Introducción:
El partido que he escogido es la Unión Demócrata Independiente (UDI), considerándolo como reflejo de la derecha chilena y de mis intereses propios, fundamentándome en los principios del partido. De igual forma expresaré su evolución política a lo largo de la historia de nuestra nación, intentando de comprobar las palabras de Pablo Longueira, ex presidente de la UDI: "Si hay algo que ha caracterizado a la UDI en toda su existencia, es la continúa búsqueda de superación y mejoramiento…". (www.udi.cl)
Igualmente encuentro interesante efectuar un trabajo sobre la derecha chilena, tomando en cuenta el trabajo ya presentado sobre Luis Corvalán, ex dirigente del partido comunista, considero que para mi formación es trascendente la comparación de las diversas fuerzas políticas que conviven hasta nuestros días, como el poder llegar a efectuar una comparación de aquellos ideales opuestos.
Historia de la UDI:
Durante la década de los sesenta surgen los pilares del que será el futuro partido de la Unión Demócrata Independiente (UDI), dentro de un grupo reducido de la Universidad Católica y dirigido por la persona de Jaime Guzmán Errazuris. Dichos pilares son lo engendrado por el pensamiento de la derecha, frente al ascenso de los ideales de la izquierda marxista dentro del mundo universitario.
- El Chile de los 60’:
Los sesenta significaron una gran encrucijada para Chile, sumergido en una amarga crisis político-social y un malestar económico notable, que venían agitando el régimen desde 1952, cuando el Partido Radical rompe relaciones con los partidos de izquierda, genera el ascenso de Carlos Ibáñez del Campo a un segundo periodo presidencial, sucesos que efectivamente daban a vislumbrar que la nación entraba en una aseverada crisis política, que a la larga, seria fatal.
Pero la ruptura radical-izquierda no fue lo único que suscito una crisis, en primer termino, a lo largo de los años, la masa de votantes iba en aumento, y se caracterizaba por su mayor libertad en el acto de sufragar. Se fue así volviendo indomable.
Como resultado de este crecimiento, los votantes aumentaron de un 17,5% en el año 1952, a un 36,5% en el año 1970. Ahora si vemos las cifras absolutas, nos podemos percatar que el aumento de votantes entre 1946 y 1970 fue de 2.900.000 personas. El cuerpo electoral aumento de este modo por diversos motivos, ya sea por la continuidad de la política legisladora de la libertad de sufragio, que, por ejemplo, en 1949 doto a la mujer de sufragar en cualquier tipo de elección, o en 1970, cuando se autoriza el sufragio a los analfabetos y rebajando la edad mínima para votar a dieciocho años; por otra parte el aumento del alfabetismo y, la difusión y acrecimiento de diversos medios de comunicación escrita de la época, como los diarios y revistas semanales, los cuales abarcaban diversos temas políticos desde los más diversos puntos de vista, agregando las radioemisoras y la televisión, que se sumarian posteriormente.
La reacción de las masas electorales no fue como se esperaba, esta empezó a oscilar con gran rapidez y violencia entre las diversas posiciones políticas, lo que justifica, por ejemplo el retorno de la derecha al gobierno por Jorge Alessandri o la instauración de un gobierno de corte marxista-leninista por Salvador Allende, en un lapso de doce años.
La inestabilidad del electorado, fue dominada por las políticas publicitarias, aquel que fuese capas de ganarse la atención de la gente ascendería, y aquel que se mantuviese aislado descendería, como fue el caso del Partido Radical, que en un lapso de veinte años oscilo violentamente su representación parlamentaria, como se observa en el siguiente grafico:
El malestar económico, visible desde la década de los cincuenta, se torno otro factor de inestabilidad en el país. Aquella inestabilidad se traduce en una serie de explotaciones de violencia social, como los sucesos de la Población José María Caro, bajo Jorge Alessandri (1962) o los de El Salvador (1966), Puerto Montt y Pampa Irigoin (1969), bajo Frei. Esas explotaciones violentas eran protagonizadas generalmente por los "marginados", como se les llamaba en la época, los cuales representaban el 20% de la población chilena, siendo el sector que participaba en menor grado en los beneficios de la sociedad, no pudiéndose extrañar su continua intranquilidad.
Reiterados gobiernos intentaron hacerle frente a los "marginados", como fue el caso de las legislaciones bajo el gobierno de Frei, las cuales buscaban integrarlos a la sociedad mediante sindicatos y juntas de vecinos (1967-68), entre otros, que a fin de cuentas no pudieron concluir con el malestar. En otros casos, grupos como el MIR empezaron a movilizar a los "marginados" para fines políticos, con crecientes respuestas favorables.
El crecimiento económico no parecía satisfactorio, existían ciertas áreas económicas que inspiraban aseveradas inquietudes, las cuales fueron afrontadas con tres "recetas" diversas –las de Jorge Alessandri, Eduardo Frei y Salvador Allende-, cada una de las cuales fuera, en su momento, acogida con mucha esperanza por las masas electorales.
En el ámbito agrícola, cada vez era necesario importar más alimento. La vivienda fue otro factor inquietante, su déficit continuaba en aumento. Los sectores de previsión cursaban una honda crisis, que aunque los sectores poderosos contaban con los beneficios para afrontarla, los trabajadores y marginados quedaban en la nulidad ante dicha inestabilidad. La mayor parte de dichos fondos de previsión iban en decadencia, ya sea por la mala administración de estos o por el aumento de la inflación. Para contener dichas situaciones, el estado aportaba grandes sumas de dinero para sostener un sistema cercano al colapso, que como fuese, el ritmo económico no daba la suficiente conformidad.
Durante aquel decenio, los presidentes Jorge Alessandri (1958-1964), apoyado por la derecha, y Eduardo Frei Montalva, apoyado por los partidos de izquierda, uno de los fundadores del partido democristiano chileno, compartieron ideales contrapuestos; mientras que Alessandri no contó con el apoyo parlamentario necesario para afrontar al máximo la amarga crisis, logro, como merito, estabilizarla en cierto modo; mientras que la política de Frei, basada en una idea de "planificación global", especialmente en lo socioeconómico y con escasas modificaciones políticas, tuvieron un gran impacto en la sociedad, desgraciadamente , ninguna colectividad o coalición de partidos que sustentara estos planes (como los democristianos o comunistas, fervientes defensoras de planes con dicha base) lograron reunir las fuerzas políticas, electorales y parlamentarias indispensables para imponer el programa. Este fue así, un elemento de desunión y crisis, aunque contuviese elementos positivos.
Aunque presidentes como Alessandri o Frei hayan tenido intenciones positivas, nunca se pudo detener los avances de la inflación, que sirvió como contrapartida a las políticas sociales aplicadas desde los 50’, agudizando la crisis. Aunque todos los presidentes prometieron y quisieron combatir y contener la inflación, esta no pudo más que mantenerse a raya. El acrecentamiento del gasto publico, y un precio del dólar mantenido artificialmente bajo, provocaron una violenta perdida de reservas internacionales, y una honda crisis hacia finales de 1961. Para afrontarla, el gobierno de Alessandri hubo de elevar el valor del dólar en moneda chilena, o sea, devaluar el peso. Lo cual, hacia finales de aquel mismo año, impidieron seguir controlando los gastos, haciéndose incontrolable el costo de la vida. La inflación continúo en forma galopante al finalizar el gobierno de Alessandri, quien, siendo un gran estadista, pudo mantener a raya la inflación, como muestra el siguiente gráfico:
Aunque la devaluación de la moneda chilena cobro mayor agudeza en el gobierno de Alessandri, no significa que haya dado inicio en aquéllos momentos, como indicara el siguiente grafico, partiendo desde el presidente Gabriel Gonzáles hasta Salvador Allende, se expondrá los grados de inflación:
Concluyendo, podemos decir que el fracaso obtenido por las planificaciones de derecha y las democristianas abrieron paso para el ascenso de Salvador Allende, quien intento instaurar un gobierno de corte marxista-leninista. Mientras la crisis de final de régimen llegaba a su fin, en el mundo estudiantil se difundían las ideas marxistas, mientras que un grupo minorico de la Universidad Católica de Chile, liderado por Jaime Guzmán Errazuris, hará frente a dichos pensamientos que inundaban la educación superior, manteniendo el carácter derechista en su filosofía: el gremialismo. Base de la actual Unión Demócrata Independiente.
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