- Etimología y significado original
- Evolución del significado de la solidaridad, para superar la degradación mediática de que está siendo objeto
- La solidaridad como concepto económico
- ¿Es posible incrementar la solidaridad social y económica?
Etimología y significado original
Las palabras tienen un origen y una acepción etimológica, que las determinan con un cierto significado y contenido original o primero que parece irrenunciable. Pero hay que reconocer también que los conceptos de los cuales los términos son portadores no son estáticos y evolucionan históricamente, de modo que el significado de las palabras a menudo se amplía, otras veces se torna más preciso y riguroso, en ciertos casos se difumina o desvanece. Normalmente las palabras enriquecen y profundizan sus contenidos, en ocasiones diversifican o multiplican sus acepciones, y siempre se relacionan unas con otras alterándose de algún modo su significado. Por todo ello, difícilmente pueden los términos definirse y entenderse con claridad y distinción, ni comunicar con propiedad y precisión las ideas y/o contenidos de cualquier tipo que están llamados a exponer, cuando se los quiera capturar aislados de los "discursos" de que forman parte y de los contextos humanos y sociales en que se utilizan. Todo esto ocurre con el término "solidaridad", lo que nos impele a indagar en sus orígenes, vicisitudes y procesos.
El Diccionario de la Real Academia Española indica que etimológicamente la palabra solidaridad viene del vocablo latino "solidus", del que se conocen tres acepciones: 1. Firme, macizo, denso y fuerte. 2. Dicho de un cuerpo que, debido a la gran cohesión de sus moléculas, mantiene forma y volumen constante. 3. Asentado, establecido con razones fundamentales y verdaderas. El mismo diccionario recuerda que en el lenguaje jurídico dícese "solidario" para referirse al modo de derecho u obligación in solidum, que implica un compromiso asumido en conjunto por varias personas que se obligan a responder cada una por el conjunto de ellas. Como otra acepción de la palabra solidario, se menciona finalmente la adhesión a la causa o a la empresa de otros, que se asume como propia.
En los diccionarios italianos, que en sus definiciones suelen recoger con mayor proximidad que en castellano la etimología latina de las palabras de tal origen, se define la "solidarietà" de estos modos: 1. Un vínculo que une a varios individuos entre sí, para colaborar y asistirse recíprocamente frente a las necesidades. 2. El conjunto de los vínculos que unen a la persona singular con la comunidad de la que forma parte, y a ésta con cada persona singular. 3. Solidaridad humana, social, es el compartir con otros sentimientos, opiniones, dificultades, dolores, y actuar en consecuencia. 4. En lenguaje jurídico, es un vínculo que caracteriza las obligaciones entre varios deudores, según el cual cada uno de estos puede responder por la totalidad de las deudas, y el cumplimiento por alguno libera a los demás frente a los acreedores.
grupo, una asociación o una comunidad, en la cual los participantes se encuentran en condiciones de igualdad. Tal relación o vínculo interpersonal se constituye como solidario en razón de la fuerza o intensidad de la cohesión mutua, que ha de ser mayor al simple reconocimiento de la común pertenencia a una colectividad. Se trata, en la solidaridad, de un vínculo especialmente comprometido, decidido, que permanece en el tiempo y que obliga a los individuos del colectivo que se dice solidario, a responder ante la sociedad y/o ante terceros, cada uno por el grupo, y al grupo por cada uno.
Evolución del significado de la solidaridad, para superar la degradación mediática de que está siendo objeto
Estos contenidos fuertes y comprometidos que tiene la palabra solidaridad desde sus orígenes, no parecen estar presentes en cierto empleo liviano que se ha hecho habitual en muchos medios de comunicación, que a su vez se hacen eco del uso y abuso de ella en algunos ambientes sociales y políticos. En efecto, se ha vuelto común emplear la palabra solidaridad para referirse al asistencialismo y a las donaciones de caridad, como también a ciertas políticas públicas y/o estatales de subsidio a los pobres y a ciertos grupos de personas discapacitadas, minusválidas o marginadas.
Página siguiente |