Teorías Psicológicas del Aprendizaje Centradas en la Enseñanza Universitaria

La sociedad actual se encuentra en constante cambio y como consecuencia de ello, se generan nuevas realidades que inciden en diversas áreas inherentes al desarrollo social; tal es el caso de la educación, por lo que se considera que la misma debe estar abierta a esas transformaciones, con el objeto de atender la demanda social. En atención a esta realidad cambiante, el presente ensayo tiene como propósito, estudiar de manera sucinta, las diferentes teorías psicológicas del aprendizaje centradas en la enseñanza universitaria, a través de las cuales, se ha dado respuesta a las necesidades educativas emergentes, frente a los desafíos existentes.

En este sentido, el aprendizaje, se considera como un proceso inacabable y continuo, fundamentado en el trabajo social, cooperativo y colaborativo. No obstante, esta concepción del aprendizaje ha variado, a través del tiempo, por lo que resulta conveniente revisar las teorías de aprendizaje, que sustentan estas concepciones del conocimiento. Como punto de partida, se encuentra el conductismo, representado por Watson, Pavlov (1878 -1958) y Skinner (1904 -1990), quienes en líneas generales planteaban que el aprendizaje, es el resultado de la relación de estímulo – respuesta y de la aplicación de las contingencias de refuerzo.

Asimismo, esta teoría propone que el aprendizaje, se debe manifestar mediante conductas observables y concretas, como respuesta a la rigurosidad objetiva y científica del conocimiento. Esto da una idea de relación vertical entre el docente y los estudiantes, en la que los objetivos de aprendizaje, son establecidos por el educador y deben expresar la conducta observable del aprendiz.

Con respecto al proceso de evaluación, el mismo está representado, en función de la congruencia entre los logros alcanzados y las metas previamente establecidas.

En este enfoque, el profesor es el poseedor del conocimiento, y quien organiza, planifica y dirige el aprendizaje, con la intención de modificar la conducta de sus estudiantes, quienes se caracterizan como sujetos pacientes, que toman por verdadero todo aquello que el docente plantea, sin ningún tipo de crítica.

Otra de las teorías psicológicas del aprendizaje que fundamentan la enseñanza universitaria, es el cognitivismo, representado por Piaget, quien señala que el pensamiento es la base en que se asienta el aprendizaje. El aprendizaje consiste en el conjunto de mecanismos que el organismo pone en movimiento para adaptarse al medio ambiente.

Este autor considera que para que el organismo sea capaz de dar una respuesta, hace falta más que un estímulo, como lo planteaba el conductismo, sino que es necesario suponer un grado de sensibilidad específica a las incitaciones diversas del medio que lo rodea, pues señala que el aprendizaje, se produce a través de la experiencia y de las representaciones del mundo que el estudiante realice. En este sentido, los alumnos asumen un rol activo, capaces de procesar información y de poseer competencias cognitivas para aprender y solucionar problemas, mientras que los docentes buscan promover con estrategias didácticas, el aprendizaje por descubrimiento autónomo o guiado.

En el caso de la evaluación, además de centrase en los resultados se orienta, sobre todo, hacia los procesos desarrollados durante la intervención educativa.

Hasta ahora, se ha evidenciado la relevancia que han tenido las teorías psicológicas para orientar los procesos de enseñanza y de aprendizaje en el entorno universitario. Siguiendo este orden de ideas, surge el constructivismo, representado por Vygostky, quien señala que el aprendizaje se fundamenta en la construcción de significados adecuados, a partir de los contenidos explicados por el profesor, quien actúa, como un mediador de conocimientos.

En esta teoría, el estudiante asume un rol activo y deja de ser un receptor de información para convertirse en el ente generador de su propio aprendizaje. Bajo este enfoque, el docente universitario, debe centrar su planificación, en las características que posean sus estudiantes, tomando en cuenta sus estructuras mentales y conocimientos previos, los cuales son Dada la centralidad del alumno, el profesor tendrá que diseñar su materia basándose en el alumnado al que va dirigido, teniendo en cuenta sus estructuras mentales y conocimientos previos, los cuales son esenciales en la construcción del aprendizaje.

En este sentido, el constructivismo, propone que la educación debe fundamentarse en la práctica de acciones auténticas, pues son este tipo de actividades las que vinculan al estudiante con el mundo real.

De igual forma, como el constructivismo trabaja con múltiples representaciones de la vida real, no utiliza dentro de su metodología el uso de modelos que solo incluyen lo más representativo de ella, sino que emplea toda la complejidad que representa el mundo real, a fin de favorecer el desarrollo de los procesos cognitivos y creativos, para que en su vida profesional el estudiante se desarrolle con autonomía e independencia. En esta teoría, se propone, la importancia de alimentar la curiosidad de los alumnos y propicia la interacción con su entorno social, con la finalidad de incentivar un aprendizaje desde lo cooperativo, colaborativo, constructivo y contextualizado.

La evaluación del aprendizaje, en el enfoque constructivista, se orienta hacia la intervención de los procesos y fases que ocurren durante el aprendizaje, y permite determinar el grado en que los estudiantes han construido interpretaciones significativas y valiosas de los contenidos revisados y del valor funcional que le han dado a esas interpretaciones.

Estos procesos de planificación y evaluación, implican una tarea compleja para el docente universitario, ya que aprender significativamente es una actividad progresiva que se valora cualitativamente y además, requiere seleccionar muy bien las tareas o instrumentos de evaluación pertinentes y acordes con los indicadores o criterios previamente establecidos en los objetivos de aprendizaje.

Otro enfoque relevante en la enseñanza a nivel universitario, lo constituye la teoría del aprendizaje significativo, cuyo principal representante es Ausubel, quien señala que la construcción de significados debe ser el eje principal de todo proceso de enseñanza y de aprendizaje.

Esta teoría, propone integrar los esquemas que ya posee el estudiante, para comprender lo que lo rodea y de esta forma generar el nuevo aprendizaje, fundamentado en la actividad constructiva que desarrolle y en la interacción que tenga con el resto de los participantes.

Asimismo, en el aprendizaje significativo, los contenidos aprendidos, deben ser funcionales y aplicables para el estudiante, por lo que deben estar bien estructurados y de forma coherente y lógica. Es por ello, que considera la planificación y la evaluación como procesos integrales, continuos, generadores y garantes del aprendizaje.

Desarrollar:

Zona de desarrollo próximo. Vygostky

Aprendizaje colaborativo. Jhonson y Jhonson

Inteligenci as múltiples. Garner

Montesori???

Próxima clase:

• Áreas de aprendizaje: afectivo, psicomotor y cognitivista

• Diferencias y similitudes entre la escuela básica y la universidad

• Construir un modelo que facilite los procesos de enseñanza y aprendizaje en la universidad, desde lo afectivo, psicomotor y cognitivo.

Autor:

Miguel Ramón González Alvarado

PROFESOR: LENIN LÓPEZ

UNIVERSIDAD NACIONAL EXPERIMENTAL

DE LOS LLANOS OCCIDENTALES EZEQUIEL ZAMORA

VICERRECTORADO DE PRODUCCIÓN AGRÍCOLA

UNELLEZ-VPA

SUBPROYECTO: TEORÍAS Y PROCESOS DE APRENDIZAJE

GUANARE, MARZO DE 2017