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Ojo de Agua de Los Melones: Una zona llena de historia (página 2)


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Fundamentación

El territorio tunero cuenta un sinnúmero de sitos de marcada importancia histórica, tanto para la provincia como para la nación; se pueden destacar algunos que tuvieron estrecha relación nuestras luchas por la independencia en el siglo XIX, entre ellos se destaca Ojo de Agua de los Melones, lugar donde se encontraba la casa que albergó una de las primeras y fijas Residencias del Ejecutivo del Gobierno del que Carlos M. de Céspedes fue Presidente entre 1868-1874. No solo en esta zona se cuenta con la presencia del Padre de la Patria sino que se destacan una serie de documentos que demuestran la significación del lugar.

En los 80 comenzó a comentarse de una casa de la etapa colonial en la zona de Ojo de Agua de los Melones, donde los pobladores de allí afirmaban que en ese sitio había estado la Sede del Gobierno Revolucionario después de la quema de Bayamo, el Historiador de la Ciudad de Las Tunas inmediatamente se personó en el lugar cuando tuvo conocimiento de ello, y comenzó un proceso investigativo sobre el lugar y por supuesto se encontraron una serie de documentos que demuestran la presencia en el lugar de Carlos Manuel de Céspedes al frente del Gobierno de la República en Armas.

Orígenes de la finca de ojo de agua de los melones

En 1868 Ojo de Agua de los Melones era una finca cubierta por un espeso bosque con poca accesibilidad del exterior, solo se podía acceder por pocos caminos casi intransitables, estos eran poco frecuentados por las autoridades colonialistas, existía en la hacienda una enorme casa de mampostería y tejas, de planta rectangular con portal al frente sostenido por columnas del orden toscano( ver interior de Casa Natal de Vicente García), esta contaba en sus alrededores con un pozo que aún se conserva y al fondo a unos 30 metros existió un trapiche(en ruinas) presumiblemente para la elaboración de raspaduras. El primer dueño de la finca fue Adolfo Villamar, el cual al estallar la contienda revolucionaria se sumó a la lucha y sus propiedades quedaron prácticamente abandonadas, este en los primeros mese de 1869 vendió la propiedad a un señor llamado Pedro López, el que a su vez se la vendió al bayamés Don Francisco Palma, primo de Don Tomás Estrada Palma. La familia Palma contribuyó a la causa revolucionaria aportando dinero y recursos, así como brindando sus propiedades para establecer campamentos. Durante todos estos años la propiedad de la finca donde se encontraba la sede del Gobierno se ha mantenido en la familia Palma, estos aún la conservan. Durante los años de la Guerra de los 10 Años y la Tregua fecunda se establecieron algunas familias, que fueron obteniendo propiedades y que junto a las de peones y trabajadores formaron un pequeño asentamiento poblacional; según relatos de pobladores del lugar, en este existió una pequeña capilla, algunos trapiches para raspaduras y una docena de casas.

PERÍODO DE 1868-1870

El día 14 de diciembre de 1868 Céspedes se encontraba en Ojo de Agua de los Melones, lugar desde donde escribe un Edicto sobre el Pago a las Tropas, este documento demuestra la existencia de Carlos Manuel en la zona mucho antes que lo planteado en algunos textos. Después del Incendio de Bayamo el 12 de enero de 1869 la ofensiva pacificadora de iniciada por el Capitán Gral. De la Isla de Cuba Don Domingo Dulce se hizo sentir en el campo insurrecto y muchos que no estaban convencidos con el proceso revolucionario fueron captados por los españoles, por lo que el jefe hispano envía una carta con tentativa de paz a Carlos M. de Céspedes, este a su vez cita a sus envidos para la finca Ojo de Agua de los Melones por medio de una carta, para el 26 de enero de 1869; en este lugar se encontraba ya el General Manuel de Quezada. Céspedes se instaló allí el 22 de enero de 1869, siendo este lugar el centro de operaciones del Gobierno de la República en Armas. Después de recibir los enviados españoles Céspedes con calma escribió una carta dirigida a Dulce, fechada el 28 de enero de 1869.

Durante el año 1869 el Gobierno se mueve entre las tunas y Camagüey, convirtiendo a Ojo de Agua de los Melones en la sede más importante, donde se mantuvo siempre la infraestructura de gobierno. A inicios de 1870 a Gómez le fue enviada una comisión con armas y municiones traídos en el ¨ Anna ¨, el que desembarcó al norte de Las Tunas, el documento estaba firmado por Carlos M. de Céspedes y traía la orden de Ojo de Agua de los Melones. Este lugar protegió la sede del Gobierno Insurrecto con Céspedes al frente hasta fines de mayo de 1870, el que se trasladó unos kilómetros al sur-este, hasta la finca de Francisco V. Aguilera en Santa Ana de Cayojo, luego de forma irregular continuó en los Melones hasta principios de 1871. En este lugar se escribieron los documentos más importantes bajo el mandato de Céspedes; aparecen fechadas en este campamento diversas cartas y órdenes recogidas por Fernando Portuondo y Hortensia Pichardo en el Tomo I de Carlos M. de Céspedes. Escritos.

Relación de documentos escritos por Carlos M. de Céspedes desde Ojo de Agua de los Melones:

  • 1. Edicto sobre el pago a las tropas. Diciembre 14 de 1868.

  • 2. Carta al Comandante Gral. Español del Departamento Oriental. Diciembre 20 de 1868.

  • 3. Proclama: dirigida a los cubanos, residentes o que posean bienes en la Isla de Cuba, quienes por estar al lado del gobierno español, o residiendo en el extranjero, no prestan ayuda a la Revolución Cubana. 2 de noviembre de 1870.

  • 4. Carta a Don Francisco Tamayo. 26 de enero de 1869.

  • 5. Carta a Don Domingo Dulce, Capitán Gral. de la Isla de Cuba. 28 de enero de 1870.

  • 6. Nombramiento de Comisionado Diplomático. 12 de diciembre de 1870.

  • 7. Credencial en blanco de Comisionado ante el Gobierno de Chile. Diciembre 16 de 1870.

  • 8. Credencial en blanco de Comisionado ante el Gobierno de Bolivia. Diciembre 16 de 1870.

  • 9. Credencial en blanco de Comisionado ante el Gobierno de Perú. Diciembre 16 de 1870.

  • 10. Al Supremo Gobierno de España. Enero 20 de 1871.

  • 11. Proclama a los cubanos. Febrero 5 de 1871.

  • 12. Ratificación de los propósitos de la Revolución. 15 de febrero de 1871.

En marzo de 1870 Máximo Gómez, Luís Figueredo y Modesto Díaz se trasladaron hasta la sede del gobierno para tener una entrevista con ellos, lo que hace evidente la presencia del generalísimo en el sitio.

PERÍODO DE 1871-1878

El 27 de septiembre de 1871, Vicente García trasladó su Cuartel General hasta la casa que había acogido al Gobierno, convirtiendo esta zona en teatro de operaciones militares. Entre 1871 y 1878 Vicente García se trasladó constantemente por el territorio que actualmente ocupa el municipio de Jobabo siendo Ojo de Agua de los Melones la sede de su Cuartel General y punto de tránsito en numerosas ocasiones, también escribió cartas y documentos, entre los que podemos citar: Las Cartas al Cor. Manuel Sanguilý. Octubre 12 de 1876 (se conocen dos cartas escritas el mismo día). En los años 1876 y 1877 el León de Santa Rita tuvo una marcada presencia en nuestro territorio, recorriendo los campamentos de Guaramanao, El Lavado, Bracito, Lajas, Aguas Blancas, Cayojo, La Soledad, etc.; su presencia en Los Melones también se hizo sentir estableciendo campamento, organizando las tropas, sosteniendo entrevistas con jefes militares y recuperándose de enfermedades.

Días que permaneció Vicente García en el Campamento de Ojo de Agua de los Melones en 1866 y 1867:

Año 1866: 3,8,9 y 29 de marzo; 5 y 9 de junio; 13, 14, 21, 22, 23, 24 y 25 de septiembre; 2, 11, 12 y 13 de octubre; 5, 6, 9, 10, 11, 12, 13 y 30 de noviembre; 1, 24 y 26 de diciembre.

Año 1877: 5, 6 y 29 de enero; desde el 19 de febrero hasta 2 de marzo, en esta ocasión estuvo enfermo.

También en Ojo de Agua de los Melones acogió a otros destacados patriotas que realizaron importantes tareas organizativas allí como Belisario Grave de Peralta, desde donde el cual escribió una carta a Vicente García el 16 de junio de 1877, en la que le comunicaba datos de interés sobre la organización de las tropas. En diversa publicaciones se menciona la presencia en Los Melones durante la Guerra de los 10 Años, de José M. Capote, Julián Santana, Gonzalo Moreno, Francisco Varona, etc. Durante 1876-1877 el Gobierno de la República en Armas con Tomás Estrada Palma y al finalizar la contienda a cargo del propio Vicente García en su constante trayecto entre el Oriente y el Camagüey permaneció en Los Melones, donde se establecieron diversas reuniones y conferencias tanto entre el Mando Mambí como con el mando español.

El la Guerra de los 10 Años funcionaron prefecturas mambisas en todo el territorio tunero, Ojo de Agua de los Melones formó parte de la Prefectura de Macaguas, formando una sub-prefectura la que tenía al mando a un hombre de apellido Mojena. Esta sub-prefectura se encargaba de abastecer fundamentalmente a las tropas de Vicente García y otras que hicieran estancia en el campamento establecido allí. Durante el período que duró la contienda se estableció a cargo de la sub-prefectura de allí toda una infraestructura que permitía abastecer las tropas, fundamentalmente las que operaban en el territorio tunero y las de tránsito por el territorio.

Período de tregua fecunda

Durante la Tregua Fecunda Ojo de Agua de los Melones continuó siendo centro de conspiraciones, el antiguo dueño de la hacienda Adolfo Villamar junto a los peones de la finca continuaron conspirando, organizaron las condiciones para continuar la lucha armada en el lugar, tal es así que fue denunciado a las autoridades españolas y el 4 de octubre de 1883 se publicó en un periódico holguinero que él junto a otros tuneros eran integrantes de las causa independentista que preparaba Vicente García en el exterior. Durante esta etapa se establecieron otras familias en la zona. La familia Palma ya establecida en este sitio contribuyó a preparar la causa revolucionaria con recursos y hombres de los suyos.

Entre 1880-1885 se estableció en la región la familia Escriba, los cuales poseían un buen caudal y bastas extensiones de tierras en los territorios comprendidos entre Ojo de Agua de los Melones y Guaramanao, estos también brindaron su ayuda. También en esta etapa se radicaron aquí las familias Conde y Leyva, que también en su momento contribuyeron con la causa revolucionaria.

Período de 1895-1898

Al estallar nuevamente la Guerra en el 95, Ojo de Agua continuó su historia siendo centro de operaciones de del Ejercito Libertador, donde frecuentemente hacían campamento diversas fuerzas que avanzaban por el territorio; En 1895 y hasta 1896 se constituyó una Prefectura mambisa, la contaba con las Sub-prefecturas de San José de la Plata, Ronco, Lajas, Anoncillo y Birama; luego en 1896 formó parte de la prefectura de Camalote y a partir de 1897 pasó a ser nuevamente una Prefectura, la que tenía al frente a Isidro P. Mayo, nombrado por el Teniente Gobernador Coyula.

También durante la contienda del 95 Ojo de Agua de Los Melones contó con la presencia de Calixto García los días 14 y 15 de noviembre de 1896, el que acampó en este sitio para luego tomar Las Tunas. Entre los años 95 y 98 tropas del Regimiento Tunas constantemente acampaban en este sitio. Hay que señalar que en este lugar murió el patriota Marcelino Arzuagas de enfermedad 17 de julio de 1898, el cual formó parte del Regimiento Tunas.

Durante el avance de la Columna Invasora al mando del Lugarteniente Gral. Antonio Maceo, este acampó y sostuvo combate en la sabana de Guaramanao próximo a Ojo de Agua, al encontrarse este en campamento sus tropas fueron abastecidas por la prefectura de Los Melones y por la familia Escriba, de esta última Don Pedro Escriba sustrajo una de las reses de sus finca y la entregó a la tropa.

Ojo de Agua de los Melones después de 1898

Después de terminada la guerra los terratenientes radicados allí continuaron incrementando sus tierras, la finca donde estuvo radicado el Gobierno de la República en Armas continuó siendo propiedad de los Palmas quienes luego favorecidos por el elegido presidente pariente suyos Tomás Estrada Palma incrementaron sus tierras y poder. El poblado continuó creciendo y este se reconoció como Barrio No 10 del municipio Tunas, estableciéndose allí una Notaría, un Colegio Electoral y un Puesto de Guardia Rural.

Importancia desde el punto de vista estratégico-militar:

Al encontrarse ubicada esta finca en una zona boscosa de difícil acceso y poco frecuentada por las autoridades favorecía una resguardada ubicación para las tropas que se encontraban allí, sumando a esto el apoyo con que contó el Ejército Libertador en la zona, el que fue muy amplio pues tanto en la guerra de los 10 Años como en la del 95, las familias radicadas en el propio Ojo de Agua y en las comarcas aledañas: Guaramanao, Mejías, Cayojo, Lajas, Lavado, Bracito, La Canoa, La Macagua, San Antonio, Las Margaritas y Aguas Blancas abastecieron y aportaron recursos para la guerra, brindaron sus fincas y casa para albergar las tropas y facilitaron toda clase de información a los diferentes jefes militares que permanecieron operando en el territorio. Además la zona facilitaba un buen dominio de todo el territorio del centro-sur tunero, el este camagüeyano y los diferentes caminos por los que se transitaba en la época. También al estar situados diferentes comarcas aledañas a Los Melones facilitaba la ubicación de pequeños campamentos para los destacamentos de avanzada y puntos de vigilancia, aprovechando también la constante bascosidad para cambiar la ubicación de los abastos.

En el plano militar facilitaba interceptar las columnas y convoyes procedentes del Camagüey. Al sur se encontraba el Fortín de La Zanja, junto a un embarcadero del mismo nombre, punto por donde entraban numerosas mercancías y refuerzos para los españoles, este sitio permitía ser dominado desde el centro del territorio tunero. Ojo de Agua de los Melones con su infraestructura permitía ser utilizado por las tropas de tránsito y recorrido del Oriente al Occidente y viceversa, por lo que numerosos jefes militares hicieron su presencia allí.

Importancia histórica de Ojo de agua de Los Melones

Durante los primeros años de la Guerra de los 10 Años la utilización de Ojo de Agua de los Melones fue fundamental para el Gobierno de la República en Armas dirigido por Carlos M. de Céspedes, el que desde la residencia ubicada allí emitió ordenes y documentos importantes para la Revolución Cubana; este lugar aguarda secretos indiscutibles de los máximos dirigentes de la contienda del 68-78, los cuales se reunieron en diversas ocasiones allí para solucionar temas imprescindibles para lograr la independencia de Cuba. La presencia solamente del Padre de la Patria en este sitio es motivo de significada trascendencia histórica, agregando además la permanencia de este y siendo además la Residencia Oficial del Ejecutivo por un largo periodo, sobran razones para decir que ¨ ES IMPOSIBLE ESCRIBIR LA HISTORIA DE LA REVOLUCIÓN CUBANA SIN MENCIONAR A OJO DE AGUA DE LOS MELONES ¨. No solo la presencia de los mambises en logar atribuye importancia, hay que señalar que su importancia estratégico-militar contribuye a referenciar su marcada significación para todo el territorio tunero y camagüeyano durante las guerras.

Bibliografía consultada

  • 1. CANOSO, RAÚL IZQUIERDO. Las Tunas en la Guerra de 1895-1898. Colección Cabaniguán. Editorial Sanlope, Las Tunas 2008.

  • 2. MARRERO, VICTOR MANUEL. Las Tunas: apuntes para su Historia Colonial. Editorial Sanlope, Las Tunas 2005.

  • 3. ___________________________. Vicente García: leyenda y realidad. Editorial de Ciencias Sociales, La Habana 1992.

  • 4. PORTUONDO, FERNANDO/ PICHARDO, ORTENCIA. Carlos Manuel de Céspedes, Escritos. Tomo Primero. Editorial de Ciencias Sociales, La Habana 1974.

  • 5. ROJAS, ELADIO AGUILERA. Francisco Vicente Aguilera y la Revolución de 1868. Tomo Primero. La Habana.

OTROS DOCUMENTOS CONSULTADOS

  • 1. Archivo de la Casa de la Nacionalidad Cubana, Bayamo.

  • 2. Enciclopedia Caros M. de Céspedes. Sitio Web de la Casa Natal. Bayamo, 2009.

  • 3. Expediente del Sitio Histórico: Ojo de Agua de los Melones, Propuesta a Monumento Local. Museo Municipal, Jobabo.

 

 

Autor:

Lic. Yaidel Miguel Rodríguez Castro

Museo Municipal

¨ Rosendo Arteaga Guerra ¨

Jobabo

Partes: 1, 2
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