Introducción
Los textos que se intentarán analizar en el presente trabajo: "Un canto para Bolívar" del escritor chileno Pablo Neruda que, en 1941, edita la Universidad Nacional Autónoma de México y la "Oración al Chávez nuestro" de autor caraqueño, hasta ahora encubierto bajo el velo del anonimato, quien en 1992 hizo llegar a escondidas al comandante venezolano Hugo Chávez Frías (retenido en la cárcel de San Carlos en Caracas), un folleto en el que se hallaban anotados los versos del texto poético que se examinará. Estos escritos brindan un punto de partida en la reflexión acerca del poder creador de la literatura en tanto instrumento de comprensión de la realidad, a través del cual es posible identificar las problemáticas que ésta atraviesa y anticipar, así, una posible transformación de la misma. Ante esto, lo que se pretende plantear con el texto nerudiano es un discurso diverso del que, por lo general, se le conoce, sin por ello descartar las posibles analogías que pueden derivar del cotejo con el otro texto que se desea analizar. Tomando como referencia el "Chávez nuestro", se puede vislumbrar en las palabras de esta breve composición el sentimiento de esperanza que había suscitado el intento de rebelión capitaneado en aquellos días de 1992 por un paracaidista desconocido. Esta hazaña autorizó al pueblo venezolano a pensar que tenía el derecho de buscar una propia vía para emerger de la miseria y del subdesarrollo, así como casi doscientos años antes el Libertador venezolano, Simón Bolívar, intentó liberarse del dominio español para ver introducido el continente suramericano en un contexto geopolítico internacional más dinámico y moderno.
¿Cuántos de nosotros nos hemos alguna vez percatado de que los textos del poeta chileno y del anónimo venezolano expresan la esperanza, nunca apaciguada, de un pueblo oprimido? Se podría afirmar que nos hallamos ante un hecho nuevo e importante en la historia del continente latinoamericano de los últimos tiempos: los acentos bíblicos y políticos presentes en ambos textos no son el resultado de un simple sentimentalismo, ni la manifestación de una frívola emoción estética, ni mucho menos mística, sino que, al contrario, son la expresión de esa experiencia trágica vivida por un pueblo a lo largo de su afligida existencia.
Vincenzo Paglione
L"Aquila, 31 de octubre de 2008
Civitella Roveto, 20 de julio de 2009
§. Redescubriendo la ciudadanía
El proceso de redescubrimiento de la ciudadanía impulsado por la Revolución Bolivariana, mediante la práctica del protagonismo que en esta subyace, intenta extender las garantías del estado de derecho al cuerpo entero de la población, educándola para ello al reconocimiento de la seguridad jurídica, es decir, formándola a restablecer el derecho y las libertades civiles ultrajadas por la vieja clase política. Para alcanzar el restablecimiento de la ciudadanía, ésta tiene que pasar a través de la construcción de una red semántica en la que se configuran los nuevos significados que se desean introducir en el contexto social, en esta forma se hace posible impulsar el proceso de reconstrucción de una nueva identidad social a partir del desenmascaramiento de los conceptos de ideología y de cultura hasta ese momento dominantes.
La condición de miseria institucionalizada a la que fue reducida gran parte de la población venezolana no podía ser contestada con el viejo sistema de valores que dominaba las relaciones sociales de ese país, los cuales impedían el desarrollo de su propia libertad. Ahora bien, como se demostrará más adelante, el proceso bolivariano no ha subvertido los valores existentes, puesto que ello conllevaría al surgimiento de tensiones sociales incontrolables, sino más bien los ha readaptado, manteniendo una tensión entre lo utópico y lo posible como punto de apoyo para una superación del estado de cosas existente. De hecho, una sociedad libre se puede representar sólo a través de la negación de la sociedad existente, es decir, sólo por medio de la negación de aquello que la sociedad establecida impide desarrollar. Por consiguiente, la búsqueda de una nueva dignidad apunta hacia la dirección de un pueblo que quiere conseguir la plena conciencia de sí. Fue así que en la última década del siglo XX el pueblo venezolano se apeló nuevamente a reclamar su libertad económica, política, social e ideológica de las que había sido despojado (C.F. Liria, P.F. Liria, L.A. Zahonero: 2007: 173-186) .
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