Descargar

Perfil antropométrico y prevalencia de sobrepeso de los escolares de Ubrique. Cádiz (página 2)


Partes: 1, 2

RESULTADOS

Del total de niños estudiados (493), 51,1% eran varones (48.9% niñas) con la distribución por edad y sexo de las variables estudiadas que se refleja en las tablas 1 y 2.

Tabla 1 Parámetros antropométricos (Valores medios y desviaciones estándar) obtenidos en los escolares de la localidad de Ubrique, Cádiz.

EDAD

Nº ALUMNOS

TALLA

PESO

PLIEGUE CUTANEO

PERIMETRO BRAQUIAL

Niñas

Niños

Niñas

Niños

Niñas

Niños

Niñas

Niños

Niñas

Niños

4

15

14

106.9 (4.9)

105.4 (4.7)

18.2 (3.4)

17.9 (2.5)

10.2 (1.6)

10.8 (3.9)

17.2 (2.5)

17.3 (1.3)

5

18

21

110.6 (3.1)

114.3 (4.4)

19.7 (2.0)

20.7 (2.4)

10.5 (1.9)

10.0 (2.1)

18.3 (1.6)

18.0 (1.5)

6

22

23

116.3 (3.8)

119.6 (4.1)

21.7 (2.9)

22.4 (4.1)

10.6 (3.0)

9.8 (5.2)

18.6 (2.3)

18.2 (2.1)

7

21

25

121.9 (4.5)

123.5 (4.0)

24.3 (3.7)

25.6 (4.8)

12.1 (4.0)

10.6 (3.8)

19.2 (1.8)

19.1 (2.4)

8

22

21

128.2 (4.5)

129.8 (4.5)

27.9 (6.9)

28.3 (4.7)

13.8 (7.1)

11.9 (5.1)

20.2 (3.1)

19.4 (2.8)

9

27

23

133.1 (5.5)

134.4 (5.9)

30.3 (4.6)

30.7 (2.7)

15.0 (5.3)

11.5 (4.2)

21.0 (2.8)

19.9 (1.6)

10

24

32

142.0 (6.0)

140.2 (6.4)

36.0 (6.9)

38.0 (9.5)

15.2 (3.9)

15.2 (8.0)

21.3 (2.2)

22.1 (3.5)

11

23

26

142.5 (8.9)

142.4 (5.3)

34.5 (8.9)

35.4 (6.5)

12.2 (4.4)

13.0 (7.9)

21.1 (2.9)

20.8 (3.7)

12

29

26

151.5 (6.5)

148.7 (7.2)

44.2 (9.1)

42.7(8.0)

16.1 (5.1)

12.9 (4.7)

23.7 (3.0)

22.6 (2.4)

13

28

28

155.8 (7.0)

156.6 (7.7)

51.1 (13.1)

48.2 (8.2)

18.9 (7.7)

12.5 (6.7)

24.9 (3.5)

23.6 (2.5)

14

12

13

156.2 (5.0)

162.2 (8.8)

51.2 (6.6)

57.1 (13.5)

17.0 (5.4)

13.6 (9.3)

25.1 (2.5)

25.8 (4.3)

Tabla 2 Indice de masa corporal. Valores medios y desviaciones estándar en los escolares de Ubrique y población de referencia.

EDAD

Nº ALUMNOS

INDICE DE MASA CORPORAL

NIIÑAS

NIÑOS

Niñas

Niños

Ubrique

Estándar

Ubrique

Estándar

4

15

14

15.9 (2.3)

16.2 (1.5)

16.1 (1.9)

16.2 (1.2)

5

18

21

16.1 (1.4)

16.2 (1.6)

15.8 (1.5)

16.0 (1.2)

6

22

23

16.0 (1.7)

16.5 (1.8)

15.6 (2.1)

16.3 (1.4)

7

21

25

16.3 (1.9)

16.6 (2.1)

16.7 (2.7)

16.5 (1.7)

8

22

21

16.8 (3.2)

16.8 (2.1)

16.8 (2.5)

16.7 (1.8)

9

27

23

17.0 (2.3)

17.1 (2.3)

17.0 (1.3)

16.8 (2.0)

10

24

32

17.8 (2.7)

17.5 (2.4)

19.1 (3.6)**

17.1 (2.1)

11

23

26

16.8 (3.0)*

18.2 (2.6)

17.4 (2.6)

17.7 (2.4)

12

29

26

19.1 (3.0)

18.6 (2.6)

19.2 (2.7)

18.2 (2.5)

13

28

28

20.8 (3.7)*

19.3 (2.8)

19.5 (2.5)

18.7 (2.6)

14

12

13

20.9 (2.3)

20.4 (2.8)

21.7 (4.9)*

19.4 (2.8)

*p< 0.05; ** p< 0.01

Las tallas medias, en todas las edades y sexos de los escolares, fueron superiores a las estándares de referencia, siendo esta diferencia mayor en los más pequeños para ir disminuyendo paulatinamente a medida que aumentaba la edad. Sin embargo, cabe destacar el descenso observado en este parámetro a la edad de 11 años en ambos sexos (figura 1).

Figura 1 Talla y peso de los escolares de Ubrique y población de referencia. 

En los varones, solamente un alumno (0.4%), quedó por debajo del percentil 3 de las tablas de referencia y el 11.1 % del total se encontraba por encima del P97 (tabla 3).   

Tabla 3 Distribución de las medidas antropométricas obtenidas en los escolares de la localidad de Ubrique respecto a la población de referencia.

Medidas y Percentiles

NIÑAS % (n)

NIÑOS % (n)

TOTAL %

TALLA · P3 > P50 > P97

1.24 (3) 65.14 (157) 7.46 (18)

0.39 (1) 76.98 (194) 11.11 (28)

0.81 71.19 9.33

PESO · P3 > P50 > P97

1.65 (4) 58.09 (140) 6.22 (15)

1.98 (5) 65.07 (164) 10.71 (27)

1.82 61.66 8.51

P. BRAQUIAL · P3 > P50 > P97

0.41 (1) 65.14 (157) 9.54 (23)

0.00 (0) 69.84 (176) 10.71 (27)

0.20 67.54 10.14

P. CUTANEO · P3 > P50 > P97

0.82 (2) 54.35 (131) 3.31 (8)

0.79 (2) 54.36 (137) 10.31 (26)

0.81 54.36 6.89

I. M. C. · P3 > P50 > P97

1.65 (4) 43.56 (105) 7,05 (17)

1.98 (5) 50.39 (127) 9.52 (24)

1.82 47.05 8.31

En las niñas, 3 alumnas (1.2%) quedaron por debajo del P3 y el 7.4% por encima del P97 (tabla 3).

Los valores medios de peso para las distintas edades y sexos, fueron superiores a los estándares en casi todas las edades, siendo esta diferencia más evidente en los grupos de edad mayor. Al igual que en la talla, volvió a observarse una bajada a los 11 años en ambos sexos (figura 1).

Hay que destacar que 5 alumnos varones (1.9%) y 4 niñas (1.6%) se situaron por debajo del P3 y 10.7 % de alumnos y 6.2% de alumnas por encima del P97. (tabla 3).

En el perímetro braquial como en los parámetros anteriores, los escolares estudiados presentaban valores medios superiores a los considerados estándares, salvo a los 11 en las niñas (figura 2).

Figura 2 Perímetro braquial y pliegue cutáneo tricipital de los escolares de Ubrique y población de referencia.

En la comparación de esta variable con los percentiles de referencia, sólo una alumna (0.4%) presentaba cifras por debajo del P3 y el 9.5% de ellas, se situaban por encima del P97 (tabla 3).

En los varones, no encontramos ningún alumno por debajo del P3 y el 10.7%, por encima del P97 (tabla 3).

Los valores del pliegue cutáneo tricipital, volvieron a ser superiores a los de Hernández et al. 7 en todas las edades, salvo a los 11 en las niñas (figura 2).

En la valoración percentilada del pliegue cutáneo de la población estudiada, nos encontramos que el 6.9% de estos alumnos, en su mayoría varones (10.3 %), se situaban en valores extremos de este parámetro (> P97) (tabla 3).

Finalmente y respecto al IMC, no se encontraron diferencias significativas entre nuestra población y la de Hernández et al. 7, salvo en los varones de 10 y 14 años que fueron superiores al estándar, y las niñas de 11 que presentaban valores más bajos, y las de 13 años con valores algo superiores. En general puede apreciarse, que los valores en la población estándar eran superiores en las edades más jóvenes (4 a 7 años), mientras que en los niños de Ubrique de ambos sexos los resultados eran superiores en las edades mayores (12 a 14 años) (tabla 2).

Si consideramos al porcentaje de niños con valor del IMC superior al P97, observamos que existen 9.5% de varones y 7.1% de niñas que se situaban a este nivel. Igualmente si consideramos en sobrepeso a aquellos alumnos con IMC ³ 25 Kg/m2 , vemos que solo 20 niños (4%) se encontraban en esta situación, con un mayor número de casos a partir de los 12 años (13 casos), sin que existieran grandes diferencias por sexos (55% varones y 45% niñas).

DISCUSIÓN

Diferentes autores, coinciden al señalar que el nivel de salud y nutrición de una comunidad infantil, se debe evaluar con parámetros referidos al crecimiento y desarrollo. La técnica antropométrica ofrece un método práctico y sencillo para esta valoración a nivel poblacional 10. Sin embargo, la validez de sus procedimientos ha sido a veces cuestionada ya que va a depender de una serie de factores como la elección de parámetros suficientemente sensibles, la precisión en la recogida de datos, la utilización de estándares o patrones de referencia adecuados y la interpretación correcta de los resultados.

En este trabajo se pretende conocer el perfil antropométrico y la prevalencia de sobrepeso de un colectivo de alumnos ubicados en una zona de la sierra gaditana que a pesar de tener carácter rural, posee una marcada actividad industrial, con una bolsa importante de economía sumergida que dificulta el conocimiento del nivel socioeconómico real de la población 11.

Con relación a la metodología utilizada, hay que decir que la recogida de la información por un solo observador y con medidas repetidas, avala la fiabilidad del estudio. Igualmente el haber sido realizado en una muestra importante de los escolares de la zona, nos permite considerar los resultados como representativos de la población en este grupo de edad. Por otra parte, los parámetros antropométricos utilizados son los más generalmente aceptados12 y se ajustan bastante a lo establecido en el Consenso Español de 1995 8.

Con respecto al estándar utilizado, elegimos el de Hernández et al. 7 pues a pesar de ser un trabajo realizado en una población de una zona geográficamente bastante diferente, se trata de un estudio longitudinal muy utilizado como referencia en pediatría.

Entre los resultados obtenidos, se podría destacar que los niños de Ubrique presentan en los parámetros estudiados valores superiores al estándar de referencia, a excepción de los 11 años de edad en ambos sexos, donde los valores fueron siempre inferiores. Este hecho no parece debido a un problema metodológico ya que no se observa en otros trabajos que utilizan la misma metodología 13, y podría ir a favor de un efecto cohorte susceptible de ser comprobado en estudios posteriores.

Nuestros resultados fueron, igualmente superiores a los encontrados por Moreno et al. 14 y Goñi et al. 15 en la comunidad de Madrid. Esto iría a favor de la hipótesis de que los cambios geográficos y climáticos, podrían explicar las diferencias entre los autores, y podría ser corroborado por otros trabajos desarrollados en otras comunidades autónomas. Sin embargo, en un trabajo realizado en Murcia16 todos los parámetros estudiados presentaron valores superiores a los nuestros, preferentemente en edades mayores, a excepción del PCT que fue superior en nuestros escolares varones. En este sentido, también hay que destacar el estudio realizado por Doña et al. en Málaga 17,18, donde a pesar de la proximidad geográfica y climática, se encontraron valores superiores a los nuestros en todos los parámetros. Parece por tanto, lógico pensar que las diferencias entre los distintos estudios, no deberían ser atribuidas únicamente a factores ambientales. Aunque en contra de esto, vemos que en el trabajo realizado por Carvajal et al.13 en Chiclana de la Frontera (Cádiz), se obtuvieron resultados bastante similares a los de Ubrique, y en el de Ruiz Jiménez et al.19 realizado en Cádiz, tampoco se observaron diferencias significativas con nuestro grupo en el PCT y IMC.

Otro factor importante que podría condicionar las diferencias encontradas es el nivel socioeconómico. Sandín20 y otros autores21, afirman que en nuestro país existen claras diferencias en el proceso de crecimiento y desarrollo entre distintas regiones, asociados fundamentalmente (aunque no únicamente) a sus distintas características socioeconómicas. Nosotros no pudimos comprobar su efecto sobre nuestros escolares debido a la dificultad para obtener unos indicadores fiables del nivel socioeconómico de la población a causa de su particular economía.

Respecto a la valoración del sobrepeso, destaca el bajo porcentaje de escolares con IMC por encima del P97 de referencia. La elección del P97 como punto de corte en lugar del P908,22 o incluso del P855 utilizado por otros autores, ha estado condicionado por el uso de las tablas de Hernández et al. que se tomaron como medida de comparación. Esta utilización del P97 en el IMC nos llevó a identificar solo sujetos con un sobrepeso elevado, datos que corresponden más a obesidad que a sobrepeso, con la consiguiente subestimación de la prevalencia en nuestra población. Sin embargo, a favor de la baja prevalencia de sobrepeso está el que también se observó un pequeño porcentaje de casos cuando se utilizó como medida de referencia el IMC³ 25 Kg/m2.

Estos resultados parecen estar en línea con lo obtenido en el trabajo sobre valoración nutricional de estos escolares recientemente publicado6, donde se concluía que su alimentación se ajustaba bastante a las Recomendaciones Dietéticas de energía y nutrientes aunque con un perfil más occidental que mediterráneo.

BIBLIOGRAFIA

1. Penchaszadech VB. Condicionantes básicos para el crecimiento. Una larga polémica: herencia o ambiente. En: OPS. Crecimiento y desarrollo: hechos y tendencias. Publ Cientif nº 50. Washington 1988: 90-101.

2. Wolfe WS, Campbell CC, Frongillo EA, Haas JD, Melnik TA. Overweight schoolchildren in New York State: Prevalence and characteristics. Am J Public Health 1994; 84: 807-813.

3. Serdula MK, Ivery D, Coates RJ, Freedman DS, Williamson DF, Byers T. Do obese children become obese adults?. A Review of the literatura. Prev Med 1993; 22: 167-177.

4. Rolland-Cachera M, Deheer M, Guilloud-Bataille M. Tracking the development of adiposity from one month of age to adulthood. Ann Hum Biol 1987; 14: 219-229.

5.  Albert B, DiGiuseppi C. Guide to clinical preventive services: screening for obesity. En: U.S. task force guide to clinical preventive service, 2nd edition. (Internet). 1996.

6. Failde I, Zafra JA, Ruiz E, Novalbos JP. Valoración de la alimentación de los escolares de una población de la Sierra de Cádiz (Ubrique). Med Clin (Barc) 1997; 198: 254-258.

7.  Hernández M, Catallet J, Narvaiza JL, Rincón JM, Ruiz I, Sanchez E. et al. Curvas y tablas de crecimiento. Bilbao: Fundación F. Orbegozo, Instituto de Investigación sobre Crecimiento y Desarrollo; 1988.

8. Sociedad Española para el Estudio de la Obesidad (SEEDO). Consenso español 1995 para la evaluación de la obesidad y para la realización de estudios epidemiológicos. Med Clin (Barc) 1996; 107: 782-787.

9. Serra Majem LL. Sobrepeso y obesidad como problema de salud pública. En: Nutrición y Salud Pública: Métodos, bases científicas y aplicaciones. Lluis Serra Majem, Javier Aranceta Bartriha, José Mataix Verdú eds., Barcelona: Masson; 1995.p. 237-243.

10. Alastrué V. Antropometría y obesidad. Med Clin(Barc) 1994; 102: 16-19.

11. Ruiz E. Estudio de alimentación y de salud bucodental en una población escolar gaditana: Ubrique. [Tesis Doctoral ]. Cádiz: Facultad de Medicina, Universidad de Cádiz; 1992.

12. Alastrué A, Rull M, Camps I, Ginesta C, Melus MR, Salvá JA. Nuevas normas y consejos en la valoración de los parámetros antropométricos en nuestra población: índice adiposo muscular, índices ponderales y tablas de percentiles de los datos antropométricos útiles en una valoración nutricional. Med. Clin. (Barc) 1988; 91: 223-236.

13. Carvajal N, Alcaraz M, Alcaraz E, Failde I. Valoración del estado nutricional de una población de escolares gaditanos. Rev San Hig Púb 1993; 67: 359-367.

14. Moreno B, Monereo S, Moreno FJ, Desco M. Curvas de crecimiento de los niños de la Comunidad Autónoma de Madrid. Salud Rural 1987; 2: 41-49.

15. Goñi I, Bayón C, García-Diz L. Estudio antropométrico y estado nutritivo de una población escolar del cinturón industrial de Madrid. Rev Esp Pediatr 1985; 41291-296.

16. Hernández AM, Tébar FJ, Serrano S, Alvarez Y, Illán F, Valdés M. Estudio antropométrico de la población escolar de la Comunidad Autónoma de Murcia. Med Clín (Barc) 1992; 98: 651-655.

17. Doña JL, Bueno A, Martínez A. Valoración de los parámetros antropométricos nutricionales: perímetro braquial y pliegues cutáneos en escolares de Malaga ciudad. An Esp Pediatr 1990; 33: 225-228.

18. Doña JL, Bueno A, Martínez A. Estudio de los parámetros antropométricos peso, talla y perímetro cefálico en escolares de Málaga ciudad. An Esp Pediatr 1990; 33: 229-232.

19. Ruiz MA, Martínez JM, Cano MC. Valoración antropométrica del estado nutricional de una población adolescente de Cádiz. Enf Científica 1996; 174: 17-23.

21. Goñi Y, García L. Influencia del nivel socioeconómico en el crecimiento infantil. Rev Nutr Clin 1988; 4: 42-47.

22. Rey Calero del J, Gil Miguel A, Calle Purón ME, Lasheras Lozano ML, Alegre del Rey E. Estudio epidemiológico del índice de masa corporal en una población escolar de Madrid. Rev San Hig Pub 1992; 66: 65-70.

Inmaculada Failde Martínez, Juan Zafra Mezcua, Jose Pedro Novalbos Ruiz, Manuel Costa Alonso y Enrique Ruiz Rodríguez. Area Medicina Preventiva y Salud Pública. Universidad de Cádiz.

Correspondencia: Inmaculada Failde Martínez. E.U. Ciencias de la Salud. Universidad de Cádiz. C/ Duque de Nájera 18. Apdo. Correos 621. 11003 Cádiz. Tfno: (956) 211064 Fax (956) 224218 inmaculada.failde[arroba]uca.es

Partes: 1, 2
 Página anterior Volver al principio del trabajoPágina siguiente