Política interior y exterior en la Rumanía de Ceaucescu

"La entrada de las tropas de los cinco países socialistas en Checoslovaquia constituye un gran error un grave peligro para la paz en Europa y amenaza el futuro del socialismo en todo el mundo. Hemos decidido por unanimidad, expresar nuestra total solidaridad al pueblo de Checoslovaquia, al Partido comunista checoslovaco".

Discurso de Ceaucescu 21 agosto de 1968

"En todas las capitales de distrito, que usted pomposamente llamaba municipalidades, se sigue disparando. El pueblo era esclavo. Toda la intelectualidad del país huyó. Nadie quería hacer nada más para ustedes".

Intervención del fiscal en el juicio sumarísimo realizado contra Nicolae y Helena Ceaucescu en la base militar de Tirjovisa el 25 de diciembre de 1989.

Considero estas dos citas significativas para abrir este trabajo. La primera de gran valor ya que es prisma de lo que fue su política exterior: el aperturismo al occidente capitalista, aunque esto irritase a sus amigos de la URSS. La segunda cita no es de Ceaucescu pero también es representativa para este trabajo: la política de terror que impuso en su país.

Estos dos fragmentos representan el inicio y el fin de una importante etapa en la historia de Rumania. La oposición de Ceaucescu a la invasión de Checoslovaquia le lanza a la escena internacional. Su gobierno despótico en territorio nacional acaba provocando una revolución que dará fin a la dictadura y a la propia vida de Ceaucescu. Será el primer y único dictador comunista del este de Europa que morirá asesinado.

Dos políticas diametralmente opuestas que solo pueden significar una cosa: que Ceaucescu era un genio en cuanto a estrategia política se refiere o que su forma de gobernar era fruto de una esquizofrenia política. Con esquizofrenia política me refiero a que las diferencias entre estas dos políticas vinieran producidas simplemente por la imprevisión o por el azar. Que no hubiera una explicación para entender lo que a simple vista nos parece una incongruencia ideológica. A este aspecto es interesante considerar lo que afirma Silviu Brucan1 : "En política interior era un dictador tiránico, pero en política exterior era un genio". El aparente aperturismo hacia occidente y a la vez la mano de hierro con la que trató a su pueblo.

A lo largo del trabajo iremos esclareciendo este hecho. Veremos tanto la política exterior como la interior, también la económica que se relacionará íntimamente con estas dos políticas.

Todavía tenemos otro punto de conflicto o de aparente "esquizofrenia" que está relacionado con el primero. La aproximación que quiso establecer con occidente mientras formaba parte del Tratado de Varsovia y era miembro del bloque comunista estando en la parte oriental del telón de acero.

La política internacional

En este apartado analizaremos la política exterior llevada a cabo por el gobierno Rumano centrándonos en dos frentes. La relación con el occidente capitalista y la relación con la URSS. Si hacemos una mirada rápida a las relaciones internacionales de Ceaucescu deduciríamos que su línea de acción fue el acercamiento con los países Occidentales y el alejamiento de la URSS. En realidad la situación es más compleja. Ceaucescu supo buscar el perfecto equilibrio dentro de esta débil cuerda en la que se situó: apertura con Occidente y amistad y rebeldía contra la URSS. Para que esta política resultara tuvo que armonizar la política internacional con la nacional y con la económica. Todo ello para contentar a unos y a otros.

Casi todos los documentos consultados hablan de una continuidad en la política internacional de Rumanía, una autonomía en este terreno que inicia el anterior dictador Gheorghiu Dej, predecesor de Ceaucescu que ciertamente inició una política exterior propia pero que en ningún caso fue tan atrevida como la de Ceaucescu.

Este último entabló relaciones con los países más importantes de Occidente y con varios organismos internacionales. Muchos fueron los líderes que le adularon: el presidente Carter, el presidente Nixon, De Gaulle, el rey Balduino de Bélgica, los reyes de Inglaterra…

Ceaucescu necesitaba de estas relaciones para poder desarrollar una economía fuerte en Rumanía. Así podría presentarse ante la URSS como un país fuerte, con una economía no estancada sino próspera.