- El mito y el rito están interrelacionados. Los rituales y el teatro también
- Libro Blanco de la Educación Ambiental en España
- Bibliografía citada
"Qué herramienta de comunicación resulta apropiada, es algo que puede variar enormemente de una situación a otra. De hecho, a menudo olvidamos que la herramienta más poderosa es la comunicación cara a cara."
Frits Hesselink. Presidente de la Comisión de Educación y Comunicación de la UICN entre 1994 y 2000
El teatro es, entre otras cosas, un instrumento de comunicación. Y como tal se ha utilizado desde su nacimiento, como medio de transmisión de los valores culturales de la comunidad.
La característica más definitoria del teatro como técnica audio-visual de comunicación, es la proximidad física real entre el emisor del mensaje y el receptor del mismo, el cara a cara entre el actor y el espectador.
El hecho de que el instrumento básico del trabajo teatral sea el cuerpo del actor (o la extensión del mismo en forma de títere, marioneta, muñeco u objeto), confiere a esta técnica de comunicación audio- visual un carácter entrañablemente "humano".
Esta "humanidad" del teatro lo hace especialmente eficaz para provocar estados de complicidad entre el emisor del mensaje (el actor) y el receptor del mismo (el espectador). Esto a su vez, lo dota de una gran eficacia a la hora de tratar cuestiones emocionales y sentimientos de pertenencia (a una comunidad, a un territorio…).
Sentir un lugar, una colectividad, un entorno, como propio (sentirme parte de un lugar, de una colectividad, de un entorno) facilita la involucración y la responsabilización en su gestión, así como el desarrollo de comportamientos respetuosos y sostenibles.
"El meollo del teatro es el encuentro. La persona que realiza un acto de autorrevelación, la que establece contacto consigo misma, es decir, una extrema confrontación, sincera, disciplinada, precisa y total, no meramente una confrontación con sus pensamientos sino una confrontación que envuelva su ser integro, desde sus instintos y su aspecto inconsciente hasta su estado más lúcido".
Jerzy Grotowski. Creador del Teatro Laboratorio. Dramaturgo, pedagogo y teórico teatral.
El teatro, como instrumento técnico de comunicación, no solo sirve para comunicarse con el público. Las técnicas de entrenamiento actoral son, entre otras cosas, técnicas de introspección, de comunicación con el interior de uno mismo, de análisis de la realidad íntima del ser humano.
Stanislavsky al desarrollar su "método" para la construcción del personaje, buscando desarrollar el denominado "comportamiento orgánico" en escena, considera el arte interpretativo desde el punto de vista de la ciencia y el conocimiento. E influenciado por, entre otras, la teoría psicoanalítica de Freud, crea un método de análisis de la realidad escénica (que implica: la realidad del personaje, la realidad del espacio escénico, la realidad del conflicto dramático, la realidad de la situación imaginaria, etc.), que puede aplicarse al análisis de la relación del ser humano consigo mismo y con su entorno.
"La antropología teatral es el estudio del comportamiento sociocultural y fisiológico de los seres humanos en situación de representación organizada".
Eugenio Barba. Director del Odin Teatret.
Fundador de la Internacional School of Theatre Antropology.
El teatro es, entre otras cosas, una elaborada técnica de análisis de la realidad, y más específicamente de la relación del ser humano consigo mismo y con su entorno. También es un eficaz instrumento de comunicación para fomentar "complicidades" a nivel intelectual y, especialmente, a nivel emocional.
Estas cualidades capacitan al teatro como eficiente recurso para la educación ambiental, entendida esta como proceso permanente en el cual los individuos y las comunidades adquieren conciencia de su medio y aprenden los conocimientos, los valores, las destrezas, la experiencia y, también, la determinación que les capacite para actuar, individual y colectivamente, en la resolución de los problemas ambientales presentes y futuros.
Estas características específicas del arte dramático no han pasado desapercibidas para el mundo de la educación ambiental. Las técnicas teatrales se están utilizando desde hace tiempo, de forma más o menos sistemática (y de forma más o menos consciente) por parte de los educadores ambientales. Las dramatizaciones y los juegos dramáticos, los cuentacuentos (el contador de historias…), los guiñoles y los montajes teatrales más o menos elaborados han pasado a formar parte de los recursos pedagógicos utilizados. También empiezan a aplicarse técnicas de Teatro Social, como las relacionadas con el Teatro Foro o el Teatro del Oprimido. No debemos olvidar que los problemas ambientales son problemas socio ambientales.
Página siguiente |