosme Borjas, Enma Gardano, Luis Augusto Méndez, el improvisador Valentín Luega (conocido como "El sinsonte banense"), Santiago Rodríguez, Manuel Acuña y Rafael Zayas González (Cabaniguán) dieron a conocer sus décimas, en la década del 50, en las páginas del periódico, sin que ninguna merezca ser antologada, a pesar de que en muchos casos se aprecia una plausible voluntad renovadora de la variante espinela.

[44] González López, Waldo: "El canto de lo vivido" en Adolfo Martí: Alrededor del punto, p.10.

[45] González Sánchez, Ronel: "Décimas pendulares" en Yunior Felipe Figueroa: Con esta leve oscilación del péndulo, p. 5.

[46] Algunas décimas de Luis Pavón, además de aparecer en publicaciones periódicas, se dieron a conocer con el título "Glosa" en la antología: Tres poetas (Holguín, Feria Nacional del Libro, y en su Selección de poesías (Holguín, Gobierno Municipal Revolucionario, 1960), donde aparece una "Glosa" suya con versos de Martí y unas "Décimas" por un niño muerto en un bombardeo de 1958.

[47] Los decimistas mencionados en ¡Ahora!, algunos en varias oportunidades, durante estos años fueron: Osvaldo Báez (Gibara), quien recibió Mención en décima en el Encuentro-debate Nacional de Talleres Literarios celebrado en 1981 en Topes de Collantes (provincia Sancti Spíritus) con el texto: "Dueña del llano y la loma" (informaciones del 6 de octubre y del 18 de noviembre de 1981); Angel Paz, Román Hernández, Arnaldo Aguilera, Manuel Rodríguez Bruceta, Balduvina Peña (24 de mayo de 1983), Osmel Almarales (Báguanos), Estela Romero (Sagua de Tánamo), Norberto Carralero (Calixto García), José Murt Mulet, Gelasio Viamonte y Manuel Reyes (talleristas del municipio Holguín); Dania María Savane (Moa), Rafael Almaguer (Báguanos), María Luisa Suárez, Miguel Angel Lamorú, Eddy Rodríguez (talleristas del municipio Frank País); Reina Sánchez, Angel Morales Infante, Primitivo Arcos Escalona, Rigoberto Rodríguez Dámaso, Alquimiades Solano Sánchez, Adalberto Ramírez Moreno y Ronel González (todos de Cacocum). También fueron mencionados autores como Ramón Serrano y Ramón Acosta (ambos de Buenaventura) y Gilberto Cruz, María Josefa Reyes y Agustín Serrano (los tres pertenecientes a la localidad de Velasco).

[48] p. 15.

[49] Hernández Menéndez, Mayra, epígrafe dedicado a Holguín en el capítulo "Donde comienza un breve bojeo por la isla" en Recado para Jonás, pp. 92- 97.

[50] González López, Waldo: "Contra la nostalgia fiera" en Agustín Serrano: Sitios de la voz, pp.3-4.

[51] González Durán, Jorge apud Ramón Iván Suárez Caamal: "Todos podemos ser viajeros del asombro" en Agustín Labrada Aguilera: Viajero del asombro, p. 10.

[52] López Lemus, Virgilio:" Décimas Labradas" en Diéresis, p. 189.

[53] González Sánchez, Ronel, "Décimas pendulares" en Yunior Felipe Figueroa: Con esta leve oscilación del péndulo, p. 6.

[54] Ver clasificación hecha por María del Carmen Victori Ramos en "La poesía tradicional de realización oral", pp. 119-141.

Partes: 1, 2, 3, 4, 5
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