Fortalezas y debilidades políticas, económicas y sociales del MERCOSUR (página 2)

En lo que respecta al entorno político del grupo debe destacarse que, éste bloque cuenta con mecanismos, tales como: Protocolo de Ushuaia sobre compromiso democrático en el MERCOSUR, Parlamento del MERCOSUR y el Observatorio de la Democracia, además de tener como parte de sus ventajas, con un aspecto de gran importancia en los procesos de integración y es que la mayoría de sus miembros comparten la misma ideología política, aspecto fundamental en el impulso de todo proceso de integración.

La voluntad política ha sido señalada por algunos estudiosos como uno de los aspectos esenciales que debe tener presente todo proceso de integración, de allí los rápidos avances alcanzados por éste bloque.

A nivel económico, ya se destacó la importancia del flujo comercial entre sus países miembros. Aunado a ello, el Mercosur tiene la ventaja, que dos de sus miembros, Argentina y Brasil, cuentan con un gran potencial económico y agrícola en la región, que le permite expandir su oferta comercial, no sólo al interior del grupo, sino también a otras regiones del mundo. Si revisamos las cifras de la ALADI, para el año 2006, encontramos que sus exportaciones globales alcanzaron 189.751 millones de dólares. En lo que respecta a las importaciones globales, estas sumaron 140.736 millones de dólares, es decir que el grupo cuenta con una balanza comercial favorable, reflejada en su nivel de exportación.

En lo atinente a lo social, como bien puede observarse la estructura del MERCOSUR, no cuenta con un órgano avocado estrictamente al ámbito social. El Foro Consultivo Económico y Social, cuenta con un área especializada sobre los aspectos sociales de integración, además de otras áreas relacionadas con la consolidación de la Unión Aduanera, profundización del proceso de integración y relaciones externas del MERCOSUR. Sin embargo, es de destacar que a fin de darle un mayor dinamismo al bloque subregional, sus países miembros incorporaron en las últimas reuniones el componente social, fundamental en todo proceso de integración, creándose instancias como: Secretaría de Derechos Humanos; Reunión Especializada de la Mujer, creada en 1998 con el objetivo de estudiar todos los aspectos relacionados con el género y su inclusión en las políticas públicas, Acuerdo Marco en materia de Ambiente, Reunión de Ministros de Ambiente, el Proyecto Cyma, orientado a contribuir con el desarrollo sustentable del sector productivo en el MERCOSUR y a atender la reducción de la contaminación ambiental, Reunión de Ministros de Educación, para el intercambio educativo, científico y cultural, Declaración sociolaboral que contiene los principios y derechos en el área de trabajo, Reunión de Ministros de salud y el Sistema de Información en Salud del MERCOSUR, el cual incluye información sobre las acciones conjuntas de los países miembros y datos sobre los sistemas nacionales de salud de cada uno de ellos, entre otros.

Por otra parte se crea el Programa MERCOSUR Social y Solidario, en la que convergen 18 Organizaciones no Gubernamentales de Argentina, Brasil, Paraguay, Uruguay y Chile, cuyo fin es trabajar por la inclusión de la esfera social en el proceso de integración regional.

COMPARACIÓN MERCOSUR-ALBA

El Mercosur y el ALBA, son dos esquemas que persiguen objetivos diferentes, puesto que mientras el primero busca de manera prioritaria, la ampliación de sus mercados nacionales, a través de la integración, el segundo otorga prioridad a la lucha contra la pobreza. A pesar de esta diferencia, algunos de los pilares del nuevo enfoque de integración que propone Venezuela a través de la Alternativa Bolivariana para las Américas, fundamentalmente la integración energética (Petroamérica, Gasoducto del Sur); y la integración financiera (Banco del Sur), son apoyados por los países miembros del Mercosur, lo que podría en un futuro consolidar como bloque el ALBA.

El proceso de integración latinoamericano debe cambiar el esquema de competencia surgido con base en las premisas neoliberales, por un nuevo modelo donde prevalezca la solidaridad, cooperación y complementariedad, usando para beneficio y crecimiento de nuestros pueblos las potencialidades presentes en los países suramericanos, ayudando al crecimiento de los países menos desarrollados, e impulsando un desarrollo equilibrado y armónico de nuestras economías.

Es de esta manera que podrá avanzarse con mayores posibilidades de éxito en la unión latinoamericana, pero lamentablemente este espíritu no fue el que prevaleció en los bloques de integración creados en la región después de la Segunda Guerra Mundial.

La falta de autonomía en la adopción de las políticas económicas, acogidas por los países latinoamericanos, ha retrasado mucho más la marcha del proceso de integración. Por tal motivo es importante consolidar las instituciones propuestas en el marco del ALBA, a fin de diseñar el proyecto de integración que mejor se adapte a nuestras realidades internas, autónomo, y en el que sea escuchada la voz de nuestros pueblos.

Fuentes

http://www.mercosurabc.com.ar/

http://www.aladi.org/

Autor

Lic. Carmen Victoria Montes