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Morbo en la televisión

Enviado por Gonzalo Carrizo


Partes: 1, 2

    1. Tema
    2. Marco teórico
    3. Objeto de estudio
    4. Policías en acción
    5. Rating
    6. Conclusión

    TEMA

    El tema que trataremos en el siguiente trabajo es el aumento de la existencia en la televisión argentina de imágenes y contenidos morbosos. Los cuales a nuestro entender traspasan los limites de la ética que se deben tener en un medio masivo de comunicación como es la televisión.

    Comenzaron el trabajo mostrando algunos ejemplos de programas que fueron emitidos en los últimos tiempos en nuestra televisión. Lo que queremos es encontrar la respuesta a por qué con el pasar del tiempo la gente que consume televisión, la mayoría de nosotros, cada vez está más interesada en este tipo de programas dejando de la lado los programas educativos, los documentales, es decir los realmente informativos.

    Creemos que muchas de las imágenes que los productores periodísticos de los programas deciden sacar al aire en distintos programas, ya sean noticieros, flashes, etc., están totalmente fuera de lugar. Tanto en el horario de protección al menor como fuera de el.

    Estamos de acuerdo que el trabajo de todo periodista es defender la verdad, y su intención es comunicar y transmitirle a la gente cierta verdad. Pero esto debe hacerse con ética y moral. No todo esta permitido en la televisión. Y menos cuando las cosas que se hacen son en busca del rating.

    Queremos saber por que se deja de lado la ética profesional que cada periodista debe tener en cuenta antes de anunciar una noticia. Por qué en la televisión de hoy no existe ningún tipo de límite.

    Frente a esto los televidentes lo que hacen es consumir estos tipos de programas. Programas sin contenido constructivo.

    La televisión de hoy en día se convirtió en una vidriera de muertes en vivos, violencia, horror, imágenes inmorales, etc. A continuación daremos ejemplos de programas e imágenes que fueron emitidas al aire y que luego analizaremos a fondo.

    En los tiempos en que vivimos, las muertes, los asaltos, y la manera de representar la realidad desde los medios televisivos han llevado a poner en tela de juicio si la delgada línea que separa la información y el morbo fue cruzada. Creemos que es tan fácil informar como poner imágenes aberrantes sobre casos que se piensa conmueven a la sociedad.

    La televisión se ha nutrido siempre de lo impactante de la realidad, siguiendo el lineamiento de esa imagen carnal que puede proyectar una muerte trágica como la de Nora Dalmasso  o el seguimiento de su caso. El trato descuidado que se le da a una persona que se le acaba de morir un familiar cercano, haciendo la pregunta nunca tan desafortunada: ¿Cómo se siente en este momento?

    Un punto de rating da rienda suelta a la imaginación de un productor para diseñar un programa basado en los chicos que salen borrachos de un boliche y pagan las consecuencias de sus actos.

    Desde una producción televisiva se puede informar o desinformar, todo esta en las manos de quien lo haga. Desde el poder que ejercen los medios televisivos la parte informativa fue apartándose, dándole paso al abuso de morbosidad, desde Mauro Viale y su peleas organizadas, o el reclutamiento de periodistas de "espectáculos" que apartan sus funciones abriendo ese abanico de información relacionada a la vida privada de cada famoso, hasta la suicidio de "el malevo Ferreira" pasando por la caída de Alejandra Pradon desde un balcón; la televisión nos ha ido acostumbrando de a poco a una imagen casi natural de esas situaciones de la vida donde lo trágico toma presencia, sin olvidar la intromisión del rey televisivo  Marcelo Tinelli, quien aun teniendo una emisión diaria con un 80% realizada en falso vivo, nos da el gusto de ver como Wanda Nara se rompe contra un costado de la pista de patinaje, o a la desahuciada Karina Jelinek desmayarse después de haber tenido un bajón de presión por un momento angustiante.

    Y siguiendo su teoría de diversión, plantar dos caños y una bañadera en medio de un programa para ver como mujeres y hombres pueden representar una escena de sexo, con el agravante de un grupo de reidores que no sabe mas que tirar acotaciones poco constructivas. Pero así no termina todo también se pueden ver chicos incapacitados llorar, al compás de una música melancólica que resalte el mensaje "humanista", que tiene bailar por un sueño.

    De todas formas no es el único modo de hacer TV morbo, también podemos encontrar este nuevo formato, que llegó para quedarse, en programas donde enfermos y adictos son puestos a pruebas humillantes como presentar en una mesa llena de comidas y hacerlos comer lechuga hervida para ganar un premio material.

    Pero no solo los programas no ficcionales sufrieron este traspaso, ahora es muy normal ver a la chica de 15 años con su profesor de historia manteniendo la relación amorosa más apasionante del mundo o encontrar al protagonista de la telenovela enrollarse sentimentalmente con más de una mujer, si bien esta es en parte la guía de una novela, el modo de mostrarlo ahora, es mucho más violento, las infidelidades son moneda corriente para estirar un producto.  

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