Descargar

Cuadro comparativo de los TGD. Ansiedad infantil ? angustia de separación ? depresión infantil

Enviado por sandy_santamaria


    Cuadro comparativo de los TGD. Ansiedad infantil – angustia de separación – depresión infantil

     

    ANSIEDAD INFANTIL

    ANGUSTIA DE SEPARACIÓN

    DEPRESIÓN INFANTIL

    CONCEPTUALIZACIÓN

    Considerado un conflicto, pero no una psico-patología, la ansiedad infantil suele presentarse entre niños de 3 o 3 y medio años de edad, hasta de 6 o 6 y medio años y manifestarse de tal modo que le cause sufrimiento y problemas de adaptación.

    La ansiedad es el conjunto de respuestas de pensamiento, fisiológicas y motoras que hemos aprendido a dar y son poco válidas para resolver una situación. Si nos enfrentamos a cualquier situación que requiera un esfuerzo para resolverla, ya sea físico o intelectual, nuestro organismo debe activarse: tensando los músculos, bombeando más sangre y respirando más rápidamente, memorizando lo aprendido, entre otras.

    Es la angustia que provoca el crecimiento, el despegarse, la independencia, el aceptar que ya no son uno sino dos, o mejor dicho, tres (madre-padre-hijo). Y esta situación pasa y se repite con otros hijos (algunos niños manifiestan en forma más evidente que otros) y con otros bebés del Lactario. 

    La mayoría no conoce su explicación y se la asocia con la etapa que hay que pasar y superar, como el primer diente, la primera comida, los primeros pasos, dejar la cuna y pasar a la cama, el levantarse de noche y aparecer en la cama de mamá y papá, dejar los pañales, etc. 

    Es un problema relativamente raro entre los niños, y cuando se han presentado lo hacen generalmente en edad escolar.

    Para que exista depresión, primero el niño tiene que haber conseguido la función psíquica de la tristeza

    Casi todo problema de desajuste psíquico en los niños está impregnado de ansiedad y de depresión, de forma irregular e intercambiable. Pudiera estar provocada por factores externos al niño, que le agreden de una manera directa o indirecta, o conflictos personales del niño más internos.

    CARACTERÍSTICAS

    • Los niños pequeños con ansiedad suele confundir fantasía y realidad ya que su mundo imaginativo está mucho más en acción que el de los adultos.
    • Aunque no deja de ser una experiencia natural -como el miedo, la tristeza o la soledad- , si se repite de un modo sistemático y sus efectos son muy acusados y exagerados, puede llegar a convertirse en una situación sin salida.
    • Es frecuente que los niños manifiesten gran cantidad de miedos irracionales (a estar solos, a irse a la cama con la luz apagada, etc.) y presenten trastornos del sueño o pesadillas congruentes con sus temores.
    • Suele comenzar alrededor de los 8 meses, cuando los niños comienzan a gatear y a observar personas extrañas a su alrededor.
    • Ocurre con la persona hacia la que el niño está más apegado, es decir, con quienes ha desarrollado un sentimiento de unión.
    • Generalmente ocurre cuando los niños empiezan el proceso de adquirir autonomía.
    • La angustia de separación también puede presentarse en casos como viajes, entrada al colegio, vivitas a otras casa, etc.
    • Si no se atienden a tiempo pueden acarrear problemas hasta la edad madura.
    • Puede afectar diversos aspectos (cognitivo, afectivo, motriz, etc.).

    FACTORES QUE LA PRODUCEN

    Pueden ser genético-hereditarias, deberse a factores temperamentales (los casos aumentan en niños tímidos) o a factores ambientales (bajo nivel cultural, problemas económicos, divorcios, drogadicción de uno de los padres, etcétera). Muy a menudo el fundamento de este problema es el alto nivel de exigencia hacia los hijos.

    • Por la sensación de algo que va a ocurrir no permitirá ver nuevamente a la figura de apego.
    • La causa de esta angustia es considerada un aspecto fundamental en las áreas emocionales y cognoscitivas. Sin embargo también puede depender del temperamento del bebé y las circunstancias de la vida.
    • Son múltiples los factores que pueden provocar la depresión infantil.

    MANIFESTACIONES CONDUCTUALES (ÁMBITOS BIOLÓGICOS Y PSICOLÓGICOS)

    BIOLÓGICOS:

    1. Tensión motora. Se caracteriza por temblor, dolor muscular, inquietud motora, fatigabilidad, etc.
    2. Hiperactividad vegetativa: disnea, taquicardia, disfagia ("nudo en la garganta"), sensación de inestabilidad, sudoración, náuseas, etc.
    3. Morderse las uñas.
    4. nocturna.
    5. Dolores de estómago sin justificación orgánica.
    6. Migrañas

    PSICOLÓGICOS:

    1. Hipervigilancia: exageración de las respuestas de alerta o de alarma, sensación de que "va a pasar algo", dificultad para concentrarse, trastornos del sueño, irritabilidad e hiperactividad.
    2. Problemas conductuales.
    3. Agresividad.
    4. Inhibición.
    5. Rebeldía, desobediencia.
    6. Enojo constante.
    • BIOLÓGICOS:
    • Llantos exagerados, de desesperación.
    • Invención de malestares que no existen, para evitar la separación de la figura de apego.
    • Pataletas en muchos casos para evitar la separación.
    • PSICOLÓGICOS:
    • Preocupación exagerada y persistente por los posibles daños que puedan sufrir las personas allegadas al niño, o temor de que no regresen si se van; temor a que una catástrofe provoque la separación; negación de ir a la escuela, o resistencia a ello, con el fin de permanecer más tiempo en casa junto a las personas a las que está vinculado; igual para dormir fuera de casa; igual a estar solo; pesadillas sobre temas de separación; angustia de anticipación o quejas somáticas cuando el niño prevé una separación; quejas exageradas.
    • BIOLÓGICOS:
    • Alteración del sueño, en el comer, pérdida de apetito, pérdida de peso; o aumento del apetito y ganancia de peso, cefaleas, vómitos, dolores abdominales.
    • Quejas frecuentes de enfermedades físicas, por ejemplo dolor de cabeza o de estómago.
    • Sufre una regresión, hablando como un bebé u orinándose en la cama.
    • Se comporta de una manera agresiva , sufre ataques de rabia u hostilidad persistente, se irrita o sensibiliza frente a pequeñas frustraciones, montando rabietas o berrinches con más facilidad.
    • PSICOLÓGICOS:
    • Alta sensibilidad al fracaso y al rechazo.
    • Tendencia constante a descalificarse (soy tonto, no sirvo).
    • Desmotivación (no valgo la pena), falta de fuerzas (no puedo), autocrítica y desvalorización (no valgo).
    • Deterioro en los estudios , concentración deficiente y ausencias frecuentes de la escuela ,aislamiento social, comunicación pobre, problemas para relacionarse, pierde el interés por los juegos preferidos y por la escuela ,se aleja de sus amigos y de la familia.

    ABORDAJE TERAPÚETICO

    Si la terapia es por medio de la psicoterapia lo importante es darle un sentido a esa emoción y hacer comprender al niño qué le sucede, pues para él no está del todo claro la razón de sentirse angustiado. Durante la terapia lo ayudamos a entender, por ejemplo, lo que hay detrás de su miedo a la oscuridad, de las figuras amenazantes, humanas o imaginarias (fantasmas, brujas, monstruos), lo que representan y cuál es su función. A esta técnica se denomina elaborar y ayuda a que en su momento el niño comprenda el suceso, lo afronte y, progresivamente, lo supere. Lo primordial, es resolver el núcleo de la ansiedad y no limitarnos a las manifestaciones clínicas, de lo contrario, podría suceder que desplace el síntoma a otra área de desarrollo.

    • Por lo general se puede abordar el problema en casa sin necesidad de recurrir a otras instancias.
    • En el caso de los bebés es recomendable ayudarlos a aumentar las distancias de los seres queridos por medio de la voz, conocido como apoyo verbal, éste es un apoyo emocional, ya que aunque no esté la figura está la presencia.
    • De manera general se puede decir que la presencia de una persona que brinde confianza, amor y tranquilidad es indispensable para superar la angustia de separación.
    • La persistencia de cualquiera de los síntomas por más de dos semanas puede indicar depresión. De ser así el niño debe recibir ayuda psicológica, no sólo en busca de alivio sino porque con frecuencia la depresión infantil es el comienzo de un problema que persiste hasta la edad adulta.
    • Dar mas atención de la normal al niño. Jugar con él ya que así le será más fácil hablar sobre sus problemas. Leerle libros infantiles con temas relacionados, dibujar, pintar, construir un puzzle con el niño. Dedicarle un momento especial y único y así, crear un ambiente más cercano y de confianza.
    • Si el niño ha sobrepasado el límite de la normalidad, habrá que buscar ayuda y apoyo medico. El diagnóstico y tratamiento temprano de la depresión son esenciales para los niños deprimidos.
    • A lo largo de la historia diferentes modelos han tratado de dar explicación a la Depresión infantil. Podemos agruparlos en dos grandes bloques:
    • Modelo Biológico: la depresión infantil se produce por una alteración de los neurotransmisores y la manera de tratar será mediante la administración de psicofármacos.
    • Modelo Psicológico: En el modelo psicológico podemos distinguir tres corrientes:
    • Psicoanálisis: Cree que la depresión se produce por la falta de autoestima o la muerte de un ser querido.
    • Conductual: Se cree que la depresión infantil se produce por falta de reforzamientos.
    • Cognitiva: Postula que el niño se deprime porque se producen distorsiones cognitivas en él respecto a: sí mismo, el mundo que lo envuelve, el futuro.

    ABORDAJE EN EL AULA

    Los docentes deben evitar etiquetar a los niños. Los infantes cambian de un día, una semana o un mes a otro, y el ‘niño travieso’ es el ‘niño travieso por ahora’ y el ‘niño triste’ es el ‘niño triste por ahora’. Se debe recordar que su comportamiento es abierto y se modifica si evoluciona bien. Los docentes no deben tomar las cosas como algo personal. En ocasiones los niños, sobre todo los de la primera fila, sacan a relucir con el maestro sus enojos, tristezas y frustraciones, pero no significa rechazo hacia ellos, sino contra lo que representan: la autoridad.

    La maestra debe desarrollar un vínculo de apoyo y confianza, permitiendo utilizar su cuerpo y sus capacidades motrices y proporcionando objetos atractivos y adecuados, Le debe dar la oportunidad de jugar con el otro, de hablar, el bebé podrá tolerar la espera, no sentirá abandono, ni perdida, sabrá que la espera será retribuida en presencia, en contacto y el juego.

    Es recomendable que si la angustia de separación ocurre en el momento de la entrada al colegio, se prevea que el niño comience con una rutina más corta de lo normal, agregando tiempo a medida que el niño vaya superando la angustia.

    • El docente debe reforzar la autoestima, y dejar que expresen sus sentimientos.
    • Recibir como premio elogios en cada buena acción realizada.
    • Ayudar al alumno en relación a su rendimiento escolar, no dejando que el mismo afecte su depresión.

    IMPORTANCIA DE SU CONOCIMIENTO POR PARTE DEL DOCENTE

    La importancia del conocimiento por parte del docente de que alguno de sus alumnos presenta ansiedad infantil, es poder llegar a conocer la causa principal de su angustia para ayudar, de manera conjunta con sus padres o representantes, el problema. Si el docente desconoce el caso, posiblemente sea un motivador de causa para mayores ansiedades o angustias. En este caso el problema del niño empeoraría ya que el ambiente de la escuela se volvería incómodo y desagradable para él.

    Es fundamental que el docente conozca como es la angustia de separación que presenta uno de sus alumnos, ya que de esta manera lo podrá ayudar, en conjunto con la familia, o recurrir al especialista encargado.

    La figura de la maestra debe convertirse en una figura de apoyo y bienestar para el niño, ayudando de esta manera a que el momento de la separación no sea tan crítico para el niño, consiguiendo paulatinamente su superación.

    Considerando que uno de los factores más comunes en los niños que presentan depresión es el rendimiento escolar, asociado con otros factores, los docentes deben conocer el problema, ya que el papel que los mismos desempeñan es de gran importancia.

    Se debe velar por ayudar al niño a superar su depresión y la figura de la maestra, con apoyo y cariño, puede ser un factor determinante el la solución del problema, siempre trabajando de manera conjunta con los padres.

     

    Sandra Santamaría

    Raiza Rodríguez

    UNIVERSIDAD JOSÉ MARÍA VARGAS

    FACULTAD DE EDUCACIÓN

    MENCIÓN PREESCOLAR

    CÁTEDRA: ALTERACIONES EN EL DESARROLLO

    Caracas, 15 de Abril de 2005