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Del amor y otras yerbas (Parte 2)


Partes: 1, 2
Monografía destacada

    1. Enamoramiento a distancia. El amor en tiempos de Internet
    2. Breve intento de aproximación a la problemática de la discordancia entre los sexos
    3. Acerca de las formas de ir mas allá del triángulo amoroso
    4. Algo que decir acerca de los celos
    5. Bibliografía general

    Amor, otra vez el amor?.

    Introducción informal al deseo de escribir nuevamente sobre el amor

    "El amor es una cuestión de coordinación,

    no alcanza con encontrar a la persona adecuada,

    sino es en el momento oportuno"

    2046 LOS SECRETOS DEL AMOR

    Amigo lector:

    Ha pasado poco mas de un año de la última vez que me senté a escribir para ti sobre el tema. En aquella oportunidad me despedí prometiendo que algún día, te diría algunas cosas más?¿ lo recuerdas? Tal vez hoy, sea ese día.

    En esta ocasión, siguiendo mi habitual desorganización y mi incapacidad para presentar mis ideas de un modo acabado y coherente, he decidido presentar mis escritos tal como se me han ido ocurriendo. Son tres artículos totalmente independientes entre sí, se pueden leer en cualquier orden y hasta se podrían publicar como tres pequeños trabajos bien diferenciados. Pero su cercanía en el tiempo de concepción, la temática que los enlazó y esta mismísima introducción, los convierte en parientes que al menos por esta vez, se verán juntos como si fueran uno y el mismo trabajo.

    El primero de ellos, intenta una reflexión acerca de los fenómenos de amor vía internet, es un escrito breve que me resulta muy simpático pues se apoya en una concepción bien Freudiana del enamoramiento para especular algo de lo que sucede con este tipo de amores en la red, hoy día tan populares.

    El segundo artículo me gustaria referirlo como literario (aunque no lo sea) versa sobre la temática del desencuentro que se produce en la vida amorosa de los sexos, ensaya una explicación y busca una salida al enríedo en el que párrafo a párrafo me voy metiendo…

    El tercero y ultimo de los artículos, el que cierra este trabajo, es un comentario del trabajo Freudiano acerca de los celos, la paranoia y la homosexualidad, así como también es un intento de aportar algo de mi propia creación…

    ¡Qué difícil es decir algo nuevo! A veces parecería que todo ya está dicho y uno no tiene más que contentarse con recorrer la huella que Otro alguna vez dejó… ¿¡Qué importa!? Persistiré una y otra vez en el intento de dejar, aunque más no sea, una pequeña marca que alguien, tal vez tú, amigo lector, algún día reconozca como mía.

    ENAMORAMIENTO A DISTANCIA. EL AMOR EN TIEMPOS DE INTERNET

    Siempre me ha parecido extraño que dos personas se conozcan y se casen a través de la red. Canales de chat, nicks, horas y horas frente a la maquina, intercambio apasionado de mails y finalmente el esperado encuentro. Infinidad de relaciones amorosas de todo tipo comienzan de esta manera, muchas terminan incluso en el altar. Un capitulo aparte merecen los casamientos vía Internet. Pero la temática de los amores en la red, sean del tipo que fuere, me parece, merece estar hoy entre los primeros abanderados de nuestros objetos de estudio, y es que en los últimos 10 años, este tipo de noticias no han dejado de sorprendernos, los casos han aumentado significativamente y esto no parece tener vuelta atrás.

    ¿Qué puede aportar el psicoanálisis a la comprensión de este tipo de fenómenos? ¿Acaso podremos arrojar alguna luz, o contribuir en algo a entender lo que aquí planteamos? ?Bien?no se pierde nada con intentarlo y la ganancia que podremos obtener si lo logramos considero justifica el esfuerzo.

    Quisiera remontarlos a los planteos, a mi criterio, más originales de Freud con respecto al funcionamiento del aparato psíquico. Aquel punto de vista económico, un tanto dejado de lado luego de los descubrimientos y la relectura de la teoría psicoanalítica a la luz de los fenómenos lingüísticos estructuralistas.

    Freud solía decir, cuando quería explicar las cosas de un modo sencillo, que el enamoramiento era una especie de rodeo que daba el sujeto en lugar de tomar el objeto deseado y saciar directamente su apetito sexual. Afirmaba que se trataba de una investidura de objeto de parte de las pulsiones sexuales cuyo fin no era otro que alcanzar la satisfacción sexual directa, pero que una vez lograda dicha satisfacción, la necesidad se extinguiría. Sin embargo, el hecho de saber que la necesidad mas tarde o más temprano volvería a despertar, tiene que haber sido, por fuerza, el motivo por el cual se vuelca al objeto sexual una investidura permanente, amándolo incluso en los momentos donde el apetito se encuentra ausente.

    Estoy siguiendo a Freud párrafo por parrafo, Ahora bien, la historia del desarrollo por la que atraviesa la vida amorosa de los seres humanos viene a agregar un segundo factor, a saber, el niño quien, Edipo mediante, había encontrado un primer objeto de amor en uno de sus progenitores, habiendo reunido en él todas sus pulsiones sexuales que pedían satisfacción, no pudo sino renunciar a ellas vía represión. Quedando en lo sucesivo ligado a ellos, pero con pulsiones de meta inhibida. Los sentimientos que en adelante albergará hacia sus padres reciben la designación de Tiernos. Siendo las anteriores aspiraciones de tipo Sensuales conservadas en el inconciente con mayor o menor intensidad.

    Al llegar la pubertad, se inician nuevas aspiraciones, muy intensas dice Freud, dirigidas a metas directamente sexuales. Se espera que la corriente tierna, "celestial" y la sensual "terrena" cooperen de modo que las pulsiones de meta no inhibida y la inhibida den lugar al enamoramiento. Enamoramiento que Freud opone al anhelo puramente sensual.

    ¿De qué manera reconoce Freud al enamoramiento? A saber, lo primero que distingue es el fenómeno de la sobreestimación sexual. El objeto amado goza de la exención de la crítica, sus cualidades son mucho más estimadas que en el resto de las personas de las cuales no se esta enamorado. Se ama sensualmente al objeto en virtud de sus excelencias anímicas. En pocas palabras, el objeto pasa a estar Idealizado.

    Lo que Freud afirma, es que en el enamoramiento se produce una represión o posposición de las aspiraciones sensuales. Dichas aspiraciones que esforzarían hacia una satisfacción sexual directa pasan a un segundo plano. Al mismo tiempo nos dice que toda satisfacción sexual rebajaría la sobreestimación sexual.

    Quiero que pongan especial atención en la teoría libidinal que utilizaba Freud para explicar estos fenómenos? "Discernimos que el objeto es tratado como el yo propio, y por tanto en el enamoramiento afluye al objeto una medida mayor de libido narcisista". Aquí la imagen que utiliza es la de un reservorio de libido que pasa del yo a los objetos que se invisten. En el enamoramiento lo que se produce es un empobrecimiento del yo en beneficio del objeto amado. "?el yo resigna cada vez más todo reclamo, se vuelve mas modesto, al par que el objeto se hace más grandioso y valioso, al final llega a poseer todo el amor de sí mismo del yo, y la consecuencia natural es el autosacrificio de este. El objeto, por así decir, ha devorado al yo".

    Tenemos ahora algunas herramientas sobre la mesa para ensayar una explicación al fenómeno de los enamoramientos vía Internet. Veamos ¿ Qué nos ofrece la red?

    Lo primero que salta a la vista es la ausencia de rasgos de nuestro objeto virtual de amor. Quedan fuera de juego, al menos en un primer momento la voz, la mirada, la sensualidad de los movimientos, el perfume (excluyendo con ello toda teoría naturalista hormonal de enamoramiento vía olfato). Lo que sí entra en juego es aquello que se escribe, ¿puro significante? Palabras, palabras (parole) que el futuro enamorado deberá creer o no para que algo del orden del amor se produzca.

    Sin duda la pregunta por los rasgos aparecerá mas tarde o más temprano, cada quien interrogará por los rasgos que causen su deseo y la charla proseguirá. La curiosidad de los potenciales amantes llevara o no a corroborar aquellos rasgos mediante pruebas adicionales que refuercen la palabra. Fotos, chateo con cámara, envío de archivos con voz, conversaciones telefónicas y hasta encuentros efectivos. Sin embargo, para que se produzca el enamoramiento en algunos casos alcanza con la palabra. Y en otros hace falta un poco mas?

    "Me gusta cuando callas? porque estas como ausente" Decía un gran poeta que algo sabía del amor. Siempre me pareció de lo más insultante la frase, a menudo me preguntaba si Neruda no había omitido un No delante?. Pero así era. El amor de Neruda era sin palabras, vaya a saber cual era el rasgo que veía en su musa inspiradora que apreciaba sus silencios.

    Hay Algunos rasgos que causan el deseo, otros rasgos en cambio, es preferible no verlos. Internet, resulta así una forma interesante de filtrar rasgos no deseados. Cada uno ve, lo que quiere ver? Si el objeto no consigue destacarse por alguno de los rasgos que despiertan la complacencia del sujeto, enseguida es descartado y se relanza la búsqueda. Si por el contrario, capta la atención del sujeto, bastaran algunos rasgos mas para encender la maquinaria del enamoramiento.

    Si toda satisfacción sexual con el objeto amado, reduciría la sobreestimación sexual. Internet se vuelve un sitio propicio para postergar dicha satisfacción. Las pulsiones de meta no inhibida, la corriente sensual no tiene otra alternativa que posponer su satisfacción mezclándose con la corriente tierna. El enamoramiento, quizás más puro, obtiene su vía regia para presentarse como el gran triunfador del juego.

    – Todo muy lindo, pero a través de Internet no todo es enamoramiento– Diría un interlocutor atento. Es cierto, para que se produzca un enamoramiento por esta vía considero necesario que el rasgo que causa el deseo en ambos esté fuertemente ligado a la palabra escrita.

    Cuando el anhelo es prevalentemente sexual, lo que prima es Internet como un paso previo al encuentro efectivo, sería un sistema de búsqueda donde también se pone en juego un potente filtro que intenta arribar al hallazgo de objeto con los rasgos que causan el deseo. Aquí la palabra escrita mas que un rasgo en si, es el medio para averiguar los rasgos deseados. Lo que interesa son las pruebas adicionales que puede ofrecer la red. Pruebas cuyo valor de verdad siempre resulta dudoso y sin embargo, permiten acercarse, previa cita claro está, al objetivo de la satisfacción sexual directa. En este caso, Internet se vuelve un medio mas, una forma mas de acercamiento para la vida amorosa de los seres humanos.

    ¿Qué es lo que hace a la red tan atractiva para que se produzcan este tipo de fenómenos? ¿Acaso es una moda? Las nuevas tecnologías, la curiosidad por los avances que trae aparejado el progreso, la necesidad de estar actualizado? no me parece una explicación suficiente para ensayar una respuesta tal.

    En primer lugar, me parece importante aclarar que si bien es cierto que Internet llegó para quedarse, y se ha convertido en un medio mas de comunicación de los ya conocidos. No por ello, es universalmente preferido a la hora de la búsqueda de la media naranja. Mas bien me inclino a pensar que se trata de un medio ideal para refugiar a un sin numero de sujetos cuyo rasgo predominante es la inhibición.

    El anonimato que ofrece Internet a la hora de entablar cualquier tipo de relación, pareciera que permite un despliegue discursivo muy particular en cada sujeto que a menudo suele diferenciarse bastante a la forma de manifestarse en el mundo que cada cual pudiera tener. Como si la ausencia de objetos como la voz y la mirada abrieran un campo distinto de relación con el semejante. O dicho al revés, como si la mirada y la voz del otro (¿Otro?) pudieran de alguna forma ser engañadas por un sujeto que juega a sentirse libre de ellas…

    MARZO DE 2006

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