Un enfoque diferente sobre la tierra y sobre la otra manifestación de la sexualidad

2. Gaia
3. Gay
4. Heterosexual
5. Bisexual
6. Lesbianas y homosexuales
7. Lesbianismo vs. Homosexualismo
8. Travestista vs transexual
9. Conclusión
10. "Gay" ser conciencia – androgino ambos mundos

Gaia-Gay

              Son dos términos. ¿Cuántas y cuántos conocemos estos términos? Más de una vez quizá les hayamos visto escrito o escuchado por ahí, pero la verdad es que la mayoría de nosotras y de nosotros no tenemos claro qué es en realidad lo que significa cada cual. Notamos que el primero es poco conocido y solo utilizado por los científicos, en tanto que el segundo es muy conocido y popularmente utilizado por todo el mundo.

              En el transcurso de este escrito vamos a descubrir fundamentalmente tres cosas: a) que en verdad mucho tienen que ver el uno con el otro, b) que ambos han sido subutilizados y c) que el conocimiento de ambos constituye una actitud de apertura ante la aventura de vivir esta existencia terrenal.

Gaia

"…el sabio observa el espacio

y no considera lo pequeño

como demasiado pequeño,

ni a lo grande demasiado grande,

porque sabe que no hay

límites en las dimensiones"

(CHUANG TZU, S-IV.aC)

              GAIA ([1]) es un mito contemporáneo realzado por la modernidad desde los ámbitos de la ciencia "más allá", por los años sesenta del presente siglo. Sin embargo, no fue del todo bien considerado por la comunidad científica ([2]), ya que no era más que una hipótesis de trabajo ([3]) que al ir ganando posiciones la sensibilidad ecológica -bandera alzada en defensa de la naturaleza ([4])-, GAIA fue adquiriendo relevancia, convirtiéndose así en el símbolo que el ecologismo ([5]) necesita bajo el lema: "La Tierra es un ser vivo, respetémosla". ([6]) 

              Dice el mito que después del CAOS vino GAIA "la del amplio seno GEA: la Madre" (en la forma romana) y a seguirles vino EROS. Esto significa que GAIA venía a ser la primera expresión del escondido CAOS ([7]), de la misma manera como en la actualidad esta situación viene a ser definida por la teoría del Big Bang. ([8]) Así pues, dentro de GAIA está la potencialidad del Cielo y la de Tierra, es decir ambas potencialidades siguen juntas o sea, forman la unidad Una del Todo. Está unido dentro de ella el principio masculino y el principio femenino, lo activo y lo pasivo, el yin y el yang y estas polaridades -negativo y positivo- están conformando un sólo Ser. ([9]) Fue la postura en práctica por el ser humano lo que introdujo el drama de la separatividad. La separación de contrarios convulsionó la Primigenia Unidad de CAOS y que GAIA heredó. ([10])  Recordemos: el origen del Universo, el Alfa y el Omega de Todo lo Creado y de Todo lo Nocreado es el Amor y la Creación un acto de Sublime Amor ([11]). ¿Hay algo fuera del Big-Bang y de su expansión, algo fuera del Huevo Cósmico?. He aquí otro dilema: está el alma en el cuerpo o el cuerpo en el alma?, se encuentra la vida en el planeta o en el planeta está en la vida?, está Dios en cada una de las cosas o están las cosas contenidas en Dios?. El símbolo de GAIA como Huevo Cósmico, como creación no enmudece ante estas interrogantes. Dios contiene al mundo -no al revés…!- porque si el mundo contuviera a Dios, entonces cabría suponer que podría existir sin Dios y ello es a todas luces un imposible metafísico.

              La hipótesis científica de James LOVERLOCK ([12]), mediante el sistema cartesiano llega a la conclusión de que la Tierra es un ser vivo, tan vivito y tan coleando como tu y como yo… ([13]).  Al ser la Tierra un SER, tenemos entonces que, ella ES, o sea es un Ser -con vida como cualquiera otro organismo viviente-. ([14])  Ligada a los ritmos y ciclos espacio-temporales y cósmicos, la Geografía ([15])  es el plano de reflexión horizontal que acoge y donde se proyectan las energías numínicas, de manera que la Tierra -este cuerpo celeste en el cual vivimos- pertenece a un conjunto de doce planetas que junto con el Sol constituyen una unidad que conocemos como Sistema Solar ([16]). Efectivamente, las doctrina tradicional afirma que la Divinidad ha estructurado el Universo según una clave -duodecimal, conocida por PLATON y desde PITAGORAS-, clave estructuradora de los mundos y los sistemas solares y el nuestro no se escapa de esta Ley cósmica universal… ¡y mal podría serlo, cuando nuestro planeta no es más una pequeñísima parte de ese Todo orgánico, quien visto desde la inmensidad vendría a ser del tamaño de un quarz en relación con el tamaño del cuerpo de un ser humano! ([17]).