Introducción
En este trabajo me enfocaré esencialmente en la búsqueda de las razones fundamentales por las cuales, la tragedia griega de Sófocles, "Edipo Rey", nos presenta al héroe trágico por excelencia, en primera instancia y como parte de mi monografía, presentaré la esencia de la tragedia griega y expondré aquellos rasgos primordiales que identifican a los personajes trágicos, los cuales se diferencian con los demás mortales por su notable valentía y nobleza, pero se asemejan a ello por la condición de hombre y sometimiento a las leyes de seres divinos, por las cuales debe actuar, delimitando de ésta manera sus acciones y poniendo en contraposición los riesgos de sus acciones con su conciencia moral.
El héroe trágico, como ya mencioné, es de condición humana, pero sobresaliente ante el resto de los mortales y su máxima representabilidad se debe a los riesgos que pueden surgir por sus cometidos actos, es decir, al recaer en acciones heroicas se asumen los riegos de errar o acertar, es así que mi trabajo está enfocado a la intención noble de Edipo Rey, como se podrá observar en la lectura de mi trabajo, noble por su intencionalidad de salvar al pueblo de Tebas, sin saber que aquella verdad que se debe revelar y que él mismo busca incesantemente para hacer justicia por la muerte de layo, sería su propia desdicha, su conciencia de aquellos actos acometidos y adversos a su intención moral, los que finalmente someten a Edipo Rey a un profundo sufrimiento, ya que, como anunciaré más adelante y con más detalles, nuestro personaje al conocer el porqué de sus males, homicida de su padre el Rey Layo y el incesto en su madre Yocasta, se convierte en un héroe trágico representativo por antonomasia. También daré a conocer los dos polos del arte griego, lo apolíneo y lo dionisiaco, y cómo se ven representados éstas artes de la cultura griega en los movimientos de nuestro personaje Edipo, dentro de la obra de Edipo Rey, pues, Edipo en su necesidad de buscar la verdad, necesidad, porque es propio de su nobleza ir en busca de la verdad para así poder actuar bien ante las leyes divinas, corre aquel velo apolíneo y descubre que él es el culpable de las plagas y del mal de su pueblo, debido a las razones antes mencionadas, y para finalizar mi trabajo, presentaré como subtema "el destino", concepto griego que hace referencia a una fuerza sobrenatural que predeterminaba la vida de los mortales.
Edipo Rey: "el héroe trágico por antonomasia".
Enfoque
En la tragedia de Sófocles titulada "Edipo Rey" vemos representados los rasgos fundamentales del Héroe trágico, los cuales demarcan ciertos límites propios de la tragedia Griega, en donde se presencia la intencionalidad de mostrar al Hombre como secuenciador de constantes enfrentamientos y hechos, en los cuales la fuerza es utilizada por la necesidad humana de sobresalir ante los demás mortales y estar en constante advenimiento con los dioses, y también la buena voluntad de hacernos presenciar el espíritu con que son juzgados estos conflictos y estas fuerzas, que en gran medida son diferentes. Es posible notar en Edipo Rey la preocupación no sólo de salvar su vida, cuando concluye que quizás el asesino de su Rey Layo, puede atentar incluso con su Reinado y darle muerte, sino más bien se deja entrever que acepta su condición de Rey, el cual debe socorrer a los lamentos de su pueblo y condicionar el mandato de los dioses que están por sobre su condición y por encima de su poder ante su pueblo, pero Edipo Rey como el Héroe trágico por antonomasia, y es acá donde se puede considerar la primera aproximación de su gran excelencia como un personaje trágico, ya que no revela la intención de un rey manipulador o motivado por el poder, por el contrario, se ve sumamente identificado con los sufrimientos del pueblo, pues se suscita en él la necesidad de conocer la verdad y encontrar al culpable u homicida de Layo, quien debe ser desterrado o muerto para que la plaga del pueblo desaparezca, por lo que la Verdad se convierte en el tema central que mueve a Edipo Rey en toda la obra, con la intencionalidad de no transgredir la armonía impuesta por las leyes divinas, es decir, hacer justicia por lo que tanto proclaman las divinidades y volver a un mejor convivir entre hombres y los dioses, aceptando que estos son seres superiores por los cuales se rigen los humanos y que existen ciertos límites, los cuales el hombre no puede dejar de considerar, ya sea por la imposición de la voluntad divina o por su misma conciencia moral, ésta última es de suma importancia para conocer el porqué se le considera a Edito Rey como el héroe trágico por excelencia y es por eso que es de mi interés tratarlo como enfoque de mi monografía, ya que la Nobleza de Edipo Rey le hace actuar de tal manera, que no piensa el los riesgos que pueden surgir, porque sólo busca encontrar el bien para su pueblo, y es así que necesita buscar la verdad para salvar el pueblo de Tebas, aún no sabiendo que esa verdad son los actos que él inconcientemente realizó y que una vez conocidos asume y se da cuenta de su gran falta moral, lo que lo lleva al sufrimiento, sufrimiento que también se debe, a que es conciente de que sus actos son medidos por la voluntad divina y por un destino del cual no puede escapar, ya que la verdad revelada le hace abrir conciencia sobre aquellos actos pasados que lo transportaron a la posición de Rey, hechos que quizás por su nobleza nunca hubiese cometido, pues actuó bajo la ignorancia, pero una ignorancia e inconciencia de la falta moral que no pueden escapar de la manifestación de la verdad y tampoco del destino. También, porque en su condición de héroe debe ir en busca del bien y proteger a su pueblo, de esta forma su representabilidad y fuerza hacen que éste personaje cobre sentido entre lo que hace para buscar la verdad y los límites que se imponen ante el actuar de los dioses.
Retomando lo dicho en algunas líneas anteriores, esta condición de Hombre superior ante el resto de los mortales, es una característica propia del Héroe trágico, quien por su nobleza sobresale y es digno de admiración, es por ende que el personaje mítico actúa siempre con un fin noble, aún desconociendo los riesgos de sus acciones, los que pueden recaer en el error o el triunfo. A través de la conciencia moral de Edipo Rey, que no es en consideración, de igual parte que la de los dioses, le lleva concientemente a ir en busca o en participación de la revelación de la verdad, con el fin noble de salvar a su pueblo, teniendo anunciada ciertas desdichas por parte del "coro", personaje que en la obra representa al pueblo desvaleciente de males, ya que hay una herida abierta en la acción del hombre frente a las normas de los dioses. Esta búsqueda incesante de Edipo para conocer la verdad que acabaría con las plagas del pueblo, lo llevarían a correr aquel velo cubriente de la verdad apolínea, asumiendo que las acciones de los hombres conllevan con sí mismos ciertos riesgos que son ineludibles, Por esto decide llamar al anciano Tiresias para que le revele la verdad, y también dispone el envío de su cuñado Creonte al templo de Delfos para conocer los votos y sacrificios que se debían realizar con la intención de parar las plagas que amenazaban a Tebas. Pues de esta manera nuestro Héroe trágico por antonomasia, corre aquel velo apolíneo que muestra aquel fondo trágico que lleva al hombre a saber que sus acciones llegan siempre a resultados decididos por la voluntad divina, así como Nietzsche nos dice que la vida tiene un fondo que es trágico y éste es propio de la condición humana[1]condición que para Edipo Rey es el sometimiento al destino del cual no puede escapar, el cual no se puede evitar aún conociendo aquellos sucesos que se revelan por medio del oráculo. Es así que nuestro personaje llega a reconocer que es el único culpable de sus propios males, esto es notable cuando comienza a pesquisar y a recordar el cómo llegó al pueblo, la constante revelación de la verdad despierta en el personaje los sentimientos de miedo y de dolor los que reflejan su sufrimiento, haciéndonos ver que es el sufrimiento la esencia del hombre y uno de los rasgos fundamentales del héroe trágico.
Primer Argumento
Ante lo anterior expuesto, consideré los rasgos del Héroe trágico y puse de manifiesto que éste es de condición humana, sometida a la limitación de sus actos y que al ser concientes de sus malos actos se someten al sufrimiento, para el Héroe trágico el miedo y la angustia son el presentimiento de su desolación, son la conciencia de la falta. Edipo Rey en la escena donde juzga a Corifeo injustamente, dejándose llevar por la cólera, que surge al pensar que éste está tramando destronarlo y es por eso que piensa que el anciano Tiresias pronuncia contra él todos los males que padecen en el pueblo de Tebas, pero ya desde la aparición de su esposa Yocasta, quien le cuenta que unos de los servidores de Layo le pronosticó su muerte por parte de un hijo que ella le daría, al nacer aquel hijo éste fue abandonado, y años más tarde le dieron muerte a Layo en un cruce de tres caminos en un país llamado Fócida, aludiendo a que muchas veces el oráculo y sus predicciones no se cumplen, pero Yocasta no estaba al tanto de la situación de aquel hijo que fue enviado a morir. Es desde entonces que Edipo Rey empieza a sospechar de los males que posiblemente se le venían, pues recuerda que en un festín le dijeron que él era hijo adoptivo, y él inquietante por aquella enunciación va a Delfos para saber la verdad, pero el oráculo le pronuncia aquellos males de un destino adverso, el que predice que será el asesino de su padre y hermano y padre de los hijos de su madre, de esta manera nuestro personaje decide huir y en camino hacia Corinto da muerte, sin estar al tanto, a su padre. Con estas escenas de la obra vemos cómo el ocultamiento de la verdad se va revelando a través de la incesante búsqueda e indagación de Edipo Rey, y de esta forma en Edipo Rey se deja asomar su angustia y la aproximación de su desgracia, ya que es conciente que es el causante de los males del pueblo de Tebas, y que al cometer el incesto se convierte en el más vil entre los hombres. Su sufrimiento se hace más incesante porque deben recaer en él la justicia, "la muerte espiritual", "el destierro", y ésta le es más dolorosa por el hecho de saber el porqué de sus males, al saber que fue el asesino de su padre y el saber de dónde proviene. Aristóteles nos dice que el héroe trágico es un hombre superior, pero con un defecto que causa su ruina[2]defecto que es una culpa moral, un pecado. Nuestro personaje se atrae la ruina, por su propia nobleza, pues necesita salvar la ciudad y para eso busca la verdad hasta el fin, y culpa moral que nace de su propia fuerza.
Segundo Argumento
En la tragedia griega, no sólo se les presentan al espectador la grandeza y la miseria del hombre, porque también se presenta una interpretación de las concepciones Griegas sobre el hombre, el mundo y los dioses, concepciones que dan sentido a la acción del Héroe trágico, sentido que se convierte en un componente significativo para la obra, pues la acción del hombre nunca carece de sentido, pero sí es limitada, de esta forma Sófocles nos muestra la pequeñez del Hombre frente al destino, la ineludible fuerza sobrenatural de la cual Edipo Rey intenta escapar. Aunque también, el héroe trágico demuestra una cierta grandeza debido a sus intenciones morales, las cuales demarcan al héroe como un hombre noble con aspiraciones al honor, el cual se convierte en un ejemplo de humanidad superior, es más que un tipo ideal claramente imitable, pero con aspiraciones limitadas; no escapa a las características de un mortal, pero se convierte en la culminación máxima del hombre, tratando de abrirse paso en situaciones no elucidadas antes, en riesgo de chocar con el límite divino. "Estirpe miserable de un día, hijos del azar y de la fatiga, ¿por qué me fuerzas a decirte lo que para ti sería muy ventajoso no oír? Lo mejor de todo es totalmente inalcanzable para ti: no haber nacido, no ser, ser nada. Y lo mejor en segundo lugar es para ti morir pronto"[3]. Sea derrotado o triunfe, falle o acierte, su vida será siempre una advertencia, porque tanto su caída como su triunfo tienen lugar por medio del dolor y a través de decisiones que querríamos nos fueran evitadas. Para el héroe trágico el dolor y la muerte están presentes en los riesgos de sus actos, pero estos no son obstáculos que les impidan o paralicen sus propias acciones. El sufrimiento de Edipo comienza cuando es conciente de sus malos actos, quizás si la verdad apolínea no hubiese sido revelada, nunca hubiese surgido su desdicha, pero quiso evitar el destino y sólo consiguió revelarlo de las formas más inicuas.
Subtemas
Primer subtema: Lo apolíneo y lo dionisiaco.
La tragedia Griega tiene su subsistencia y consistencia dentro de un trasfondo metafísico. En Nietzsche vemos cómo la tragedia se efectúa en base a la distinción entre lo apolíneo y lo dionisiaco, concebidos como dos contrastes, aunque complementarios del espíritu griego, y que sin duda alguna, constituyen, correspondientemente, la representación y la voluntad. Lo dionisiaco representado por el dios Dionisio, el dios sufriente de los misterios, según Nietzsche, un dios sufriente, pero a la vez, exaltadamente, jubiloso; el Dios del vino y la embriaguez. Y en contraposición a éste, lo apolíneo representado por el Dios Apolo, es el Dios resplandeciente, es decir, la divinidad de la luz, el dios de las artes figurativas que preside el mundo de la representación, es el Dios vaticinador, el intérprete de los sueños y del destino.
La representabilidad de la vida del hombre griego, a través de la tragedia griega, suponía, según Nietzsche, la intención de demostrar la capacidad del pueblo de asumir la miseria, horrores y sufrimientos que prevalecen en la existencia del hombre. El coro es quien representa los sentimientos dionisiacos, en Edipo Rey, el coro anuncia los males que padece el pueblo, expresando el sufrimiento y la angustia del pueblo de Tebas, y así mismo Nietzsche supone, que en ese contexto de sufrimiento, el optimismo del espíritu griego habría ideado en la tragedia griega un mecanismo para hacer más soportable y aceptable la vida sobre la tierra, tomando en consideración que la vida por naturaleza tiene un fondo trágico. Éste fondo trágico lo vemos representado en los mortales, por ende el héroe de la tragedia griega no se ve escapado de aquel fondo trágico, es decir, sus acciones son valerosas y sobresalientes, pero al igual que todos los hombres actúan bajo las normas divinas, las cuales no se deben transgredir, su destino por esencia o naturaleza tienen un fondo que es trágico. Pero valerosos de sus acciones no le temen a la angustia y al fracaso, y menos a la muerte. Se consolidan héroes, pues el miedo no les espanta, se deja de manifiesto que sí lo experimentan, pero por su nobleza y honor se dejan regir por aquellas leyes o voluntad divina, pues la conciencia moral en estos personajes les hace actuar bien, y si caen en acometidos actos, como es el caso de Edipo Rey, aceptan el sufrimiento y la intervención de la justicia de los dioses y la justicia de sus semejantes.
Segundo subtema: El destino.
Para Nietzsche el héroe trágico encarna siempre a Dionisio desgarrado, pues en el caso de Edipo Rey, se ve reflejado en él porque no actúa bajo la luz, obstáculo que le impide alejarse de las propias pretensiones nobles y del alcance del bien, ya que, Cuando se es consciente y se actúa con lucidez se puede lograr la consistencia entre lo que se quiere y lo que se impone por los dioses, conociendo de ésta forma los límites humanos y que su voluntad está medida por una fuerza mayor. El destino es considerado, según el arte Griego, como la fuerza sobrenatural, que está por encima de la voluntad y leyes del hombre, en Edipo Rey, el destino se manifiesta dentro de su propia realidad, es decir, quiso escapar de los males que el oráculo había pronunciado para el Rey Layo, pero aún así, esa intención de voluntad humana sólo logra desviar y no aceptar sus límites y lo que le debe ocurrir como mortal, y lo que finalmente le sucede, que dentro de su propia condición de Rey noble, necesita buscar la verdad y ésta se manifiesta en él, de tal forma, que acepta su realidad y que es el culpable de los males del pueblo y de su propia desdicha. Lo dionisiaco apunta al ocultamiento de la verdad, y ese ocultamiento tiene la posibilidad de acceso a través del velo apolíneo, la buena voluntad de hacer el bien y aceptar las características y límites del héroe trágico lo llevan a correr aquel velo, y también, ayudan al héroe trágico en estar en constante advenimiento con los dioses y por ende aceptan su destino. «Como sobre el mar embravecido, que, ilimitado por todos lados, levanta y abate rugiendo montañas de olas, un navegante está en una barca, confiando en la débil embarcación; así está tranquilo, en medio de un mundo de tormentos, el hombre individual, apoyado y confiando en el principium individuationis [principio de individuación] ».[4] Es así que Edipo al correr aquel velo apolíneo, en cuanto conoce la verdad y accede a ese fondo trágico, puede ser conciente de sus males, pero por su condición de héroe trágico por antonomasia, acepta estos males y admite que debe recaer sobre él las leyes divinas y el sufrimiento por haber cometido tan viles actos.
Conclusión
Por medio de mi trabajo, que apunta a la exposición de Edipo Rey como el héroe trágico por excelencia, expuse cuáles son las características propias de un héroe del género trágico, para hacer un análisis de los rasgos físicos y psicológicos de nuestro héroe Edipo. El héroe trágico es de condición humana, aspira al honor, por sus actos nobles, y en los actos nobles existe la posibilidad de errar o triunfar, y estas posibilidades las aceptan aún cuando existe la posibilidad de recaer en el sufrimiento o incluso en la muerte. Edipo Rey muestra en sus actos la intención noble de socorrer a su pueblo, pero tan solo con esa intencionalidad hizo aparecer el riesgo que lo somete a su sufrimiento, ya que buscó la verdad incesantemente para dar con el asesino del antiguo rey del pueblo y así cerrar la herida que estaba abierta y que tenía despertada la cólera de los dioses, y descubrió que él es el culpable de las plagas que afectan al pueblo.
Todo esto nos muestra la gran magnificencia de la obra de esquilo, al presentarle al espectador un mundo en donde el hombre, es regido por leyes divinas, las cuales debe considerar en cada uno de sus actos, pues, por el contrario es sometido al castigo, que en caso de Edipo Rey, es el destierro, que a la vez se ve acompañado del gran mal que lo afecta al ser conciente de que fue en contra de toda la armonía de la naturaleza por haber matado a su padre y haber tenido hijos con su propia madre.
De esta manera, Edipo Rey se convierte en el héroe trágico por antonomasia, no sólo porque es de condición humana y porque se somete al sufrimiento y destierro del alma, sino también porque es de condición noble, y bajo esa postura siempre busca la verdad e intenta hacer el bien, de tal forma, que respeta las leyes divinas y los límites que las divinidades imponen en el accionar humano, asumiendo de ésta forma la incapacidad de alejarse del sufrimiento y de los riesgos que conllevan ese accionar, y de los posibles castigos que los dioses pueden hacer recaer en aquellos hombres que transgredan el orden y sus mandatos, por lo tanto se deja entrever en Edipo, que no fue de su voluntad faltar a la moral, no sólo porque sabemos que actuó bajo la ignorancia, pues, a la vez, porque sabemos que es de su voluntad hacer el bien e ir en busca de la verdad, respetando y asumiendo de ésta manera, que debe hacer lo que los dioses desean para mantener la tranquilidad entre el convivir humano y divino.
Bibliografía
Libros
-Sófocles (1969). Edipo rey. Madrid: ediciones Guadarrama.
-Nietzsche, Friedrich (1952). El nacimiento de la tragedia. Argentina: colección Austral.
-Aristóteles (1992 {1ª edición, 4ª impresión}). Poética, Madrid: Editorial Gredos..
Revistas virtuales
El héroe trágico.
http://www.fgbueno.es/bas/pdf/bas10203.pdf
Nietzsche y la tragedia, Pilar Palop Jonqueres.
Páginas Web
http://filosofia.idoneos.com/index.php/343231
http://www.boulesis.com/didactica/apuntes/?a=212&p=2
Autor:
Iván Castro Rodríguez
Facultad de ciencias de la educación
Pedagogía en lenguaje, comunicación y filosofía
Asignatura Monográfico de integración castellana-filosófica
Profesora Marcela Quevedo Romero
Fecha 23 de Julio del 2010
[1] Nietzsche, Friedrich (1952). El nacimiento de la tragedia. Argentina: colección Austral.
[2] Aristóteles (1992). Poética de Aristóteles. Madrid: editorial Gredos.
[3] Sófocles (1969). Edipo rey. Madrid: ediciones Guadarrama.
[4] Nietzsche, Friedrich (1952). El nacimiento de la tragedia. Argentina: colección Austral.