Mediante el presente texto hemos querido escribir algunas líneas, que son el resultado de una reflexión de algunos temas que nos han llamado profundamente la atención y pertenecen a nuestra realidad cotidiana, que se relacionan con procesos de intercambio económico y cultural que se dan a menudo en el sector de la feria pinto, la cual se ubica en el sector de la estación de ferrocarriles de Temuco, en la cual podemos encontrar una infinidad de productos, verduras, frutas, legumbres, diferentes tipos de carnes, lácteos, inclusive artesanía.
En este sentido es importante clarificar que como un insumo para este ensayo se nos ha proporcionado un material bibliográfico, el cual contiene diferentes testimonios reales de personas que conviven diariamente con este mundo, que pertenecen a el. Podemos decir que estas personas han otorgado un poco de su tiempo y han detenido sus labores para poder contarnos como es que desarrollan sus actividades diarias.
La vida en este rubro no es fácil, el trabajo es muy duro, y los procesos de reproducción de formas y estilos de vida que se dan en este entorno, en nuestra Feria Pinto, a solo minutos de nuestros hogares, plasmados de modernidad, por el lado en que los observemos, con olor a capitalismo, materialismo, etc., generalmente pasamos por este lugar sin poder pensar, ni siquiera imaginar que detrás de estos productos que adquirimos existe una persona con toda una historia de vida, una cultura diferente a la que vemos todos los días en los diferentes sectores de nuestra sociedad, en la cual se entremezclan estos fenómenos y procesos creando una especie de mundo dentro de otro mundo, el que se resiste diariamente a incluirse dentro del nuevo sistema económico implantado en nuestro país, el cual es observado como un sistema hostil y de competencias, que genera individualismo entre las personas, no podemos dudar que este nuevo sistema económico no es compatible con estas formas de vida, debido a que son completamente opuestos, a nuestra opinión.
Podríamos decir que muchas de estas personas que trabajan en este lugar aprendieron como hacerlos desde sus ancestros, "…son, en su mayoría, nietos de los primeros feriantes de Temuco…"(Davinson, Ketterer, 75)es una cultura transmitida de generación en generación, en la cual no solo se traspasan conocimientos, sino que sistemas y formas de vida y subsistencia para sus familias, es un trabajo familiar, el cual muchas veces incluye a la totalidad del grupo familiar, para una mayor efectividad de sus esfuerzos, estos procesos son muchas veces pasados por alto, dentro de la sociedad y no comprendemos el por que de que no opten por otras alternativas que le podrían otorgar mayores rentas, pero no se piensa más aya de lo que se ve, es un sistema cultural que se transmite de padre a hijos o de madres a hijas, desde pequeños los niños y niñas están insertos en esta forma de vida, muchas veces observando como es que lo hacen sus padres, otras para aprender, en categoría de principiantes, y luego también se dedican a esta labor, esto no quiere decir que en todos los casos se de de la misma forma el proceso, eso dependerá de la particularidad e intereses de todas las personas, ya que muchas veces no se dedican a esto y cambian de labor, y por lo tanto de estilo de vida.
Desde el comienzo del siglo XX, podemos decir aproximadamente, las mujeres han luchado por tener un papel preponderante en el ámbito laboral, desde ese entonces y con mucho sacrificio, incomprensión y en una sociedad mayoritariamente machista, logrando insertarse en este mundo, para aportar con un salario a la familia, es el caso de las mujeres asalariadas en un trabajo formal, pero hay otro grupo de mujeres que no entran en este circulo "selecto" y son las que salen de su hogar a ganarse la vida como vendedoras ambulantes, temporeras, feriantes, etc., y muchas de ellas lo hacen porque son madres solteras, separadas o abandonadas por sus parejas o maridos, las que quedan con la responsabilidad de criar, alimentar y educar a sus hijos e hijas, (no obstante no podemos generalizar expresando que este es el caso de todas las mujeres que trabajan en este ámbito)
En el caso puntual de las mujeres que trabajan en la feria, muchas de ella son de origen mapuche, que viven en sectores aledaños de la capital regional, las que tienen que levantarse muy temprano para comenzar con su jornada laboral, y llegar con sus productos al lugar donde serán comercializados, algunas de ellas incluso van con sus hijos más pequeños porque no tienen donde ni con quienes dejarlos, ya que como es obvio en sus sectores no cuentan con jardines infantiles, menos con salas cunas, que permitan que ellas vayan tranquilamente a realizar sus labores.
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