José Raúl Delgado Diez, paradigma en la formación de valores de las nuevas generaciones deportivas
Enviado por Lic. Hirán Marcelo Compte Ruíz
Resumen
En este trabajo se aborda el fortalecimiento de los valores en las nuevas generaciones de deportista de nuestro municipio teniendo como paradigma la trayectoria deportiva y el ejemplo de José Raúl Delgado Diez, gloria del deporte y único atleta olímpico de nuestro municipio. .Mediante el empleo de métodos de investigación empleados pudimos estudiar aspectos relacionados con el tema, y el empleo de técnicas investigativas nos permitieron el desarrollo del mismo. Se demostró la importancia de divulgar la vida y trayectoria de esta gloria y el empleo de esta experiencia en el trabajo de formación de valores de las nuevas generaciones de atletas. El desarrollo del mismo constituye una vía para estimular el trabajo de estas personas que al concluir su vida como atletas activos continúan aportando valores para el desarrollo del deporte cubano. Recomendamos la divulgación de este trabajo y su aplicación en todas las ECDER de nuestro municipio.
Introducción
La formación de valores contribuye a lograr en los atletas sentimientos de respeto ante el trabajo y de todos los trabajadores del país, de orgullo por los éxitos alcanzados en nuestro desarrollo y alegría por poder participar activamente como elogiar lo bueno criticar los errores, intercambian criterios, colaboran con los demás brindando nuestro compañerismo a otros pueblos del mundo brindando nuestros recursos materiales y humanos.
Toda sociedad aspira a formar un determinado modelo de hombre, entre diferentes sociedades seguros que obran valores comunes como es la honestidad, solidaridad, la sinceridad, el patriotismo entre otros, pero no quiere decir ello que las costumbres, las leyes, las normas le den igual connotación, lo cual esta además asociado al momento histórico. Al igual que abra sociedades que le den un paso muy grande a determinados valores, como la justicia, la solidaridad, por citar algunos.
Ese modelo de hombre a formar en cada sociedad existe, y será siempre el punto de referencia de la educación, lo que no es más que la exigencia de la sociedad respecto al hombre a formar.
Un modelo que se ajuste a las posibilidades y características de las diferentes edades y que sirvan de referente al docente, al padre y al propio estudiante. Así, un ideal al alcance de todos, permitirá el contraste con lo real que se da en cada individuo, como orientación para el docente en el docente y el propio estudiante, de las metas a trazar en la formación.
En la formación de valores interactúan otros componentes que tienen un paso esencial en los sentimientos y las cualidades y el cumplimiento consiste de las normas de comportamiento social, el ideal aspirado, los motivos e intereses de la persona, interactúan en el complejo proceso de formación de valores
La doctora Esther Báxter Pérez en libro de Compendio de Pedagogía define que a la escuela, le corresponde desempeñar un papel determinante en la formación de valores, para ello es necesario efectuar transformaciones en el trabajo educativo, por lo que resulta fundamental que este oriente de forma tal que permita potenciar en cada estudiante, el significado y el momento histórico que vive.
El sistema de valores, esta directamente vinculado con la forma de vida de la sociedad, lo que origina que al cambiar las relaciones sociales y sobre todo las económicas se establecen nuevos valores, lo que tienen lugar mediante una tenaz lucha ideológica, esto debe ser tomado en cuenta por el educador, a los efectos de no perder la oportunidad en cada momento de trabajo de hacer conciente a sus estudiantes de lo correcto e incorrecto en cada una de sus acciones.
El doctor Gilberto García Batista en el libro de Compendio de Pedagogía plantea sobre la necesidad de reforzar el trabajo educativo, donde la escuela, el maestro, la familia y todos los ajenos de la comunidad juegan un papel esencial. Los valores contribuyen a que una persona, una institución o una sociedad establezcan sus rumbos, métodos y fines, constituyen guías generales de conducta que se derivan de la experiencia y la edad a la vida, propicia su calidad de tal manera que está en relación con la realización de la persona y fomenta el bien de la comunidad y la sociedad en su conjunto.
Se puede hablar de los valores en un doble sentido: de lo que vale un objeto para satisfacer una necesidad y por otro lado en dependencia de constituir la meta de la vida.
Tener valores es estimar un objeto, un principio, es ubicar las cosas por orden de importancia es decir lo que es más importante en un determinado momento y luchar por ello. Es ubicar y jerarquizar los vienes materiales y espirituales en orden de importancia.
Esta jerarquía de valores se forma en el individuo en su interacción con las diferentes esferas de la vida: Escuela, familia comunidad, ambiente físico ambiente sociocultural entre otros.
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