Las inteligencias múltiples en la educación básica
"Ser diferente es ser único; ser diferentes enriquece nuestra cultura"
Cada persona es diferente a cualquier otra que habita en el planeta. Somos diferentes física, emocional e intelectualmente. Dentro del proceso de enseña y aprendizaje esta visión considera que cada persona aprende de manera diferente y posee potenciales, conocimientos y experiencias distintas, es decir, existen diversos estilos de aprendizaje a partir de los cuales procesamos la información recibida del medio y la transformamos en conocimiento.
El Plan de Estudios 2011 Educación Básica plantea que el centro y el referente fundamental del aprendizaje es el estudiante, porque desde etapas tempranas se requiere generar su disposición y capacidad de continuar aprendiendo a lo largo de su vida, desarrollar habilidades superiores del pensamiento para solucionar problemas, pensar críticamente, comprender y explicar situaciones desde diversas áreas del saber, manejar información, innovar y crear en distintos órdenes de la vida.
En este sentido, es necesario reconocer la diversidad social, cultural, lingüística, de capacidades, estilos y ritmos de aprendizaje que tienen; es decir, desde la particularidad de situaciones y contextos, comprender cómo aprende el que aprende y, desde esta diversidad, generar un ambiente que acerque a estudiantes y docentes al conocimiento significativo y con interés.
Algunos autores han demostrado, precisamente, que los niños aprenden de distinta manera y que su aprovechamiento escolar depende de que en el proceso de enseñanza-aprendizaje se apliquen los estilos y se brinden ambientes apropiados a su capacidad de asimilación y a sus potencialidades innatas.
Carbo, Dunn R. y Dunn K. han investigado sobre las diferencias en los estilos de aprendizaje desde finales de la década de los 70´s, y han demostrando que no existe un estilo de aprendizaje único en los estudiantes, cada ser es diferente, por lo tanto es necesario que se les enseñe de acuerdo a su estilo de aprendizaje. Afirman también que no existe un estilo que sea mejor que otro; hay muchas aproximaciones distintas, algunas de las cuales son efectivas con ciertos niños e inútiles con otros.
El término estilo de aprendizaje se refiere al hecho de que cada persona utiliza su propio método o estrategias para aprender.
Aunque las estrategias varían según lo que se quiera aprender, cada ser desarrolla ciertas preferencias que definen un estilo de aprendizaje. Son los rasgos cognitivos, afectivos y fisiológicos que sirven como indicadores relativamente estables de cómo los alumnos perciben interacciones y responden a sus ambientes de aprendizaje, es decir, tienen que ver con la forma en que los estudiantes estructuran los contenidos, forman y utilizan conceptos, interpretan la información, resuelven los problemas, seleccionan medios de representación, etc. (Woolfolk,1995).
Se han desarrollado distintos modelos y teorías sobre estilos de aprendizaje los cuales permiten entender los comportamientos diarios en el aula, cómo se relacionan con la forma en que están aprendiendo los alumnos y el tipo de acción que puede resultar más eficaz en un momento dado.
Uno de ellos es el de Inteligencias Múltiples de Howard Gardner, el cual establece que todos los seres humanos son capaces de conocer el mundo a través siete formas diferentes: del lenguaje, del análisis lógico-matemático, de la representación espacial, del pensamiento musical, del uso del cuerpo para resolver problemas o hacer cosas, de una comprensión de los demás individuos y de una comprensión de nosotros mismos. Donde los individuos se diferencian en la intensidad de estas inteligencias y en las formas en que recurre a esas mismas inteligencias y se las combina para llevar a cabo diferentes labores, para solucionar problemas diversos y progresar en distintos ámbitos.
Al tener esta perspectiva más amplia, el concepto de inteligencia funciona de diferentes maneras en la vida de las personas, sin embargo, la idea de las inteligencias múltiples es antigua y en tiempos recientes ha recuperado el derecho de ser analizada con seriedad.
Gardner (1993) considera que la inteligencia debe probarse con algo más que breves respuestas a preguntas breves, respuestas que erróneamente predicen el éxito académico; sin embargo, a falta de mejor manera de pensar acerca de la inteligencia y de mejores maneras de evaluar la capacidad individual, esta práctica se ha venido repitiendo durante muchos años.
En todo el mundo muchas personas dedicadas a la educación están llegando a conclusiones parecidas. Existe interés en los nuevos programas que pretenden desarrollar la inteligencia humana para toda una cultura y ayudar a individuos a aplicar su potencial humano.
Debiera ser posible identificar el perfil intelectual de un individuo a una edad temprana, y luego utilizar este conocimiento para mejorar sus oportunidades y opciones de educación.
Se podría canalizar a individuos con talentos poco comunes hacia programas especiales, incluso, de igual modo diseñar programas de enriquecimiento especial para individuos con semblanza atípica o disfucional de las competencias intelectuales.
Gardner manifiesta que el objetivo de la escuela debería ser el de desarrollar las inteligencias y ayudar a los alumnos a alcanzar los fines vocacionales y aficiones que se adecuen a su inteligencia predominante. Hace referencia también de que una escuela ideal del futuro no debería asumir que todo el mundo tiene los mismos intereses y capacidades, no todos aprendemos de la misma manera.
Una escuela centrada en el individuo tendría que ser rica en la evaluación de las capacidades y de las tendencias individuales.
En esta escuela ideal de Gardner los educadores intentarían comprender con mucha sensibilidad las habilidades y los intereses de los estudiantes, utilizando instrumentos imparciales o neutros respecto a cada inteligencia.
En sus libros "Estructuras de la mente" (1993) e "Inteligencias Múltiples" (2005), Gardner determina la amplia variedad de habilidades que poseen los seres humanos con la existencia de por lo menos siete inteligencias básicas:
1) Inteligencia lingüística: está relacionada con el lenguaje y la comunicación, en la cual se integran los dos hemisferios cerebrales. Manifiesta la capacidad para usar palabras de manera efectiva, sea en forma oral o de manera escrita.
Esta inteligencia incluye la habilidad para manipular la sintaxis o significados del lenguaje o usos prácticos del lenguaje, como la retórica, la explicación y el metalenguaje. Poseen esta inteligencia los poetas, escritores y buenos redactores.
2) Inteligencia lógico matemática: capacidad para usar los números de manera efectiva y razonar adecuadamente. Esta inteligencia incluye la sensibilidad a los esquemas y relaciones lógicas, las afirmaciones y las proposiciones (si-entonces, causa-efecto), las funciones y las abstracciones. Los tipos de procesos que se usan al servicio de esta inteligencia incluyen: la categorización, la clasificación, la inferencia, la generalización, el cálculo y la demostración de la hipótesis.
3) Inteligencia corporal-cinética: capacidad para usar todo el cuerpo para expresar ideas y sentimientos (por ejemplo un actor, un mimo, un atleta, un bailarín) y la facilidad en el uso de las propias manos para producir o transformar cosas (por ejemplo un artesano, escultor, mecánico, cirujano).
Esta inteligencia incluye habilidades físicas como la coordinación, el equilibrio, la destreza, la fuerza, la flexibilidad y la velocidad así como las capacidades auto perceptivas, las táctiles y la percepción de medidas y volúmenes.
4) Inteligencia espacial: habilidad para percibir de manera exacta el mundo visual-espacial (por ejemplo un cazador, explorador, guía) y de ejecutar transformaciones sobre esas percepciones (por ejemplo un decorador de interiores, arquitecto, artista, inventor).
Esta inteligencia incluye la sensibilidad al color, la línea, la forma, el espacio y las relaciones que existen entre estos elementos. Incluye la capacidad de visualizar, de representar de manera gráfica ideas visuales o espaciales.
5) Inteligencia musical: capacidad de percibir (por ejemplo un aficionado a la música), discriminar (por ejemplo, como un crítico musical), transformar (por ejemplo un compositor) y expresar (por ejemplo una persona que toca un instrumento) las formas musicales.
Esta inteligencia incluye la sensibilidad al ritmo, el tono, la melodía, el timbre o el color tonal de una pieza musical.
6) Inteligencia interpersonal: capacidad de percibir y establecer distinciones en los estados de ánimo, las intenciones, las motivaciones, y los sentimientos de otras personas.
Esto puede incluir la sensibilidad a las expresiones faciales, la voz y los gestos, la capacidad para discriminar entre diferentes clases de señales interpersonales y la habilidad para responder de manera efectiva a estas señales en la práctica (por ejemplo influenciar a un grupo de personas a seguir una cierta línea de acción).
7) Inteligencia intrapersonal: es el conocimiento de sí mismo y la habilidad para adaptar las propias maneras de actuar a partir de ese conocimiento.
Esta inteligencia incluye tener una imagen precisa de uno mismo (los propios poderes y limitaciones), tener conciencia de los estados de ánimo interiores, las intenciones, las motivaciones, los temperamentos y los deseos, y la capacidad para la autodisciplina, la autocomprensión y la autoestima.
Un aspecto fundamental de esta teoría que propone Howard Gardner es insistir en que las inteligencias se complementan, especialmente frente al desafío de resolver una problemática determinada.
Todas ellas son igualmente importantes, ya que proporcionan información sobre los estilos de aprendizaje de los alumnos, contribuyendo a concebirlos como personas que aprenden y ven al mundo de manera diferente, dando una pauta para generar estrategias metodológicas diversas para un mismo grupo de alumnos, que atiendan a cada una de sus necesidades, de esta manera el docente apoya al alumno para reconocer sus capacidades, utilizándolas, potenciándolas y reforzando sus debilidades.
Ante esta situación los alumnos que cursan la educación básica se enfrentan a una gran dificultad: pocos docentes valoran, promueven y planean de acuerdo a las inteligencias múltiples, ritmos y estilos de aprendizaje.
Como docentes es importante analizar a fondo esta situación, prepararnos más y mejor para conocer a cada uno de nuestros alumnos y guiarlos a potenciar sus capacidades al máximo, utilizando una planeación adecuada para cada inteligencia que prevalezca en nuestras aulas.
REFERENCIAS
Gardner Howard (1994) "Estructuras de la mente La Teoría de Las Inteligencias Múltiples". Fondo de Cultura Económica.
Gardner Howard (2005 ) "Inteligencias múltiples: la teoría en la práctica", ed. Paidós. Barcelona.
Markova, D. y Powell, A. (1997). Cómo desarrollar la inteligencia de sus hijos. México: Selector.
SEP, Plan de Estudios 2011 Educación Básica, 2011, México.
Woolfolk A, (1995).Psicología Educativa, Ed. Prentice-Hall, México.
Autor:
Luz Cristina Nieto Burgos