El papel del Otro en la construcción de la identidad cultural

2. Globalización e identidad cultura. ¿Por qué se hace necesaria una teoría de la identidad cultural hoy en día?
3. La respuesta al problema de la construcción de la identidad cultural según distintas tradiciones
4. La relación con el Otro cultural en las tradiciones expuestas
5. Conclusión final
6. Notas
7. Bibliografía

Sartre, Taylor y la propuesta de la Filosofía Intercultural. Búsqueda de una forma de concebir la identidad cultural en la actualidad en base al análisis de estas tres tradiciones

Introducción

El problema de la constitución de la identidad cultural, está íntimamente relacionado con la cuestión del Otro: la cuestión de qué posición tomar en cuanto al Otro cultural concreto, situado, y que tiene una forma de vida distinta de la nuestra. Mi hipótesis es que las diferentes formas de constitución de la identidad cultural -al menos en los planteamientos teóricos- llevan siempre previamente supuesta una elección en cuanto a la manera de relacionarnos con el otro.

En este sentido, creo que es imposible ser indiferentes frente al Otro: siempre elegimos -consciente o inconscientemente- una manera de relacionarnos con éste, aunque sea la indiferencia, y sobre la base de esta relación con el Otro nos formamos a nosotros mismos personal y culturalmente. Esto es justificable por el hecho de que es posible, al tomar una teoría cualquiera acerca de la construcción de la identidad cultural, dilucidar qué tipo de relación supone con el Otro cultural. Esto es lo que voy a intentar mostrar en este trabajo tomando tres tradiciones no sólo distintas entre sí sino también distintas en cuanto a su contexto histórico: Sartre, Taylor y la propuesta dialógica de la Filosofía Intercultural.

El relativismo cultural, por otro lado, es el gran problema que surge de extremar la diferencia entre culturas, llevándolas al punto de la inconmensurabilidad, al estilo de los paradigmas de Kuhn. Por lo que dije hasta ahora, creo que es una cuestión que tiene que ver con qué actitud adopta una cultura para relacionarse con su Otro cultural. En este sentido, habría modos de ver al Otro que acentúan el relativismo y otros que lo atenúen. Esta es otra de las cosas que vamos a intentar analizar en este trabajo, intentando entrever una manera de relación con el Otro en lo cultural que no caiga ni en un relativismo, ni en el otro extremo: el etnocentrismo que anula la diferencia. La idea sería encontrar alguna concepción de la identidad que sostenga las identidades -la diferencia- sin caer en un relativismo cultural extremo.

Este tipo de cuestionamientos por la forma en que vemos al Otro cultural, es hoy especialmente importante frente a la amenaza de destrucción de las culturas en manos de la llamada "globalización", que no es más que una estrategia cultural encubierta para el intento de dominación y manipulación del Otro por parte de una cultura hegemónica dominante. Específicamente de esto nos ocuparemos más adelante.

En este trabajo voy a exponer distintas respuestas al interrogante por la identidad cultural, y luego haré un análisis más profundo, distinguiendo tanto los elementos que adoptan como los que dejan de lado, y la relación o el lugar que dejan al Otro. En la conclusión, conectaré la situación actual mundial -globalización- con la identidad cultural, abordando la cuestión a través de la relación de las culturas con su Otro, y viendo qué concepción de la identidad necesitaríamos para nuestros fines. Esto podría darnos una idea acerca de la teoría de la identidad cultural que necesitamos en nuestros días para salvar, si no todos, algunos de los problemas mencionados más arriba.

Desarrollo

1. Como introducción al tema, podemos decir que el fenómeno neoliberal denominado "globalización" está basado en la teoría del "fin de la historia" o "Pensamiento Único". Las raíz de la idea del fin de la historia está en la suposición de que la derrota del mundo bipolar, simbolizada en la caída del Muro de Berlín, ha demostrado que el sistema económico es el capitalismo, y no hay otra opción. En este contexto económico, la globalización constituye también una forma de etnocentrismo, ya que con el fin de mundializar este sistema económico particular, se recurre al intento de homogeneizar a los distintos grupos culturales eliminando las valiosas diferencias entre ellos. Esto supone una negación a escuchar otras voces culturales, un juicio de valor acerca de las mismas: la opción globalizante -tanto en lo económico como en lo cultural- es mejor que las demás. Este es un claro rasgo etnocentrista, fundamentado en un pensamiento evolucionista muy fuerte.

2. Globalización e identidad cultural. ¿Por qué se hace necesaria una teoría sobre la identidad cultural hoy en día?