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Los fondos marinos de Costa Rica en el Pacífico: Identificación de accidentes notables

Partes: 1, 2

    1. Introito
    2. El fondo marino
    3. Cuadro 1. Cañones submarinos
    4. Cuadro 2. Valles Submarinos
    5. Referencias
    6. Anexo

    Introito

    A través de las investigaciones oceanográficas que hemos realizado en los últimos 15 años, concluimos que los llamados bajos marinos juegan un papel decisivo en la producción de riqueza pesquera, pues las corrientes favorables en magnitud y dirección al arrastrar los sedimentos desde el fondo sobre sus laderas, producen un afloramiento donde surge la cadena alimenticia que propicia la pesca comercial de altura en nuestra zona económica exclusiva. Por tal motivo la flota nacional presta atención a su ubicación y profundidad, creando mitos y leyendas sobre su existencia, posición, extensión, movilidad aparente y características en general.

    El fondo marino

    El piso marino es la superficie del Planeta que se halla cubierta por agua oceánica y ocupa a nivel global el 72.4%. En Costa Rica tal cobertura representa el 90% del territorio y por ello la trascendencia de su identificación apropiada, sus características reales y su referencia oficial por las dependencias del Estado pertinentes.

    Esta enorme área geográfica ha pasado desapercibida para la población; y es solo a partir de los años 50´s del siglo anterior cuando por interés de aprovechar el atún de nuestras aguas, las universidades y agencias federales norteamericanas y luego los franceses, inician la investigación sistemática de nuestras riquezas marinas y del piso oceánico asociado. Con este propósito se invirtieron millones de dólares anualmente para llevar a cabo investigaciones que nuestro gobierno ni financió ni utilizó hasta ahora para planificar el desarrollo nacional. Tal es la génesis de la información base que sustenta este trabajo y que de modo digital se anexa en un disco compacto.

    Los rasgos sobresalientes de nuestro piso oceánico se ponen de manifiesto en la lámina de colores adjunta. Ellos son: 

    La gran planicie abisal del norte (color verdoso claro), la cual cubre un área cercana a 185.215km2, o sea casi cuatro veces el territorio nacional continental. Sobre esta superficie se produce de forma permanente el fenómeno de domización (conocido como Domo Térmico de Costa Rica), por lo que algunas cartas náuticas internacionales (con sondeos antiguos) y la mayoría de los pescadores creen que se encuentran allí los bajos del 

    Guardian Bank. Error de apreciación que se producía con las viejas ecosondas que confundían la alta concentración de plancton con cordilleras submarinas.

    La Trinchera Mesoamericana que se origina en el sur de México y corre paralela al litoral Pacífico de América Central hasta la Península de Osa. En nuestro territorio forma un cañón submarino angosto de 18km de ancho y 360km de largo, alcanzando los 4500m de profundidad. Las paredes orientales constituyen el talud continental, donde los sedimentos depositados por cientos de años tienen el potencial de generar maremotos sobre las ciudades costeras, tal como sucedió en Nicaragua en 1992.

    La Cordillera Cocos, la mayor y más alta del país, con al menos 15 montañas submarinas, dos grandes mesetas y varios cañones importantes. Tiene una extensión de 1.100km sobre el territorio nacional y un ancho medio de 270km, algo mayor que el ancho medio del territorio continental. Prospecciones preliminares indican amplios yacimientos de gas natural. Se supone que contiene vastas reservas de minerales valiosos y petróleo.

    La plataforma continental de unos 12.000 km2 de área, con yacimientos de níquel y cadmio -entre otros-, fundamentales en la industria del acero, la tecnología de los reactores nucleares y la construcción de aleaciones para la fabricación de naves espaciales. En la plataforma frente a la Península de Nicoya se hiceron las primeras prospecciones en 1942 por la Armada Norteamericana, cuantificando los nódulos de ricos minerales.

    En los cuadros siguientes se enumeran y detallan los elementos fundamentales de nuestro piso marino. Hemos respetado los nombres utilizados a nivel internacional cuando los hay. Igualmente referimos las denominaciones populares que utilizan los pescadores para algunos bajos, mismos que se indican entre paréntesis. Téngase presente que su posición se mantiene en secreto entre la flota pesquera, por lo que los nombres varían de pescador a pescador y casi de familia a familia, no habiendo consenso sobre posiciones ni nombres. He ahí otra razón para homologar criterios.

    En la nomenclatura utilizamos nombres de próceres -olvidados algunos- y nombres de grupos indígenas precolombinos – desconocidos para la mayoría-. De esta forma proponemos una denominación que contribuya al ordenamiento de la escasa tradición marítima nacional.

    En los cuadros siguientes el término profundidad mínima se refiere al dato calculado desde la carta oceanográfica, pues según los estudios hechos esta profundidad local podría ser mayor.Utilizamos dos tipos de unidades. La milla náutica (mn) es cómoda para orientar posiciones y verificar los cálculos. Los kilómetros para la comprensión popular, además de ser la unidad de distancia en el sistema métrico decimal.

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