Las parafilias y la pedofilia: Una revisión de un problema crónico
Enviado por Felix Larocca
- Introducción
- Aquí nos referimos a las parafilias, y a la pedofilia en particular
- Síntomas
- Causas
- Tratamiento
- En resumen
- Bibliografía
El abuso sexual se produce cuando, una persona en posición superior fuerza a otra a mantener un contacto sexual. Para ello se puede valer de la potencia física, de engaños, de amenazas o de sobornos. Generalmente, se produce en niños, por parientes adultos, mentores, o jóvenes de mayor edad; y en los adultos, por jefes con mujeres subordinadas. FEFL en: La importancia dinámica del abuso sexual: www.monografias.com/trabajos48/abuso-sexual/abuso-sexual
La actividad sexual con miembros inmaduros de una especie (con la excepción de la nuestra), no ocurre libremente en la Naturaleza. La razón posible para este encuentro, aún en aquellos primates que copulan por placer y no por el imperativo de la reproducción, es porque los adultos de ambos sexos no perciben la estimulación de las hormonas sexuales (feromonas) que están ausentes en el animal impúber.
Maltrato infantil
No obstante, la prostitución infantil, el matrimonio intergeneracional, como lo hemos descrito en otras ponencias, y otras actividades sexuales (incluyendo el estupro de menores) es común entre adultos y niños, con el perpetrador pudiendo ser miembro maduro de cualquier género.
Nuestras sociedades están alarmadas, y con razón. Con lo antedicho, y, debido al hecho de que mis ponencias al respecto han recibido atención profusa e inmediatas en los portales que las han publicado, he accedido a una actualización de las mismas.
Además de lo antedicho, y, en respuesta a tantas solicitudes de nuestras radio audiencias televisadas (FM Radio KOOL La Revuelta/Salud 106.9 y Punta Cana TV Canal 8 www.radiokool106fm.com), nos sentimos obligados a asentir y actualizar temas que anteriormente hemos completado en otras lecciones y portales del Internet. (Véase: Diferencia de edad en las parejas en: http://www.monografias.com/trabajos56/diferencia-de-edad/diferencia-de-edad).
Aquí nos referimos a las parafilias, y a la pedofilia en particular
La pedofilia, comportamiento sexual aberrante, se viene reportando, con incidencia alarmante, en tiempos recientes. Debido a la publicidad adversa, que hoy se asocia en esta actividad sexual, casi exclusivamente, con el comportamiento lascivo de algunos sacerdotes, miembros de la Iglesia Católica Apostólica y Romana. El Pontífice reinante Francisco I nos asegura que estos atropellos morales van a terminar.
Como entidad clínica, la pedofilia cae bajo la categoría general de las parafilias (comportamiento sexual innatural, amoral, impúdico, y anormal). La pedofilia propia, se define como el acto, o la fantasía de procurar actividades sexuales con niños pre-pubescentes, como el método preferido, o exclusivo de lograr satisfacción sexual. Usualmente los pedófilos son hombres adultos, quienes pueden también ser atraídos erótica, paradójica e irónicamente, por otros hombres, por mujeres o por ambos sexos.
Un fenómeno muy común y a la vez insólito, entre quienes son pedófilos, es la tendencia a ver sus comportamientos (destructivos hacia los niños a quienes abusan) como actos placenteros, beneficiales y aún valiosos para los mismos. Paradójicamente, los pedófilos siempre sonsacan garantías por parte de sus víctimas de que no alertarán sus padres, las autoridades o a ninguna otra persona de sus actividades subrepticias.
De todas las parafilias reconocidas y estudiadas, la pedofilia es la más común; con un estimado (en los EE.UU.) de un 20% de todos los niños americanos habiendo sido víctimas de esta forma de abuso sexual.
La mayoría de quienes perpetran este crimen son personas conocidas (raramente extraños) al niño. La mayoría son amigos confiados de la familia, parientes, o personas que supervisan al niño en cualquier capacidad. A propósito de lo último tenemos el reciente caso escandaloso del difunto Sir Jimmy Saville en el Reyo Unido cuyas fechorías y transgresiones pedófilas continúan multiplicándose de manera exponencial (Véase: http://www.theguardian.com/commentisfree/2015/feb/27/jimmy-savile-sexual-abuse).
Los tipos de actividades en que los pedófilos envuelven al niño varían. Puede que se limiten a mirar al niño desnudo, a tocarle sus órganos genitales o a consumar actos más complicados como constituyen el sexo oral o la masturbación mutua. Muchos investigadores reportan el hallazgo de que los niños que están a mayor riesgo de caer víctimas del predador sexual son, lógicamente, aquellos que carecen de supervisión y cuidado.
Numerosos hombres famosos fueron conocidos por sus inclinaciones eróticas hacia los pequeños de cualquier sexo. Robert Baden-Powell, fundador del escautismo y el Reverendo Charles Dogdson, también conocido como Lewis Carroll, autor de las famosas aventuras de Alicia (Alice Liddell) en el País de las Maravillas fueron presuntos pedófilos.
Antes de ser considerado para ser diagnosticado, usando la clasificación diagnóstica de la Asociación Psiquiátrica Americana (APA); por un período de, por lo menos seis meses, el pedófilo debe de haber "percibido fantasías recurrentes e intensas de excitación sexual o de comportamientos sexuales envolviendo niños pre-pubescentes (generalmente de edad 13 años ó más jóvenes)".
Secuelas
Las mismas fantasías, los impulsos sexuales o los comportamientos anómalos, pueden causar al pedófilo dificultades personales, sociales, u ocupacionales afectando toda área de la situación individual.
La persona tiene que tener por lo menos 16 años de edad y ser (por lo menos) 5 años mayor que su víctima. Esta definición excluyendo un adolescente maduro envuelto en una relación sexual con otro adolescente de entre 12 y 13 años.
Las causas de las parafilias (incluyendo la pedofilia) no han sido formalmente establecidas. Si se encuentran casos familiares, este hallazgo puede ser (tan probablemente) indicativo de un componente genético (algo que no ha sido establecido con certeza) como de uno culturalmente asimilado.
Anomalías en las hormonas sexuales masculinas, en el metabolismo de la serotonina, historia de abuso sexual en la infancia; todas éstas, y otras teorías causales propuestas, no han sido demostradas satisfactoriamente.
Para la mayoría de los terapeutas tratando la pedofilia, existen tantas posibilidades causales, como existen pedófilos. De lo que se infiere que el mero hecho de haber sido testigo (como niño) de comportamientos sexuales aberrantes no conlleva por necesidad al desarrollo desviado sexual.
No lo digas a nadie
El uso del alcohol, y las dificultades inherentes a la imposibilidad que tienen algunos de establecer relaciones adultas con miembros del sexo opuesto pueden conducir a la preferencia por los niños en algunos casos.
Establecido es el hallazgo de que pedófilos que prefieren varones tienen la propensión de ofender de nuevo con una frecuencia doble de la que tienen los que prefieren las hembras.
Como no existe causalidad establecida, y como el pedófilo puede ocultar sus tendencias eróticas bajo guisa de sus inclinaciones personales a hacer amistad con el niño, a veces se convierte en asunto difícil detectar a quienes utilizan los menores para sus fines carnales. Muy a menudo el mecanismo psicológico de la racionalización, acoplado con la negación, crea una situación poco favorable para que el perpetrador admita su necesidad de asistencia profesional. De hecho, publicaciones recientes por grupos de profesionales, quienes defienden la posición de que el pedófilo incrementa (con su conducta abusiva hacia el niño) el autoestima de sus víctimas; por el mero hecho de que las hacen sentir especiales como objeto de su interés sexual y como recipiente de sus atenciones mal dirigidas. Estas posiciones teoréticas viciadas carecen de mérito alguno para tenerlas en cuenta; pero se usan para defender a los pedófilos en las cortes de la Ley y frente al público en general.
Se ha reportado con frecuencia preocupante que el famoso sexólogo, Alfred Kinsey (entre otros) condonan la pedofilia como siendo parte del espectro normal, y deseable, del comportamiento sexual. (Leer más: http://www.businessinsider.com/why-alfred-kinsey-was-controversial-2013-10).
Como es típico con la mayoría de las enfermedades emocionales por todos conocidas, casi todos los métodos de terapia aceptados han sido intentados y ninguno ha provisto una solución final.
El uso de ciertas medicinas antidepresivas (el Prozac, por ejemplo) han producido resultados equívocos. El uso de hormonas que acentúan la feminidad puede acarrear consecuencias negativas, como fuese en el famoso caso de Alan Turing. (Leer más: http://www.scottaaronson.com/blog/?p=63 ).
El uso de agentes que, en teoría, reducen la libido sexual por su efecto en la disminución de la intensidad de los efectos de los andrógenos circulantes, no ha dado resultado alguno.
Los métodos de condicionamiento y contra-condicionar el comportamiento de los pacientes no prometen esperanzas en esta situación, como tampoco lo prometen el castigo o el encarcelamiento.
Finalmente, para todos quienes ven en toda circunstancia humana otra forma de dependencia, es prudente informarles que los doce pasos de AA son un esfuerzo tan malgastado como bien intencionado.
En nuestra experiencia profesional, los pedófilos que hemos tratado son personas inmaduras, impulsivas, con tendencias hedonistas y con desarrollo tenue de su conciencia moral. No importa que sean curas, políticos o santos, lo mismo da. Ellos se las manejan de alguna manera para enceguecer a los padres y para seducir a sus víctimas.
Entre las profesiones que encontráramos representando los pedófilos con mayor frecuencia: los líderes de boys y girl scouts parece ser la más representativa de los infractores inveterados, seguidos por los entrenadores atléticos, los maestros, parientes cercanos y (desgraciadamente) por los clérigos.
La pedofilia, tanto como las parafilias y como parece que (a menudo) ocurra con las enfermedades del comer, pueden interpretarse como desviaciones inesperadas en la adaptación de organismos que procuran el placer (cualquier placer) para satisfacer sus instintos descarriados en sus búsquedas por el éxtasis instantáneo. Sin importar a quienes, en su egoísmo narcisista, inmoral y descarriado, condenan al tormento eventual.
Fin de la lección.
Recién casados: Ella doce años, él 77
Larocca, FEF: La importancia dinámica del abuso sexual en monografías.com, academia.edu.com y researchgate.net
Larocca, FEF: Donde se Aprende del Juego Brusco con los Niños, y de sus Problemas, de la Formación de un Síntoma Neurótico, del Maltrato Personal y del Abuso Sexual en monografías.com, academia.edu.com y researchgate.net
Larocca, FEF: Una síntesis de la personalidad Narcisista Patológica en monografías.com, academia.edu.com y researchgate.net
Larocca, FEF: Temas de la niñez: En el valle de la opulencia, del sexo y de la inocencia en monografías.com, academis.edu.com y researchgate.net
Larocca, FEF: Juego Brusco y Abuso Sexual infantil en monografías.com, academia.edu.com y researchgate.net
Larocca, F. E. F: El celibato: ¿Sublimación aberrante? o ¿Aberración sublime? en mailxmail.com, monografías.com, academia.edu.com y researchgate.net
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Además, extensivos enlaces (links), bibliografía adicional y referencias de contribuciones a este tema y otros temas mencionados por este mismo autor, pueden obtenerse en los siguientes portales:
Academia.Edu
ResearchGate.net y
Monografías.com
Alice Liddell (Alicia en el País de las Maravillas y el Rev. Charles Dodgson (alias Lewis Carroll)
/trabajos49/abuso-sexual-infantil/abuso-sexual-infantil
Autor:
Dr. Félix E F Larocca