Los usos médicos de la hipnosis son variados. Se ha usado sin ningún éxito en el tratamiento de la obesidad, en el de las adicciones y en el de la pedofilia. Pero, sí puede ser adjunto efectivo en el tratamiento del dolor del cáncer, del dolor del parto y del dolor de la cirugía dental.
Nosotros en el Servicio Médico de la US Navy, lo hemos aplicado, exitosamente, en el tratamiento del dolor de la porfiria.
Debido a sus aspectos místicos, muy pocos médicos hoy la utilizan, aunque puede que sea una de las medicinas más viejas por nosotros conocidas.
Es interesante destacar aquí que el psicoanálisis freudiano se deriva directamente de la hipnosis.
James Braid
Freud fue muy pobre hipnotizador por admisión propia.
En su desarrollo, como pensador y científico, Freud colaboró en sus métodos con el psiquiatra vienés Josef Breuer, con quien publicara sus estudios originales acerca de la histeria.
Ambos, Freud y Breuer, creían que por medio del trance hipnótico las pacientes (generalmente mujeres) descubrían eventos que habían sido sepultados en la mente fuera del alcance de la percepción consciente, resultado en la "cura".
Para compensar por sus pocos talentos de hipnotista, Freud decidió emplear el método de la catarsis, por medio del cual, el paciente permanecía despierto y no bajo trance, resultando en la abreacción (descarga) directa y consciente de afectos, con el resultado de una disminución de la tensión psíquica.
Otro cambio de Freud en su método: La introducción del diván psicoanalítico.
Cuando Freud hizo uso del diván psicoanalítico, admitió que lo hizo, para evitar que sus pacientes lo estuvieran mirando directamente todo el tiempo.
Con la experiencia y el transcurso de los años se ha llegado a realizar que el método psicoanalítico, en sus mecánicas y dinamismos, es una situación terapéutica compleja y valiosa como instrumento de investigación y de cura.
Prosiguiendo
Debido a que el mesmerismo y su asociación con el espectáculo teatral y con la charlatanería, la hipnosis ha sido vista con escepticismo por gran parte de su historia.
Profesor Jean-Martin Charcot demuestra el uso de la hipnosis con la famosa Blanche Wittman
En tiempos recientes, la hipnosis ha sido sujeto de mucho interés y estudio por los neurocientíficos cognitivos y hoy se considera como un estado alterado de la consciencia — a veces descrito como un "trance" — que se asocia con una respuesta aumentada a las sugestiones, un incremento de la imaginería y una reducción en la capacidad de comprobar la realidad (reality testing).
Todos entendemos que la hipnosis puede afectar profundamente la mente y el comportamiento, de manera que percepciones y pensamientos pueden ser manipulados fácilmente, lo que no se ha establecido con certeza son los mecanismos neurales que median estos comportamientos.
De acuerdo a un estudio reciente de los mecanismos neurales de la parálisis-inducida hipnóticamente, se ha demostrado que la descripción original que Braid hiciera fue extraordinariamente acertada.
El estudio fue publicado en la revista Neuron. Éste demuestra que el estado hipnótico produce un aumento de actividad en áreas del cerebro que están involucradas con la atención, imaginería mental y autoconsciencia.
De tal manera que el trance, puede ejercer control de los movimientos del cuerpo por medio del incremento de las representaciones mentales del ego (self) y del enfoque selectivo de la atención en esos procesos.
Un grupo de investigadores del Centro para la Neurociencia de la Universidad de Ginebra utilizó técnicas de neuro-imaginería para establecer si la sugestión hipnótica de la parálisis inducida activaba los procesos motores inhibidores, y, de ser así, si estos procesos correspondían a los mecanismos responsables bajo condiciones no-hipnóticas.
fMRI durante la hipnosis
Para conducir la investigación se reclutaron 18 voluntarios saludables, a quienes se les pidió que condujeran ciertas tareas de movimientos mientras eran escaneados con imaginería de resonancia magnética (fMRI).
Los participantes fueron requeridos a fijar la vista en una imagen que se les mostró por medio segundo. Esto fue seguido por una foto en escala gris localizada a mano derecha o izquierda, esta maniobra era para prepararlos para la próxima prueba. Luego de un intervalo de 1-5 segundos, la imagen cambiaba de color: si se volvía verde, ellos tenían que responder, tan pronto como les fuera posible, presionando un botón con la mano correspondiente, si era roja, ellos tenían que evitar todo movimiento y permanecer inmóvil.
Esta prueba se condujo mientras los candidatos estaban bajo hipnosis, habiéndoseles dicho que la mano estaba paralizada, como asimismo se condujo en el estado normal.
En una tercera situación (la de control), 6 de los participantes conducirían el experimento mientras pretendían estar paralizados (pretendiendo que no podían mover los dedos de la mano izquierda).
En el estado normal, los voluntarios llevaron a cabo la prueba con mucho acierto, respondiendo a las direcciones correctamente con ambas manos en más del 97% de las veces.
Bajo la hipnosis, las respuestas fueron correctas con la mano derecha, pero no hicieron ningún movimiento con la izquierda.
Lo que indica que la sugestión hipnótica de la parálisis había sido exitosa, y que la hipnosis no afectó la función de la mano "intacta".
Por el modo en el que el experimento fuera diseñado, los datos obtenidos por la resonancia magnética les permitieron a los investigadores examinar dos hipótesis:
Primero, ellos pudieron corroborar que la sugestión hipnótica suprimió la intención de movimiento. Segundo, ellos, asimismo determinaron que la parálisis inducida por la hipnosis involucra los mismos mecanismos neurales-inhibitorios que operan durante la supresión de movimiento voluntario.
Por medio de la comparación de las respuestas de los controles y los participantes activos, esto se lograría.
La preparación para llevar a cabo una acción motora resulta en actividad cerebral en la corteza motora que se asocia con planeamiento para ejecutar los comandos necesarios.
Planear el movimiento de la mano derecha causa la activación de la corteza motora izquierda y viceversa.
Si la parálisis hipnótica suprime la intención del movimiento, se esperaría que la actividad motora temprana de la corteza estuviera ausente en todas las pruebas bajo la hipnosis.
Trance.
Cuando los investigadores examinaron la actividad de la corteza motora durante el intervalo después de la señal preparatoria, ellos no encontraron diferencias entre los estados normales e hipnotizados.
Sin embargo hubo una diferencia en la actividad del cerebro asociada con la ejecución actual de los movimientos de la mano: Durante las pruebas que involucraban los movimientos de la mano derecha, actividad en la corteza cerebral izquierda se observó, en ambos, los sujetos normales y los hipnotizados.
Por contraste, en las pruebas que envolvían la mano izquierda (las pruebas con no-acción), actividad motora cortical derecha se observó en los participantes en el estado normal, pero no en los sujetos que estaban hipnotizados.
Lo que era de esperarse, ya que los participantes hipnotizados en realidad no movieron su mano izquierda en ninguna de las pruebas, así que no se detectó la actividad cerebral correspondiente.
Estos hallazgos sugieren que la hipnosis induce el control de los movimientos por medio de representaciones internas, que son generadas por el incremento de la imaginería cerebral.
Esto ocurre porque la parálisis hipnótica causa una reconfiguración de las actividades de los centros de función ejecutivos produciendo cambios en la conectividad utilizable entre las cortezas pre-motora y motora, de manera que resulta en una reducción conectiva entre las áreas que planean los movimientos y las que los ejecutan.
Imagen durante las pruebas
Se cree que estos resultados pueden ser básicos para un entendimiento neurobiológico de la hipnosis.
En resumen
Algo de lo que, como en el caso de la obesidad, todos hablan y nadie sabe.
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Autor:
Dr. Félix E. F. Larocca
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