¡De memoria! Así rapan los intelectos, como las cabezas.
Así sofocan la persona del niño, en vez de facilitar
el movimiento y expresión de la originalidad que cada
criatura trae en sí; así produce una uniformidad
repugnante y estéril y una especie de libro de las inteligencias
José Martí
Introducción
Estudiar la creatividad supone un reto a sus capacidades.
La institución escolar constituye un modelo sistema interactivos que más peso tiene en el desarrollo de la personalidad; de ahí las posibilidades que brinda para favorecer, a partir de un buen diseño de las influencias educativas.
La escuela como lugar de apropiación y construcción del conocimiento debe, sin negar esto, adquirir otra dimensión superior: la escuela como espacio para la educación de la personalidad y la creatividad.
Desarrollo
Las carteristas generales del sistema actividades-comunicación favorecedor del desarrollo de la creatividad, y precisamos las particularidades de tal sistema de la institución escolar. A partir de ellas hemos estructurado un sistema didáctico integral que constituye una estrategia global para la educación de la creatividad en la escuela.
Esta estrategia global que consiste en el rediseño de los principales elementos del proceso docente, no puede ser tomada como una (receta), sino que debe ser utilizada creativamente en función del subsistema de enseñanza, las características de los alumnos y los maestros, y lo especifico de la institución educativa donde se utilice
A partir del análisis de diversas investigaciones en el campo del desarrollo, la educación de la personalidad y la creatividad, así como de nuestras propias posiciones y experiencias en la educación superior, precisaremos lo que debe caracterizar, en general, a los elementos del proceso docente-educativa para que, como sistema, que contribuya al desarrollo de la creatividad en los estudiantes.
Aunque muchos de los conceptos y ejemplos que utilizamos se refieren a la educación superior, consideramos que las cuestiones esenciales son generalizables a otros subsistemas de enseñanza.
Teniendo en cuenta que no existen modelos únicos, acabados, que hayan demostrado total eficacia y seguros de que el sistema didáctico integral que proponemos no será el primero solo mostraremos lo esencial de las principales direcciones en que consideramos necesario trabajar para que el proceso docente, en su carácter global, constituya una vía real para el desarrollo de la creatividad.
A partir de su utilización, nos limitaremos a señalar en cada caso los elementos que resultan más significativos:
Los objetivos del aprendizaje
Lograr la implicación de los estudiantes en sus propios objetivos de aprendizaje a partir de que participen activamente en su construcción.
Individualizar los objetivos. Estos no tienen que ser exactamente los mismos para todos los estudiantes.
Lograr, a partir del trabajo sistemático que se realice, que los objetivos se construyan para el alumno en una guía real de su proceso de aprendizaje.
Plantear y trabajar explícitamente el objetivo "ser creativo".
Los contenidos
Los contenidos de la enseñanza vienen definidos por los propios objetivos, pero para favorecer el desarrollo de la creatividad hay que tener en cuenta particularmente:
No pretender enseñarlo "todo", ya que esto limita las posibilidades de individualización y elaboración de información.
Dar alternativas; que el estudiante pueda decidir y fundamentar sus decisiones.
Los métodos
Es donde mayor número de experiencia se ha acumulado para el desarrollo de la creatividad, precisamente porque se ha asumido que el desarrollo de esta en la escuela depende de lo que el alumno "hace". La importancia de los métodos de enseñanza para el desarrollo de la creatividad, es incuestionable si se logra lo siguiente:
Utilizar de forma sistémica y generalizada los métodos productivos y problémicos.
Hacer énfasis no solo en la solución creativa de problemas, sino también en el planteamiento de problemas, forma esencial de expresión de la creatividad.
Favorecer el cuestionamiento, la polémica, la discrepancia y la fundamentación y defensa de los criterios propios.
Incorporar, siempre que sea posible, técnicas específicas de estimulación de la creatividad en el diseño de las actividades a realizar con los alumnos.
LAS TAREAS Y LOS TRABAJOS INDEPENDIENTES
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