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Mujeres Jefas de Hogar…Tendencia de la Ultima década (página 2)

Enviado por Classing, Susan


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Trabaja sola porque su marido la abandonó hace algunos años, situación que se hace mas complicada y dura, pero nada de eso la desanima, ya que ella es una persona afable y conversadora, cualidades que le han permitido desarrollar amistades tanto en la feria como con sus clientas.

El capital económico que sostiene esta mujer es bastante reducido y fue " juntando con mucho esfuerzo", por su marido y ella, cuando trabajaban juntos. Al ser abandonada tuvo que, obligadamente seguir trabajando a fin de tener un sustento para su hogar.

Todo esto es un fiel ejemplo de lo expuesto anteriormente, donde el 23% de las jefaturas de hogar son femeninas; al año 2000, según encuesta CASEN. Esta realidad implica que dichas mujeres cumplan diversas funciones como las de dueña de casa y crianza de sus hijos, que desde siempre ha sido intrínsico en ellas.

Lucia como muchas de las mujeres que están en la misma realidad que ella deben de realizar tareas pesadas como las que ella efectúa en la feria, las cuales le van deteriorando su estado físico y de salud, ya que pueden pasar horas paradas, pasándose de frío, donde está la posibilidad de enfermarse y no ir a trabajar, lo que provocaría no tener ingresos económicos por un tiempo determinado, todo esto sumado a que ellas no cuentan con una adecuada previsión que le cubra los gastos básicos ante cualquier tipo de eventualidad como esta.

Ante todo esto me cuestiono: ¿ Dónde están las políticas y planes conducentes a mejorar la calidad de vida de personas como éstas, tanto en la igualdad de derechos y oportunidades entre sexos y clases sociales o en caso de accidente estando trabajando en la feria quien le paga el subsidio de incapacidad laboral?

Preguntas como estas me hacen pensar que; tal vez, en Chile la economía genera empleos para mujeres sin recursos, Sin embargo, esos empleos son fundamentalmente precarios y de baja calidad, donde poco y nada se pueden disminuir las practicas discriminatorias y que afectan en gran medida el proceso de desarrollo de nuestro país, ya que en sí, bajo condiciones así no se puede trabajar adecuadamente, ya que le puede producir alteraciones y no tener un bienestar emocional

Este tema se acrecienta mas, al saber que aun estamos en un país donde se excluye a las personas indígenas, se les aleja de un sistema donde se dice que los mapuches o cualquier otra etnia son las bases de nuestra sociedad, pero al momento de enfrentar situaciones como estas se hace lo contrario. Y no aprovechan las condiciones que poseen mujeres como Lucía donde su conocimiento y apego que tienen hacia su cultura es muy valioso.

Cabe señalar que mujeres pobres no son víctimas pasivas del mercado, son agentes de su propia historia, ya que buscan un espacio laboral adecuado, y frente a las adversidades que se le presentan, las sortean, en muchas ocasiones favorablemente, ya que cuentan con atributos que distinguen al genero, como mayor esfuerzo, empeño, disponibilidad, alegría y solidaridad entre otras, mas aun dispuestas a dejar a sus hijos y viajar largas horas para llegar a la feria a vender sus productos, como es el caso de las que trabajan en la feria Pinto o cualquier contexto parecido.

Se puede decir, además, que según estudios realizados por el SERNAM señalan que las barreras se superponen y actúan como filtros sucesivos en las trayectorias laborales de las mujeres en general, se observa que las malas condiciones laborales están vinculadas a los obstáculos que se producen en otras dimensiones (la familia, la identidad laboral y los recursos individuales).

La actividad de las mujeres se explica por una estrecha articulación entre factores estructurales y la percepción subjetiva que las mujeres tienen de ellos.

Libros y relatos como el libro Culturas de Mercado, rutinas de vida, ayudan a comprender y acercarnos mas a las diferentes realidades de nuestra sociedad, y así entender los diversos actores y contextos sociales que conforman la dinámica chilena, en especial a las mujeres jefas de hogar, y tal como dice el nombre del capitulo: dignidad, ya que no por ser mujeres pobres, sin un marido que las acompañe, mas aun siendo mapuches van a ser concebidas como sujetos de menos derechos, o menos habilidades, al contrario, deben ser consideradas como sujetos preparadas , que son capaces de elaborar estrategias de distinta índole para contar con un sustento para su hogar.

A modo de conclusión se puede decir que se deben crear políticas, proyectos eficaces y eficientes , a largo plazo, que dejen de lado ese aspecto simplista que caracteriza a muchas estrategias chilenas y que no están acorde al de un país en vías de desarrollo.

Se espera que se enfatice realmente a la mujer, se potencie sus cualidades y por sobretodo que sean capaces de desarrollar su capacidad de empoderamiento frente a la sociedad, mas aun cuando se vean enfrentadas a situaciones de abandono puedan salir a adelante sin mayor preocupación y se priorice la institución básica de toda sociedad, la familia, donde la situación laboral de las mujeres quede regularizada en horarios adecuados, fuero materno por igual, sobre todo para mujeres como Lucía, que trabajan en la feria, que no cuentan con personas idóneas que la asesoren en estos temas y sueldos acorde a su situación.

Bibliografía

Davinson, Guillermo y Lucy Ketterer

  1. Culturas de Mercado, rutinas de vida. Temuco: Ediciones

Universidad de la Frontera

Fuentes electrónicas

SERNAM ( en línea ) Disponible en Word Wide Web

http://www.sernam.cl/estudios/index.htm

SERNAM ( en línea ) Disponible en Word Wide Web

INE ( en línea ) Disponible en Word Wide Web

http://www.ine.cl/ine/canales/chile_estadistico/calidad_de_vida/mujeres/pdf/mujchilenasvol1.pdf

INE ( en línea ) Disponible en Word Wide Web

http://www.ine.cl/ine/canales/chile_estadistico/calidad_de_vida/mujeres/pdf/mujchilenasvol3.pdf

 

Classing, Susan

Alumna de 3er año de la carrera de trabajo social de la Universidad San Sebastián sede Valdivia

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