Descargar

Responsabilidad del auditor informar errores e irregularidades

Enviado por Onelio Agustín


  1. Introducción
  2. Aspectos generales
  3. Error e irregularidad
  4. Responsabilidad del Auditor
  5. Normas de auditoría aplicables a la detección de errores e irregularidades
  6. Factores a considerar en la planeación de la Auditoría
  7. Evaluación de los resultados de las pruebas de Auditoría
  8. El efecto de irregularidades en el informe de Auditoría
  9. Conclusión
  10. Bibliografía

Introducción

Hoy en día las auditorias han cobrado valor significativo ya sea que el estado exija estados financieros auditados a empresas especiales a través de la superintendencia administración tributaria o que la junta de administración solicite los mismos, para dar un valor extra a las cifras mostradas en los estados financieros, es por ello la importancia del trabajo que realiza un auditor, en este tema se trata a fondo la responsabilidad que tiene el auditor al momento de realizar una auditoría con respecto a la detección de errores e irregularidades, que procede luego de la detección, que impactos tienen en los estados financieros.

El auditor es responsable de su informe y debe realizar su trabajo de acuerdo con las Normas Técnicas de Auditoría establecidas. Su trabajo no está específicamente destinado a detectar irregularidades de todo tipo e importe que hayan podido cometerse y, por lo tanto, no puede esperarse que sea uno de sus resultados. No obstante, el auditor debe planificar su examen teniendo en cuenta la posibilidad de que pudieran existir errores o irregularidades con un efecto significativo en las cuentas anuales.

El auditor no es y no puede ser responsable de la prevención del fraude o error, sin embargo, el hecho de que se lleve a cabo una auditoria anual, puede servir para contrarrestar fraudes o errores.

La existencia de sistemas de contabilidad y procedimientos de control interno eficientes reducen la posibilidad de errores e irregularidades en las cuentas anuales, aunque siempre hay riesgo de que los controles internos no funcionen tal como se diseñaron.

OBJETIVOS GENERALES

  • Conocer cual debe ser el objetivo del auditor independiente al momento de practicar un examen a los estados financieros a una entidad privada, de acuerdo con los principios de contabilidad generalmente aceptadas y aplicar los elementos importantes de la auditoria: como la evidencia e influencia en el juicio de la auditoria, para formarse una opinión de si los estados financieros presentan razonablemente la situación financiera y que los mismos no contengan errores e irregularidades que puedan tener un efecto significativo sobre los estados financieros y de observar la debida diligencia y cuidado profesional en el curso de su examen.

OBJETIVOS ESPECIFICOS

  • Cuales aspectos debe evaluar el auditor al momento de la evaluación de los resultados de las pruebas de auditoria.

  • El efecto sobre las irregularidades en el informe de la auditoria

RESPONSABILIDAD DEL AUDITOR PARA DETECTAR E INFORMAR ERRORES E RREGULARIDADES

Aspectos generales

El objetivo del auditor independiente al practicar un examen de estados financieros de acuerdo con normas de auditoria, es formarse una opinión de si los estados financieros presentan razonablemente la situación financiera, resultados de operación y flujos de efectivo y que los mismos no contengan errores importantes incluye también la evaluación de los principios de contabilidad generalmente aceptadas, ya que el propósito de cualquier clase de auditoria es de añadir cierto grado de validez al objeto de la revisión.

Y de acuerdo a normas de auditoria el auditor independiente tiene la responsabilidad de planificar de acuerdo a los objetivos de la auditoria en las cuales debe tener la información y razonabilidad de los estados financieros , observados en su conjunto, establecer la aplicación adecuada de los recursos económicos y financieros de una institución , así como la protección de los mismos, la cual le va permitir al Contador Publico y Auditor emitir una opinión independiente sobre la razonabilidad de los estados financieros, la cual le va a servir para detectar errores e irregularidades que pueda tener un efecto significativo sobre los estados financieros y de observar la debida diligencia y cuidados profesional en el curso de su examen.

El auditor no es y no puede ser responsable de la prevención del fraude o error, sin embargo, el hecho de que se lleve a cabo una auditoria anual, puede servir para contrarrestar fraudes o errores.

Las Normas Técnicas de Auditoría de carácter general publicadas por Resolución de 19 de enero de 1991, del Instituto de Contabilidad y Auditoría de Cuentas, establecen en el epígrafe 1.5.3, lo siguiente:

El auditor es responsable de su informe y debe realizar su trabajo de acuerdo con las Normas Técnicas de Auditoría establecidas. Su trabajo no está específicamente destinado a detectar irregularidades de todo tipo e importe que hayan podido cometerse y, por lo tanto, no puede esperarse que sea uno de sus resultados. No obstante, el auditor debe planificar su examen teniendo en cuenta la posibilidad de que pudieran existir errores o irregularidades con un efecto significativo en las cuentas anuales.

Asimismo, en el apartado "Objetivos de la Auditoría de Cuentas Anuales" de las citadas Normas Técnicas de Auditoría, se establece lo siguiente:

"En la planificación de su examen, el auditor debe considerar la detección de los errores e irregularidades producidas, que pudieran tener un efecto significativo sobre las cuentas anuales, sin embargo no será responsable de todo error o irregularidad cometido por los administradores, directivos o personal de la entidad auditada".

Error e irregularidad

QUE ES ERROR

El término "error" se refiere, en el contexto de esta norma técnica, a actos u omisiones no intencionados cometidos por uno o más individuos, sean de los administradores, de la dirección, de los empleados de la entidad auditada, o de terceras personas ajenas a ésta, que alteran la información contenida en las cuentas anuales, tales como:

Errores aritméticos o de transcripción en los registros y datos contables.

Inadvertencia o interpretación incorrecta de hechos.

Aplicación incorrecta de principios y normas contables.

QUE ES IRREGULARIDAD

El término "irregularidad" se refiere, en el contexto de esta norma técnica, a los actos u omisiones intencionado, cometido por uno o más individuos, sean de los administradores, de la dirección, de los empleados de la entidad auditada, o de terceras personas ajenas a ésta, que alteran la información contenida en las cuentas anuales.

La irregularidad puede suponer, entre otros:

  • Manipulación, falsificación o alteración de registros o documentos.

  • Apropiación indebida y utilización irregular de activos.

  • Supresión u omisión de los efectos de transacciones en los registros o documentos.

  • Registro de operaciones ficticias.

  • Aplicación indebida e intencionada de principios y normas contables.

Los errores e irregularidades tienen en su intencionalidad el factor primordial de diferenciación. Sin embargo, en ocasiones resulta difícil determinar dicha intencionalidad, sobre todo en aspectos relacionados con estimaciones contables o en aplicación e interpretación de principios y normas de contabilidad".

ࠠࠠ Cualquier auditoría de cuentas anuales está sujeta al inevitable riesgo de que algunos errores e irregularidades significativos no sean detectados, incluso cuando se planifica y ejecuta adecuadamente de acuerdo con las normas técnicas de auditoría. El riesgo de no detectar irregularidades es mayor que el de no descubrir errores, ya que normalmente la irregularidad va acompañada de actuaciones tendentes a ocultarlo, tales como colusiones, falsificaciones, omisiones deliberadas en el registro de transacciones o justificaciones inadecuadas al auditor.

ࠅl auditor llevará a cabo su actuación con una actitud de escepticismo profesional, reconociendo que puede encontrar circunstancias o hechos que indiquen la existencia de errores e irregularidades.

ACTITUD DEL AUDITOR RESPECTO A ERRORES E IRREGULARIDADES

La materialidad de los errores e irregularidades deben ser evaluadas y posteriormente incluirlas en su dictamen o en el informe de control interno, dependiendo del efecto del o los problemas en los estados financieros:

EFECTOS SOBRE EL DICTAMEN

Detectada la existencia de errores/irregularidades, constituirán una salvedad, que, dependiendo del grado o significación de dicho efecto, nos conducirá a una opinión con salvedades, o a una opinión adversa.

Cuando las circunstancias impidan la obtención de evidencia suficiente para evaluar la existencia probable de errores/irregularidades, tendremos una limitación al alcance del examen, que nos llevará a calificar de salvedad o negar la opinión, en función del grado de la limitación

EFECTO PARA EL ENTE AUDITADO

Comunicar a la gerencia del ente las debilidades sobre el Control interno, cuando se trata de irregularidades el auditor debe comunicarlo con una

mayor prudencia respecto a quién debe dirigir la comunicación de este tipo de hechos, pues puede que nos encontremos con que la gerencia esté implicada

EFECTO SOBRE LAS ENTIDADES REGULADORAS

Si los errores detectados y calificados en el dictamen, especialmente si se trata de irregularidades, pudieran constituir violación grave de disposiciones legales o perjudicar la continuidad del negocio del ente auditado, deberán ponerse en conocimiento, tan pronto se tenga constancia fehaciente de los mismos, a los organismos reguladores a los que el ente se encuentre sujeto

También se tiene que tener en cuenta la NIA 240 responsabilidad del auditor de considerar el fraude y error en una auditoria de estados financieros el propósito de esta Norma Internacional de Auditoría (NIA) es establecer normas y proporcionar lineamientos sobre la responsabilidad del Contador Público como (de aquí en adelante, el auditor) auditor de considerar el fraude y error en una auditoría de estados financieros. Si bien esta NIA se centra en las responsabilidades del auditor con respecto al fraude y al error, la responsabilidad primordial para la prevención y detección de fraude y error compete tanto a los encargados del mando como a la administración de una entidad.

Al planear y llevar a cabo procedimientos de auditoría y al evaluar e informar los resultados correspondientes, el auditor deberá considerar el riesgo de representaciones erróneas de importancia relativa en los estados financieros resultantes de fraude o error.

RESPONSABILIDAD DE LOS ENACARGADOS DEL MANDO Y DE LA ADMINISTRACION

Es responsabilidad de la administración de una entidad establecer un ambiente de control y mantener políticas y procedimientos para ayudar a lograr el objetivo de asegurar, tanto como sea posible, la conducción ordenada y eficiente del negocio de la entidad. Esta responsabilidad incluye poner en vigor y asegurar la operación continua de los sistemas de contabilidad y de control interno diseñados para prevenir y detectar fraude y error. Consecuentemente, la administración asume la responsabilidad de cualquier riesgo remanente

Responsabilidad del Auditor

Planear la auditoría, el auditor deberá discutir con otros miembros del equipo de auditoría la susceptibilidad de la entidad a representaciones Admisiones erróneas de importancia en los estados financieros resultantes de fraude o error.

Investigaciones con la administración.

Al planear la auditoría, el auditor deberá hacer investigaciones con la administración.

(a) Para obtener una adecuada comprensión de la evaluación de la administración del riesgo de que los estados financieros puedan estar presentados en forma errónea significativamente, como resultado de fraude.

(b) Para obtener conocimiento de la comprensión de la administración respecto a los sistemas de contabilidad y de control interno establecidos para prevenir y detectar errores.

(c) Para determinar si la administración está al tanto de algún fraude conocido que haya afectado a la entidad o presunto fraude que esté investigando la entidad.

(d) Para determinar si la administración ha descubierto algún error de importancia.

Además de debilidades en el diseño de los sistemas de contabilidad y de control interno y del no-cumplimiento con controles internos identificados, las condiciones o eventos que aumentan el riesgo de fraude y error incluyen

堃uestiones con respecto de la integridad o competencia de la administración

堐resiones inusuales dentro o sobre una entidad

堔ransacciones inusuales

堐roblemas para obtener suficiente evidencia apropiada de auditoría

CONSIDERACION DE SI UNA REPRESENTACION ERRONEA IDENTIFICADA PUEDE SER INDICATIVA DE FRAUDE

Cuando el auditor identifica una representación errónea, el auditor deberá considerar si esta representación errónea puede ser indicativa de fraude y, si hay dicha indicación, el auditor deberá considerar los efectos de la representación errónea con relación a otros aspectos de la auditoría, particularmente la confiabilidad de representaciones de la administración.

EVALUACION Y DISPOSICION DE REPRESENTACIONES ERRONEAS Y EL EFECTO EN EL DICTAMEN DEL AUDITOR

Cuando el auditor confirma que, o no puede concluir si es que, los estados financieros están presentados en forma errónea significativamente, como resultado de fraude o error, el auditor deberá considerar las implicaciones para la auditoría.

La NIA 320, "Importancia Relativa de la Auditoría", proporciona lineamientos sobre la evaluación y disposición de la representaciones erróneas y el efecto en el dictamen del auditor.

DOCUMENTACION

El auditor deberá documentar los factores de riesgo de fraude identificados como presentes durante el proceso de evaluación del auditor y documentar la respuesta del auditor a cualquiera de dichos factores. Si durante el desarrollo de la auditoría se identifican factores de riesgo de fraude que causen que el auditor crea que ciertos procedimientos de auditoría adicionales son necesarios, el auditor deberá documentar la presencia e dichos factores de riesgo y su respuesta a ellos.

REPRESENTACIONES DE LA ADMINISTRACION

El auditor deberá obtener representaciones por escrito de la administración de que:

a. Reconoce su responsabilidad de la puesta en marcha y operación de los sistemas de contabilidad y de control interno diseñados para prevenir y detectar fraude y error.

b. Cree que los efectos de las representaciones erróneas sin corregir de los estados

financieros, acumuladas por el auditor durante la auditoría no afectan significativamente, tanto en lo individual como en el total acumulado los estados financieros tomados en conjunto. Deberá incluirse un resumen de tales partidas en o acompañando a la representación escrita.

c. Ha revelado al auditor todos los hechos importantes relativos a cualquier fraude o presunto fraude conocidos por la administración que pueden haber afectado a la entidad.

d. Ha revelado al auditor los resultados de su evaluación del riesgo de que los estados financieros puedan estar presentados en forma errónea importante como resultado de fraude.

COMUNICACIÓN

Cuando el auditor identifica una representación errónea resultante de fraude, o un presunto fraude y/o error, deberá considerar la responsabilidad del auditor de comunicar esta información a la administración, a los encargados del mando y, en algunas circunstancias, a las autoridades de vigilancia y control de la entidad…

Comunicación de representaciones erróneas resultantes de fraude a la administración y a los encargados del mando

Si el auditor ha:

a. Identificado un fraude, sea o no que dé como resultado una representación errónea que afecta significativamente los estados financieros; u

b. obtenido evidencia que indique que puede existir fraude (aun sí el efecto potencial sobre los estados financieros no es importante)

El auditor deberá comunicar estos asuntos al nivel apropiado e administración en forma oportuna y considerar la necesidad de informar estos asuntos a los encargados del mando de acuerdo con la NIA 260 "Comunicación de asuntos de auditoría con los encargados del mando".

COMUNICACIÓN DE DEBILIDADES DE IMPORTANCIA RELATIVA EN EL CONTROL INTERNO

El auditor deberá comunicar a la administración cualquier debilidad de importancia relativa en el control interno, relacionada con la prevención o detección de fraude o error, que haya llegado a la atención del auditor en el transcurso de la auditoría.

COMUNICACIÓN A LAS AUTORIDADES DE LA VIGILANCIA YCONTROL

El deber profesional del auditor de mantener la confidencialidad de información del cliente ordinariamente impide informar el fraude y error a una parte fuera de la entidad del cliente; sin embargo, en algunos países el deber de confidencialidad puede ser sobrepasado por estatutos, leyes o juzgados.

RETIRO DEL TRABAJO

El auditor puede concluir que el retiro del trabajo es necesario cuando la entidad no toma las acciones de remedio respecto del fraude que el auditor considera necesarias en las circunstancias, aún cuando el fraude no sea de importancia relativa para los estados financieros. Los factores que afectarían la conclusión del auditor incluyen las implicaciones de la involucración de la más alta autoridad dentro de la entidad, lo que puede afectar la confiabilidad de las representaciones de la administración, y los efectos sobre el auditor respecto de continuar en asociación con la entidad. Para llegar a esta conclusión, el auditor ordinariamente buscaría asesoría legal.

Según se expresa en el "Código de Ética para Contadores Profesionales"

emitido por la Federación Internacional de Contadores, al recibir un

requerimiento del auditor propuesto el auditor existente debería comunicar si

hay razones profesionales por las que el auditor propuesto no debería aceptar

el nombramiento.

El grado al cual un auditor existente puede discutir los asuntos

de un cliente con un auditor propuesto dependerá de si se ha obtenido el permiso del cliente para hacerlo y/o de los requerimientos legales o éticos que aplican en cada país relativos a dicha revelación. Si hay alguna de esas razones u otros asuntos que necesitan ser revelados, el auditor existente, tomando en cuenta las restricciones legales y éticas incluyendo, donde sea apropiado, el permiso del cliente, dará detalles de la información y discutirá libremente con el auditor propuesto todos los asuntos relevantes al nombramiento. Si el permiso del cliente es negado por éste,

para discutir sus asuntos con el auditor propuesto, ese hecho deberá revelarse al auditor propuesto.

PERSPECTIVA DEL SECTOR PÙBLICO

Respecto a la detección

Basado en la evaluación del riesgo, el auditor debería diseñar procedimientos de auditoría para obtener certeza razonable de que son detectadas las representaciones erróneas que surgen de fraude y error que son de importancia relativa a los estados financieros tomados globalmente, debe tomarse nota que la naturaleza y el

alcance de la auditoría del sector público pueden ser afectados por la legislación, regulación, ordenanzas, y directivas ministeriales relacionadas con la detección de fraude y error. Estos requisitos pueden disminuir la capacidad del auditor para ejercer juicio. Además de cualquiera responsabilidad por mandato formal de detectar fraude, el uso de "dineros públicos" tiende a imponer un perfil más alto sobre los temas de fraude, y los auditores pueden necesitar ser responsivos a las "expectativas" públicas respecto de la detección de fraude. Tiene también que ser reconocido que las responsabilidades de informar según se discutió en los párrafos 19 y 20 de esta _IA 11, pueden estar sujetas a provisiones específicas del mandato de auditoría o la legislación o regulación relacionadas.

Y de acuerdo a la SAS 53 que fue derogada por la SAS 82, que luego fue reemplazada por la SAS 99, en la cual se nos da los lineamientos adecuados en cuanto a la consideración de fraude en una Auditoria de Estados Financieros.

En la SAS 1 establece que el auditor tiene la responsabilidad de planear y planificar la auditoria para obtener la seguridad razonable que los estados financieros no contienen errores importantes, causados ya sea por error o fraude.

De acuerdo a la SAS 99, nos da una breve descripción y características del fraude, la importancia de ejercer es escepticismo profesional, discusión entre el personal del compromiso respecto a los riesgos de error importante debido al fraude, identificación de los riesgos que pudieran resultar en un error importante debido al fraude y una respuesta a los resultados de la evaluación, etc.

Los requerimientos y guías tienen el propósito de que sean integrados en el proceso de auditoria en su conjunto, de una manera lógica, en la cual se puede incluir la SAS 22 en cuanto a la planeación y supervisión, SAS 47 riesgo de auditoria e importancia relativa al realizar una auditoria y la SAS 55 en cuanto a la consideración del control interno en una Auditoria de Estados Financieros.

Típicamente, la administración y los empleados que participen en fraudes tomaran los pasos para ocultar el fraude a los auditores y a otros dentro y fuera de la organización, el fraude puede ser ocultado a través de la retención de evidencia o declarando información falsa en relación de las preguntas de la documentación

Por lo tanto se requiere el debido cuidado profesional que el auditor ejerza el escepticismo profesional.

La SAS 22, proporciona guías sobre las maneras que el auditor obtiene el conocimiento acerca del negocio de la entidad e industria para la cual opera, al realizar ese trabajo, pueda hacérsele presente al auditor información que debe ser considerada en la identificación de riesgos de error importante debido al fraude.

Normas de auditoría aplicables a la detección de errores e irregularidades

El auditor al momento de realizar una auditoría tiene que basarse en las normas internacionales de auditoría (NIA). En este caso la que él tiene que aplicar es la Nía 240 que lleva como título Fraude y error. El propósito de esta Norma es la establecer normas y proporcionar lineamientos sobre la responsabilidad del auditor de considerar el fraude y error en una auditoría de estados financieros.

La norma destaca que el auditor debe considerar el riesgo de la existencia de errores significativos y fraude en los estados contables, cuando planea la auditoría, ejecuta los procedimientos necesarios para tal fin y rinde el informe respectivo.

La norma distingue los fraudes de los errores e incluye sus características. Asimismo, destaca la responsabilidad primaria de la dirección del ente por la prevención y detección de los fraudes y errores que pudieran existir.

Por otra parte, señala como responsabilidad del auditor, tal cual lo indica la NIA 200, la de conducir una auditoría cumpliendo con las NIA de manera que los procedimientos seleccionados estén dirigidos a expresar una opinión acerca de si los estados contables examinados, en sus aspectos significativos, están libres de errores y fraudes importantes. Cabe notar que, claramente, la norma destaca que el auditor no es responsable por la prevención del fraude y el error.

También es importante lo que indica sobre las limitaciones inherentes a una auditoría respecto de obtener absoluta seguridad de detectar fraudes y errores aún cuando la auditoría haya sido eficientemente planeada y eficazmente ejecutados los procedimientos de acuerdo con las NIA. Por ello, la opinión del auditor se emite en un marco de razonable seguridad y no de certeza.

Aclarado lo precedente, la norma reclama del auditor el cumplimiento de determinados requisitos y procedimientos para mitigar el riesgo de que fraudes y errores importantes pudieran no ser descubiertos. Así le requiere que realice el trabajo con una actitud de escepticismo profesional, que mantenga discusiones de planeamiento con la dirección del ente inquiriendo sobre la susceptibilidad de la organización al riesgo de fraude o error y a la evaluación que hace la dirección sobre tal posibilidad. La norma hace un análisis detallado del riesgo de la auditoría (dar una opinión equivocada sobre los estados contables sujetos a examen) y de sus componentes: el riesgo inherente, el riesgo de control y el riesgo de detección, explicando cada uno de ellos e indicando que actitud debe asumir el auditor frente a ellos. También la norma hace un análisis de los procedimientos que debe cumplir el auditor cuando existen circunstancias que indican una posible distorsión de los estados contables y, en particular, cuando la distorsión se debe a un posible fraude. Además de los procedimientos requeridos, la norma establece los efectos que pueden tener esas distorsiones en el informe del auditor. Finalmente, otras cuestiones tratadas en la NIA 240 se refieren a la documentación en los papeles de trabajo del auditor de los factores de riesgo de fraude o error detectados; los procedimientos ejecutados en conexión con ellos; las representaciones de la dirección que debe obtener; las comunicaciones de los hallazgos de fraude o error a la dirección; las comunicaciones de debilidades importantes de control interno; las cuestiones que se suscitan si el auditor no fuera capaz de completar el trabajo; la comunicación al auditor sucesor propuesto y otros temas relacionados.

Basado en la evaluación del riesgo, el auditor debería diseñar procedimientos de auditoría para obtener certeza razonable de que son detectadas las representaciones erróneas que surgen de fraude y error que son de importancia relativa a los estados financieros tomados globalmente.

Consecuentemente, el auditor busca suficiente evidencia apropiada de auditoría de que no han ocurrido fraude y error que puedan ser de importancia para los estados financieros o que, si han ocurrido, el efecto del fraude está reflejado en forma correcta en los estados financieros o que el error está corregido. La probabilidad de detectar errores ordinariamente es más alta que la de detectar fraude, ya que el fraude ordinariamente se acompaña por actos específicamente planeados para ocultar su existencia.

El auditor debería comunicar los resultados actuales a la administración tan pronto sea factible si las sospechas son fuertes o ya se estableció el fraude.

Factores a considerar en la planeación de la Auditoría

Factores generales: es importante tomar en cuenta factores que ayudan a evaluar el riesgo y deben considerarse para poder obtener un juicio general, la presencia de algunos factores aislados no necesariamente indicarían mayor riesgo. Se puede considerar factores como:

Una sola persona controla las decisiones de la administración con respecto a operaciones y finanzas.

La actitud de la administración para proporcionar información financiera, se muestra indebidamente agresiva.

La gerencia muestra poca importancia al cumplimiento de las proyecciones de utilidades.

Factores de operación y de la industria: son factores relacionados al comportamiento de la entidad en si por ejemplo:

La rentabilidad de la empresa en relación a otras de su misma índole es insuficiente o inconsistente.

La sensibilidad de los resultados de operaciones a los factores económicos, es decir inflación, tasas de interés, desempleo, etc. es alta.

La dirección del cambio en la industria de la entidad se disminuye, debido a muchos fracasos empresariales.

La organización se encuentra descentralizada, sin la supervisión adecuada.

Factores de trabajo: son aquellos aspectos relacionados con el trabajo de los empleados de la entidad.

Se presentan muchos aspectos contables contenciosos o difíciles.

Se presentan importantes operaciones o saldos, difícil de auditar.

Se presentan importantes e inesperadas operaciones que no son del curso normal del negocio.

El negocio al cual se le auditara no le aparece historial de auditorías anteriores, o no se obtiene información suficiente del auditor anterior.

En si el auditor debe considerar desde la planeación que pueden existir errores e irregularidades y ponderar los factores de riesgo. Al detectar errores e irregularidades es necesario saber el nivel jerárquico de la administración para así informar el error o irregularidad a la persona indicada, es decir no informárselo a quienes posiblemente estén involucrados en el ocultamiento.

Evaluación de los resultados de las pruebas de Auditoría

Al evaluar un incumplimiento que llega a ser del conocimiento del auditor, éste debe de considerar tanto la material cuantitativa como la cualitativa del acto. Por ejemplo, un incumplimiento con una ley o reglamento puede ser insignificante en cuanto a su importe pero ese acto puede tener gran importancia, si existe una razonable posibilidad de que pueda dar lugar a un pasivo contingente importante o a una pérdida significativa de ingresos. El auditor, en lo posible, debe evaluar el efecto y su revelación de incumplimientos o posibles incumplimientos en las cifras que se presentan en los estados financieros, incluyendo los efectos monetarios contingentes, tales como multas, recargos, reparaciones de daños, etc. Las pérdidas contingentes resultantes de incumplimientos y que puede ser necesario revelar, deben ser evaluadas de la misma manera que otras pérdidas contingentes. Los siguientes son ejemplos de pérdidas contingentes que pueden resultar como consecuencia de un incumplimiento: expropiación de activos, suspensión de operaciones en el país o en el extranjero y litigios.

El auditor debe considera las implicaciones de cualquier incumplimiento con relación a otros aspectos de la auditoria, particularmente con relación a la confianza que deposita en las declaraciones de la administración. A este respecto, el auditor debe considerar su evaluación del riesgo y la validez de las declaraciones de la administración, en caso de incumplimiento no detectado por los controles interno o no incluido en las declaraciones de la administración.Las implicaciones de incumplimientos particulares dependen de la relación que exista entre la realización y ocultación del acto, en su caso, con los procedimientos específicos de control y el nivel de la administración o empleados involucrados. Es posible que la administración quiera comunicar a su nivel superior simultáneamente con el informe del auditor, las medidas correctivas adoptadas. La comunicación por el auditor, en atención a la importancia del cumplimiento y a la urgencia que las circunstancias requieran, puede hacerse oralmente; sin embargo, a fin de evidenciar adecuadamente este hecho, siempre deberá ratificarse por escrito. El auditor debe comunicar de inmediato al nivel apropiado de la entidad, ya sea a la administración, al comité de auditoría, al consejo de administración o al comisario de cualquier incumplimiento que sea de su conocimiento y obtener evidencia de que este evento ha sido apropiadamente informado. La comunicación debe describir el acto, las circunstancias en que ocurrió y su efecto en los estados financieros. El auditor no necesita hacer esa comunicación cuando se trata de asuntos que son claramente triviales o sin consecuencia.

Si el auditor sospecha que funcionarios de la administración, incluyendo miembros del consejo de administración, están involucrados en algún incumplimiento, debe informar el asunto al siguiente nivel superior de autoridad en la entidad, si existe, tal como a un comité de auditoría, a un comité ejecutivo del consejo de administración, al propio consejo de administración o al comisario. En caso de que no exista autoridad más alta o si el auditor cree que no se tomará ninguna acción respecto a su informe o está inseguro sobre a cual persona u órgano de la entidad debe informar, el auditor debe considerar la posibilidad de buscar asesoría legal.

El efecto de irregularidades en el informe de Auditoría

Es la respuesta producida por el informe del auditor indicando las irregularidades encontradas, el auditor debe expresamente concluir que los estados financieros están afectados de forma importante por la irregularidad, debe insistir en que los estados financieros sean revisados y, si no, debe expresar una opinión adversa o con salvedades, revelando toda razón sustantiva que fundamente su opinión.

Si impiden al auditor aplicar los procedimientos necesarios, o si, después de ampliar sus procedimientos, no puede concluir si las posibles irregularidades pueden afectar materialmente a los estados financieros este debe actuar de la siguiente manera:

Negar a dar una opinión con salvedades sobre los estados financieros.

Comunicar sus descubrimientos al consejo de administración.

Si la gerencia niega aceptar el informe del auditor, el auditor debe retirarse del compromiso y comunicar las razones de su retiro al Consejo de Administración.

Conclusión

La Declaración Estándar de Auditoria No. 53 (SAS 53/1988) Responsabilidad del auditor por detectar y reportar errores e irregularidades, es el primer estándar profesional de auditoría que identifica factores específicos de riesgo que deben ser considerados por el auditor cuando valora el potencial del fraude administrativo, y también es, la primera respuesta de la profesión contable americana frente a las exigencias de la Comisión Treadway, el cual fue reemplazado por el SAS No. 82 de 1.997 -Consideración del Fraude en una Auditoria de Estados Financieros-, que considera veinticinco factores de riesgo, Norma que también fue reemplazada en 2009 por la actual SAS 99, Consideración del Fraude en una Auditoria de Estados financieros, la norma reclama del auditor el cumplimiento de determinados requisitos y procedimientos para mitigar el riesgo de que fraudes y errores importantes pudieran no ser descubiertos. Así le requiere que realice el trabajo con una actitud de escepticismo profesional, que mantenga discusiones de planeamiento con la dirección del ente inquiriendo sobre la susceptibilidad de la organización al riesgo de fraude o error y a la evaluación que hace la dirección sobre tal posibilidad.

Una auditoria está sujeta al riesgo inevitable de que algunos errores y/o fraudes materiales tengan impacto en los EECC y no sean detectados, El auditor no es y no puede ser responsable de la prevención del fraude o error, sin embargo, el hecho de que se lleve a cabo una auditoria anual, puede servir para contrarrestar fraudes o errores.

Bibliografía

NIA 240 Fraude y Error

SAS 99 Consideraciones del Fraude en una Auditoría de Estados Financieros

Boletín 3070 del Comité Ejecutivo Nacional del Instituto Mexicano de Contadores Públicos, A. C

Perdomo Salguero, Mario Leonel. Procedimientos y técnicas de auditoría I.

http://www.normativaifrs.cl

 

 

 

Autor:

Onelio Agustin