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Formación de Valores en la Universalización de la Educación Superior (página 2)


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Entre la educación y el desarrollo social existen complejos nexos, que condicionan la necesidad actual del sistema educativo que den respuestas a las exigencias sociales del siglo XXI, entre las que se impone la formación y desarrollo de valores.

DESARROLLO

El tema de los valores ha sido una vieja preocupación del ser humano. Que acepta como bueno, justo, bello o útil y que califica como malo, injusto, feo o perjudicial, han sido interrogantes a las que el hombre ha tenido constantemente que buscar respuestas para orientarse en la vida, para encontrar las fuerzas motivacionales que guíen su actividad y conducta.

Los valores son el resultado de las leyes naturales. La delimitación entre lo natural (o valioso) y lo antinatural (o antivalioso) es posible debido a una capacidad humana también natural: la de sentir deleite.

Se hace necesario partir del surgimiento mismo de los valores como un elemento moral que ha sido estudiado, definido, tratado desde la antigüedad por los diferentes filósofos, evolucionando primero hacia una disciplina filosófica denominada Ética, de la cual a su vez, se derivo la axiología.

Un rasgo importante de los valores es su carácter histórico-concreto.

Significa que los valores no son eternos ni inmutables, sino que esa significación social positiva puede ser adquirida, o perdida por determinado objeto en relación con el cambio mismo de las condiciones y necesidades de la sociedad, como la muestra, por ejemplo, el que la revolución burguesa haya representado un valor en los momentos en que permitió la desaparición del régimen feudal, mientras que hoy en día ha perdido dicha cualidad.

El hecho de que no todos los valores contribuyan en igual medida al avance del programa social, determina la existencia de una jerarquía de los valores. Así en correspondencia con las condiciones históricas existente, los valores económicos, o políticos pueden ocupar un lugar más o menos preferencial en la escala de la significación de ellos para la sociedad.

Junto a este carácter histórico-concreto que posee los valores, no es posible obviar el hecho real de que existen determinados valores que posee un contenido humano-universal, en tanto son validos para todos los hombres y todas las épocas, como son la amistad y el amor, entre otros.

Aunque los valores se encuentran directamente relacionados con el objeto de la valoración, este último no se puede reducir a los valores.

La formación de valores morales representa una necesidad para todas las sociedades y en la sociedad cubana ha estado presente a través de la historia.

La impronta martiana fue el sol que iluminó a quienes que lucharon por la honradez, el honor y el patriotismo en medio de la corrupción política y administrativa de la neocolonia.

Siguiendo el hermoso camino, en el temprano marzo de 1959, el líder de la Revolución Cubana, el Comandante en Jefe Fidel Castro planteaba la necesidad de “sembrar profesionales capaces (….) profesionales idealistas, no profesionales reaccionarios, ni profesionales incompetentes, ni profesionales que vengan a estudiar a la Universidad para ponerse después al servicio de los intereses creados”.

A ese llamado ha respondido la Educación Superior a través de su devenir revolucionario. En la actualidad la universidad cubana profundiza su quehacer científico en la línea de la labor educativa y especialmente en la encaminada a la formación axiológica de los estudiantes.

Por eso nos interesa, en especial, tratar de entender como evolucionan los valores en los jóvenes, aun cuando mucho de los rasgos de ese proceso se dé en forma similar en el resto de las generaciones.

Los valores contribuyen a que una persona, una institución o una sociedad, establezca sus rumbos, metas, fines. Constituyen guías generales de conducta que se derivan de la experiencia y le dan sentido a la vida, propician su calidad, de tal manera que están en relación con la realización de la persona y fomentan el bien de la comunidad y la sociedad en su conjunto.

Tener valores es estimar un objeto, un principio. Es ubicar cosas por orden de importancia, es decir lo que es más importante en un determinado momento y luchar por ello. Es ubicar y jerarquizar los bienes materiales y espirituales en orden de importancia.

Desde nuestra óptica, tener valores es apreciar en alto grado los elementos de nuestra cultura, las relaciones humanas, a las personas, determinados sistemas políticos, morales, que afectan al individuo, el hogar, nuestra escuela y la sociedad en general.

Las exigencias de la vida actual han demostrado que el proceso de formación de valores entre los futuros profesionales es una necesidad, y por tanto intentar obviarlo equivaldría a que concientemente dejáramos de brindar la cuota que nos corresponde como profesores en las aulas universitarias.

Enfrentar estas condiciones impones desafíos a la Educación en general y a la Universidad en particular, a partir del papel que esta debe jugar como escuela de quienes llevarán sobre sus hombros la dirección de los procesos económicos, políticos, ideológicos, científicos y técnicos entre otros.

Surge una vez más la interrogante de cómo formar al hombre que sea capaz de dar respuesta no sólo a los retos que la vida le impone en el presente, sino que ha de estar pertrechado para responder eficientemente ante las exigencias futuras en el ámbito profesional, como una vida familiar y social.

Cuando se trata de la formación y desarrollo de valores se hace necesario ubicarlos como formaciones psicológicas de la personalidad que constituyen orientaciones rectoras de su esfera moral.

Entre la educación y el desarrollo social existen complejos nexos, que condicionan la necesidad actual de sistemas educativos que den respuestas a las exigencias sociales del siglo XXI, entre las que se imponen la formación y desarrollo de valores.

Una metodología para la formación y desarrollo de valores debe incluir las acciones que realiza el maestro en sus funciones, tanto docentes como educativas de forma general, y las que ejecuta el estudiante a través de su actividad y comunicación. En este sentido que se enuncian los términos formación y desarrollo.

El desafió que representa para los educadores la búsqueda de alternativas para su desempeño en el marco de la formación de valores, inspiró las reflexiones que aquí se exponen, dedicados a los jóvenes universitarios y a quienes desde las aulas de la Educación Superior contribuyen al desarrollo de las personalidades de esta importante cantera.

Los principios o valores sociales declarados, o asumidos desde su universidad como expresión de la internacionalidad a nivel social en la formación del profesional se va articulando a la práctica en cada momento del devenir histórico, la que determina su funcionalidad y eficacia social. No existe una relación lineal entre los llamados valores institucionalizados y valores objetivos, configurados desde la realidad misma, que dada sus características cambiantes y dinámicas van condicionando el cambio de sus formas de expresión y la emergencia de nuevos valores como representación de lo que se valora desde la cotidianidad y que en ocasiones entra en contradicción con lo deseado o establecido desde el discurso oficial.

CONCLUSIONES

Es importante tener en cuenta que el trabajo alrededor de la formación de valores nunca puede representar un intento de insertar en otros, valores que poseemos o hemos considerado que deben adornar a los jóvenes. Se trata de crear una comunidad critica de profesores y alumnos en la que se dé espacio al dialogo y a la reflexión.

El tema de los valores tiene un amplio desarrollo desde el punto de vista filosófico en el plano objetivo pero se hace necesario profundizar en el plano subjetivo de los valores, particularmente en su caracterización psicológica y sus implicaciones pedagógicas.

BIBLIOGRAFÍA

1-Álvarez de Zayas. C. Fundamentos teóricos de la Dirección del Proceso Docente Educativo en la Enseñanza Superior Cubana. ED. EMPES. MES Ciudad Habana.

2-Baxter Perez, Esther. La formación de valores. Una tarea pedagógica. Editorial Pueblo y Educación, La Habana, 1989.

3-Chacón Arteaga, Nancy. Formación de valores morales. Editorial Academia. La habana, 1999.

4-“Métodos Participativos ¿una nueva concepción de la enseñanza?” del Colectivo de

Autores del CEPES (1998)

5-Romero Pérez, C; Acosta Morales, H. y otros. La formación de valores en la Universidad: Exigencias teórico-metodológicas. AESES, Universidad de Matanzas, 2000.

6-Vasco Montoya, E. El maestro como formador en valores. Revista de Pedagogía. Vol. XVII No. 45. Escuela de Educación UCV. Caracas, 1996.

 

Datos Generales Autora.

-Nombre y Apellidos: Enelida Rodríguez Viera.

-Fecha de nacimiento: 20-3.1966.

-Estado Civil: Casada.

Formación Académica.

Comencé mis estudios primarios en la escuela Carmen Jiménez, ubicada en el pueblo de Macagua en el Municipio de Los Arabos, donde cursé mis estudios hasta sexto grado, culminando mis estudios con buenos resultados académicos, desde primer grado forme parte de la organización de pioneros y ocupe cargos en el colectivo de la escuela, cumpliendo con todas las actividades orientadas.

Al terminar la primaria continuo mis estudios de Secundaria Básica y Preuniversitario en la Escuela Vocacional Carlos Marx en la Provincia de Matanzas, participando en todas las actividades y tareas orientadas por la FEEM y ocupando cargos dentro del grupo, culminando dicha enseñanza con resultados satisfactorios, obteniendo derecho ha estudiar Ingeniería Fitosanitaria en el ISCAH, ubicado en San José de las Lajas, en Provincia Habana.

Actividad Laboral.

Me incorporo a la vida laboral en Septiembre del año 1989 en la Graja de Artemisa, perteneciente a la Empresa Pecuaria General Gusev como Técnico en Adiestramiento en Agrotecnia, donde laboro por el periodo de un año, de ahí pase a la Granja de Fe del Valle, donde desempeñe diferentes actividades como son: Técnico de Agrotecnia, Control Técnico, y Jefa de Agrotecnia, actividad que desempeñe hasta agosto 1994, donde paso ha formar parte del grupo de Inspección del Ministerio de la Agricultura, como Inspectora Municipal, hasta el año 1996, donde dichos inspectores pasamos a formar parte del grupo de Supervisores del Departamento de Auditoria y Supervisión de la Delegación Provincial de la Agricultura de la Provincia de Matanzas, actividad que desempeñe hasta febrero del 2002, pasando ha trabajar como Funcionaria Municipal del Servicio Estatal Forestal en Los Arabos.

Labor Intelectual, Científica y Posgrado.

-Posgrado de Sanidad Vegetal.

-Posgrado sobre Pasto y Forraje.

-Fundamentos Didácticos de la Nueva Universidad Cubana.

Seminario sobre Extensionismo Agrícola.

-Taller de Capacitación sobre Vivero Forestal.

-Maestría en Ciencias de la Educación Superior.

 

 

Autora:

Ing. Enelida Rodríguez Viera

Enviado por:

Jesús Pérez González

Sede Universitaria

Rafael Trejo González

Los Arabos

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