Pueblo de Tarmas, año 1.974
En la década de los años ochenta del siglo XX en el pueblo de Nuestra Señora de La Candelaria de Tarmas en la Parroquia Carayaca del desaparecido Depto. Vargas del Dtto. Federal; entre el pueblo tarmeño vivió un personaje atípico a nuestra idiosincrasia y realidad que fue conocido bajo el seudónimo de "RADIO RUMBOS".
¿Quien fue Radio Rumbos para el gentilicio tarmeño en su tiempo?
De tan pintoresco y sublime personaje sabemos muy poco sobre sus orígenes y de qué forma llegó a nuestro pueblo en esos recordados años de nuestro ayer; presumimos que él era oriundo de la ciudad oriental de Puerto La Cruz o quizás de Cumaná, más bien por su actitud dicharachera y de buen humor criollo a lo venezolano. En nuestro ancestral pueblo comenzamos a conocerle en los últimos años de su propia existencia como mortal; para esos tiempos era un anciano cargado de años, pero era muy enérgico en su forma de actuar y pensar.
Lo que si era cierto, es que parece que unos pocos años antes habían llegados algunos nietos y quizás una de sus nietas a El Sector "El Vigía", cerca de donde estuvo ubicada la casa del Partido Acción Democrática (AD), cuyo Secretario de Organización por muchísimos años fue el afro-tarmeño Cuyito Ladera, quien era originario de la desaparecida Hacienda "La Florida", en tierras aledañas a las antiguas haciendas de "El Guire", "Chichiriviche" y "Uricao".
¿Cómo era Radio Rumbos?
Él era de estatura muy pequeña y de tez cobriza e indiada; con una dentadura completa y muy bien conservada, vestía muy elegante con vistosos trajes y usaba sobreros al estilo panamá; con una cultura interesante y muy llamativa hacia quienes les conocieron en su vida andariega y de buen vendedor en las diferentes plazas en las cuales se desenvolvió; otras de sus características era que sus zapatos brillaban al tras luz de los rayos del día, debido a que era un ser siempre listo a estar bien presentable en donde se desenvolviera como ciudadano.
Era muy notable observar que en una de las solapas de sus trajes llevaba un pañuelo y otro que llevaba en uno de los bolsillos en la parte posterior de sus pantalones; ya que hubo momentos en donde mostraba su galantería en presencia de las damas que se encontraban en frente de su figura llena de anécdotas, relatos e historias desconocidas por muchos de nosotros. Sin dudas que fue un hombre galante, casi al estilo del guaireño Vito Modesto Franklin, el mismito personaje conocido como El Duque de Rocas Negras en tiempos del gobierno del General Juan Vicente Gómez Chacón.
¿Por qué les decían Radio Rumbos?
A pesar de los años que tenía a cuestas Radio Rumbos, él era llamado así debido a que era un buen parlanchín de oficio, hablaba mucho en cada instante; no dejaba de conversar, era intenso en el habla y no le gustaba que le interrumpieran sus diálogos o parlamento; los cuales estaban llenos de la picaresca propia de quienes hacen del dialogo una matriz para dar a conocer el sentido práctico que nos deja la política o cualquier forma societaria que vaya en pro o en detrimento de la gente y de acuerdo al medio en donde nos desenvolvíamos en esos momentos.
Así fue como los tarmeños y tarmeñas comenzaron a llamarlo RADIO RUMBOS. Él tenía como costumbre en salir de nuestro pueblo a eso de las cuatro y media de la madrugada; bajando desde su ranchito en donde moraba con ciertos familiares suyos; con su caminar apresurado llegaba a la antigua parada que teníamos en El Almendrón que está frente a la casa de la difunta nonagenaria Magdalena Hidalgo Arias de Rangel en la Plaza Bolívar de Tarmas; y después cuando cambiaron la parada más allá de los tubos que estaban en la entrada del pueblo optó por tomarlos allí; cuyo servicio público era cubierto por viejos conductores quienes en su mayoría eran nativos del pueblo de San José de Carayaca y quienes en el primer gobierno de Carlos Andrés Pérez habían recibido jeeps para cubrir la ruta de Tarmas a Carayaca y viceversa en un recorrido de 5 kilómetros más o menos.
Cuando lo veían nuestros niños salir del pueblo o al llegar en horas de la noche al mismo, al unisono y en alta y sonora voz, les gritaban: ¡Ah, Radio Rumbos!
¿Cómo era en si Radio Rumbos?
En el pueblo de Tarmas se oía mucho a la Emisora Radial "Radio Rumbos" en todas las horas del día y más en la madrugada; ya que era el despertador de todos los tarmeños que laboraban en las haciendas, fincas, granjas avícolas y porcinas, como en los clubes que habían en algunas regiones costeras de la Parroquia Carayaca, como en Uricao y en el Tarma Yacting Club en Las Salinas; otros laboraban en el Aeropuerto de Maiquetía o en el Puerto de La Guaira; y los había quienes laboraban en los diferentes cuerpos policiales o en la Escuela Náutica de Venezuela en Catia de La Mar; también hubo quienes estudiaban en los institutos universitarios en Caracas; y habían personas que laboraban en La Colonia Tovar y en El Junquito; todas esas personas conocieron a cabalidad al popular RADIO RUMBOS.
¿Por qué Radio Rumbos hacía vida como vendedor en Caracas?
La verdad es que él siempre interpretó que el pueblo de Tarmas y su vecina Carayaca eran más bien pueblos dormitorios, en donde la vida desde el punto de vista económico eran muy cara en relación a otros pueblos de nuestro litoral. Pero también comprendió que en esos años nuestros pueblos al oeste del actual Edo. Vargas eran muy sanos y su gente era fraterna y muy solidaria. A pesar de que teníamos una Memoria Festiva muy interesante, el propio Radio Rumbos nos decía estas palabras: " Un pueblo no puede estar viviendo de fiesta en fiesta, porque eso demuestra que su gente es floja y no es trabajadora; lo que lo hace no muy bueno para su desarrollo y progreso ".
Y en otras ocasiones señalaba: " La flojera tarmeña lo que trae es ocio, vicios y pone a la gente al borde de la bebedera de aguardiente y de los juegos de azahar en base a trampas y a bajas triquiñuelas, que finalmente desembocan en el desarrollo del hampa, la prostitución y paremos de contar ".
Cuando él salía del pueblo de Tarmas, lo realizaba con un buen bolso llevado a cuestas en unos de sus hombros; en la cual llevaba una gran cantidad de buenos tabacos, para luego ser vendidos en La Plaza Bolívar en Caracas. Antes de abordar el jeep para ir a Carayaca a tomar el bus o las camionetas para Catia de La Mar, y si llegaba a ver algunos jóvenes con aspectos de malandros, les decía estas palabras matutinas del periodista José Campos Suárez: " El crimen no paga ".
Antigua parada de los jeeps en Tarmas, año 1.967
Esas palabras les quitaban los ánimos delincuenciales que cualquiera de nuestros muchachos tuvieran en contra de sus propios paisanos; con las cuales quedaban desarmados y así se evitaban contratiempos hasta con las mismas familias de los mismos.
¿En qué año habría nacido Radio Rumbos?
Presumimos que nació en 1.916 y creemos que se vino al centro del país en busca de mejores condiciones de vida. Lo que si notamos es que era un buen autodidacta formado en los quehaceres diarios de la Universidad de La Vida; tampoco se veía maltratado, porque vivió por muchos años en la Caracas de los techos rojos, siendo un asiduo amante de La Sultana del Valle; notamos que era un buen lector de novelas venezolanas, porque manejaba muy bien las historias noveladas de una Venezuela rural que daba paso a un país urbano en base a la aparición petrolera desde 1.887. Radio Rumbos era de los últimos poetas románticos de la vida venezolana, quien no fue muy bien valorado por quienes en esos tiempos hacían vida cultural en La Casa de Los Pintores de Tarmas, como en otros entes culturales y organizativos.
¿Por qué Radio Rumbos fue un buen vendedor en Caracas?
Él fue un buen vendedor por su señera figura y por su porte lleno de gallardía siempre al servicio de sus propios compradores y compradoras; sin dudas que era un hombre muy culto, debido a que conocía mucho de poesía, historia, economía y de geografía, y mucho más de moral y cívica. Nosotros cuando íbamos a Caracas, nos poníamos a observarlo, con gran detenimiento; quizás por la forma adecuada y muy decente como él se dirigía sus propios compradores, y lo que más le gustaba a la gente era que les vendía un producto caro, pero de buen gusto; ya que sus tabacos eran adquiridos en casas costosas, porque él señala: " Es mejor vender un tabaco bueno, pero caro; que uno malo, pero barato ".
Lo que más le llamaba la atención a sus clientes era que le daba una explicación detallada de la situación política del momento, el cual comparaba con situaciones de gobiernos pasados, y cuando quería burlase de la gente, les decía estas palabras: " Hay que ver que estamos yendo para atrás, hacia la ignorancia misma, cómo es posible que ahora digamos "El Gocho pá el 88" ".
Y luego recalcaba: " La palabra Gocho significa cochino o cerdo y ahora vamos a elegir a un cerdo como Presidente de Venezuela, ja, ja, ja ".
¿Qué otras anécdotas hay sobre el enigmático personaje Radio Rumbos?
Cuando él abordaba las unidades de transporte público en su trayecto desde el pueblo de Tarmas y pasado por el pueblo de Carayaca hasta llegar a Catia de La Mar y luego ir a la ciudad de Caracas, quedándose por los lados de El Capitolio, para luego ir a tomarse un cafecito o degustar un desayuno en su añorada ciudad. Radio Rumbos cuando oía a personas hablar incoherencias fuera de la lógica y de la verdad, y en relación a lo que decían; una de sus más típicas anécdotas era cuando sigilosamente llevaba su mano derecha a la altura de la sien y sorprendiendo a los pasajeros les decía estas palabras: " El ser humano vale de aquí para arriba; ya que de aquí para abajo es pura mierda ".
Entrada al pueblo de Tarmas
Otro de los detalles que siempre le caracterizaron era que cuando veía subir a una dama de la edad que fuera subir a una unidad de transporte público, y él notaba que la misma estaba parada y ninguno de los caballeros que iban sentados no tenían la amabilidad de pararse para ceder sus puestos a las féminas; dirigiéndose a los malos educados personajes, con prestancia los emplazaba con estas palabras: " Amigo, cómprese el Manual de Urbanidad de Carreño, para que al menos aprenda buenos modales y sean un digno ciudadano al servicio de sus semejante ".
Y cuando satíricamente se burlaban de él y notando que no se los podía quitar de encima; les decía: " Amigo, tenga cuidado, porque lo va agarrar la página 14 del Libro Mantilla ".
Muchos no sabía que era el Libro Mantilla y les preguntaban: ¿Qué es el Libro Mantilla y porque mencionas esa página Radio Rumbo?
Él le respondía de esta manera: " Caramba, vale; qué inculto eres, el Libro Mantilla fue el que yo usé cuando fui a la escuela a estudiar mi primaria de cuatro grados; ese libro fue escrito por el poeta cubano José Martí y se lo dedicó a una joven de esa familia en la Isla de Cuba. Muy pocas personas saben que el Apóstol de la Independencia cubana fue quien nos los legó para nuestra primera instrucción pública. En relación a la página 14, cuando alguien se la menciones amigo, póngase más bien mosca, porque sutilmente es una amenaza en su contra; ya que en la misma hay tres figuras que pueden acabar con tu vida, porque allí está un Cuchillo, una Hacha y un Machete ".
Eso nos indica, que de acuerdo al sitio en donde estés molestando al prójimo o a cualquier ciudadano, es como una de esas herramientas te puede mandar al más allá, de donde nunca más a regresar; porque el cementerio está más bien lleno de guapos y equivocados, que de gente honrada y virtuosa. Además, él nos decía que sus clientes eran escogidos, que a cualquiera no podía venderles sus tabacos, porque él era una biblioteca andante, era como un radio lleno de sabiduría moviéndose alegóricamente con sus palabras como en los tiempos de Bernardino "Raposanta" en los tiempos del terremoto de San Bernabé en 1.641.
Lo cierto del caso, es que cuando Radio Rumbos desaparece para siempre en la historia del pueblo de Tarmas, consideramos que pasó a la transición eterna en su siempre amada ciudad de Caracas; y quizás una de sus anécdotas más interesantes es que cuando él apreciaba que un caballero duraba mucho tiempo sentado en un bus o en una de esas camionetas que estaban al servicio de nuestros usuarios u usuarias, y que al parase para luego dárselos a una dama, les señalaba lo siguiente. " Apreciado amigo, sea usted más respetuoso con la dama. Es que usted no se ha dado cuenta que tienes mucho tiempo calentando con su rabo el puesto, o es que no notas que vas quemarle sus nalgas a la dama ",
¡Eso es mala educación amigo mío!
¿O es que no conoces esa mala norma ciudadana?
Cuando Radio Rumbos llegaba en las horas de la noche al pueblo de San José de Carayaca, lo primero que hacía era comprar un buen pan para llevarles a sus nietas y nietos, como a sus bisnietos y bisnietas. Otro de los detalles era que siempre le gustaba ir en el lado de la ventana del transporte público en los asientos de adelante. Los días de sus mayores ventas eran los días sábados y domingo de cada semana.
Radio Rumbos fue un personaje caraqueño como los fueron el policía Apascacio Mata, Isidoro, Pacheco, y todos aquellos y aquellas como Panchito Mandefuá a quien José Rafael Pocaterra McPherson inmortalizó por el tiempo y las edades.
¡Glorias eternas al popular Radio Rumbos!
Esperamos que este personaje que hizo vida en el pueblo de Tarmas sea recordado por siempre por nuestra gente y que de hecho pase a formar parte en la historia de nuestra comunidad, como un ser que nos deleitó con su sapiencia adquirida dentro de la Mayéutica Socrática.
Fraternalmente,
Autor:
León Manuel Morales
Patrimonio Cultural Viviente del Edo. Vargas
Francmasón Past Master Grado 33°
Oficial de Marina Mercante