II. Propuesta de un modo de actuación para incorporación de lo ambiental en el proceso pedagógico general.
La realización de la dimensión ambiental debe partir de su adecuada planificación, organización, ejecución y control ajustada al diagnóstico medioambiental con fines pedagógicos existente en cada centro, a las prioridades, y a las precisiones de los objetivos formativos de educación ambiental en cada tipo de educación, grados y programas de asignaturas, así como de los objetivos de la educación ambiental declarados en la Conferencia Internacional de Tbilisi (1977); los que se adecuarán a partir de considerar minuciosamente los principios de la educación ambiental, también establecidos en la conferencia referida y de las estrategias medioambientales territoriales de educación ambiental.
La ambientalización del proceso pedagógico deberá abarcar las diversas formas organizativas, y vincularse con todos los factores, incluyendo la familia y la comunidad.
En cada centro deberá crearse un equipo multidisciplinario de educación ambiental encargado de atender las líneas de trabajo en este sentido. El mismo se ocupará de organizar el diagnóstico inicial y en su evolución, así como de estudiar sus resultados, y todas las normativas establecidas para identificar, a partir de las contradicciones entre el estado actual y el estado deseado, las necesidades fundamentales hacia las cuales deberá enfocarse el trabajo ambiental. Una vez determinadas las principales carencias, se valorarán las posibilidades de su cumplimiento y se confeccionará un prediseño con las posibles acciones y metas en los primeros días del mes. El mismo se someterá a un análisis en la Cátedra Martiana como órgano funcional, para su valoración y posible enriquecimiento con la experiencia acumulada por el colectivo de docentes, incluyendo la participación de las organizaciones, y miembros del entorno no escolar; es aquí donde se tomarán las primeras decisiones colectivas, y seguidamente en los diferentes niveles u órganos de dirección (consejo de dirección, ciclos, grupos y departamentos).
Al menos, un representante del equipo multidisciplinario, deberá pertenecer a la Cátedra Martiana. Estas acciones generales estarán contempladas en la primera semana del sistema de trabajo.
En cada uno de los distintos niveles se tomarán las decisiones en correspondencia con los intereses generales y específicos, y necesidades que estos tengan, las que deberán caracterizarse por el desarrollo de un proceso comunicativo adecuado. La toma de decisiones con el consenso de todos los participantes debe constituirse en la premisa para colegiar las propuestas de acciones, principalmente aquellas que deben concebirse en función de la preparación metodológica en aspectos medioambientales, la que será adecuada a todas las actividades metodológicas, en los distintos espacios y por las diferentes vías de realización.
En cada nivel de dirección se elaborará el diseño definitivo con las propuestas de acciones, según corresponda en sus diferentes formas organizativas: docentes, extradocentes, y extraescolares, para su ejecución correspondiente.
Un lugar importante ocupa la ambientalización de los programas de las asignaturas, la que incluye la determinación de conocimientos, habilidades, valores, etc., y el trabajo con los núcleos cognitivos interdisciplinarios a partir del análisis y aprovechamiento de las potencialidades educativas de los contenidos en función de los aspectos ya señalados anteriormente. El encargado principal de esta actividad es el profesor. Precisamente, en la preparación metodológica de los niveles más inmediatos es necesario preparar al maestro o profesor para que perfeccione constantemente la incorporación de la educación ambiental, y que es hacia donde se dirige el contenido de este trabajo.
Paralelamente se produce, en los diferentes niveles de dirección, y de acuerdo a la planificación del sistema de trabajo en cada centro, el control y la evaluación mensual, que permite la actualización del diagnóstico mediante un proceso iterativo. Anexo: Fig.1.
Conclusiones
La incorporación de la dimensión ambiental es un recurso metodológico que ayuda a la integración, en el proceso pedagógico, de elementos ambientales. Es la concreción de la educación ambiental.
La realización de la dimensión ambiental debe partir de su adecuada planificación, organización, ejecución y control ajustada al diagnóstico medioambiental con fines pedagógicos existente en cada centro, así como a los documentos normativos del Ministerio de Educación.
En cada centro deberá crearse un equipo multidisciplinario de educación ambiental. En la Cátedra Martiana se tomarán las primeras decisiones colectivas, y seguidamente en los diferentes niveles u órganos de dirección (consejo de dirección, ciclos, grupos y departamentos).
Al menos, un representante del equipo multidisciplinario, deberá pertenecer a la Cátedra Martiana.
En cada uno de los distintos niveles se tomarán las decisiones en correspondencia con los intereses y necesidades generales y específicas que estos tengan.
En cada nivel de dirección se elaborará el diseño con las propuestas de acciones.
En la preparación metodológica de los niveles más inmediatos es necesario preparar al maestro o profesor para que perfeccione constantemente la incorporación de la educación ambiental.
La ambientalización de los programas de las asignaturas es responsabilidad de los profesores.
El control y la evaluación mensual en los diferentes niveles de dirección se realizarán de acuerdo a la planificación del sistema de trabajo en cada centro.
Referencias
1 Citado por: González Muñoz, María del Carmen.: en Características de la Formación Continuada en Educación ambiental del profesorado del nivel medio. Revista Iberoamericana de Educación. No 16 – Educación Ambiental y Formación: proyectos y experiencias. CD– ROM.: Educación Ambiental para el Maestro. Hacia una cultura para el desarrollo sostenible. GIGEA. La Habana, Cuba, S/a.
2 Citado por Colectivo de Autores en Bases Conceptuales de la Formación Ambiental. Manual Metodológico para Capacitadotes Ambientales. Módulo de Formación Ambiental Básica. Proyecto: Acciones Prioritarias para Consolidar la Protección de la Biodiversidad en el Ecosistema Sabana – Camagüey. CUB/ 98 / G 32 – Capacidad 21. p. 2.
3 Citado por Ayes, G.N en Educación Ambiental. Medio Ambiente y Desarrollo. Editorial Científico – Técnica. La Habana, 2003.p. 165.
4 Citado en El proceso formativo. Didáctica. La Escuela en la Vida. Editorial Pueblo y Educación. La Habana, 1999. p. 2.
5 Citado por María Novo en la década de los años 70: de Estocolmo a Tbilisi. La Educación Ambiental. Bases éticas, conceptuales y metodológicas. Editorial Universitas, S.A. Madrid, 1998. p. 40.
6 Citado en Formación laboral: precisiones conceptuales. Testa Frenes, Armando/ Pérez Lemus, Leonardo. Educación, Formación Laboral y Creatividad Técnica. Editorial Pueblo y Educación. La Habana, 2003. p.35.
7 Estrategia Nacional de Educación Ambiental. Citada el textos de Educación Ambiental. CD – ROM, Educación Ambiental para el maestro. S/a.
8 Mc Pherson Sayú, Margarita y otros en: Estrategia Metodológica Nacional de Educación Ambiental en los Institutos Superiores Pedagógicos: una propuesta para todos. La Educación Ambiental en la formación de docentes. Editorial Pueblo y Educación: La Habana, 2004. p.245.
9 Mc Pherson Sayú, Margarita. Citado por Marta Álvarez Pérez en la educación ambiental como vía de concreción de la interdisciplinariedad: una aproximación desde la Enseñanza – Aprendizaje de las Ciencias. Compilación. Editorial pueblo y Educación. La Habana, 2004. p. 307.
10 Citado en Vías que contribuyen a transformar los modos de actuación en el desempeño profesional de docentes de Secundaria Básica. Informe Final del Proyecto asociado al Programa Ramal II, CDIP. Capitán Silverio Blanco Núñez, Sancti Spíritus, 2001. p. 8.
Bibliografía
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2.- Álvarez de Zayas, Carlos M. Didáctica. La Escuela en la Vida. Editorial Pueblo y Educación. La Habana, 1999.
3.- Álvarez de Sayas, Carlos M:. La Pedagogía como Ciencia. Editorial Pueblo y Educación. La Habana, 1998.
4.- Álvarez Pérez, Marta. Interdisciplinariedad: una aproximación desde la Enseñanza – Aprendizaje de las Ciencias. Compilación. Editorial pueblo y Educación. La Habana, 2004. p. 307.
5.- CD- ROM.: Educación Ambiental para el Maestro. Hacia una cultura para el desarrollo sostenible. GIGEA. La Habana, Cuba, s/a.
6.- G. N. Ayes, Ametller:. Medio Ambiente, Impacto y Desarrollo. Editorial Ciencia y Técnica. La Habana, 2003.
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9.- Manual Metodológico para Capacitadotes Ambientales. Módulo de Formación Ambiental Básica. Proyecto: Acciones Prioritarias para Consolidar la Protección de la Biodiversidad en el Ecosistema Sabana – Camagüey. CUB/ 98 / G 32 – Capacidad 21.
10.-Remedios, Juana María:. Informe Final del Proyecto asociado al Programa Ramal II. CDIP, ISP. Capitán Silverio Blanco Núñez, 2001.
11.-Testa Frenes, Armando/ Pérez Lemus, Leonardo. Educación, Formación Laboral y Creatividad Técnica. Editorial Pueblo y Educación. La Habana, 2003.
Anexo
Autor:
Lic. Raúl Calvo Gómez
Profesor asistente en la especialidad de Geografía del departamento de Ciencias Naturales
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