Sistema de Indicadores para medir el impacto de la capacitación en Técnicas Agroecológicas en los directivos del MINAG en Cuba

2. Objetivo general
3. Resultados
4. Análisis estadístico
5. Propuesta de indicadores para medir la capacitación en técnicas agroeológicas a directivos del sector agropecuario cuba
6. Conclusiones
7. Bibliografía

Introducción

Desde el triunfo de la Revolución tiene gran auge la capacitación en nuestro país en todas las esferas de la vida productiva.

Desde el año 2000 se viene exigiendo por la dirección de país, evaluar el impacto de la capacitación que se brinda a los cuadros y directivos así como a las reservas del sector agropecuario y forestal. Teniendo en cuenta que la capacitación es una inversión para el desarrollo, es necesario buscar un sistema de indicadores que permita visualizar el cambio que se opera en los hombres, antes y después de haber podido satisfacer sus necesidades de aprendizaje sobre una u otra materia. (Resolución 21/99).

Los directivos, son los hombres y mujeres que influyen en otros para que se produzcan bienes y servicios para que actúen, se relacionen y en ese proceso generen ideas (Guzmán 1979).

Existe necesidad de modernizar y reformar el sistema de capacitación, así como evaluar su impacto, pues se está produciendo un cambio importante en la economía mundial caracterizada por el tránsito desde una economía dominada por la oferta a una economía basada en la demanda ya que el mayor desarrollo económico está haciendo que los patrones de demanda se estén transformando. (Menguzato 2001)

Las transformaciones del mercado exigen a las empresas y empresarios modelos de producción flexibles y ya no a la concepción atomística y aislada del puesto de trabajo. Cada individuo debe incorporar y aportar sus conocimientos al proceso de producción y de participar en le análisis y solución de problemas que obstaculizan el aumento de la calidad y productividad de la empresa, por lo que hace falta un hombre cada vez más preparado.

La intención principal de esta investigación responde básicamente a la necesidad de obtener medidas de cómo se está produciendo el cambio en nuestros directivos después que reciben un módulo de acuerdo a sus necesidades en las escuelas de capacitación del sector (MINAG), donde se elaboran las estrategias y programas con este fin.

Es necesario un sistema de indicadores que pueden servir para medir el impacto de la capacitación durante el proceso y no esperar a obtener resultados productivos aunque este sea el objetivo supremo de la misma.

El impacto de la capacitación en nuestros días se ha caracterizado por. (Resolución 21/99).

• 1. Enfoque de la Capacitación dominada por la oferta. Los programas no son diseñados, aplicados y evaluados desde las áreas de Recursos Humanos de las empresas, o sea según las necesidades de capacitación de cada individuo.

• 2. Incompatibilidad entre la organización de los servicios de capacitación por especialidades y puestos de trabajo y demandas actuales de los cursistas y la producción de la organización.

• I- Rigidez de programas (se repiten contenidos conocidos).

• II- Falta de conocimientos de la experiencia laboral. Necesitamos que nuestros programas de estudio sean flexibles, que respondan a las necesidades de aprendizaje de cada individuo, que las estrategias pedagógicas permitan facilidad de ingreso a los cursos y que la retroalimentación de esta capacitación sea por cada grupo ocupacional y se efectúe de forma continua. (Resolución 21/99).

Los directivos reconocen su principal fuente de diferenciación y competitividad en su gente por lo que fortalecen su activo humano, generan ambiente socio-político favorable y propician el aprendizaje y la innovación en sus organizaciones.

En no pocas oportunidades es posible observar que cuando se intenta evaluar el resultado de la capacitación, nos encontramos que faltan elementos o información relevante o la acción formativa, la cual no responden a necesidades y objetivos determinados o simplemente se desea saber si lo hecho tiene algún grado de calidad y/o de efectividad.

En otros simplemente evaluamos por medio de la cuantificación de cursos realizados y personas capacitadas, asociado tal vez al porcentaje de utilización de la franquicia tributaria o el presupuesto asignado. (Orozco. 2002).

Los indicadores constituyen una de las herramientas indispensables para contar con información relevante y oportuna para la toma de decisiones, el seguimiento de los compromisos y la rendición de cuentas. Asimismo, son elementales para evaluar, dar seguimiento y predecir tendencias de la situación de un país, un estado o una región, valorar el desempeño institucional y llevar a cabo la comparabilidad del desarrollo económico y social.