Durante siglos los hábitos alimenticios que fueron conformados por nuestra historia colonial y neocolonial han condicionado las costumbres impuestas por culturas que nos son ajenas y que tampoco son las mejores. Cambiar hábitos no es fácil, pero tampoco imposible.
El hombre es un ser eminentemente natural, y en la medida en que avanza la civilización, por ende la industrialización nos alejamos de nuestra propia esencia, por la dinámica que nos impone la vida agitada y la sociedad de consumo. Existe un alto por ciento de la población mundial que apenas llega a la toma de conciencia de una alimentación dañina y un por ciento menor son los que lo hacen de manera sana o los estrictamente vegetarianos.
Nuestro cuerpo es una "maquinaria" fabulosa capaz de destruir agentes patógenos que llegan a diario al organismo, tanto es así, que dentro de sus exquisitas funciones que realiza, tenemos:
1. Diariamente desarrolla cuatrillones de procesos en forma controlada.
2. Está constituido por más de 75 billones de células.
3. Cada segundo mueren 50 millones de células y son reemplazadas al instante por otras.
4. Posee más de 25 billones de glóbulos rojos que transportan cada hora 15 litros de oxígeno.
5. El corazón late más de 100 000 veces al día y en un año más de 36 792 000 veces. Bombea continuamente 5 litros de sangre a través de los más de 96 000 Kms de vasos sanguíneos.
6. Tiene más de 4000 millones de poros que mantienen la homeostasis.
7. Posee más de 700 músculos y 200 huesos, con los cuales es posible realizar miles de movimientos.
8. Cada células del hígado dispone de 50 enzimas diferentes que realizan su trabajo millones de veces cada segundo.
9. El cerebro conduce millones de procesos simultáneamente de forma precisa y controlada.
10. Es capaz de reproducirse, a partir de un óvulo fecundado por un espermatozoide.
Pero si no ayudamos a este cuerpo, es muy probable que sumado a las tensiones psicológicas y emocionales puede enfermar.
En nuestro país existe una tendencia al consumo de carnes rojas y el uso excesivo de azúcar blanca, que aún subsisten en la población cubana, a pesar de la labor que realiza el Sistema de Vigilancia Alimentaria (SIVAN), que tiene como objetivo prevenir o reducir las incidencias de las enfermedades asociadas con malas prácticas en la alimentación. Sus investigaciones van encaminadas al perfeccionamiento de los hábitos alimentarios con el propósito de que estos se subordinen a las necesidades nutricionales del hombre y estén cada vez más al servicio de su salud.
El auge que tiene hoy la medicina natural y tradicional y las investigaciones realizadas por médicos naturistas, comprueban científicamente que muchas enfermedades de moda como el cáncer de colon, diverticulitis, constipación, hipertensión arterial, diabetes, enfermedades cardiovasculares, osteoporosis y otras dolencias, tienen una relación estrecha con la dieta. En la combinación y el balance de los alimentos está el secreto de una buena salud.
Como especialista en dietética tenemos la responsabilidad de orientar nutricionalmente a la población y modificar los malos hábitos ya existentes. Es por esto que nos sentimos motivados a realizar una revisión bibliográfica de la alimentación natural y elaborar un plegable que fundamente científicamente las consecuencias nefastas que produce el consumo excesivo de carnes rojas azúcar blanca en la alimentación y brindar una información básica que permita una toma de conciencia profunda de las necesidades reales del organismo, de la importancia de la calidad de los alimentos consumidos y preparar al individuo para una reforma en su alimentación y liberarse de los viejos esquemas del pasado, contribuyendo de esta forma a elevar la expectativa de vida de nuestro país y educar nutricionalmente a la población. Por lo expuesto anteriormente el trabajo tiene como propósito explicar las consecuencias nefastas del consumo excesivo de carnes rojas y azúcar blanca o refinada para modificar hábitos alimentarios existentes, apoyándonos en la Dietética Naturista
Nuestro patrón alimentario tradicional de "comida cubana", no es el ideal. Está conformado en su mayoría por hábitos dietéticos inadecuados. Entre ellos tenemos la preferencia por el consumo de carnes rojas (Res, Cerdo, Carnero, Etc.) y el exceso de azúcar (refrescos, jugos, bebidas, batidos, dulces, bombones, caramelo, galletas y panes dulces, entre otros).
Estos malos hábitos se trasmiten de una generación a otra y traen consigo un gran número de enfermedades que hoy preocupan a la humanidad. Una de las formas de prevenirlas es educar nutricionalmente a la población, brindarles información y orientar en el consumo de dietas adecuadas.
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