Descargar

Bernard Madoff, Quimera: Crimen y Castigo (Parte II)

Enviado por Felix Larocca


Partes: 1, 2

     

    1. La Ley Natural o ¿La Ley de la Jungla?
    2. La neurobiología de la Justicia y el Castigo
    3. En resumen
    4. Bibliografía

    Bernard Madoff, Quimera: Crimen y Castigo, la neurobiología del engaño y el principio inquebrantable de la Ley Natural (Parte II)

    "Ahora, escuchen, ésta es la Ley de la Selva — tan antigua y tan cierta como el cielo. Y el Lobo que la observe podrá prosperar, pero el lobo que la viole morirá. Es como la enredadera que circunda el tronco del árbol — la Ley corre hacia delante y corre hacia atrás — Porque la fuerza de la Manada es en el Lobo, y la fuerza del Lobo es en la Manada." Rudyard Kipling. El Libro de la Selva.

    En esta segunda parte de esta tesis comenzaremos reiterando lo obvio: Nosotros al fin y al cabo, resultamos ser (¿qué más?) animales sociales.

    ¡Ah! Pero no somos los únicos tan privilegiados en serlo, aunque así nos agrada creerlo.

    Siendo, de manera muy simple, animales sociales, nos incumbe reconocer que, aunque a muchos les importune admitirlo, tenemos obligaciones adquiridas y deberes que desempeñar para los demás con quienes compartimos el sol, la tierra, el agua que bebemos, los alimentos que comemos, y muchas otras concesiones naturales que a todos pertenecen. Algo que, para algunos quienes fueran elegidos a cualquier posición del servicio público, o que manejan el dinero ajeno, o que controlan el bienestar de otros, o que acaparan riquezas, olvidan el instante en que asumen el compromiso otorgado.

    edu.red

    Rinoceronte blanco

    En páginas números seis y siete del libro Handbook of Psychopathy, se encuentra un pasaje sorprendente, porque es como si algo inverosímil se descubriera: El referido segmento nos enseña que algunos animales salvajes exhiben conciencia moral. Mientras que, nosotros, dotados de ética presunta, a veces, nos comportamos como si fuésemos animales salvajes.

    Leamos el pasaje referido:

    "¿Cómo se las arreglan la mayoría de los niños para evitar ser inadaptados sociales? Probablemente del mismo modo que los retoños de otros mamíferos gregarios aprenden las reglas. Observando el comportamiento de sus mayores.

    "En Sud África durante los años noventas del siglo pasado la población de rinocerontes blancos estaba siendo diezmada por actos de violencia.

    "Los paquidermos estaban siendo exterminados, no por cazadores furtivos, sino por elefantes machos jóvenes que quedaran huérfanos resultado de la matanza selectiva para el control del crecimiento de la población de animales, emprendida por el gobierno de Sud África en Kruger National Park.

    "Los adultos de manadas matriarcales habían sido muertos y los elefantes bebés transportados a otros parques donde crecieran careciendo del cuidado normal que proveyeran sus madres durante sus infancias. Como resultado se desarrollaron convertidos en forajidos peligrosos.

    "La salvación de los rinocerontes blancos fue la introducción de un número de elefantes maduros que actuaban como padres subrogados quienes dominaron y disciplinaron los juveniles, enseñándoles el comportamiento propio de un elefante decente.

    "Nuestra especie está situada entre los elefantes y los primates grandes, hacia el fondo. Y entre las hormigas y las himenópteras, en el polo opuesto del continuo de la socialización.

    edu.red

    Comportamiento hecho posible por la "invención" de la niñez.

    "Nosotros nacemos dotados con la capacidad de desarrollar una conciencia observante que actúa para inhibir las transgresiones contra las reglas establecidas.

    "Nosotros podemos aprender a sentir empatía por nuestros semejantes y derivar satisfacción de actos de altruismo.

    "La mayoría de nosotros desarrolla un sentido de responsabilidad hacia nuestras familias y nuestra comunidad; y un deseo de compartir el esfuerzo en la tarea colectiva para la supervivencia del grupo.

    "Nosotros podríamos ser la única, entre las especies, que está motivada a emular a quienes admiramos para lograr sentirnos bien acerca de nosotros mismos.

    "Por lo contrario como sucede con los insectos sociales, nuestras inclinaciones pro-sociales no emergen como instintos bien formados, sino que como sucede con nuestra capacidad innata del lenguaje, éstas deben de ser desarrolladas, moldeadas y reforzadas por medio de nuestras interacciones con otros humanos maduros durante el curso de nuestro desarrollo."

    Como fuera nuestra vida en el pasado remoto

    Partes: 1, 2
    Página siguiente