- Definición del termino Discurso.
- Lenguaje y discurso jurídico.
- Discurso práctico y discurso jurídico.
- Reglas generales del discurso jurídico.
- Rasgos de la lógica jurídica.
- Figuras argumentales del discurso jurídico.
- La lógica factual en el análisis argumental.
- Ejemplo: Un fallo jurídico.
Presentación.
En este trabajo exponemos, de forma general, las características del discurso jurídico y, a partir de allí, algunos desarrollos que permitan sostener que el discurso jurídico en tanto actividad argumental es un razonamiento situado, como toda práctica argumental.
Para tal objetivo, introducimos primero algunos elementos que sitúan al discurso jurídico como un tipo de lenguaje. Luego, exponemos una relación posible entre discurso práctico y discurso jurídico; por último, ofrecemos un acercamiento a la actividad argumental, propia del discurso jurídico, que permite, con mayor precisión, observar todo lo que está contenido en una práctica argumental, sea ésta jurídica o no. Este acercamiento es la propuesta de la lógica factual, que encuentra en el trabajo de Toulmin (1958) los desarrollos centrales.
Definición del termino Discurso.
Se puede definir el discurso como "toda sucesión de palabras, extensas o cortas, que sirva para expresar lo que discurrimos, debe ser adecuado, es decir, ordenado, acomodado y proporcionado para lo que se quiere, perfecto para el caso".
Esta definición sugiere que el comunicador sabe lo que quiere con su discurso, y lo organiza para lograr ese objetivo.
Todo discurso posee tres partes fundamentales: la introducción, el desarrollo y la conclusión. A su vez, la introducción tiene cuatro funciones: captar la atención del público, establecer una relación positiva con el público, justificar el tema y anunciar al público la información que recibirá
Concepto de Discurso jurídico.
El discurso jurídico es un tipo de juego de lenguaje, tiene determinadas reglas y procedimientos que lo guían y que le son propias a su naturaleza como discurso.
Lenguaje y discurso jurídico.
Con el concepto juegos del lenguaje, Wittgenstein (1988, 1997) se refiere a una prodigiosa diversidad de actividades que caracterizaría al uso del mismo; entre otras, según Wittgenstein, se encontrarían:
"…Ordenar y actuar según órdenes -Describir un objeto según el aspecto o según las medidas -Crear un objeto según una descripción (dibujo) -Relatar un suceso -Hacer suposiciones sobre un suceso -Plantear una hipótesis y comprobarla -Representar los resultados de un experimento mediante cuadros y diagramas -Inventar una historia; y leerla…-Pedir, agradecer, blasfemar, saludar, orar…" (Wittgenstein, 1988: 43).
A partir de este catastro de actividades, Wittgenstein (1988, 1997, 1998) nos remite también a la idea de que entre los juegos de lenguajes sólo hay parecidos de familia respecto de reglas y procedimientos, pues entre ellos hay una complicada red de semejanzas que se solapan y entrecruzan. Semejanzas en lo grande y en lo pequeño (Wittgenstein, 1988: 73).
Como otros, el discurso jurídico es un tipo de juego de lenguaje. Tiene determinadas reglas y procedimientos que lo guían y que le son propias a su naturaleza como discurso. Este es el punto de partida de algunos autores que describen el discurso jurídico; así lo hacen, por ejemplo, Alexy (1989) y Atienza (1993) que trabajan en argumentación jurídica; también encontramos en Manson (1984) y Barros (1994) trabajos específicos que señalan los procedimientos de este lenguaje.
Como otros juegos, los del lenguaje se rigen por reglas. Wittgenstein aquí (1988, 1997, 1998) nos recuerda también que, para la existencia de una regla, es necesario que varias personas la sigan en diversos momentos: Al respecto Wittgenstein (1988) es preciso:
"…No puede ser que una regla sea seguida una sola vez por una sola persona … Seguir una regla, comunicar algo, dar una orden, jugar una partida de ajedrez son costumbres (usos, instituciones)."(Wittgenstein, 1988: 91).
Cada institución tiene costumbres, usos específicos que definen el juego de lenguaje en el que participan sus jugadores. En este sentido, la actividad específica del discurso jurídico es una forma de vida que, como tal, tiene una praxis vital común caracterizada por determinadas convicciones fundamentales. Sobre estas convicciones, todo tipo de juego se erige como sistema.
Página siguiente |